Sobre magia y guerrilla

Por Pamela Aviles y Andrea Palacio

Synopsis.

Saltar entre las piedras para no dejar rastro, con los ojos enrojecidos por la fiebre, sintiendo en su espalda el calor de las llamas que consumen su casa en la madrugada, fue el escenario del conmovedor escape de Penny

• Idioma: Español
• Editorial: Barles and Sons Pty Ltd.
• Fecha de lanzamiento: 10 sept 2020
• ISBN: 9780646817828

Pamela Aviles

Correctora profesional de textos en español especializada en textos narrativos, periodísticos y divulgativos, con diez (10) años de experiencia. Comunicadora social y periodista. Magíster en Enseñanza del Español como Lengua Extranjera. Avalada por Cálamo & Cran como correctora profesional ortotipográfica y de estilo. Creadora y administradora del grupo en Facebook "Vacantes y oportunidades en la industria editorial colombiana".

Vista previa del libro

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Una fantástica historia de resiliencia inspirada en hechos reales.

Copyright © 2020 by Pamela Aviles.

All rights reserved.

A production of: Entre Magia y Guerrilla.

ISBN: 978-0-646-81782-8

All rights reserved. This book or any portion thereof may not be reproduced or used in any manner whatsoever without the express written permission from author copyright owner.  Abg, Pamela Aviles.

For information regarding permission, find contact information on: www.myIdentifiers.com.au / www.australianselfpublisher.com

La magia de esta tierna errante la ayudo a sobrevivir al reclutamiento pero su odisea no ha terminado.

TABLA DE CONTENIDO

Capitulo Uno

A MERCED DE LOS DESIGNIOS DE LA GUERRILLA

Capitulo Dos

EL TRIUNFO DE LOS GRANDES IGNORADOS

Capitulo Tres

UN VIAJE A LAS MEMORIAS DE MUERTE

Capitulo Cuatro

LA MAGIA DE SANGRE INOCENTE

Capitulo Cinco

UNA DULCE SONRISA POR LO AMARGO QUE HEMOS VIVIDO

Capitulo Seis

LA NOCHE RENACE SOÑANDO MI SUEÑO

Agradecimiento

Quisiera activar mis poderes para hacer hechizos.

Cada palabra de esta frase posee la fuerza espiritual de romper la barrera del tiempo. Esta cargada con la profundidad suficiente para triunfar ante frialdad de los procesos legales.

Hoy mientras escribo estas memorias, comparto lo que siempre anhelé, y que en muchos sentidos supe que tendría la oportunidad de escribir.

Quiero ofrecer mi gratitud sin fin, a cada uno de los niños que compartieron sus historias conmigo. Es mi gran privilegio, honrar sus viviencias.

Dedico este libro a mi familia.

A mi hija Valentina, la fogata de amor perenne que llena de ternura mi corazón.

A mi esposo John, por perseverar en apoyarme pagina tras pagina.

A mis pequeñitos Oliver y Dakota, sin sus largas siestas, jamás hubiera logrado terminar el libro.

SOBRE MAGIA Y GUERRILLA

CAPITULO UNO

A MERCED DE LOS DESIGNIOS DE LA GUERRILLA

La magia se integro a mi vida un 16 de Noviembre de 2011, sosteniéndome con encanto y, no ha salido de mi corazón.

De modo que escribir esta tarea, no puede escabullirse de mi tópico favorito.

«Para el examen de este viernes, escoger una foto de tu infancia e ilustrar un relato corto. No más de diez hojas. Buena caligrafía y ortografía».

Siempre me he sentido cautivada por volver a escribir la historia de cómo los acontecimientos de mi infancia, estuvieron marcados por la magia. Desde luego, se trata de una historia increíble, una particular experiencia que le da a mi vida un significado distinto.

Mi mente es asaltada por miles de posibles inicios para mi tarea, y en esta ocasión, ilustraré el relato con detalles importantes que he recordado últimamente, detalles sobre como la magia me ayudo a sobrevivir del reclutamiento.

Quizá sea un recuerdo del recuerdo, ya que todo pasó cuando tenía cinco años, época en la que mi mamá y yo huimos a Bogotá, puedo recordarlo vívidamente, sin embargo, le superan en numero, las ocasiones en las que, al compartir mi experiencia, las profesoras del valle me han llamado «mentirosa».

Los maestros que han leído mi historia se han esforzado por ocultar su decepción al evaluarla. No hay nada que pueda hacer al respecto, es mi tema favorito a la hora de componer relatos, y escribo sobre ello con perseverancia.

«Disparates, delirios sobre embrujos, soñadas invenciones infantiles, párrafos fantasiosos, encantamientos, escapes mentales de una niña asustada, desvaríos, pamplinas, tonterías…», todo eso dicen de mis poderes mágicos.

Mis maestros son buenos y me quieren mucho, pero no comprenderían lo que llevo dentro, nunca lo comprenderían aunque lo hubieran vivido.

Evidentemente, el solo anhelo de lograr empatía no puede sostenerse por si solo, pero se ha puesto en duda incluso mi estadía en la Capital. Esta historia ha tenido la fuerza para sostenerse ante la duda y escapar al olvido del tiempo.

A pesar de esos vergonzosos momentos en los que me han dicho «mentirosa», para mí no hay nada más cierto en el mundo que mi capacidad para hechizar. Por más que en este valle nadie me crea, estas son mis memorias y mis poderes mágicos… míos y de nadie más.

Mi afán ha vuelto a reavivarse, dada la grata fortuna de haber encontrado la foto perfecta para esta tarea: un retrato de Bogotá, en el que aparezco abrazada a mi mamá frente a la Iglesia de Monserrate.

Desde el fondo de mis trece años, lamento el rumbo de los acontecimientos que llevaron a mi mamá a tomar la decisión de abandonar mi pueblo, pero de no ser así posiblemente habríamos muerto. Mi vida pudo haber transcurrido de cualquier otra manera, y sin embargo, mi destino ha estado marcado por la perseverancia en conservar la vida, la convicción de superar la adversidad así como por la determinación por proteger mi magia. El curso de los acontecimientos de mi vida, han sido efectivamente puro ilusionismo y fascinación.

Después de todo, que yo aspirara a desarrollar poderes mágicos, fue desde mi infancia una posibilidad latente que hubiera llenado de orgullo y regocijo a mi abuela e incluso a mi bisabuela, pero, a lo que a mi madre concernía, la magia simplemente no existe. Su convicción divina sobre la vida, radica en mantenerse silenciosa e inadvertida. Viviendo con prudencia y ligereza. Sin amargar el carácter y dentro de lo posible libre de la mínima polémica; buscando progresar silenciosamente. Yo no lo entiendo así exactamente. El haber sido capaz de huir del reclutamiento y poseer preponderancia y dominio sobre la magia, es un hecho que se resiste al paso del tiempo.

He vigilado con detenimiento a través de los años, las escasas oportunidades de escuchar a mi madre contar lo que sucedió. A pesar de que fue una historia dolorosa, me embargaba una tremenda emoción volverla a escuchar. Por muy sobria que fuese, era de todos modos mi historia, mía y de mi madre. Todo eso paso, hace cuatro años atrás, y hasta la semana pasada tuve la ocasión de escuchar nuevamente, como la contaba mi mamá.

Al mirar hacia atrás, me explica cómo la presencia de los grupos paramilitares se respiraba en cada segundo en nuestro pueblo. Todos teníamos que huir: la violencia, le cobró la vida a más de un vecino.

Su tranquila voz, temblaba de excitación al referirse al modo en que nos abordaron.

Una patrulla de tropas de asalto apareció en el parque y unos minutos después llamaron a la puerta.

—Grisales, ¡afuera!.

Aquellas, fueron las palabras con las que se aparecieron en nuestro hogar. Esos gritos se repiten en mi mente constantemente y la autoridad y determinación con la que pronunciaron nuestro apellido, traía un anuncio a muerte innegable. Tumbaron la puerta abruptamente.

Siete u ocho hombres estaban en pie formando un grupo, buscaban a tu tío, pero, el no estaba en ese momento. Me miraron como si nunca hubieran visto a una mujer antes, se dispersaron armados, registraron la casa, tirando todo a su paso.

Uno de ellos, me miraba directamente con una sonrisa de superioridad que me desconcertó totalmente. El curso de la vida de una familia entera, de un pueblo entero cambia en un minuto porque llegaron unas tropas decididas a secuestrar a quienes se les antoje.

Desde el primer momento, sentí que tenia que huir.

Tu estabas dormida en tu habitación. En el aire se respiraba pánico de desasosiego y mientras hurgaban toda la casa yo empece a desvariar , de modo que bajando la mirada muy delicadamente busque con total discreción apoyarme en la pared de la habitación donde tu estabas. Increíblemente, no se, realmente no entiendo como logre echar una ultima mirada hacia donde estabas.

Me parecía demasiado delicada la posibilidad de mover siquiera un solo dedo, mucho menos dar un paso, sin embargo, mientras ellos hablaban y escudriñaban en nuestro hogar, logre acercarme a ti y tomarte entre mis brazos.

Entonces, el mas joven de ellos al darse cuenta de mi valiente afrenta, corrió hacia mi gritando —eh!, que estas haciendo, quédate quieta!.

Y sacando un arma de uno de los bolsillos de su pantalon, la preparo lentamente y la alzo a la altura de mi frente.

La mayoría de los hombres, le hicieron un ademan de que bajara el arma, pero el la mantenía. Yo estaba tan asustada que no sabia que hacer, me quedé paralizada sosteniéndote entre mis brazos con todas las fuerzas que me eran posibles.

La convicción inherente de que te sacaría con vida de esa casa no me habría bastado para salir huyendo, si uno de los Guerrilleros no hubiera gritado desde afuera: —¡en esta casa tampoco esta!, -en el mismísimo instante-, en el aquel tipo me apuntaba.

El mas alto de ellos, que parecía también