Gastos gubernamentales: Decodificar el gasto público y dominar las opciones fiscales para un mañana mejor

Por Fouad Sabry

¿Qué es el gasto público?

El gasto o gasto público incluye todo el consumo, la inversión y los pagos de transferencia del gobierno. En la contabilidad del ingreso nacional, la adquisición por parte de los gobiernos de bienes y servicios para uso corriente, para satisfacer directamente las necesidades individuales o colectivas de la comunidad, se clasifica como gasto de consumo final del gobierno. La adquisición gubernamental de bienes y servicios destinados a crear beneficios futuros, como la inversión en infraestructura o el gasto en investigación, se clasifica como inversión gubernamental. Estos dos tipos de gasto público, en consumo final y en formación bruta de capital, constituyen juntos uno de los principales componentes del producto interno bruto.

Cómo se beneficiará usted

(I) Perspectivas y validaciones sobre los siguientes temas:

Capítulo 1: Gasto gubernamental

Capítulo 2: Economía de Eritrea

Capítulo 3: Gasto deficitario

Capítulo 4: Saldo presupuestario gubernamental

Capítulo 5: Deuda nacional de Estados Unidos

Capítulo 6: Recorte de impuestos

Capítulo 7: Gasto del consumidor

Capítulo 8: Austeridad

Capítulo 9: Desplazamiento (economía)

Capítulo 10: Gasto público

Capítulo 11: Economía de Gales

Capítulo 12: Política fiscal de Estados Unidos

Capítulo 13: Presupuesto federal de Estados Unidos

Capítulo 14: Presupuesto gubernamental

Capítulo 15: Subsidios en India

Capítulo 16: Presupuesto federal australiano de 2009

Capítulo 17: Gastos en el presupuesto federal de Estados Unidos

Capítulo 18: Debates políticos sobre el presupuesto federal de Estados Unidos

Capítulo 19: Reducción del déficit en Estados Unidos

Capítulo 20: Presupuesto federal de Suiza

Capítulo 21: Gasto gubernamental en los Estados Unidos

(II) Respondiendo a las principales preguntas del público sobre el gasto gubernamental.

(III) Ejemplos del mundo real sobre el uso del gasto gubernamental en muchos campos.

Para quién es este libro

Profesionales, estudiantes de pregrado y posgrado, entusiastas, aficionados y aquellos que quieran ir más allá del conocimiento o la información básica para cualquier tipo de gasto público.

• Idioma: Español
• Editorial: Mil Millones De Conocimientos [Spanish]
• Fecha de lanzamiento: 15 ene 2024

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Capítulo 1: Gasto público

El gasto público incluye todo el consumo, las inversiones y los pagos de transferencias. En la contabilidad de la renta nacional, el gasto público en consumo final es la adquisición de bienes y servicios para uso corriente, que satisfacen directamente las necesidades individuales o colectivas de la comunidad. La inversión pública se refiere a la adquisición de bienes y servicios que benefician al futuro por parte del gobierno, como la inversión en infraestructura o el gasto en investigación (formación bruta de capital del gobierno). Estos dos tipos de gasto público, en el consumo final y en la formación bruta de capital, constituyen uno de los elementos más importantes del producto interno bruto.

El gasto público puede financiarse mediante préstamos, impuestos, derechos de aduana, venta o arrendamiento de recursos naturales y diversas tasas, como las tasas de entrada a los parques nacionales y las derechos de licencia. Los cambios en el gasto público son un componente importante de la política fiscal utilizada para estabilizar el ciclo económico macroeconómico.

El mercado de capitales (el mercado de fondos prestables) y el efecto de desplazamiento.

El aumento del gasto público deficitario desplaza la inversión privada al aumentar las tasas de interés y disminuir la cantidad de capital disponible para el sector privado.

El gasto público puede ser un instrumento eficaz de política económica. La política fiscal es el uso del gasto público y/o los impuestos para afectar la economía.

El gasto público en consumo final se refiere al gasto público en bienes y servicios para uso corriente para satisfacer directamente las necesidades individuales o colectivas de los miembros de la comunidad (GFCE). Es una compra de la cuenta de uso de la renta de las cuentas nacionales para bienes y servicios que satisfacen directamente necesidades individuales (consumo individual) o colectivas (consumo comunitario) (consumo colectivo). La GFCE consiste en el valor de los bienes y servicios producidos por el gobierno distintos de la formación de capital por cuenta propia y las ventas, así como el valor de las compras del gobierno de bienes producidos en el mercado que se suministran a los hogares como transferencias sociales en especie sin transformación.

El consumo público consiste en la compra de bienes y servicios por parte del gobierno.

Entre esos ejemplos se encuentran las reparaciones de carreteras e infraestructura, la defensa nacional, las escuelas, la atención médica y los salarios de los trabajadores del gobierno.

Inversiones de servicio público en ciencias e innovaciones tecnológicas estratégicas.

Los pagos de transferencia son pagos realizados por el gobierno a individuos. Dichos pagos incluyen pagos de seguridad para la vejez, beneficios del seguro de empleo, pensiones de veteranos y funcionarios públicos, pagos de ayuda exterior y pagos de asistencia social. En esta categoría también se incluyen las subvenciones a las empresas.

Los pagos de intereses son los intereses pagados por los bonos del gobierno, como los bonos de ahorro y las letras del Tesoro, a sus tenedores.

Estados Unidos gasta significativamente más en defensa nacional que otras naciones. Estados Unidos, por ejemplo, aprobó un presupuesto de 686.100 millones de dólares para gastos militares discrecionales en 2019. El cuadro que figura a continuación muestra los 10 países con los gastos militares más altos en 2015, el año más reciente para el que hay datos disponibles públicamente. Según la tabla, Estados Unidos gastó casi tres veces más en sus fuerzas armadas que China, la nación con el segundo gasto militar más alto. En 2016, ocho de los diez principales países gastaron menos de 100.000 millones de dólares en sus presupuestos militares, eclipsados por los 600.000 millones de dólares de Estados Unidos. En 2022, el proyecto de ley de gastos generales agregó $ 42 mil millones al presupuesto militar, estableciendo aún más a Estados Unidos como el mayor gastador de defensa del mundo.

El 91 por ciento de los australianos, según Research Australia, cree que mejorar los hospitales y el sistema de salud debería ser la principal prioridad de gasto del gobierno.

Además, se produce un aglomeramiento: Un aumento del 10 por ciento en la financiación gubernamental de la investigación y el desarrollo disminuyó el gasto privado en investigación y desarrollo en un 3 por ciento... Se estima que el costo medio de los fondos públicos en Australia oscila entre 1,20 y 1,30 dólares por dólar recaudado (Robson, 2005). El costo marginal es probablemente mayor, pero las estimaciones varían ampliamente en función del aumento del impuesto.

De 2013 a 2017, la inversión total en investigación y desarrollo (I&D) médica y de salud en los Estados Unidos aumentó en un 27 por ciento, liderada por el sector privado y el gobierno federal. En 2017, la industria representó el 67 por ciento de los gastos totales, mientras que el gobierno federal representó el 22 por ciento. En 2017, el Instituto Nacional de Salud (NIH, por sus siglas en inglés) fue responsable de $32.4 mil millones, o el 82.1 por ciento, del gasto federal en investigación médica y de salud.

Además, las instituciones académicas y de investigación, como los colegios y universidades, la investigación independiente (IRI) y los centros de investigación médica de hospitales independientes, aumentaron el gasto en investigación y desarrollo médico y de salud en 2017, dedicando más de $ 14.2 mil millones de sus propios fondos (dotación, donaciones, etc.) al campo. Aunque otras fuentes de financiamiento (fundaciones, gobiernos estatales y locales, asociaciones voluntarias de salud y sociedades profesionales) representaron el 3.7% del gasto total en investigación y desarrollo médico y de salud, la mayoría de los fondos provinieron del gobierno federal.

Por el contrario, el gasto sanitario mundial sigue aumentando y aumentando rápidamente, hasta alcanzar los 7,8 billones de dólares en 2017, es decir, alrededor del 10% del PIB y 1,80 dólares per cápita, frente a los 7,6 billones de libras esterlinas de 2016.

Además, el 605 por ciento de estos gastos fueron públicos, mientras que el 40 por ciento fueron privados, el financiamiento de los donantes representa menos del 0,2 por ciento del total, a pesar de que el gasto en salud en términos reales ha aumentado un 3,79 por ciento en el último año, mientras que el PIB mundial ha aumentado un 3,0 por ciento.

La cifra ilustra que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el gasto en salud en los países de bajos ingresos aumentó un 7,8 por ciento anual entre 2000 y 2017, mientras que sus economías crecieron un 6,4 por ciento. Sin embargo, el gasto en salud en las economías de ingreso mediano creció más del 6 por ciento, mientras que el crecimiento anual promedio en los países de ingreso alto fue del 3,5 por ciento, aproximadamente el doble de la tasa de crecimiento económico. Por el contrario, el gasto en salud en los países de ingresos altos sigue representando la mayor proporción del gasto mundial (aproximadamente el 81 por ciento), a pesar de que sólo cubre el 16 por ciento de la población mundial; Esta proporción ha disminuido desde el 87 por ciento en 2000. India y China son los principales responsables de este cambio en el gasto sanitario mundial, ya que se han trasladado a grupos de ingresos más altos. Además, poco más del 40 por ciento de la población mundial residía en países de bajos ingresos, cifra que ha disminuido al 10 por ciento. Además, se produjo un crecimiento significativo del gasto en las economías de ingresos medianos altos, donde la proporción de la población se ha más que duplicado durante el período, y donde la proporción del gasto mundial en salud casi se ha duplicado como resultado del enorme crecimiento demográfico de China y la India. Lamentablemente, todos los demás grupos de ingresos de participación en el gasto habían disminuido.

Desde una perspectiva continental, América del Norte, Europa Occidental y los países oceánicos tienen los niveles más altos de gasto, mientras que Asia Central Occidental y África Oriental tienen los más bajos, seguidos de Asia Meridional.

También es cierto que la rápida expansión económica se asocia con un aumento del gasto en salud y una rápida expansión económica sostenida entre 2000 y 2017. Además, el rápido crecimiento económico, que suele asociarse a mayores ingresos públicos y gastos sanitarios, se concentra principalmente en Asia, como China, India e Indonesia, seguidos de Oriente Medio y América Latina. De 2000 a 2017, el gasto real en salud per cápita en estas naciones aumentó 2,2 veces y 0,6 puntos porcentuales como proporción del PIB.

La formación bruta de capital fijo o inversión pública se refiere a la adquisición de activos por parte del gobierno con la intención de crear beneficios futuros, como la inversión en infraestructura o el gasto en investigación. Esta suele ser la mayor parte del gobierno. Para adquirir bienes y servicios, el gobierno los produce (utilizando su propia fuerza de trabajo, activos fijos y bienes y servicios comprados para consumos intermedios) o los compra a los productores del mercado. En teoría económica y macroeconomía, la inversión es la cantidad gastada en bienes no consumidos que se utilizarán para la producción futura (es decir, capital). Algunos ejemplos son la construcción de ferrocarriles y fábricas.

El gasto público en infraestructura se considera una inversión porque normalmente ahorrará dinero a largo plazo y reducirá el valor presente neto de los pasivos gubernamentales.

La infraestructura física en los Estados Unidos devuelve un promedio de $1.92 por cada dólar gastado en construcción no residencial porque casi siempre es menos costoso de mantener que de reparar o reemplazar una vez que se ha vuelto inutilizable.

En 2010, los gobiernos nacionales gastaron un promedio de $2.376 por persona, mientras que las 20 economías más grandes (basadas en el PIB) gastaron un promedio de $16.110 por persona. Noruega y Suecia fueron los países que más gastaron per cápita, con 40.908 y 27.760 dólares, respectivamente. El gobierno federal de los Estados Unidos gastó 11.041 dólares por persona. Corea del Sur (4.557 dólares), Brasil (2.813 dólares), Rusia (2.458 dólares), China (1.010 dólares) e India (226 dólares) son también ejemplos de países con una economía considerable que gastan una cantidad considerable de dinero. El gasto del 42 por ciento del PIB y un PIB per cápita de 54.629 dólares para los Estados Unidos indican que los gobiernos nacionales, estatales y locales gastaron 22.726 dólares por persona en los Estados