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Un hada en apuros: Colección/Serie:  Cuentos de Hadas Modernos, #1
Un hada en apuros: Colección/Serie:  Cuentos de Hadas Modernos, #1
Un hada en apuros: Colección/Serie:  Cuentos de Hadas Modernos, #1
Libro electrónico125 páginas1 hora

Un hada en apuros: Colección/Serie: Cuentos de Hadas Modernos, #1

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Descripción del libro:

¿Qué puede hacer un hada madrina en entrenamiento cuando Cenicienta se niega a ir al baile?

¡Pues, colocarse en el lugar de Cenicienta, claro!

Pero enamorarse del hermano del príncipe nunca estuvo contemplado que pasara. De pronto una serie de eventos entran en acción e impactarán no solamente su carrera, sino su vida entera.

El problema es, que ella no sabe si el hermano del príncipe siente por ella lo mismo que ella por él.

Y abandonar sus alas solo por si él pudiera interesarse en ella y corresponderle, parecía algo descabellado e imprudente para lo que normalmente haría Esmeralda según-el-libro.

Mas aun, convertirse en humana sería la única oportunidad para Esmeralda de alcanzar su propia felicidad para siempre.


Mira el libro 1 en está nueva serie de cuentos de hadas modernos que te dejaran sin respiración y deseando el siguiente...

IdiomaEspañol
EditorialBadPress
Fecha de lanzamiento5 feb 2019
ISBN9781547569236
Un hada en apuros: Colección/Serie:  Cuentos de Hadas Modernos, #1

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    Un hada en apuros - Andrea R. Cooper

    Descripción del libro:

    ¿Qué puede hacer un hada madrina en entrenamiento cuando Cenicienta se niega a ir al baile?

    ¡Pues, colocarse en el lugar de Cenicienta, claro!

    Pero enamorarse del hermano del príncipe nunca estuvo contemplado que pasara. De pronto una serie de eventos entran en acción e impactarán no solamente su carrera, sino su vida entera.

    El problema es, que ella no sabe si el hermano del príncipe siente por ella lo mismo que ella por él.

    Y abandonar sus alas solo por si él pudiera interesarse en ella y corresponderle, parecía algo descabellado e imprudente para lo que normalmente haría Esmeralda según-el-libro.

    Mas aun, convertirse en humana sería la única oportunidad para Esmeralda de alcanzar su propia felicidad para siempre.

    Mira el libro 1 en está nueva serie de cuentos de hadas modernos que te dejaran sin respiración y deseando el siguiente...

    Palabras clave:

    cuentos de hadas, el cuento de hada, recuentos, cenicienta, mitos, leyendas, romance de fantasía, romance paranormal, historia de amor.

    Biografía del Autor: Andrea R. Cooper

    Aventuras Románticas

    www.andreaRcooper.com

    Andrea R. Cooper es un autor de fantasía, romance paranormal, y romances históricos con un toque de magia. Su serie de Leyendas del Olvido ha ganado el Up Author Approved Award y el premio Moonrise's Best Fantasy Romance.

    Andrea vive con su esposo y tres hijos en Texas donde le da forma a personajes ficticios dentro de misteriosos mundos. Ella practica luchando con espadas plásticas con su hijo y su hija o conjurando cenas con el maravilloso mago que es su esposo quien es el amor de su vida.

    Ella cree en el poder de transformación y cuenta a cada momento con una bendición. Pero más importante, ella cree en el amor.

    Regístrese en su hoja informativa para nuevas publicaciones, eventos, y más: http://eepurl.com/brJAl5

    Colección/Serie:

    Cuentos de Hadas Modernos

    Capítulo Uno

    El aroma del polvo de hadas y de las flores salvajes se arremolinó alrededor de Esmeralda mientras ella tomaba su lugar en la fila y respiraba profundo. Finalmente. Su turno para ser un hada madrina permanente, en lugar de una sustituta, había llegado. Ella tenía que ayudar a enamorarse al que estaba bajo su cargo, quien sea que fuera él o ella. Sus apretadas manos se arrugaron su falda de bígaro mientras ella se acercaba más al hada madrina en retiro. Si Esmeralda arruinaba esta prueba, como la última que hizo hace doscientos años, su promoción sería suspendida. En otras palabras, ella regresaría a limpiar rocío de cuchillas del césped, lo cual era aburrido, aburrido, aburrido. Ella no podía ni pensar en fallar.

    Ella enderezó sus hombros, sus alas batían más rápido que los latidos de su corazón. Gano esta, y podré mezclarme entre los humanos, incluso oler sus deliciosas comidas. Su boca se hizo agua al pensamiento de los dulces helados y los productos horneados. Ella trabajaría su varita mágica para obtener este trabajo. Además, Fanny, el hada madrina en retiro, había sido la original para Cenicienta en la fábula y ya era el momento de alas nuevas. Esmeralda subió mientras el hada en frente de ella chillaba de gusto y desapareció detrás de un buche rosa.

    Siguiente, llamó Fanny.

    Esmeralda enderezó sus hombros y subió marchando hacia la anciana dama de la que una vez su cabellera blanca fuere mayormente gris

    Esta asignación será fuerte, pero creo que ustedes persistirán. Le gesticuló Fanny con su pergamino sellado.

    Un malestar se enroscó de su vientre, apretándolo. No podía fallar, no de nuevo, pero tampoco iba a alcanzar el rollo de papel por sí misma. ¿Era por la asignación que Fanny estaba preocupada? ¿O era por las anteriores metidas de pata de Esmeralda que Fanny le estaba advirtiendo?

    Los ojos violeta de Fanny brillaron con malicia. Yo quiero disfrutar de mi retiro flotando alrededor del Mediterráneo y persiguiendo hombres de poca altura, no esperando por ti.

    Esmeralda dudo. ¿Era esta una prueba, o eran las reglas de las hadas? Pero mezclarse directamente con humanos, que no estuviesen a su cargo, está prohibido.

    Un día, cuando tú seas tan vieja como yo, aprenderás que las reglas son hechas para romperse, o al menos doblarse.

    Eso no era lo que decía el libro de las reglas. Y Esmeralda se había memorizado las setenta y tres de ellas. Antes de que ella pudiera protestar, Fanny chasqueó el rollo de papel en su mano abierta. El pergamino se calentó en la palma de su mano. Todos los detalles de su asignación se absorbieron dentro de su piel y el rollo de papel desapareció.

    No olvides tener a la descendiente de Cenicienta lista para el baile de mañana en la noche. Fanny ondeó su arrugada mano.

    Correcto, el baile. Así que Ceny podría encontrarse con su príncipe. Demasiados falsos hechizos mágicos fallaron en hacer que los humanos se enamoraran de su pareja. Entre más pronto llevara al baile a  su nuevo encargo a encontrarse con su príncipe, más pronto reclamaría su insignia de hada madrina y nunca tendrá que preocuparse de ser acusada de observar envidiosamente a los humanos de nuevo, eso sería parte de su trabajo.

    No lo olvidaré, y no defraudaré a los miembros del concejo, ni a ti. Ella cepilló un mechón azul de cabello fuera de sus ojos mientras luchaba por que su corazón latiera no tan rápido.

    Solo cuídate. Las alas de Fanny batieron con solo una pizca de escarcha verde lima mientras ella salía volando, pero dijo por encima de su hombro. No me hagas regresar más temprano de mi viaje.

    No la defraudaré a usted, ni a los mayores. Con burbujas de risa dentro de ella, Esmeralda dejó a la feliz hada en lo profundo del bosque con sus suaves, harmoniosos sonidos de animales, aves y abejas. Ella se protegió colocándose fuera del alcance de los ojos humanos y voló hacia el hogar de Ceny en un cercano poblado. Por generaciones los humanos se habían sentido atraídos por las Montañas Allegheny, sin darse cuenta nunca de que la razón por la que el área era tan atractiva, era que allí estaba el hogar oculto de Fairyland.

    El humo de las chimeneas de la ciudad se mezclaba con la contaminación de Pittsburg a lo largo de varias millas y no le permitía ver bien a través de la delgada capa de humo. Ella estacionó a la derecha, asintiendo con la cabeza a las hadas del viento quienes desesperadamente trataban de permitir que el sol se filtrara a través de las flores y árboles más abajo. Con ayuda de ellas, el sol de la madrugada luchaba con las nubes de humo para parpadear a través de los árboles. A menos que ellas decidieran permitirlo, o que estuvieran muy distraídas, ningún ser humano podría verlas.

    Esmeralda se movió más abajo, haciendo uso de su magia para ocultarse mientras serpenteaba las calles salpicadas de somnolientas personas sin hogar y repletas de carros y casas de ladrillos. Aun cuando ella había estadoen muchas ciudades en el norte-Chicago, New York, Pittsburg, e incluso una vez bajó a Washington, D.C.-pero ella todavía prefería Bethany, este pintoresco pueblito cerca de Allegheny Mountains donde ella nació.

    Ella pescó un olorcillo a canela y pan horneado y observó. La comida era una de las cosas que envidiaba de los humanos. Tanto para elegir y tan maravillosos aromas. Varias veces, ella había intentado desviarse de su dieta de miel y néctar de flores, pero se arrepentía, sintiendo náuseas por varios días. Bajó otro poco, hizo pausa en las afueras de una panadería con las puertas abiertas y el olor que flotaba de adentro, le hizo colocarse una mano sobre su estómago.

    Ella cerró sus ojos fuertemente, permitiéndose regodearse con los deliciosos aromas. Transformándose del tamaño de un humano, preguntándose si solo un sorbo, o un pedacito de helado le haría lamentarse más tarde. Había mantenido su invisibilidad para protegerse, debatiéndose, cuando un peso sólido golpeó de pronto su espalda y ella cayó al suelo. Su escudo se hizo añicos.

    Oooaf. Lo siento, dijo un hombre con delantal de panadero. No te vi allí. Un carrito lleno de rollos de canela y magdalenas había salpicado hacia la calle. ¿Estás bien? Se levantó el hombre y le tendió una mano.

    "¿T-tú puedes verme? Preguntó ella con voz temblorosa.

    Bueno, ahora puedo. El helado chorreó su delantal y otras manchas fueron absorbidas cruzando el frontal. La mayoría de las manchas parecían recién hechas.

    Ella había hecho un desastre con su comida. Lo siento. Puedo arreglarlo. ¿Dónde estaba su varita? Ella viró alrededor. Se había pinchado en una magdalena.

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