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Los secretos antigüos
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Libro electrónico249 páginas7 horas

Los secretos antigüos

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En el tiempo futuro nuestros dioses bajarán y salvarán al mundo del mal que habita en ustedes, los mismos humanos…” Con estas palabras del último chaman en Tenochtitlan se lanzó el hechizo que da inicio a la historia, un hechizo que partió el antes y el después de la humanidad, un hechizo que tuvo efecto siglos después, pero cuyos efectos nunca olvidarían las personas, un hechizo que permitió que los dioses caminaran sobre la tierra una vez más; al menos en una forma mortal y terrenal.
“Los Secretos Antiguos” es la primera parte de la serie con el mismo nombre. La cual relata la vida de unos jóvenes en el siglo XXI, quienes obtuvieron poderes para controlar los elementos, mismos que proceden desde la mística Piedra del Sol y la fantástica sociedad que la creo. Poderes derivados de los dioses representados en dicho monumento, pero para que existan los héroes se necesita primero al antagonista; villanos cuyos poderes derivan del mismo lugar.
Esta primera obra escrita por Cristopher J. L. Rodríguez, nos relata de una manera diferente el final de la cultura Azteca y su gran ciudad, así como historias contemporáneas y al mismo tiempo la persistencia de su legado en unos pocos elegidos de la actualidad.
Acompaña a Andrew, Viviana, Emma y Josué, durante su travesía para convertirse en los héroes que los Aztecas esperaban y que la sociedad actual necesita, ahora que algunos males han comenzado a crecer en el mundo.

IdiomaEspañol
EditorialGRP
Fecha de lanzamiento16 sept 2018
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    Los secretos antigüos - Cristopher López

    © Cristopher J. L. Rodríguez

    © Grupo Rodrigo Porrúa S.A. de C.V.

    Lago Mayor No. 67, Col. Anáhuac,

    C.P. 11450, Del. Miguel Hidalgo,

    Ciudad de México.

    (55) 6638 6857

    5293 0170

    direccion@rodrigoporrua.com

    1a. Edición, 2018.

    ISBN:

    Impreso en México - Printed in Mexico.

    Prohibida la reproducción total o parcial por cualquier medio

    sin autorización escrita del titular de los derechos patrimoniales.

    Características tipográficas y de edición:

    Todos los derechos conforme a la ley.

    Responsable de la edición: Rodrigo Porrúa del Villar.

    Corrección ortotipográfica y de estilo: Graciela de la Luz Frisbie y Rodríguez /

    Rodolfo Perea Monroy.

    Diseño de portada: Alberto Sebastián Gómez Ortiz / Leobardo Márquez

    Diseño editorial: Grupo Rodrigo Porrúa S.A. de C.V.

    Para mi mamá que siempre me ha apoyado en todo,

    Para todos mis amigos, ya estén en el libro o no,

    Para mis familiares,

    Cuyas inspiradoras frases aparecen en el libro,

    Y a la memoria de mi papá, pues todo su esfuerzo fue una inspiración.

    ÍNDICE

    PRÓLOGO

    1 LA HISTORIA VERDADERA

    2 EL RENACIMIENTO DE LAS LÁPIDAS

    3 LOS SECRETOS ANTIGUOS

    4 LIRIOS Y UNA PELEA FAMILIAR

    5 LA PRISIÓN CAPTUS REA

    6 CHARLIE (DEATH-MAN)

    7 LAS TRES PARTES DEL MUNDO DE LOS MUERTOS Y LOS TRES SIRVIENTES

    8 LA LIBERACIÓN DE LA 7ª LÁPIDA

    9 EL ESCAPE DE GERARDO

    10 PELEA ENTRE CUATRO VIEJOS AMIGOS

    11 EL ENCUENTRO CON EL QUINTO ELEMENTO

    12 PELEA CONTRA EL QUINTO ELEMENTO

    PRÓLOGO

    … en el tiempo futuro nuestros dioses bajarán y salvarán al mundo del mal que habita en ustedes, los mismos humanos… Con estas palabras del último chaman en Tenochtitlan se lanzó el hechizo que da inicio a la historia, un hechizo que partió el antes y el después de la humanidad, un hechizo que tuvo efecto siglos después, pero cuyos efectos nunca olvidarían las personas, un hechizo que permitió que los dioses caminaran sobre la tierra una vez más; al menos en una forma mortal y terrenal.

    Los Secretos Antiguos es la primera parte de la serie con el mismo nombre. La cual relata la vida de unos jóvenes en el siglo XXI, quienes obtuvieron poderes para controlar los elementos, mismos que proceden desde la mística Piedra del Sol y la fantástica sociedad que la creo. Poderes derivados de los dioses representados en dicho monumento, pero para que existan los héroes se necesita primero al antagonista; villanos cuyos poderes derivan del mismo lugar.

    Esta primera obra escrita por Cristopher J. L. Rodríguez, nos relata de una manera diferente el final de la cultura Azteca y su gran ciudad, así como historias contemporáneas y al mismo tiempo la persistencia de su legado en unos pocos elegidos de la actualidad.

    Acompaña a Andrew, Viviana, Emma y Josué, durante su travesía para convertirse en los héroes que los Aztecas esperaban y que la sociedad actual necesita, ahora que algunos males han comenzado a crecer en el mundo.

    1

    LA HISTORIA VERDADERA

    Hace mucho tiempo, hacia el año 680, en el país de México; habitó una civilización llamada azteca. Esta ha sido una de las mejores que han existido, pues sus habitantes no sólo tuvieron un gobierno, sus dioses, su cultura y sus tradiciones, pues a pesar de no conocer lo que es la tecnología, pudieron crear cosas increíbles, como grandiosas pirámides y esculturas. Claro está que gracias a una de esas obras es como da origen esta historia.

    Todo gira alrededor de una pieza arqueológica llamada La Piedra del Sol. Esta piedra que a los humanos de la época actual nos parece una escultura asombrosa, es la piedra angular de nuestra historia, literalmente hablando. Hace aproximadamente 680 años, tal vez menos, los aztecas terminaron esa asombrosa obra de arte. La Piedra del Sol representaba una de las cosas más sagradas que poseían, porque en ella encontraban cinco imágenes; la del dios solar actual y cuatro dioses solares anteriores.

    Cuando los aztecas llegaron a Tenochtitlan tenían un rey fuerte, justo e imponente, el cual se llamaba Acamapichtli; que pensó que su pueblo debía tener un calendario por así llamarlo, en el que se mostrara su dios actual y dioses anteriores y se les rindiera homenaje…

    1- El dios sol de la tierra; Ocelotonatiuh.

    2- El dios sol del viento; Ehecatonatiuh.

    3- El dios sol del fuego y de la lava; Quiatonatiuh.

    4- El dios sol del agua; Atonatiuh.

    Rodeando a los dioses se encuentran los veinte signos de cada día de los aztecas, después están los rayos que emana el sol y dos enormes serpientes encierran todo eso.

    Los primeros reyes creían que hacer la piedra era necesario y por consiguiente se creó. Tiempo después, los aztecas serían conquistados por los españoles cuando llegaran a Tenochtitlan. Los invasores se encargarían de destruir todo y al hacer eso cometerían un error que sería el primero de una larga lista que cambiarían por completo al mundo y su historia.

    Al transcurrir varios años, para el 1521, cuando se apoderaron de Tenochtitlan, no sólo destruyeron obras arquitectónicas y obras de arte, también mataron, robaron, traicionaron, etc. En ese momento, el último de los chamanes existentes estaba molesto y dijo…

    —Ustedes han destruido toda nuestra gran sociedad — empezó el chamán. Él estaba furioso estando frente a La Piedra del Sol, desde la cima del Templo Mayor afirmó—. Han matado, destruido y acabado con todo lo que querían, ahora nosotros ya no podemos hacer nada, pero en el tiempo futuro nuestros dioses bajarán y salvarán al mundo del mal que habita en ustedes, los mismos humanos… pero también ellos deberán tener cuidado, pues si ellos llegaran a caer en nuestro mismo error, serán destruidos…

    Mientras él decía eso, puso sus manos en una de las últimas esculturas que les quedaban; La Piedra del Sol, sus palmas tocaron las imágenes de los dioses y sin darse cuenta mandó un hechizo hacia la piedra. Sintió como su poder cruzaba su cuerpo hasta salir por sus palmas.

    Cuando empezó la colonización, los españoles venían y se quedaban a vivir en estas tierras como si fuera su propio país, trayendo esclavos y aislando a los indígenas del país en lugares que ellos nunca habían visto como sitios adecuados para vivir.

    Al parecer, esta nueva intromisión de los españoles fue una de tantas señales que esperaba La Piedra del Sol, pues en todo el continente ocurría exactamente lo mismo, e incluso era peor en algunos países, a los que también traían esclavos y no sólo eso, además mataban a los lugareños o simplemente los aislaban como se había hecho aquí en México.

    Cuando esta situación se dio en el continente americano, La Piedra del Sol tuvo una reacción; comenzó a brillar, aunque sólo brillaban las imágenes de los dioses, sólo eso sucedió. Durante mucho tiempo ocurrió lo mismo; sólo brillaba y no hacía más.

    Años después inició la Guerra de Independencia con algunos personajes como Miguel Hidalgo, Morelos, Iturbide, etc., pero esto ocasionó algo peor. Al parecer, lo que los símbolos de los dioses en la piedra nos querían decir era que la humanidad debería mantenerse unida, así se podría evitar algo peor. Acto seguido la piedra comenzó a brillar por completo.

    En el lugar donde se creó la piedra, comenzó a haber un enorme terremoto, se abrió la tierra, las estructuras se destruían, la gente se atemorizaba y se escondían donde podían, pero este terremoto no duró más de 15 minutos. Al finalizar el desastre y el caos, la tierra se volvió a unir y todo regresó a la normalidad, pero dentro de la tierra a exactamente un kilómetro hacia abajo se encontraba una solitaria lápida con una leyenda escrita en un costado, nadie se percataría de su existencia por mucho tiempo. Ella no dejaba de brillar, pero después de unas dos o tres horas el brillo cesó y la piedra se quedó tranquila.

    Cerca de allí, de hecho, unos cuantos kilómetros a la izquierda y dos hacia abajo, se encontraba otra lápida que también tenía una leyenda en el costado. Esta lápida se creó cuando con el terremoto se hizo un agujero y un solitario rayo de sol daba directamente.

    Pero esto no sólo ocurrió en México, en Estados Unidos se desató una lluvia, que los científicos de ahora describirían como lluvia ácida, y como la peor que ha habido en ese país, pero no, nadie lo entendió en ese entonces y tampoco en la actualidad, la verdad es que era una lluvia de lava, las gotas eran rojas, brillantes, calientes y quemaban lo que tocaban; tras unas horas la lluvia terminó. Después del desastre, a un kilómetro debajo de la tierra reposaba una lápida con otra leyenda. Pero al crearse esta, también se creó una más que estaba a varios kilómetros de distancia.

    Por otro lado, en otro continente; en Francia se inició un maremoto tan fuerte que destruyó todo lo estaba a su paso, esto fue en la ciudad de Niza. La inmensa ola llegó con toda la fuerza de la naturaleza, no dejaba nada en pie. Sin embargo, ese maremoto no causó la muerte de ninguna persona, lo cual fue bastante raro. Así como en los otros países, había una lápida enterrada y también tenía una leyenda, e igualmente había una segunda lápida a unos kilómetros de distancia.

    Y por último, en el Reino Unido ocurrió algo similar. Un gran tornado se formó y arribó en Londres, durante todo su trayecto destruyó cuanto pudo. Ocasionó tantos daños y tantas muertes, que la gente sólo corría de un lado a otro, tratando de escapar del temible fenómeno natural. Pero este se detuvo y sólo continuaba girando, volando a escasos metros sobre el suelo. Cuando al fin tocó tierra, creó un hoyo y en el desapareció como si se consumiera, y entonces se creó una última lápida, claro que también había otra a unos cuantos kilómetros.

    ___________________________________________

    Pasaron años y las lápidas no cambiaron en lo absoluto, cada país se fue independizado y fue avanzando, las lápidas ni siquiera volvieron a brillar.

    Tiempo después, se soltó una devastadora guerra en México, a la que llamaron la Revolución Mexicana. Una vez más, la lápida que estaba en ese país, la que se había creado con el imponente, pero efímero terremoto, volvió a brillar de un una forma sorprendente, obviamente nadie la vio, aún estaba enterrada, estaba fría y pálida, más sin embargo en ese momento brilló como un espejo que reflejaba los rayos del sol. Cuando terminó, la lápida regresó a la normalidad, sin embargo, la segunda losa, la que se había creado con el verdadero rayo de sol, ni siquiera lanzó una pequeña chispa, ni nada parecido.

    Pero el que esta lápida estuviera tranquila, no indicaba que las otras también. Por esos años en el mundo se llevó a cabo una de las peores guerras que se habían visto: La Primera Guerra Mundial (La Gran Guerra), en la cual participaron un gran número de países y murieron muchas personas. Varios de los países vieron derrumbarse sus tierras, sus naciones quedaron devastadas, las personas estaban traumatizadas. En el transcurso de esa guerra, las tres losas restantes no dejaron de brillar, cada una de las que se formaron al principio con cada fenómeno natural. ¿Qué significaba eso? ¿Acaso nos querían decir algo? ¿Su brillo realmente tenía un sentido?

    Esa guerra duró varios años y después del primero, en el cual el brillo era incesante, las losas comenzaron a vibrar. Pasaron un par de años más y ya no sólo vibraban sino que ahora se tambaleaban frenéticamente. Seguían enterradas, pero su movimiento era tan fuerte que las piedras tenían la capacidad de mover la tierra de un lado a otro. Al fin lograron realizar lo que buscaban, empezaron a ascender, ¡a desenterrarse!

    Cuando la guerra terminó y los países regresaron a la tranquilidad, las lápidas también se tranquilizaron, solo que ahora reposaban a unos 600 metros bajo tierra.

    Siguió pasando el tiempo y unos 20 años después de La Primera Guerra Mundial, comenzó la que hasta nuestros días se considera la peor de todas las guerras en más de un sentido. Cuando Adolfo Hitler tomó el mando en Alemania, comenzó la Segunda Guerra Mundial.

    En ella participaron un mayor número de países; fueron más los que se involucraron en esta ocasión, entre ellos, Estados Unidos, Francia, Inglaterra y México; así es, los países que albergaban a las lápidas. En esta guerra hubo cerca de 50´000,000 de muertos, no sólo soldados, sino civiles, gente que sin tener nada que ver con el problema, tuvieron que sufrir las consecuencias. Este enfrentamiento también causó que la ya frágil salud mental de la gente se perdiera totalmente al ver las atrocidades realizadas en esos años; las armas tan masivas que se utilizaron por primera y única vez; al ver lo más espantoso y temible que puede hacer el ser humano contra sus semejantes. Vieron cómo naciones poderosas fueron reducidas a escombros; esto definitivamente fue lo más horrible que la gente había visto en toda su existencia. Así, en lo que duró esta guerra, las lápidas, además de brillar, vibrar y tambalearse, empezaron a desenterrarse de nuevo.

    Fue tan intenso su movimiento que subieron rápidamente. Durante los seis años que duró el combate, las lapidas ascendieron casi toda la distancia, hasta estar cerca del borde libre de la tierra. Cuando Estados Unidos atacó a Hiroshima y Nagasaki con la bomba atómica, se terminó la guerra; tras este gran suceso, las lápidas lograron subir 590 metros.

    A los escasos 10 metros de distancia bajo tierra que era donde ellas reposaban, fue donde se mantuvieron por las siguientes décadas, pues no volvieron a moverse después. Al terminar la guerra se creó la ONU (Organización de las Naciones Unidas) y con eso el tiempo pasó y las lápidas quedaron tranquilamente enterradas.

    2

    EL RENACIMIENTO

    DE LAS LÁPIDAS

    Desde hace cincuenta y nueve años, que fue cuando se creó la ONU, las lápidas no han parado de vibrar y moverse, lo que se consideraría un movimiento bastante leve comparándolo con el que hacían cuando ocurrieron las guerras, pues, aunque ya no las haya, la humanidad no ha podido vivir en paz.

    Es cierto, la guerra como la conocimos, ya no se ha presentado, excepto por agresiones como el atentado contra Estados Unidos. Sin embargo, en el mundo existe otro tipo de guerra; el mal en su naturaleza. Este mal ha habitado en el corazón del ser humano desde un principio; la humanidad no ha sabido vivir en paz. Sólo ha habido algunas personas capaces de controlar la necesidad de poder, de ambición, de egoísmo, pero desgraciadamente no todos somos iguales, y debido a esos sentimientos en el mundo hay peleas, secuestros, asesinatos, etc.

    A causa de todo ese mal, las lápidas han estado saliendo de la tierra, no han podido descansar desde que fueron creadas, y esto dará paso al inicio de nuestra historia.

    Desde que el último chamán azteca lanzó el hechizo a la piedra del sol, se eligió a cuatro jóvenes que todavía no habían nacido, pero que estarían destinados a cambiar el futuro del planeta, pero la pregunta es; ¿podrán hacerlo?

    Para el año 1989, nació un niño en México, a este niño se le puso por nombre Josué y su apellido era López. Cuando nació este bebé, la lápida que se encontraba en México, la primera en formarse, se tambaleo unos momentos, ascendió un poco y tras unos instantes se quedó descansando.

    El muchacho fue creciendo poco a poco, creció como una persona normal, nadie esperaría que así creciera quien en un momento dado tendría más poder que cualquiera… o mejor dicho más poder que el que tenía y hubiera tenido casi cualquier humano.

    Rápidamente pasaron dieciséis años y el pequeño bebé bueno el muchacho, creció sano y terminó siendo un joven alto, de piel morena, fuerte, de cabello entre lacio y chino. El chico estaba cursando el segundo año de bachillerato y se podría decir que se dedicaba a sus estudios.

    Pero en el año 1989 no sólo ocurrió el nacimiento de Josué, en otros tres países había ocurrido exactamente lo mismo. En Estados Unidos, en la ciudad de Chicago, nació otro muchacho, llamado Andrew Johnson. En Francia, en la ciudad de Niza, nació una niña a la que le dieron el nombre de Emma Gannén. Y en Inglaterra nació otra niña a la que le llamaron Viviana Blend.

    Pero el que ellos nacieran el mismo día, a la misma hora, al mismo minuto no fue lo extraño, lo que si lo fue es que con cada nacimiento cada lapida iba oscilando, todas simultáneamente ascendían, todas parecían emocionadas por el nacimiento de estos cuatro chicos; por fin su espera llegaba al desenlace.

    Los dieciséis años pasaron tanto para Josué como para los otros tres, lo que naturalmente indicaba que todos crecieron, todos iban al bachillerato, y aunque los cuatro en cierto momento serían amigos, ahora ni siquiera sabían que existían.

    Hacía poco que habían entrado a la escuela, y Josué como era, pretendía tener las mejores notas. Sin embargo, eso no le impedía tener amigos. Diario los veía, unos eran de su misma edad y otros mayores o menores, a él eso no le importaba.

    Solía pensar que el grado que estaba cursando era el más difícil, pero sabía que podría resistirlo pues con sus amigos tenía momentos de diversión. De hecho, su mejor amigo era Mario Domingo, un muchacho no muy alto, de voz aguda, cabello negro y largo, blanco de la piel. Este chico se encontraba en un grado arriba de Josué.

    _______________________________________

    Trabajando duro y divirtiéndose, pudo aguantar hasta el último día del mes de octubre, el día en que el destino de Josué comienza.

    —Chicos, pongan atención —empezó a decir su profesor de historia—. Muy bien, ahora que pude callarlos, les voy a decir que mañana saldremos de viaje…—dejó de hablar el profesor debido a los gritos que proferían los muchachos.

    —Genial, por fin nos vamos —grito Raúl, un amigo de Josué.

    —¡YA CÁLLENSE! —gritó el profesor ya harto de tanto grito—. Como les iba diciendo, mañana saldremos de viaje hacia las ruinas aztecas y allí pasaremos todo el

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