Cómo dejar de comer carne de forma saludable (Todo lo que debes saber antes de dar el paso)

Por Luis Garre

En la actualidad estamos asistiendo a un nuevo movimiento relacionado con la alimentación, que se está haciendo muy popular entre las personas, derivado de otros con más trayectoria como son el colectivo vegano y vegetariano, pero posiblemente con los mismos errores nutricionales que los anteriores. Me refiero a la tendencia por dejar de comer carne o eliminar para siempre este alimento de nuestra dieta.

Dejar de comer carne es el objetivo de muchas personas que, no obstante, tienen innumerables dudas sobre cómo hacerlo de manera saludable y sin el peligro de sufrir graves carencias nutricionales.

Bien sea por motivos de salud, estéticos, políticos, modas, tendencias, empatía con los animales y su protección, o cualquiera de los motivos que queramos añadir, el hecho que supone dejar de comer carne debe estar asociado a una serie de nuevos hábitos alimenticios. El problema es que muy pocas personas los conocen y no los llevan a la práctica, produciéndose así desequilibrios importantes en su organismo, a nivel nutricional por déficit de nutrientes, proteínas u otros superalimentos que deberían estar incluidos en una dieta sin carne.

Desayunar leche vegetal, de arroz o avena, frutas o tostadas con mermelada. Al mediodía comer pasta con soja, nueces o setas, ensaladas con aguacate, semillas, verduras, legumbres y revueltos con tofu y tomate, realmente suena muy bien a nivel nutricional y además no echaremos de menos la ingesta de carne en nuestro organismo. Pero el problema aparece cuando determinadas personas, por ignorancia, comienzan una dieta sin carne por seguir la tendencia, por ser más guay que el resto, o simplemente por querer estar más sanas sin tener en cuenta importantes carencias nutricionales a la hora de llevarla a cabo. Por lo tanto, el desequilibrio que se produce en su cuerpo, conlleva riesgo para su salud.
Si has decidido dejar de comer carne o llevas tiempo sin hacerlo, si eres vegano o vegetariano, este libro despejará todas las dudas a nivel alimenticio, que debes tener en cuenta para el bien de tu salud y en definitiva, para tu bienestar personal y felicidad.

El quid de la cuestión no radica exclusivamente en dejar de comer carne, sino en seguir llevando una dieta equilibrada cuando se interrumpe la ingesta de este alimento.

Muy pocas personas mantienen una alimentación equilibrada cuando han dejado de alimentarse con carne.
Por increíble que parezca a día de hoy, muchas personas piensan que con el solo hecho de alimentarse con arroz, lechuga, los vegetales y frutas que encuentren, van a tener buena salud. Pero lo cierto es que la realidad es bien distinta.

Muchos alimentos comercializados como vegetarianos o veganos suelen ser altamente procesados, con alto contenido de azúcar o carecen de nutrientes. El negocio de la alimentación quiere vender a toda costa, pero nunca se preocupará, como nosotros lo debemos hacer, por nuestra salud.
Según opiniones expertas en salud y nutrición, todos sin excepción, somos aptos para estas dietas. Hay que recordar que somos seres vegetarianos por naturaleza. Al cambiar nuestra dieta y readaptarla, tendremos una mejor salud, menor riesgo de sufrir enfermedades, nuestros sistemas internos trabajarán con mayor libertad y fluidez, se evitará el maltrato animal y miles de millones de vidas no tendrán que ser sacrificadas. Además, contribuiremos para combatir las principales causas de deterioro de nuestro medio ambiente.

Porque todo empieza y termina por la salud, con esta guía tendrás a tu disposición, de forma práctica y sencilla, toda la información y el conocimiento necesario para realizar la transición hacia una dieta sin carne de manera sana y equilibrada.

• Idioma: Español
• Editorial: Luis Garre
• Fecha de lanzamiento: 10 oct 2018
• ISBN: 9780463053768

Luis Garre

LuisGarre (Autor Emprendedor) Autor de Libros, Ebooks, Blogs y Contenido Web focalizado en la Consciencia Humana y Universal, Hábitos Inteligentes y Saludables, Crecimiento Personal y Espiritualidad. “Escribo para hacer brillar tu luz interior porque tu vida es el regalo que siempre has estado buscando“

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Índice

Cómo dejar de Comer Carne de forma saludable

Introducción

Capítulo 1: ¿Puedo dejar de comer carne? Mitos y realidades sobre el consumo de carne.

Capítulo 2: Cómo hacer la transición paso a paso y sin poner en riesgo tu salud.

Capítulo 3: Errores que cometen la mayoría de los excarnívoros.

Capítulo 4: ¿Vegano o vegetariano? Todo lo que debes saber antes de dar el paso.

Capítulo 5: Beneficios para la salud de una dieta sin carne.

Capítulo 6: Top Recetas dietas sin carne y sin déficit nutricional.

Capítulo 7: Conclusión final

Cómo dejar de

COMER CARNE

de forma saludable

(Todo lo que debes saber antes de dar el paso)

Guía práctica y sencilla para hacer la transición hacia una dieta sin carne de manera sana y equilibrada

LuisGarre

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Todos los derechos reservados

www.luisgarre.com

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Introducción

Dejar de comer carne ¿Es una moda más o una gran decisión?

Hola lector, en los últimos años estamos asistiendo a una auténtica revolución social entre la población, en lo que se refiere al cuidado de nuestra salud física y la alimentación. Tanto es así, que como consecuencia de tal movimiento, han surgido junto a él nuevas y paradójicas enfermedades o desequilibrios relacionados con una inadecuada conducta o comportamiento, asociados a su vez a estados mentales patológicos derivados por la obsesión de querer estar sano, comer los mejores alimentos del momento o tener el mejor cuerpo posible.

El ser humano suele distinguirse por su extrema dificultad a la hora de mantener en el tiempo un correcto equilibrio a todos los niveles, tanto físico como mental y espiritual. Pero con respecto a la alimentación, asistimos nuevamente a oleadas de movimientos, modas o tendencias siempre en masa y como pollos sin cabeza, por querer estar más sanos y espléndidos cada día.

El problema es que tales tendencias, en muchos casos, nos están llevando otra vez a extremos que, de manera casi irónica e incluso algo siniestra, siempre acaban asociándose al desequilibrio, la enfermedad o el descontrol y el menoscabo de nuestra salud física y emocional.

La ortorexia o la obsesión por comer sano, es un trastorno alimenticio cuyo nombre fue acuñado por primera vez en 1997 por el doctor Steven Bratman. Se trata de una patología caracterizada por la obsesión por comer comida considerada como saludable por la persona que la padece, esto no implica, necesariamente, que así sea. Algo similar a un trastorno obsesivo compulsivo, en el que el sujeto lleva a cabo una dieta muy restrictiva, evitando ciertos alimentos como por ejemplo aquellos que llevan, no solo grasas, sino también conservantes y colorantes, etc... Los producidos industrialmente o artificiales. La mayoría de pacientes son jóvenes o mujeres con un nivel adquisitivo medio y alto (que pueden permitirse este tipo de alimentación). Los deportistas muy activos son otro grupo de riesgo, en especial si controlan aquello que ingieren de forma exhaustiva para mejorar su rendimiento físico o acelerar su metabolismo todo lo necesario para mantener su índice de grasa corporal en los niveles más bajos posibles. Al igual que en el caso de los adolescentes preocupados por las repercusiones de determinados alimentos en su aspecto físico, que no se quedan atrás.

Por otra parte, los medios de comunicación y las tendencias sociales también tienen gran parte de responsabilidad en el asunto. La forma en la que se difunden, sin ningún pudor, noticias sobre alimentos cancerígenos, súper saludables, que ayudan a reducir el colesterol, etc... Así como el culto exagerado por la imagen y la delgadez como sinónimos de bienestar y éxito, tienen mucho que ver en el aumento de este tipo de trastornos o patologías mentales y de comportamiento a las que estamos siendo testigos en la actualidad.

Otro trastorno, mucho más conocido, es la vigorexia. La adicción al ejercicio físico es una alteración mental que afecta a hombres de entre 18 a 35 años, de clase media-baja y con poca autoestima.

Esta obsesión provoca que los afectados tengan una visión distorsionada de su cuerpo físico. Las personas que sufren vigorexia suelen ser jóvenes de entre 20 a 38 años y aunque es más frecuente entre el género masculino, en los últimos años se está produciendo un aumento de casos entre las mujeres. Afecta a personas que tienen una alteración importante de la imagen corporal y cada vez quieren estar más fuertes a toda costa, pasando a ser esto lo más importante en sus vidas. También se da en