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Ensayo ME HE CREIDO ALGO: Creerse a la altura de la galaxia
Ensayo ME HE CREIDO ALGO: Creerse a la altura de la galaxia
Ensayo ME HE CREIDO ALGO: Creerse a la altura de la galaxia
Libro electrónico144 páginas2 horas

Ensayo ME HE CREIDO ALGO: Creerse a la altura de la galaxia

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Información de este libro electrónico

A cada nacimiento nace una historia, y cada rompimiento de fuente nace una estrella. La misión del ser humano aquí en la tierra es responder con su llamado de ser, más grandes que las plantas que los alimentan, más brillante que la estrella de la mañana y más importante que los planetas que giran alrededor del sol, por que cada uno de estas maravillas fueron pensados de antemano para nuestro servicio y bienestar. En este material concebido exclusivamente para soñadores y para animar a los que no han empezado a soñar todavía, a encontrar las pautas necesarias para preponderar su nombre en la historia, como lo hizo Jesús de Nazareth, Nelson Mandela, Madre Teresa de Calcuta y un sin números de hombres que han dejado sus huellas en la historia. Sin importar de donde vinieron, sin traer a colación el nombre de su madre y el apellido de su padre, han estandarizado su vida y trayectoria para darle renombre a sus progenitores y enaltecer a la tierra que nos vio nacer. Con este libro de auto-ayuda y de superación personal, Me he creído ALGO, cada uno de los lectores no solo trazará pautas específicas de superación, sino que se abrirá a un mundo de oportunidades y de creaciones que cambiarán su forma de pensar y de actuar hasta que pueda recordar en su larga vida. SER ALGO y no ser alguien, si nos hacemos alguien pronto desaparecemos, y hemos de ser algo inolvidable, una marca inevitable, un nombre imponderable, hemos de ser el fruto del vientre de nuestra madre, darle sentido a 9 meses de caprichos sin sentido, de momento de dolor sin causas, de ataques de furia sin motivo. Por eso debemos de ser ALGO, ALGO que repercuta aquí y allá, algo que ponga en evidencia nuestra naturaleza suprema, nuestro código divino y entrelazos celestiales; ser ese ALGO nos llevará a la altura de la estrella que brilla noche tras noche allá en lo más alto del cielo. Has de ser ALGO para que las constelaciones del firmamento estén complementadas, para que la galaxia pueda contar con toda tu hermosura. «Si por suerte, se nace con suerte, forjaré mi propio destino, partiendo de mis sueños,son legítimamente lo único que me pertenece,y gracias a ellos haré que mi vida se prolongue más allá de donde repercute mi nombre.»
IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento30 nov 2019
ISBN9789945806861
Ensayo ME HE CREIDO ALGO: Creerse a la altura de la galaxia

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    Ensayo ME HE CREIDO ALGO - Gardy Helvé

    SER ALGO, EMPEZANDO POR VENCER

    EL PRECIO DEL VIEJO COLCHÓN…

    ME HE CREÍDO ALGO

    GARDY HELVÉ-YDRAGMAN

    ME HE CREÍDO

    ALGO

    a la altura de la galaxia

    «Si por suerte, se nace con suerte,

    forjaré mi propio destino, partiendo de mis sueños, son legítimamente lo único que me pertenece,

    y gracias a ellos haré que mi vida se prolongue más allá de donde repercute mi nombre . »

    Ydragman

    Verite Editorial Group

    Casa editorial de auto-publicación y de distribución de libros.

    www.editorialverite.com

    ISBN: 9789945806724

    Primera Edición, Santo Domingo, DN. 25 agosto 2019.

    Diseño de Portada: Alexander Beras

    Diagramación:

    Robert alvarado

    Corrección:

    Lourdes Morales

    © Gardy Helve

    Email:

    Ydragman1@gmail.com

    Webpage:

    www.ydragman.com

    Blog:

    www.ydragman.wordpress.com

    Redes Sociales:

    @ydragman

    Homenaje

    No quisiera ser nadie, ni siquiera existir, si en cada uno de mis hechos, en el trasfondo de mis escritos, no se reflejara el amor incondicional del Dios todopoderoso, el Creador que me ha sellado y escogido para ser voz y representante de su reinado, y por aquellos que vivo día a día llevando a la acción cada uno de sus mandamientos, demostrando amor y sencillez de corazón a cada silueta viviente sobre la faz de la tierra.

    Homenaje a mi incansable padre, Frantz Helvé, que me dejó un vacío en el corazón el 13 de febrero del 2010, día en que falleció por una trombosis (enfermedad vásculo-cerebral, EVC); ese día vimos agonizar a nuestro papá, justamente un mes después del devastador terremoto del 12 de enero. Y desde entonces me apuro para ser alguien en la vida, para recompensar y honrar a nuestra madre biológica, nuestra guerrera, Firichelle Noisette, que hasta el sol de hoy se afana en tierras extranjeras para sustentar a nuestra familia. El deseo intenso mío de ser ALGO es para demostrarles a mi madre querida y a mi querido padre que está en el seno de Abraham, que sus esfuerzos y sacrificios nunca fueron en vano, y que sus suspiros amamantaban a un espíritu inabrogable para cambiar nuestra generación y marcar la vida en nuestro mundo.

    A mis hermanos, a todos ellos, los de sangre: Genel Elvé, Phito Elvé, Frantzdy Hervé, Fabiola Elvé, Fritznel Elvé (Carlito) Richelson Elvé, Davidson Elvé. A Juan Saintil, A mi adorados Jimaelle y Junior, mis amores en fracción de sobrino, a todos ustedes, que juntos hemos aprendido a sobrevivir y a vivir en el amor fraternal y en armonía para garantizar alegría en nuestro hogar.

    A mis nuevos padres en el extranjero, a Mark Roberts (padre y mentor), quien me impulsa día tras día a ser alguien, quien me sustenta a seguir creyendo en lo que he de ser. A Luzdenia Pérez Montero (madre en tierra dominicana), a Fernando Ruiz, a Mikal Fleming y a Martha Rosario, a cada uno de ellos, agradezco con todo mi corazón que, sin conocerme, me hicieron parte de su vida, me privilegiaron al considerarme como el hijo que nunca tuvieron, dándome un lugar siempre dentro de su parentesco.

    A mis hermanos de crianza,Dieuseul Aboite, Samuel Joslin, Carine Jean Pierre, Gayau Dorvil, a todos aquellos que compartimos infancia sana en las calles más peligrosas de Puerto Príncipe.

    A mis amigos y amigas de cerca y de lejos, les dedico estas hojas llenas de garabatos; garabatos que día a día tomaron sentido en algunos momentos vividos en su compañía.

    Me he creído ALGO está dedicado a todos aquellos que merecen creerse algo para sobrevivir, dedicado a aquellos que están siendo pisoteados por los verdugos de nuestras sociedades, a los pobres empleados que sus mediocres sueldos les pronostican una vida de miseria y de peripecias.

    Dedicado a cada uno de mis compatriotas haitianos que sufren miles de humillaciones en tierras extranjeras, a los inmigrantes latinos perseguidos por las leyes discriminatorias en América del Norte, Europa y todos los países desarrollados del mundo: creernos ser algo y ser alguien serán nuestras herramientas para forjarnos un camino en nuestro Egipto y lograr cruzar el mar Rojo de la desesperanza y alcanzar nuestros más pretenciosos sueños, para el bienestar de nuestra familia y para ser el orgullo de la tierra que nos vio nacer.

    Agradecimientos especiales

    A mis pastores y padres espirituales quienes, gracias a sus mensajes, consejos y estudios, han contribuido a que aprendiera y comprendiera más acerca de la Biblia, de la vida y de mi entorno.

    Gracias a mi Pastor Fernando Ruiz Fleming y su esposa Mikal Ferrer por sus enseñanzas y sus asesorías de crecimiento personal mientras vivía en Barahona Sur de la república Dominicana.

    A los Pastores Andrés y Rocío Corson más el equipo pastoral del lugar de su presencia de Bogotá, iglesia que desde hace cuatro años he adoptado como propia, alimentándome semana tras semana de sus estudios, alabanzas y mensajes.

    Sin olvidar al pastor Dante Gebel de la Iglesia River Church quien sigo desde hace mucho, tratando de poner en práctica sus prédicas, manteniendo en alto el nivel de fe que profesa y que lleva a todo cristiano a mantenerse firme en Jesús.

    Prefacio

    En varias ocasiones me han dicho que mis pretensiones son superiores al color de mi piel. Para algunos tal afirmación pudiera tildarse o entender como racista o discriminatoria, pero en realidad creo que no, ya que nacimos en un mundo donde el éxito se le ha atribuido a grupos específicos y las excepciones son clasificadas como tales. Para mí no son insultos, ya que entiendo que en realidad mis pretensiones van más allá de lo que cualquier mortal pudiera desear, por lo tanto supera exponencialmente el color de mi piel, a lo aplastado de mi nariz o la anchura de mis gruesos labios.

    Por lo tanto, desde muy joven he decidido no ser igual a los de mis alrededores, anhelo ser mucho más de lo que han resonado en esa parte de la isla y del hemisferio completo. Es un sueño, es un simple anhelo, esta es mi pretensión. Me he creído ALGO viene siendo como un estornudo de mis pensamientos a cada segundo.

    Este libro, Me he creído ALGO, aunque pudiera escucharse altanero y prepotente, es un deseo y un gemido de superación que sobrepasa mi existencia. No quiero ser ALGO para superar a nadie, sino para superarme a mí mismo, darle un verdadero sentido a mi vida, responsabilizarme frente al compromiso de ser privilegiado con la oportunidad de seguir respirando, de habitar el firmamento al igual que las resplandecientes e innumerables estrellas o los majestuosos e imponentes planetas de las galaxias.

    El querer ser ALGO para poder estar orgulloso de gritar a viva voz, que escuchen Nelson Mandela, Malcom X, George Washington, Simón Bolívar, Mahatma Gandhi, cada uno de los iconos de la historia de la humanidad que brindaron sus vidas y sus conocimientos para alumbrar a los que son iguales a mí.

    Me he creído ALGO, como mis antecesores, mis ancestros, los que fueron y marcaron la historia a costa de su sangre y de su vida, quienes pusieron freno a la arbitrariedad, al abuso y a la explotación de nuestra raza, dando un ejemplo de dignidad, destruyendo la potencia más temida del siglo XIX. He de creerme ALGO porque comparto dignamente la

    misma nacionalidad que Toussaint Louverture, Jean Jacques Dessalines, Henri Christophe, Alexandre Pétion y cada uno de los héroes de la independencia haitiana que pusieron una interdicción al sistema esclavista que aniquilaba a millones de indios para reemplazarlos con negros de África, a quienes desde luego explotaron, maltrataron y mataron con sus ambiciones capitalistas. Cómo no he de creerme ALGO

    después de estudiar como exilamos (esclavos) al ejército más poderoso de aquel tiempo, apoderándonos de media isla, bautizándola como el primer país negro libre de azotes coloniales.

    No se trata de un libro profeso de orgullo, porque a este le huyo, que sé que Dios resiste a cualquiera que anduviera en estas veredas, Me he creído ALGO se trata de un ensayo que motiva a todos a soñar con una vida mejor, y hacer de estos sueños una realidad y de esa realidad un estilo de vida. No es porque somos caribeños que estamos condenados a ser pobres o dependientes de los yankees o de cualquier estado desarrollado del occidente, no es porque nuestros padres son humildes que debemos vivir solo con el pan del día: hemos de ser ALGO porque hemos nacido para ser la diferencia y el honor de nuestro apellido.

    Con Me he creído ALGO cada uno de los lectores no solo trazará pautas específicas de superación, sino que se abrirá a un mundo de oportunidades y de creaciones que cambiarán su forma de pensar y de actuar hasta que pueda recordar en su larga vida. SER ALGO y no ser alguien, si nos hacemos alguien pronto desaparecemos, y hemos de ser algo inolvidable, una marca inevitable, un nombre imponderable, hemos de ser el fruto del vientre de nuestra madre, darle sentido a 9 meses de caprichos sin sentido, de momentos de dolor sin causas, de ataques de furia sin motivo. Por eso debemos de ser ALGO, ALGO que repercuta aquí y allá, algo que ponga en evidencia nuestra naturaleza suprema, nuestro código divino y entrelazos celestiales; ser ese ALGO nos llevará a la altura de la estrella que brilla noche tras noche allá en lo más alto del cielo.

    Has de ser ALGO para que las constelaciones del firmamento estén complementadas, para que la galaxia pueda contar con toda tu hermosura y lucir sus colores y sus resplandores sin que falte ninguna de sus estrellas. Después de leer este libro no tendrás excusas para no presumir

    la misma importancia que la Osa Mayor, y sobre la tierra su estructura física será invaluable entre todos tus parecidos.

    Me he creído ALGO nace para responder a las necesidades de mi casa, prometer días mejores a toda mi raza, tenderle la mano a los más desfavorecidos tras mis pasos, enaltecer el apellido de mi padre y hacer resonar lo más lejos posible el nombre de la bella tierra donde mi ombligo está enterrado.

    Si no has soñado con ser ALGO, el viaje a través de estas hojas te dará una razón para empezar a soñar ese ALGO que es menester ser, para el bien de tu existir.

    Gardy Helvé-Ydragman

    Palabras del autor

    Mis palabras a lo mejor no serán persuasivas,

    mis deseos tal vez parezcan altaneros,

    no me quedaré en silencio ni tranquilo

    cuando superarme sea la única alternativa.

    En vez de quedarme de brazos cruzados,

    dejar mis pretensiones a la merced de otros,

    renunciar a mis sueños y metas por estarme quejando, hablaré palabras, aun sin sentido, seguiré soñando.

    Hoy decido ir en contra de los pronósticos, decido enfrentar el déficit económico y descenso de la bolsa prefiero ignorar las incertidumbres de los especialistas porque no dejaré que nadie pronostique mi futuro.

    No es debido depender del qué dirán de los demás tampoco es de sabios desistir a sus impulsos de grandeza, he de ser la mejor versión de mí, sin importar mi realidad, el presente usaré como impulso, para superar mis metas.

    Como nadie me otorgará la oportunidad de ser exitoso, construiré mi patrimonio sobre las ruinas de mis fracasos, caminaré más allá de las huellas de mis calzados, para alcanzar cada uno de

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