Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Solo $11.99/mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

Un Perro Y Un Erizo En Psicoterapia De Pareja
Un Perro Y Un Erizo En Psicoterapia De Pareja
Un Perro Y Un Erizo En Psicoterapia De Pareja
Libro electrónico284 páginas3 horas

Un Perro Y Un Erizo En Psicoterapia De Pareja

Calificación: 0 de 5 estrellas

()

Leer la vista previa

Información de este libro electrónico

Pisar el umbral del gabinete de terapia de pareja puede ser aterrador. Renunciamos o traemos con nosotros expectativas mas o menos realistas.
El libro de Laura Panazan nos invita a un mundo guiado por un terapeuta, nos hace participes de experiencias muy sensibles, nos permite olfatear las vivencias de los clientes y el esfuerzo terapeutico.
Nos ayuda a sentir empatia con cada personaje, a dar un sentido a las conductas dificiles de entender. Nos sorprende con su estilo directo. Nos inquieta con la sinceridad de sus revelaciones, uniendo las historias de sus clientes con instantaneas de su vida personal.

Y sobre todo nos da a conocer al o al que llevamos dentro, nos determina a mirarnos mas de cerca, para comprendernos y tomarnos el amor y la vida en nuestras propias manos.
--Dr. Madalina Voicu, psicologo y psicoterapeuta, principal P.E.U., formador y supervisor dentro del Instituto SPER

Una lectura que te obliga a emprender un viaje en las profundidades de tu alma, con todo lo bueno y lo malo, a explorar rincones que a la vez te parecen desconocidos y familiares, a reir y llorar con almas reales que se asemejan asombrosamente a la tuya, la de ella, la de el.
--Alina Iliescu, especialista oftalmologo

Un libro sincero, profundo, a veces tremendamente incomodo, otras veces sorprendentemente liberador. Un libro que reinventa los de la pareja, llevandolos ahi donde pertenecen: muy cerca de nuestras almas.
--Claudiu Alexandru, piloto

IdiomaEspañol
EditorialLaura Panazan
Fecha de lanzamiento20 oct 2021
ISBN9786060714880
Un Perro Y Un Erizo En Psicoterapia De Pareja

Relacionado con Un Perro Y Un Erizo En Psicoterapia De Pareja

Libros electrónicos relacionados

Psicología para usted

Ver más

Artículos relacionados

Categorías relacionadas

Comentarios para Un Perro Y Un Erizo En Psicoterapia De Pareja

Calificación: 0 de 5 estrellas
0 calificaciones

0 clasificaciones0 comentarios

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

    Vista previa del libro

    Un Perro Y Un Erizo En Psicoterapia De Pareja - Laura Panazan

    Copyright

    Un perro y un erizo en psicoterapia de pareja

    COPYRIGHT 2021 LAURA PĂNĂZAN

    COPYRIGHT 2021 Editorial LETRAS

    Todos los derechos reservados.

    ISBN ePub 978-606-071-488-0

    Amazon - 978-606-071-489-7

    Publicado por Letras

    https://letras.ro/

    Distribuido por https://piatadecarte.net/

    Contacto editorial: edituraletras@piatadecarte.com.ro

    contact@letras.ro

    Este libro está protegido por la ley de derechos de autor.

    Por respeto al autor, utilicen este libro solo para fines privados.

    Se permitirá la reproducción de algunos fragmentos, dentro del límite de 300 palabras, en su página web, blog o redes sociales, siempre que el texto vaya entre comillas y esté seguido por el título del libro UN PERRO Y UN ERIZO EN PSICOTERAPIA DE PAREJA. VOLÚMEN 1: EXPECTATIVAS IRREALISTAS, y un enlace al libro y a la Editorial Letras.

    Índice

    Un perro y un erizo en psicoterapia de pareja

    Copyright

    Advertencia

    Prólogo

    Capítulo 1 – La primera expectativa

    ¡Si eres tan buena, resuélvenos tú!

    Capítulo 2 – La segunda expectativa

    ¡Prescríbenos una receta, hoy mismo!

    Capítulo 3 – La tercera expectativa

    ¡Ayúdame a arreglarlo!

    Capítulo 4 – La cuarta expectativa

    ¡Asegúrate de que nos vaya bien!

    Capítulo 5 – La quinta expectativa

    ¡Tú eres culpable!

    Capítulo 6 – La sexta expectativa

    ¡El amor no requiere esfuerzos!

    Capítulo 7 – La séptima expectativa

    Las emociones hacen daño

    Capítulo 8 – La octava expectativa

    ¡No quiero saber!

    Capítulo 9 – La novena expectativa

    ¡Déjame ser libre y no sufrirás!

    Capítulo 10 – La décima expectativa

    ¡Ya es demasiado tarde!

    Capítulo 11 – La úndecima expectativa

    La perfección

    Antes del final

    Conclusión

    Agradecimientos

    Notas

    A mis padres,

    Adina y Emil Marian

    Advertencia

    Querido lector, antes de empezar hay algo que te tengo que confesar. Yo, a ti.

    Eres tú quien podría tener expectativas irrealistas de la terapia de pareja o de este libro. Soy sincera contigo desde el comienzo y en esta nota te lo diré todo directamente.

    Podrías sentirte apuntado con el dedo desde el primer párrafo. Agarrado por el cuello. Puesto en la posición de cliente. Indignado, quizá.

    Solo quiero que te acerques. De hecho, quiero levantar el dedo hacia mí misma. Decirte quién soy. Pero antes te voy a contar algo.

    En mi primera cita con Esteban, mi amor de toda la vida, hace unos 30 años, yo, Laura, le enumeré mis imperfecciones: Esto es lo que soy. Esto es lo que no soy, aunque quizás te gustaría que sí fuese.

    Mi franqueza hizo que él también me enseñara sus defectos. Los enamorados suelen verse y mostrarse bañados en brillantina. Nosotros, al contrario, elegimos enfrentarnos a nuestros peores temores: Si un día descubrieras algo sobre mí que yo ya sé, ¿no sería como si te hubiese mentido, tratando de esconderlo, y así te perdería?

    Aquí, en tu primer encuentro conmigo, quiero confesarte lo que ya sé sobre este libro.

    Este libro no te va a relajar como una lectura fácil de fin de semana.

    Este libro te provocará. Te irritará. Hará que sientas emociones inesperadas. Es imposible que no te identifiques con algún cliente de mis historias, porque la relación de pareja es una apuesta fantástica para cada uno de nosotros. Aun cuando elegimos la soltería.

    Este libro no es pura literatura, aunque te lleve por mi barrio, la orilla del mar, el gabinete de psicología y algunas almas.

    Este libro no es la transcripción de un blog, aunque tiene un toque de diario en el Prólogo y en ciertas partes. Y resulta incómodo para aquel que busca informaciones y halla otra cosa. Es como si lo rodeara en círculos antes de que le desvelara los grandes secretos.

    Es mi manera de presentarte, en paralelo y cronológicamente, la historia detrás de la escritura. Desde el nivel de idea vaga y tic tac del corazón que ya olfateaba con sed las hojas del libro, por entre altibajos, ahora a todo galope, ahora a tropezones, a veces a matacaballo, otras veces con el caballo en brazos, hasta el momento cuando, ya armada de valor, te permito leerme.

    En este viaje, en el que serás mi cómplice, me he sentido a la vez gran impostora y gran escritora. ¿Será impropio decírtelo desde el inicio?

    Este libro entreteje varios hilos. El de mi vida, el de las terapias de pareja a las que apoyo, el de nuestra relación que recién comenzamos. El de tu alma, si la abres, si me recibes.

    En ocasiones, te resultará desconcertante y agotador este ajetreo mío de un plano al otro. Tendrás la impresión de que soy caótica. Pero te aseguro que los hilos tejen una estructura, los círculos se cierran y, al final, el rompecabezas estará completo. Que todos los detalles y las variaciones tienen un propósito. Y una intención bien definida. Tú.

    A lo mejor te parecerá que mi ambición es criarte, que tengo la arrogancia de darte lecciones. Que a veces te empujo hacia la introspección sin que tú me hayas pedido que fuese tu terapeuta.

    Solo quiero mostrarte que tú y yo somos iguales. Y para ello tendrás que acudir a esta cita no solo con la mente abierta y curiosa, sino también con el corazón en la mano. De lo contrario, en dos días olvidarás todo lo que has leído, por muy interesante que te haya parecido.

    Este libro no es un manual, pero puedes aprender mucho al experimentarlo. No encontrarás aquí el profesionalismo distante, objetivo, puramente científico e impersonal de un doctorado. Y no presenta estudios de casos, sino trozos de almas. Tampoco pretende ser una innovación en el ámbito. O alcanzar alguna cima. Solo quiere acercarse a ti. Ahí en tu escondrijo.

    Este libro no permitirá que hagas de mí un ídolo. Aunque necesites una autoridad impecable como referencia y hayas venido aquí para encontrarla. Aunque, al admirarme, leerás mi libro con más facilidad, impaciencia y confianza.

    Quiero que sepas desde el principio que soy una persona de carne y hueso. Que a veces tengo conflictos con mi marido o con mis hijos. De la misma manera que tengo maravillosos momentos de conexión con cada uno de ellos. Siempre te mostraré al ser humano que está detrás del experto. Con máscara, sin máscara. Te divulgaré mi emoción. La verdad. Y a veces te parecerá demasiado. ¿De qué sirve tanta divulgación? ¿Acaso los terapeutas no deberían ser impersonales? ¿A ti qué te parece?

    Si tienes el hábito de dividir el mundo entre Superiores e Inferiores, Buenos y Malos, Sabihondos e Ignorantes, Dioses y Mortales, Creyentes y Paganos, Campeones y Perdedores, puedes estar seguro de que te voy a decepcionar. Porque te mostraré tanto mi punto fuerte, que ya esperas, como mi vulnerabilidad.

    Y esto hará que descubras tu propia vulnerabilidad, y eso duele. Por lo cual te vas a enfadar seriamente conmigo y querrás tirar el libro contra la pared.

    Y sería mejor si, antes de hacerlo, volvieras a leer esta advertencia. No es para que pueda comentar…  ¡ya te lo dije!, sino para que recuerdes que todas mis confesiones tienen un sentido, que tu emoción negativa es el precio que pagas para encontrar la verdad propia. Es el precio de la concienciación, el primer paso hacia el cambio y el crecimiento. A partir de ese momento tú y yo nos vamos a encontrar a fondo. Ahí donde duele. 

    Y quiero que no pierdas de vista que, más allá de mis conflictos, hay siempre una reconexión. Temo que el conflicto te desilusione tanto que no logres prestar atención a cómo lo uso.

    Lo más probable es que mi relación, la cual expongo en este libro, no llegará a la altura de la relación de pareja ideal de tu imaginación. 

    Entiendo que quisieras que pasara esto, para poder equilibrar las relaciones bloqueadas que presento. O tu propia relación amorosa, que te empuja a buscar aquí un rato de felicidad. Hay películas con final feliz, hay cuentos de hadas que acaban con y vivieron felices para siempre.

    Yo creo más en se escucharon, se apoyaron, se consolaron uno al otro y juntos encararon mejor la vida.

    Este libro trata la realidad. A veces en palabras chocantes, otras veces en palabras cuidadosamente elegidas, pero nunca perdiendo de vista su meta. Trata la complejidad del ser humano completo, con su vasto abanico de colores emocionales y dentro del que cohabitan lo bueno y lo malo. Como dentro de mí. Y dentro de ti.

    Este libro trata el autoconocimiento, la aceptación de todo y la propia asunción, de modo que tu motivación y esperanza vengan del interior y no del exterior. De ti mismo y no de mí. De Uno Mismo, tu núcleo divino y no de un viejito con barba que está en el cielo.

    Espero que eventualmente lo recibas como regalo, como comprensión más amplia y más cerca de la naturaleza humana. De tu propio ser.

    Yo no suelo maquillarme. ¿Y tú?

    Prólogo

    La segunda mitad de septiembre de 2019. Día 20, el primero con aroma otoñal, un viernes por la tarde.

    No hace suficiente frío como para decir que hace frío. No hace suficiente calor como para tener calor. Una sensación de aire fresco, que no te quieres perder. Esteban trabaja hoy desde casa y yo no tengo que ir al gabinete. Así que salimos un rato.

    Paseamos por el barrio como dos viejos amigos, en un ritual solo nuestro. Él aboga por su estación preferida, o sea esta, mientras yo sigo envuelta en la nostalgia del verano pasado.

    Vamos, admítelo, a ti también ha empezado a gustarte el otoño, dice él.

    Sé que es su intento de tranquilizarme. Una manera de decir todo va bien entre nosotros, cariño.

    A mí el otoño me recuerda que somos pasajeros. Y a las pérdidas… ¡Cómo nos hemos apartado el uno del otro! ¡Y cómo nos hemos buscado uno al otro en este barrio!, respondo.

    Él sabe que me refiero al otoño de nuestro matrimonio, con lágrimas-lluvia, tormentas en el alma y mucho barro. Siente que por un instante he regresado a esa vieja emoción. Yo sé que nos hemos vuelto a encontrar al arreglarnos las cuentas en otra primavera de nuestra relación. Siento su mano abrazando la mía en este instante.

    Dejo de caminar y lo miro profundamente.

    ¡No sería quien soy sin ti y sin nuestros conflictos!, le digo con toda el alma.

    Estoy en paz con todo y se lo muestro a través de mi sonrisa.

    A lo largo de nuestro paseo no deja de asombrarnos la aparición de más y más matices chillones y artificiales con los que el Ayuntamiento insiste en colorear nuestras vidas: basureros azules, bancos amarillos y resguardos violetas que se esparcen por el verde natural de nuestro barrio.

    ¡A esos habría que demandarlos por delitos estéticos!, dice Esteban mientras agarra mi mano para cruzar la calle, como si intentara protegerme de algún mal inopinado.

    Luego, al otro lado, admiramos en silencio a los artistas callejeros, que pintan molinos de viento y pájaros en los muros, con los mismos colores (re)ordenados, pero con el efecto diametralmente opuesto. Si los primeros resultan repulsivos y molestos, los últimos son atrayentes y reconfortantes. Los primeros están en contra de la naturaleza. Los últimos recuerdan una esencia perdida en el vaivén cotidiano e invitan, a través de detalles, a gozar de un momento de respiro. Nos alejamos con cuidado para no interrumpir el proceso. Seguiremos siendo observadores de estas creaciones por muchos años.

    Imagínate, cariño, qué titular de periódico… El Kitsch y el Arte se hacen guiños en mi calle.

    Suena mi móvil. Es Aurora, compañera y amiga mía mucho más joven.

    1-MoriDeVant

    ¿Te acuerdas, Laura? Hace dos años, por estas fechas, disfrutábamos, con cucharaditas minúsculas, chocolate caliente negro en Zvon Café y me fascinaba tu afición por EFT¹. Estaba a punto de dar a luz, pero anhelaba un poco más de ciencia antes de asumir el papel de madre en tres turnos al día. Vaya... ¡¿te das cuenta que ya han pasado dos años?! ¡¿Que mi niño está grandecito y yo soy otra persona?!... Oye, dentro de un cuarto de hora viene mi primera pareja a la terapia. Es increíble, ¿verdad? ¡Claro que ya me he repasado toda la teoría, pero siento que tú tendrías algo importante que decirme, algún secreto sobre cómo proceder en esta sesión!, comenzó a recitar de carrerilla.

    Cariño, ya sabes todo lo que te voy a decir, afirmo. Y empiezo a enumerarle los aspectos clásicos de la relación terapéutica y su puesta en escena, solo para que mi voz le calme un poco la mente, cuyos motores ya estaban vibrando a máxima intensidad ante esta nueva provocación.

    "Por ejemplo, no te olvides de la igualdad de espacio. Quizás uno tenga un montón de cosas que decirte y parezca una fuente inagotable al exponerte sus incontables problemas. Y también los del otro. Y a lo mejor el otro considera que ya no tiene sentido añadir algo, porque la versión del primero ya ha influido en tu percepción. Podrías decirle: Entiendo que en tu caso normalmente funciona así, pero ahora te invito a que lo hagas de manera distinta, a que me hables sobre ti. Tienes toda mi atención y curiosidad. Aquí tienes tu espacio."

    ¡Dios, Laura, qué efecto tienen tus palabras en mí!...

    Sonrío por dentro y continúo.

    "Le aseguras que puedes dejar de lado todo lo que el primero te ha contado para poder recibirlo a él. Y que al final juntarás ambas perspectivas para obtener una más vasta, completa. Que con el paso del tiempo ellos también lograrán cambiar el o, o en y, y." Más aun, les dirás, juntos empezaréis a dejar espacio al tercer personaje: vuestra relación. Sois dos, pero en realidad estáis tres: yo, tú y nosotros. Y aprenderéis a prestar atención a la conexión entre vosotros."

    ¡Qué bien que te he llamado y que te tengo!

    Sé que te acuerdas de nuestra última entrevista que en la primera sesión hay que cuestionar qué objetivo se ha fijado cada uno para esta terapia y observar si dichas metas se completan o se excluyen recíprocamente. No te olvides de usar la lente del apego y mostrarles las necesidades de amor que tú observas.

    ¡Claro que sí, lo haré tal cual!

    Pero más que hacer, importa estar ahí. Con ellos. Atenta y presente. Y tú eres muy buena para eso. Finalmente sentirán que alguien los escucha.

    Si existen ángeles de la terapia, seguramente eres uno de ellos. Mi ángel.

    ¡Vaya, qué halago! Un abrazo, Aurora. ¡Suerte! Lo harás muy bien, estoy segura.

    Pero más que esa imagen mía de alas extendidas, me conmueve el sentimiento de reconocimiento que siento en su voz. Ha recibido. Irvin Yalom, el psiquiatra americano del que he aprendido la generosidad en este ámbito, la llama reverberación. Ya he cumplido medio siglo y me gusta transferir lo que sé y lo que soy, incluso a las personas que no me encuentro directamente, como los clientes de mi amiga.

    Aurora se siente ahora en las nubes. Y yo también. Me complace haber podido ayudarla. Tengo una sonrisa amplia, juguetona y mis ojos brillan cuando dirijo mi mirada hacia Esteban.

    ¡Me dijo que soy su ángel!

    ¡Bien hecho, cariño!, responde divertido mientras nos acercamos a casa.

    Ahora me entraron ganas de escribir.

    ¡Ya lo veo!, dice.

    Ya lo sabe, si empiezo a escribir un artículo, tendrá que pasar la tarde de viernes sin mí.

    Me ha provocado esta chica, le explico. Aún me quedaba tanto por decirle. Y no solo a ella. Hay tantos terapeutas jóvenes que me hacen preguntas y para quienes la pareja es todavía una zona resbaladiza. Y sería una ayuda para las parejas recién formadas, que acuden a la terapia con expectativas surrealistas. La gente no sabe realmente lo que ocurre en un proceso terapéutico: vienen para recibir consejos y soluciones. Y esperan que tú, su terapeuta, tomes las riendas de sus vidas. Exactamente sobre esto voy a escribir, sobre expectativas...

    Diez expectativas idiotas de la terapia de pareja es un título que vendería bien, afirma él.

    No me gustan ni las cifras, ni las cosas que venden bien. ¿Y quién crees que compraría un libro que le dice en la portada que es un idiota?

    ¿Hostia, cómo he podido pensar que ibas a valorar mis ideas?, pregunta y sonríe.

    "¡Anda, no seas malo!, le digo también en broma. Tus ideas importan siempre, aun cuando están en conflicto con las mías. Cuando te ofrezco explicaciones a ti, me clarifico a mí misma. Claro que no escribiré como lo harías tú, amor. Tengo otra cosa que transmitir, soy otra persona y lo hago a mi manera, continúo seria. 

    Pero me ayuda mucho hablar contigo: me doy cuenta de cómo no quiero que mi escritura sea y se me revela la forma que quiero que tome…

    Quisiera que fuera

    ¿Disfrutas la vista previa?
    Página 1 de 1