Rusia medieval: Una guía fascinante de la historia de Rusia durante la Edad Media

Por Captivating History

¿Sabía que Rusia, como estado unido, no se formó hasta el siglo XVI?

Hoy en día, Rusia es el país más grande y uno de los más poblados del mundo. Desde las primeras y primitivas formaciones estatales del siglo IX hasta la creación del primer verdadero zarato de Rusia en 1547, la historia de la Rusia medieval está llena de constantes luchas por el poder, rivalidades personales entre varios príncipes, guerras sangrientas y búsqueda de identidad.

Este periodo, que abarca unos ocho siglos, suele olvidarse al hablar de Rusia, a pesar de su importancia. Hoy en día, la percepción que la gente tiene de Rusia está definida en gran medida por la era de la Unión Soviética, y no es difícil entender por qué. Sin embargo, explorar un periodo tan crucial que dio forma a la Rusia moderna es imperativo para todo aquel que esté interesado, aunque sea parcialmente, en la historia del mundo.

 

Este libro sirve de guía para todos los lectores que quieran profundizar en la historia de la Rusia medieval. Abarca temas apasionantes, como:

• El surgimiento y la caída de la Rus de Kiev, el primer estado ruso.
• La separación de los territorios rusos en feudos.
• Las luchas internas entre los príncipes rusos por el dominio.
• La conquista de los mongoles y cómo gobernaron Rusia.
• La aparición de nuevas tendencias sociales y culturales en la sociedad rusa.
• Lucha por la independencia y la libertad de los gobernantes mongoles.
• Asunción del poder por parte de Moscovia, el territorio ruso más poderoso en el siglo XIV.
• Consolidación del poder por parte de los gobernantes moscovitas y los signos de un primer estado ruso unificado.
• La expansión de las tierras rusas y su participación en los asuntos europeos.
• Período Tumultuoso y la familia real Romanov.
• ¡Y mucho, mucho más!

 

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• Idioma: Español
• Editorial: Captivating History
• Fecha de lanzamiento: 16 dic 2022
• ISBN: 9798215454169

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Introducción

Este libro pretende explorar la historia de lo que comúnmente se reconoce como la Rusia medieval, un periodo de casi ochocientos años, desde el siglo IX hasta el XVII. Se centrará principalmente en los principales actores y acontecimientos de la zona conocida como «Rusia europea», una región al oeste de los Urales, y explorará cómo los acontecimientos que se produjeron ayudaron a dar forma al Estado ruso.

La zona al oeste de los Urales había sido durante mucho tiempo el hogar de una serie de pueblos diferentes antes del siglo IX. Aunque estos pueblos tienen una historia muy rica y apasionante, se considera que la formación de la Rus de Kiev, el primer estado verdadero de la región, dio lugar a lo que hoy conocemos como Rusia. Por tanto, el objetivo del libro es presentar una historia fascinante de cómo Rusia pasó de ser un pequeño y remoto estado en las lejanas tierras del noreste de Europa al inicio de su ascenso como legítima superpotencia europea en el siglo XVII.

Se cree que la «europeización» de Rusia comenzó durante el reinado de Pedro el Grande y que la evolución de los territorios rusos antes de eso estuvo ausente de contactos e influencias occidentales. Sin embargo, este libro demostrará lo inexacta que es esa afirmación. A pesar de la ambigüedad de este periodo de ochocientos años, los acontecimientos que se produjeron en Rusia no solo fueron significativos porque incluyeron a Occidente y a Oriente, sino porque también condujeron a la creación de uno de los imperios más definitorios que ha visto el mundo. Pedro el Grande contribuyó enormemente a la europeización de Rusia, pero los acontecimientos anteriores a su reinado son igual de apasionantes y también vitales para entender la Rusia preindustrial, la moderna temprana y la moderna.

La primera parte del libro se centrará en la historia de la formación de Kiev como un estado independiente y plenamente funcional, y su desarrollo a lo largo de los casi cuatro siglos de su existencia. (Hoy en día, Kiev se escribe como Kyiv; hemos optado por la grafía de la ciudad tal y como se habría escrito en la época medieval). La Rus de Kiev fue, sin duda, la fundación de Rusia tal y como la conocemos hoy, y fue el actor más dominante de la región en el apogeo de su poder. Sentó las bases no solo de las primeras estructuras sociopolíticas y económicas de Rusia, sino también de su cultura, algo que puede observarse claramente incluso hoy en día.

La parte central del libro abarcará el periodo que va desde el colapso de la Rus de Kiev hasta la creación del Gran Ducado de Moscovia, el otro estado crucial en la historia de Rusia. Este periodo caótico y sangriento está dominado por la desintegración de las tierras rusas a causa de los mongoles. También aumentó la confrontación de los pueblos germánicos, eslavos y nórdicos occidentales. Los acontecimientos que tuvieron lugar desde el siglo XIII hasta finales del XIV hicieron que surgiera un nuevo estado dominante que sustituyó a la Rus de Kiev como actor principal de la región.

En la última parte del libro se observa la evolución de Moscovia hasta la aparición de la dinastía Romanov y el reinado de Pedro el Grande. Este periodo se caracteriza por la expansión de las tierras rusas y el mayor protagonismo de Rusia en los acontecimientos de Europa. Desde el surgimiento de Moscovia hasta el Período Tumultuoso después de Iván IV, los últimos trescientos años de la Rusia prerromanov son increíblemente interesantes, ya que permiten comprender por qué Pedro el Grande creía que Rusia debía ser completamente reestructurada.

Capítulo 1 - La Rus de Kiev

Antes de Kiev

La llanura euroasiática, que se extiende desde los montes Urales en el este hasta los Cárpatos en el oeste, se considera la cuna de la civilización rusa. Esta vasta zona se compone de una tundra y una taiga interminables en el norte y de una estepa más cálida en el sur, que bordea los mares Negro y Caspio y las montañas del Cáucaso. Densos bosques dominan la zona central de la llanura, mientras que varios grandes ríos, como el Dnepr y el Volga, desempeñan un papel fundamental en la conformación de lo que quizá sea uno de los lugares geográficos más diversos y singulares de toda Eurasia. Fue aquí donde nació la civilización rusa y donde se desarrolló durante la mayor parte de su época medieval.

No es de extrañar que el desarrollo de los asentamientos en la llanura euroasiática se produjera de forma gradual, sobre todo si se compara con sus homólogos de las regiones occidentales y meridionales de Europa. Los primeros pobladores de la zona llegaron probablemente de Mesopotamia (de los valles de los ríos Tigris y Éufrates), que se considera la primera civilización de la historia. Debido a la proximidad de la llanura euroasiática con estas civilizaciones de los valles fluviales, es probable que los colonos viajaran hacia el norte a través de los corredores que les proporcionaba el mar Negro. Las pruebas arqueológicas de la conexión entre los mesopotámicos y los pueblos que vivían en la región del Cáucaso meridional han quedado bien establecidas, y es probable que los primeros pueblos que se asentaron en la llanura euroasiática procedieran de Oriente Medio.

Estos acontecimientos tuvieron lugar en los primeros tiempos de la historia de la humanidad, pero dieron un paso adelante en la época de los antiguos colonizadores. Los griegos se empeñaron en fundar ciudades comerciales en la costa del mar Negro. La ciudad griega de Chersonesus (Jersón), por ejemplo, en la península de Crimea, se estableció ya en el siglo VI a. C. Era una valiosa salida comercial para los pueblos de la llanura euroasiática del norte y los pueblos antiguos del sur. Además de estas expediciones, la gran migración desde Asia central hizo que la zona se diversificara aún más, promoviendo un modo de vida más tribal. Los pueblos que vinieron a vivir a lo que hoy es Europa oriental se denominaron venecianos, y acabarían convirtiéndose en los antepasados eslavos de los rusos. El nombre Sclaveni aparece por primera vez en los registros bizantinos del siglo VI y sería la base del término eslavo (Slav) actual, que es la forma más común de dirigirse al mismo grupo de personas[1]. 

También hubo constantes interacciones con los pueblos germánicos y nórdicos. Estos pueblos limitaban con estos colonos y no solo participaban en el comercio, sino que también organizaban despiadadas incursiones e invasiones. La presencia vikinga fue muy destacada en la región. Aprovechaban los grandes ríos de la zona con sus barcos largos, ligeros, fáciles de maniobrar y rápidos. Los nórdicos utilizaban sus barcos para recorrer los ríos, llegando incluso hasta el mar Negro, saqueando los asentamientos en su camino. Llegaron incluso al Imperio bizantino, que a menudo empleaba a los hábiles varegos en sus filas. Como la historia demostraría, los nórdicos desempeñarían un papel fundamental en la formación de Rusia debido a su amplia presencia en la región.

Los orígenes de Kiev

En el siglo IX, aparecieron varios asentamientos en la llanura euroasiática. Se concentraban principalmente en las orillas de los grandes ríos. Sin embargo, aún no existía una formación lo suficientemente significativa, algo que pudiera llamarse un estado. Existen varias opiniones sobre cómo estos asentamientos acabaron fusionándose para formar una entidad unida. Una de las más destacadas es la teoría normanda, que sostiene que fueron, de hecho, los normandos los que unieron a los pueblos eslavos. La teoría normanda se basa en la Crónica Primaria, una serie de escritos de los años de formación de la Rus de Kiev que describen los acontecimientos relacionados con la Rus a partir de los tiempos bíblicos. La Crónica Primaria menciona: «No había ley entre ellos [los eslavos]. Se dijeron: Escojamos un príncipe que nos gobierne y nos juzgue según la ley. En consecuencia, se dirigieron a los rusos varegos... Los eslavos dijeron entonces al pueblo de la Rus: ‘Toda nuestra tierra es grande y rica, pero no hay orden en ella. Venid a gobernar y a reinar sobre nosotros"»[2].

Según la Crónica Primaria, los eslavos se acercaron a los varegos con una oferta para unirlos. De los tres líderes, que eran todos hermanos, el mayor, Riúrik, llegó a establecerse en Nóvgorod y la gobernó en el siglo IX. Aunque la teoría normanda ha sido criticada en el pasado por depender demasiado de las imágenes heroicas de individuos que transformaron por sí solos el panorama político de la región, hay que decir que la historia de los forasteros vikingos que unieron a los eslavos enfrentados es racional. Es obvio que Riúrik y sus hermanos no serían los únicos responsables de la creación del primer estado ruso, pero en el gran esquema de las cosas, fueron los principales actores en el proceso más amplio de transformación de los eslavos tribales en una sociedad más organizada. Además, es probable que muchas de las representaciones de las figuras nórdicas legendarias de la época sean exageradas, pero eso no debe impedirnos pensar que el estado organizado de Nóvgorod tuvo fuertes influencias de los nórdicos.

Unos veinte años después de la llegada de