Códice Volumen I: Elementales

Por Jorge Andres Bosaans

Los cuentos aquí compilados son resultado de un ejercicio premeditado, fruto del rigor y la necesidad creativa personal que comenzó espontáneamente y que luego tomó vuelo. También, a su vez, es un medio para lograr eventualmente sanación y alivio del impacto COVID-19 que todos hemos experimentado.

Las ideas que tocan los textos no están necesariamente relacionadas directamente con esta pandemia: El amor y desamor, las tecnologías, la muerte, los sueños, la vida cotidiana enfrentada a lo desconocido, lo sobrenatural y el futuro son las materias entramadas en historias breves- todas ellas- que tienen el afán de captar al lector rápidamente, sorprenderlo y dejarlo posteriormente meditando sobre estos temas.

"Códice" consta de 40 cuentos cortos divididos en tres ejemplares: Volumen I: "Elementales", Volumen II: "Post" y Volumen III: "Mi bautizo fue el diluvio, mi nombre será mensajero.", todos ellos escritos entre marzo 2020 y julio 2021.

• Idioma: Español
• Editorial: Pehoé Ediciones
• Fecha de lanzamiento: 31 ene 2022
• ISBN: 9789564045580

Vista previa del libro

© JORGE ANDRÉS BOSAANS

CÓDICE Volumen I: Elementales

[e-mail] / @__codice / @baktatank

Diseño e ilustración:

EDU OYARCE / @alternador

ISBN Obra Completa: 978-956-404-557-3

ISBN Códice Volumen I: Elementales: 978-956-404-558-0

RESERVA DE DERECHOS CÓDICE

R.P.I.: Nº: 2021-A-9309

Reservados todos los derechos. No se permite la reproducción total o parcial de esta obra, ni su incorporación a un sistema informático, ni su transmisión en cualquier forma o por cualquier medio (electrónico,mecánico, fotocopia, grabación u otros) sin autorización previa y por escrito de los titulares del copyright. La infracción de dichos derechos puede constituir un delito contra la propiedad intelectual.

Diagramación digital: ebooks Patagonia

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Dedicado con todo el amor de este mundo para Papá, Juancri, Tatin y en especial para mi madre, María del Carmen Carvajal. Gracias eternas y totales. Ellos saben por qué.

Guardo agradecimientos especiales para mis grandes amigos y colaboradores, Mike Schmedes y Edu Oyarce: Sin su constante ayuda, consejos y apoyo valioso todo habría sido más dificultoso y caótico.

Índice

INTRO

21:30 (Extendida)

ANESTESIA

BELLA DE BLANCO

CAIDA ABAJO

EL CUERPO DE MARLEY

EL VENDEDOR DE FLORES

IN MEMORIAM

JOMEO Y RULIETA

LA NOVIA DE MI NOVIA

OJOS DE MIS OJOS

QUIZÁS

¿SINCRONICIDAD? (Extendida)

SÓLO PARA TUS OJOS

TRAIDOR, ME LLAMABAN

El escritor que se niega a explorar las regiones más oscuras del corazón nunca podrá escribir de manera convincente sobre la maravilla, la magia y la alegría del amor; pues así mismo, no es posible confiar en la bondad a menos que ésta haya respirado el mismo aire que el mal.

Nick Cave

21:30 (Extendida)

Dahl estaciona su BMW en el número veintiuno del block de su edificio ubicado en una exclusiva zona de Santiago Oriente. Aprieta el botón en su mano, suena un blip seco. Toma su maletín de cuero con mecánica precisión. Eso es lo que hace siempre. Todo con precisión: su vida cotidiana, su trabajo e incluso con el amor. Camina hacia el elevador. Piensa que en dos horas más llega a visitar, sólo a visitar, su novia Augusta. Tiene todo ya preparado: el sushi, el vino, la coca e incluso las flores. Presiona con el pulgar la pantalla azul, se abre la puerta de caoba y dirige los pasos al interior del loft. Se encienden automáticamente las luces y se cierra la puerta en silencio. Deja su maletín sobre la mesa de cristal, mientras se desabrocha la corbata. Se acerca a los inmensos ventanales. Observa la ciudad en su majestad, llena de ruido y de luces, en movimiento constante, con caótico orden. Piensa que podría encontrar un algoritmo para aquello. Mira su reloj Omega en su pulsera. 21:30. Suena la alarma. Dirige los pasos a la habitación, abre un cajón metálico al costado de la cama. Saca de un pote de vidrio dos cápsulas luminiscentes. Se las mete en la boca y las ayuda a tragar con agua de un vaso a exactamente veinte centímetros del borde de aquel cajón metálico.

Estaciona su BMW en el número veintiuno del block de su edificio exclusivo. Se acomoda la chaqueta y toma con precisión su maletín de cuero. Cierra con el mando el vehículo. Las luces centellean dos veces. Camina hacia el elevador. Presiona el botón 92. Piensa en la reunión de mañana. En los nuevos clientes. Ya tiene todo preparado: la presentación, los datos bursátiles, las tendencias, e incluso la propuesta de vender según el mercado. Presiona con el pulgar la pantalla azul, la puerta tallada se abre, camina hacia el interior espacioso del piso. Se encienden automáticamente las luces al interior. Se cierra la puerta sin el menor ruido. Deja el maletín sobre la mesa de cristal al centro, a treinta y dos centímetros de un juego de sillones de cuero flanqueándola y que le costaron una fortuna. Al interior de su departamento de cuatrocientos cincuenta y tres metros cuadrados, ubicado en el penthouse, todo había costado una fortuna. Todo cuidadosamente elegido y dispuesto