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Entre el cielo y la tierra
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Entre el cielo y la tierra
Libro electrónico114 páginas35 minutos

Entre el cielo y la tierra

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Información de este libro electrónico

Un temblor bajo los párpados
las columnas del palacio matinal
/revientan en los senderos,
no puedo hablar
frente al enjambre de brotes helados y humeantes.
IdiomaEspañol
EditorialMAGO Editores
Fecha de lanzamiento21 may 2016
ISBN9789563172935
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    Vista previa del libro

    Entre el cielo y la tierra - Cristian Cruz

    © Copyright 2015, by Cristian Cruz

    Primera edición: Diciembre 2015

    Colección Poeta Raúl Zurita

    Director: Máximo G. Sáez

    editorial@magoeditores.cl

    www.magoeditores.cl

    Registro de Propiedad Intelectual Nº 259.131

    ISBN: 978-956-317-293-5

    Diseño y diagramación: Catalina Silva Reyes

    Lectura y revisión: Constanza Valenzuela Flores

    Fotografía de portada: Leonora Vicuña

    Edición electrónica: Sergio Cruz

    Derechos Reservados

    Entre la fábula y el tedio: apuntes sobre la poesía de Cristian Cruz

    En la poesía de los 90 existe una tendencia que, sin alejarse de la preocupación y reflexión sobre el lenguaje, no hace de esta el objeto de su quehacer. Sin agotarse en la metapoesía ni en la búsqueda formal, algunos poetas han construido un universo donde el canto y la épica han cedido ante la irrupción de lo cotidiano, no al estilo parriano o neorromántico, sino un cuasi larismo posmo o un zen dolorido y melancólico, alejado del tremendismo y el barroco (de algún sector de la generación anterior y posterior), el surrealismo chileno (presente en poetas importantes del 90 y que a esta altura y a la distancia –en sus orígenes mandragóricos– creemos nunca fue de segunda o tercera categoría): una poesía que parece venir más del Desencanto General de Alejandro Pérez (pero un desencanto menos de la política y de la vida, que de ellos mismos) que de los intentos de la neovanguardia, más de la poesía social y amorosa de los dos Riedemann, una poesía que aprendió a leer a Millán como uno de los poetas fundacionales del viejo y nuevo siglo, que vio en Teillier y Lihn dos pilares fundamentales de la poesía chilena de la segunda mitad del veinte o de todo el veinte, una poesía que a ratos deja la ciudad para volver al bosque y allí se queda respirando entre coníferas y ninfas. Poetas que no se creen poetas, que fundan editoriales independientes, que respetan a los poetas clásicos chilenos y de afuera, tanto como al recolector de cochayuyo que hace su largo viaje entre Saavedra y Temuco, lento, como un computador lleno de virus.

    Una poesía del asombro frente a lo cotidiano, donde lo ideológico no cede a la indiferencia, pero tampoco a la confianza que se puede escribir desde una total certeza. Y sin ser lo político lo gravitante, lo incorporan a un universo donde el microcosmos del ser humano parece ser la preocupación central.

    Poetas que no ceden a la tentación antipoética, que vienen quizás desde algunos lares, sin complejos con la provincia, pues saben que la aldea fue hace rato destrozada, por el amor roto, el alcohol, la imposibilidad de que vuelva a correr otro que no sea el tren bala entre Santiago y Puerto Montt. Poetas que no buscan metafísica en los bares sino una cerveza. Que recogen el rechazo a la modernidad no como una manida porfía, ni un letargo, no con lágrimas de bolero, sino porque están atentos a los esenciales y eternos gestos humanos.

    Cristian Cruz participa de algunas de estas características, sino de todas, y continúa la tradición de aquellos que hace rato saben que no es necesario ningún peregrinaje a

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