Sonidos Imperiales

Por Adolfo Sagastume

Revelación de última hora. El Ser que estructuró el mundo actual se alimenta del sufrimiento humano. Una de sus herramientas que usa para mantenernos atados al llanto y el dolor es la Música Imperial, que no es otra cosa que la música popular y de todo tipo. Es hora de quitarle una máscara más al gran Vampiro depredador, a esa larva astral, a ese Parásito inter dimensional, que la gente adora como su dios. Este libro nos enseña cómo salirnos del Sistema para ser verdaderamente libres. Es para todo público.

• Idioma: Español
• Editorial: Adolfo Sagastume
• Fecha de lanzamiento: 25 ene 2020
• ISBN: 9780463163931

Adolfo Sagastume

Construyendo Universos LiterariosCiudadano LatinoamericanoCiudadano de la República de LiberlandCiudadano de Asgardia The Space Kingdom

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Índice

Introducción

El Dolor de la Vida

Letras Nefastas que Hieren

Sonidos que Matan

Música de Dolidos

El Macabro Subconsciente

La Muerte del Ego

Conclusión

Introducción

¿Quién mueve los hilos emocionales de esta civilización humana?

¿Cuál es el beneficio de esa malvada maquinación energética?

¿Por qué se abren persistentemente las heridas emocionales de las personas?

¿Cómo podríamos evitarlo?

El ser humano desconoce el efecto de los sonidos. Vive inmerso en ellos, los activa y desactiva automáticamente e impremeditadamente. Y los sonidos lo llevan a las regiones más remotas de su mente subconsciente. Aceleran su memoria y activan todo el potencial de su dolor subyacente que le conduce al sufrimiento.

Las victorias que consiguieron arrancar gritos de entusiasmo y lágrimas de una alegría confusa son relámpagos luminosos en la pantalla del recuerdo los fan voluntarios e involuntarios.

Las tristezas más recónditas y las heridas más dolorosas son machacadas y repetidamente activadas, inconscientemente, por el engrane de notas y sonidos musicales que viven rodeándonos las veinte y cuatro horas del día.

Las melodías populares siempre nos acompañan, es complicado y difícil aislarnos completamente de ellas. A donde vayamos nos siguen. Están en el vehículo, público o privado, que usamos para ir al trabajo, a la tienda, a la escuela o de vacaciones.

En el relax de la casa se hacen presente en la radio, la televisión o las redes sociales.

¡Son omnipresentes!

¡Son parte de la vida cotidiana!

¡Estamos tan ceñidos, acostumbrados, habituados, a ellos que solo pensar en su abandono nos puede conducir a un estado tan agudo de dolor y tristeza similar al mismo efecto lacerante que producen!

Nuestro día se hace junto a las redes sociales, los videos y la radio. Ellos son expertos en mantener vivo el gusto a los estilos y modas musicales. No hay tendencia olvidada. Todas las épocas están presentes. Todos los artistas están a la vista durante diez, veinte, cincuenta o cien años después de su muerte.

El gusto, la afición y el fanatismo que nacieron en medio de los acontecimientos de su carrera artística son removidos, refrescados, traídos y llevados de un rincón a otro de nuestra memoria subconsciente.

El sentimiento