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El Halcón Del Caribe
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Libro electrónico90 páginas1 hora

El Halcón Del Caribe

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El halcn del caribe.
Esta publicacin est ilustrada. Durante la Segunda Guerra Mundial, El Halcn es contratado en Puerto Rico por el servicio secreto de Sus Majestades Britnicas para cubrir todo el Caribe y el Ocano Atlntico. Los Nazis intentan apoderarse de muchas de las islas de las Antillas. Un doble agente. El Gobierno de los Estados Unidos lo contrata tambin. Julin Rojas pertenece al Servicio de Inteligencia Britnico y acta para proteger el petrleo en el mar Caribe de los ataques de los U-boats alemanes. Julin es un personaje de un ojo fino y una mente penetrante, rpido en sus decisiones, de un dominio de la mecnica y un control de todos los vehculos en los que se mueve. Una novela dentro de un panorama histrico real que muchos vivieron.
IdiomaEspañol
EditorialPalibrio
Fecha de lanzamiento7 abr 2018
ISBN9781506524917
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    El Halcón Del Caribe - Federico Y Monge Barreda

    El HALCÓN

    del Caribe

    FEDERICO BARREDA Y MONGE

    Copyright © 2018 por Federico Barreda Y Monge.

    Número de Control de la Biblioteca del Congreso de EE. UU.:       2018904272

    ISBN:                   Tapa Dura                                                              978-1-5065-2490-0

                                Tapa Blanda                                                          978-1-5065-2492-4

                                Libro Electrónico                                                978-1-5065-2491-7

    Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este libro puede ser reproducida o transmitida de cualquier forma o por cualquier medio, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopia, grabación, o por cualquier sistema de almacenamiento y recuperación, sin permiso escrito del propietario del copyright.

    Esta es una obra de ficción. Cualquier parecido con la realidad es mera coin-cidencia. Todos los personajes, nombres, hechos, organizaciones y diálogos en esta novela son o bien producto de la imaginación del autor o han sido uti-lizados en esta obra de manera ficticia.

    Fecha de revisión: 04/06/2018

    Palibrio

    1663 Liberty Drive, Suite 200

    Bloomington, IN 47403

    778047

    ÍNDICE

    EL ATLÁNTICO 1938

    DICIEMBRE DE 1941

    EL HALCÓN

    BLACKOUTS

    CIUDAD MURADA

    El AFFAIRE PECECITOS DE COLORES

    FUENTE DE RIQUEZAS

    ISLA DE CUBA, 1943

    SECRETO

    DEDICATORIA

    A mi hermano Víctor,

    Hermano de aventuras.

    Su héroe favorito.

    EL ATLÁNTICO 1938

    N eville Chamberlain, jefe del gobierno inglés desde el 28 de mayo de 1937, era un Ministro esencialmente Conservador. A veces parecía dar pequeñas muestras de transigir con los fascistas. En febrero de 1938 Anthony Eden, el Ministro de Asuntos Exteriores dimitió por diferencias con él respecto a la política con Italia. El 16 de abril de 1938, Inglaterra firmó un acuerdo con la Italia de Mussolini, según el cual los italianos retirarían sus fuerzas de la guerra civil en España con el triunfo del General Franco sobre la República.

    La diplomacia de Eden, había sido emplear a España como baraja en su política contra Italia, ya que no se fiaba de Mussolini, demostrando de esta manera su reacción negativa hacia el fascismo.

    La victoria de Franco en España, no amenazaba la paz, después de éste haber declarado su neutralidad en caso de una guerra europea que parecía inminente.

    Por otro lado, no obstante, España era el foco de los intereses mineros de las grandes potencias como Inglaterra y Francia, para sus fábricas de implementos bélicos. El poder de la City de Londres en las finanzas de España, era decisional; en especial sobre las minas de cobre, Sociedad Río Tinto, e íntimamente unidas a las industrias de guerra donde controlaba La Sociedad Española de Construcción Naval.

    De igual manera, el hierro de Vizcaya exportado desde Bilbao hacia Inglaterra, se había hecho tan popular, que desde el siglo XIV una diversidad de vocablos de objetos de hierro habían entrado a la lengua inglesa del español. Esta relación comercial se incrementó con la primera guerra mundial de 1914 a 1918. En 1921 el rey Jorge V había concedió al presidente de la Naviera Sota y Aznar, la distinción de Caballero del Imperio Británico, por los buenos servicios prestados al Reino Unido.

    Alemania intentaba sustituir de algún modo a Inglaterra en este aspecto, en especial la familia Krupp; su participación en Orconera de Vizcaya era ya conocida, ahora pedía las concesiones mineras de Río Tinto.

    *     *     *

    Existía una relación directa que unía a la City con el famoso Servicio de Inteligencia Británico; este Servicio poseía una gran autonomía, incluso financiera.

    Para ese entonces los Servicios Secretos de Inteligencia estaban en plena actividad. El cónsul inglés en La Habana, y agente del servicio secreto británico, (a veces conocido como su Eminencia Gris), fue llamado en 1938 a España para mediar en varios asuntos.

    *     *     *

    Las instrucciones del Foreign Office eran, proteger el petróleo en la zona del mar Caribe. Su política en Europa iba dirigida hacia la defensa, y una guerra iba a requerir un gran esfuerzo.

    Los barcos de la Royal Dutch Shell, petrolera anglo-holandesa, navegaban por todo el Atlántico y se abastecían en estas islas. Se pensó en proteger las refinerías y los centros de almacenaje. La compañía petrolera tenía sus especialistas.

    Es por esto que decidieron acudir al ingeniero Julián Rojas, quien llevaba muchos años en la rama de la ingeniería del petróleo. El conocía muy bien el territorio en cuestión. Había viajado con su padre desde muy joven todas las islas del Caribe. Como también lo había hecho a Angola y a Madagascar montando centrales azucareras, torrefactoras de café, y otras muchas obras de ingeniería.

    Su padre, un rico hacendado que llegó a Puerto Rico a principios de siglo, estableció su propia central azucarera en Villalba. Era además un ingeniero de grandes destrezas que había recorrido varios continentes. Dominaba diez idiomas y se había ocupado de instruir a su hijo en estos. Su familia todavía mantenía los negocios en varias de las islas del Caribe.

    El ingeniero Rojas en la década de los treinta había dirigido las operaciones de la Royal Dutch Shell tanto en la Republica Dominicana como en Haití.

    Su amplio despacho estaba localizado en las instalaciones de la planta petrolera en la isleta de San Juan. Desde allí podía divisar el Canal de San Antonio, que conectaba la bahía con la laguna del Condado y el mar, lugar donde muchas veces atracaban los barcos petroleros.

    Ese día, temprano en la mañana, se encontraba Julián sentado en su escritorio. Estudiando unos

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