¡¿CÓMO SUBDESARROLLAR A UN PAÍS?!

Por Jacobich Mileto Alexandropoulos Zaitsev

Esta propuesta de ahora, ¡¿CÓMO SUBDESARROLLAR A UN PAÍS?!, intenta dar una opinión, de cómo un sistema político arrastra a un país al subdesarrollo más ignominioso, pernicioso y lo mantiene en esa po

• Idioma: Español
• Editorial: GoldTouch Press, LLC
• Fecha de lanzamiento: 21 ago 2020
• ISBN: 9781952155840

Jacobich Mileto Alexandropoulos Zaitsev

Jacobich Mileto Alexandropoulos Zaitsev, nacido el 26 de julio de 1953, en Pinar del Ro, Cuba. Ha sido Maestro primario y Profesor de los niveles primario, medio, medio superior y de adultos impartiendo Matemticas, Biologa y Espaol por cerca de 46 aos. Ha realizado estudios en idioma ingls alcanzando el grado de Diploma. Ha realizado estudios independientes sobre Economa Poltica del Capitalismo y del Socialismo sin que haya obtenido algun grado acadmico. Tiene categora de Master en Educacin (MEd). Tiene un libro de Matemticas para la High School escrito en Jamaica sin que se haya publicado.

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¡¿Cómo Subdesarrollar A Un País?!

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There are 10 chapters plus Index and Glossary.

Jacobich Mileto Alexandropoulos Zaitsev

Copyright © 2020 by Jacobich Mileto Alexandropoulos Zaitsev.

Library of Congress Control Number:      2020915958

HARDBACK:    978-1-952155-85-7

Paperback:    978-1-952155-83-3

eBook:            978-1-952155-84-0

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Printed in the United States of America

ÍNDICE

¿QUÉ DICE EL AUTOR?

INTRODUCCIÓN

HOMBRES DE NEGOCIOS DE OTROS PAISES.

EL RESURGIR DE LA PROPIEDAD PRIVADA EN CUBA.

EL PAPEL DE LA ECONOMÍA EN EL SUBDESARROLLO DE LA SOCIEDAD.

PATRIMONIO PRODUCTIVO RECIBIDO EN 1959.

LOS BUFOS DE LA REVOLUCIÓN FIDELISTA.

LOS 57 AÑOS DE SEUDOREPÚBLICA.

FIDEL, EL CABALLO DEL APOCALIPSIS CUBANO.

LOS TEJIDOS Y LAS CÉLULAS QUE MUTAN.

GLOSARIO

¿QUÉ DICE EL AUTOR?

¿Qué es lo que dice el autor sobre el libro?

Dice que este tiene como tema central la situación económica de la isla, pero como está lastrada, como es una rémora de la política que es la que determina cada paso en la vida del país, entonces fue necesario abordar con mayor profundidad el entrelazamiento entre economía y política.

Él dice que el futuro desarrollo de la nación tiene que necesariamente pasar por un sector privado fuerte y diverso que no se concentre entre bambalinas en las manos de los que detentan el poder. GAESA, es un pulpo que solo le proporciona ganancias a los Castros y a los altos rangos militares del fidelismo o castrismo.

El autor también dice que el sistema político no se va a caer solo, que hay que estremecerlo y sacudirlo para que caiga porque los que asumieron el poder entre charcos y ríos de sangre no lo van a dejar, no van a salir de él si no hay, más que un Maleconazo como el del 94, un CUBANAZO que nos traiga la verdadera libertad e independencia para todos los cubanos.

¿Y qué más dice el autor sobre el libro?

Le dice a los miembros de los cuerpos armados, el ejército y sobre todo la policía, que ellos no son una guardia pretoriana destinada a cuidar y proteger a los nuevos prototipos de emperadores, que sus obligaciones son con la defensa del país y su orden interno, que no es estar violando jóvenes, ni servir de perros falderos porque reciban una jaba o unas libras de pollo a las que la inmensa mayoría de los cubanos pobres no pueden acceder.

Que el uso de las armas de fuego contra sus congéneres es ante todo un acto vil, abusivo, un acto de canallas y propio de cobardes como los dirigentes políticos que ostentan los más altos cargos del país; que esas armas son para ser empleadas si hubiera una agresión externa y no contra la población que reclama el justo trato al que tienen derecho todos los seres humanos sin considerar el aspecto ideológico. ¡Qué no manchen sus manos, su conciencia, sus armas disparando contra el pueblo inerme! ¡Qué las órdenes recibidas para matar y masacrar a cubanos que luchan por sus derechos pueden y deben ser incumplidas si ellos son hombres y mujeres de bien que quieren lo mejor para su país!

El escriba dice además que llegado el momento la diáspora debe apoyar a los que en la isla luchen por derrocar al abominable régimen que oprime, esclaviza y se burla del pueblo, que esa ayuda debe concentrarse en alimentos y en mantener los teléfonos recargados para permitir algún grado de comunicación y coordinación dentro de la isla por lo que también es necesario que se establezca alguna vía de comunicación que no sea la que ofrece ETECSA.

Este amanuense también señala como punto muy importante que la lucha no debe ser basada en el uso de las armas porque nos ocurriría lo mismo que con la revolución fidelista, que una vez instaurados en el poder se creen el dueño del mismo y no van a querer soltarlo; vean el ejemplo de FCR que empezó diciendo yo no quiero el poder, no lo quiero, deseo estar lejos de él y cuando se encaramó en el mismo, no hubo forma de bajarlo. Debe ser una lucha cívica, de desobediencia en la que se afecte la economía del país y la nuestra, por eso más que armas se va a necesitar ayuda material desde la diáspora sobre todo en alimentos, pero sin que se contraigan compromisos ominosos que le den a alguien el derecho de decir: yo fui el que más aportó por eso me corresponde tal territorio o provincia.

También aduce que alguien tendrá que liderar la lucha y que esta persona sería objeto de prisión tan pronto las autoridades de jure lo puedan atrapar y que en ese caso debe existir alguien preparado y dispuesto para asumir el lugar vacío, la dirección de la protesta; no puede ser que la lucha se interrumpa porque no haya alguien que dé un paso al frente para organizar lo que se debe hacer, siempre cuidando no ser penetrados por los elementos rompe huelgas del régimen. La protesta no se detendrá hasta que no se alcance la renuncia del régimen y ninguno de los actuales dirigentes debe fungir como miembro del grupo que se cree para regir los destinos del país.

Estúdiense las luchas cívicas y de protestas pacíficas llevadas a cabo por el indio Mahatma Gandhi y los estadounidense Martin Luther King Jr. y Malcolm X; se debe tratar por todos los medios no usar métodos violentos porque eso justificaría el uso de armas por parte de las autoridades; no dejarnos provocar es una buena estrategia, pero sin dejarnos avasallar, si usaran objetos contundentes para golpearnos como hicieron cuando el Maleconazo, debe maniobrarse para no dejaros golpear y pasar a la ofensiva. No será fácil; pero no podemos hacer una revolución como la fidelista que traería un costo en sangre y encarcelamientos indescifrables.

El autor dice que tiene que ser una lucha de todo el pueblo que está siendo oprimido, que las autoridades van a tratar de desorganizar desde adentro infiltrando elementos quinta columnistas y rompe huelgas, pero la decisión debe ser luchar los meses que sean necesarios en las calles, tal vez al principio serán pocos, pero poco a poco puede que los participantes verdaderos vayan aumentando. Es mejor enfrentar la muerte un día que estar bajo un techo que no se sabe cuándo se va a desplomar sobre nuestras cabezas.

Él reconoce que las autoridades se burlan tácitamente mientras nos llaman nuestro pueblo y les da lo mismo que se mueran tres niñas de entre 12 y 14 años, como si se mueren 50, ya lo demostraron con los hundimientos del remolcador 13 de Marzo y el barco XX Aniversario, sin contar otros vandálicos actos llevados a diario contra la población, pues entonces hay que tratar de coger el toro por los cuernos, teniendo en cuenta que no hay STOP, que no hay TREGUA, esto es hasta que se busque la SALIDA del desastroso sistema que vivimos.

El coronacastrismo-61 es fuerte, pero los cubanos de vergüenza, con las jóvenes que cada día nos dan lecciones de coraje en su enfrentamiento contra la dictadura, más la batalla que día a día libramos por sobrevivir durante estos 61 años, tienen que hacernos crecer y ver que el pueblo es más fuerte que el coronacastrismo-61.

Él dice que cuando se alcance el deseado cambio no puede haber la venganza, ni la revancha que exhibieron los castristas con el triunfo. No pueden haber che Guevara ensangrentando La Cabaña con aquellos juicios relámpagos en los que perdieron la vida más de 550 personas en apenas 4 meses, los que se juzgaban en la tarde y eran fusilados en la noche; ni la Masacre de la Loma de San Juan en Santiago de Cuba la que ocurrió en la madrugada del 12 de enero de 1959 con 71 asesinados llevada a cabo por Raúl Castro el cual se puso bravo cuando fue criticado y prometió que en próximos días habrían más muertos y cumplió su palabra llegando a cifras por encima de los 200 muertos con el mismo proceder que tenía el che; ni puede haber un Fidel Castro vanagloriándose de que ya en su toma de posición como primer ministro el 16 de feb. del 59, había más de 300 asesinados y que según él otras cabezas caerían y que además, los que no se pasaran por las armas irían a la Ciénaga de Zapata a desecarla y él auguraba que ese castigo les sería más duro que enfrentar el paredón. Esas salvajadas no se pueden repetir porque sería la de nunca acabar; pero además las nuevas personas que llegarán al poder no pueden parecerse a los asesinos que condujeron los destinos del país hasta el presente, sembrándolo de odios, violencia, resquemores y revanchismo. Se requiere una ley de punto final como se hizo en Chile cuando Pinochet dejó el poder. Hay que perdonar, sin que signifique que olvidamos las atrocidades acaecidas durante la dictadura, tenemos que llegar a ese convencimiento; es la única forma de encausar al país.

¿Dice el autor del libro algo más?

Sí, dice que esta lucha, que esta batalla no se librara en las montañas sino en las calles, con todo el que se sienta humillado, preterido, usado por el régimen y quiera revindicar los derechos que nos han sido arrebatados, burlados por la dirigencia nepotista; aspiramos a un verdadero cambio que no nos lo van a mandar de afuera, que tenemos que lograrlo desde adentro con todos los que tengan más vergüenza y estén decididos a no seguir siendo una carta de juego del la dictadura castrista. Puede existir miedo al principio pero este desaparecerá cuando se tome plena conciencia de que nunca obtendremos el cambio que necesitamos si no luchamos.

Dice que hay que apertrecharse de provisiones de todo tipo para resistir por largo tiempo en las calles, que la desobediencia a la dictadura es esencial para mantener nuestra resistencia, que nuestras armas no deben ser las malas palabras en boca de las mujeres, ni de los hombres, que no podemos comportarnos como una chusma inculta y salvaje, nuestras armas serán el silencio sepulcral en las marchas y nuestros brazos para defendernos si nos agreden. La decencia será un rasgo distintivo de los que se manifiesten. Que las palabras pene, testículos, vulva y otras de calibre pesado están excluidas del vocabulario de los manifestantes. No portar armas blancas, ni de ningún tipo durante las manifestaciones nos hará más fuertes y no le daremos motivos a la fuerza represiva a usar las suyas.

También dice que la solidaridad externa se proyectará de acuerdo a la conducta que exhibamos en cada día de lucha callejera. No puede haber rotura de tiendas, de vidrieras, no puede haber esa violencia que genera el odio a un sistema que nos ha puesto el pie encima y no nos lo quiere quitar.

Él alega que no deben haber consignas populistas como las creadas por la revolución castrista, que nuestro principio es: que si guardamos cuarentena en casa por el coronavirus-19, entonces para luchar contra el coronacastrismo-61 tenemos que hacernos a la calle.

Lo último que ha dicho el autor es que en esta etapa de lucha pacífica, además de nuestros verdaderos héroes y mártires, donde no esta Fidel, ni compañía, se pueden tener como guías espirituales de nuestras luchas las imágenes de Mahatma Gandhi, de Martin Luther King Jr., de Nelson Mandela y de Malcolm X. Que esta no es una lucha por ser comunista, que aunque se puedan respetar a los comunista, nuestra lucha es por abandonar el comunismo, el socialismo y el nefasto castrismo; qué es preferible volver al feudalismo o a la comunidad primitiva antes de seguir en una de esas nefastas e inservibles sociedades.

INTRODUCCIÓN

Por más de 6 décadas la isla ha vivido lo que parecía sería un período de esplendor y de mejor vida para todos los cubanos. Nos equivocamos. No fue así.

Desde 1959 cerca de 3 millones de cubanos han tenido que hacer sus matules y dejar la isla, como dijera un balsero en 1994: aquí es imposible vivir… hay que vivir robando para poder sobrevivir.

Después de conocer de la inteligencia impar del hombre que nos puso los grilletes y ni cuenta nos dimos hasta que empezamos a sentir la molestia, molestia que derivo en dolor, dolor que se fue haciendo cada vez más y más agudo hasta llevarnos a la locura de lanzarnos al mar a riesgo de nuestras vidas y de las vidas de los que nos acompañaban o hacer un viacrucis desde Suramérica hasta tocar la frontera del país que el régimen quería que odiáramos a toda costa.

Nos queda la satisfacción de saber y reconocer la inteligencia de otro miembro de la familia Castro-Ruz, la hermana, que a leguas de los momentos actuales fue capaz de dar una acertada definición de lo que era el comunismo y por eso rompió con él y abandonó cualquier privilegio que pudo haber tenido a cambio de vender su alma al diablo que resultó ser su hermano en el poder.

¿De cuánto no hemos sufrido los cubanos en la isla? ¿Qué nos falta por pasar, por sufrir, qué prueba nos queda pendiente, a ver si la pasamos y salimos de esta pesadilla? Hemos sufrido de mentiras fidelistas, de violación de nuestros derechos, de muerte de familiares por razones políticas o de guerras que llenarían de glorias a los seres más farsantes que han pisado la tierra cubana, de ser tratado como lo que hemos sido en estos años: verdaderos esclavos modernos a cambio de unas migajas que se dieron no porque se reconocía la necesidad que tenía la dotación, sino a cambio de un servilismo político y un agradecimiento incondicional hasta que fuéramos cadáveres.

Fulgencio Batista Zaldívar (FBZ), fue uno de los gobernantes más malos que tuvo la república antes del 59, pero las cosas con él estaban más claras, le interesaba dinero, dinero y más dinero; nunca trató de comprar el alma de la gente, ni comprometerla para su causa; como todo político decía mentiras y robaba, ¡cómo no!, pero se sabía, existía la posibilidad de salir de él algún día sin necesidad de una revolución que se considerara perpetua en el poder, entonces, ¿cuándo tendremos los cubanos un país en que de verdad podamos votar por quien queremos nos dirija?, porque las elecciones manigüeras que tenemos hoy son las hijas de aquellas desafortunadas palabras de: ¿Elecciones, elecciones para qué?, todo un rotundo engaño.

Batista no nos hubiera durado estos 60 años, sin embargo llevamos todo ese tiempo de fidelismo o castrismo con un daño casi irreversible a la capacidad de pensar, de discernir, de objetar de los cubanos; mire usted si el castrismo ha sido pernicioso que nos hemos quedado postrados, inmóviles, casi somos el bochorno del mundo, todo el campo socialista y la madre que los parió desapareció y nosotros quedamos como bastión fidelista de porquería, inexpugnable, para con los norcoreanos ser la lástima del mundo, la pena de los demás; ahorita y si no nos apuramos los norcoreanos salen del enclaustramiento en que viven primero que nosotros. ¡QUÉ PENA!

La isla anda patas arribas desde que el castrismo la acogió en su seno, la amamantó con la ponzoña más letal; si antes del 59 estaba mal, después de ese año y a partir de la breve y fugaz obertura con la que encantó a su público en la primera presentación, la orquesta comenzó a desafinar y las notas que producía eran cada vez más discordes y disonantes.

Las propuestas de los dirigentes son tan irreales que no mueven a risa, sino a llanto desconsolado y esa es la forma más grotesca de burlarse de la masa esclava que durante años han mantenido en la mayor censura y ostracismo; solo es verdad lo que desde la alta cúpula se dice y a esa cúpula solo llegan los que mejor saben mentir y manipular. Su profesor emérito murió hace algún tiempo y dejó a un sustituto de bajo performance y este a su vez se buscó algo así como una marioneta.

De los que nos quiso el castrismo vender como enemigos podemos aprender que uno de sus presidentes, Abraham Lincoln (1861-65) libró la Guerra Civil o de Secesión y lejos de establecer la esclavitud, acabó con ella en los estados confederados donde esta existía, y por supuesto que ese fue un primer momento, pero desde allá hasta acá aunque ha llovido mucho, incluyendo lluvia ácida, no se puede negar que la sociedad de los enemigos de FCR es mejor que la que su clan ha venido formando y eso solo se corrobora porque cuando los esclavos huyen del castrismo todos quieren ir a parar a la tierra del enemigo, ¿y entonces?, ¿cómo se puede entender semejante proyección totalmente contraria a la cantaleta fidelista de que los yanquis son malos y por ende nuestros enemigos?, ¿cuántos yanquis han ido a refugiarse a la tierra de los Castros?; que se conozca una y porque está como fugitiva, acusada de asesinato, que a lo mejor lo del asesinato no fue verdad, pero ¿quién más quiere ir a deleitarse con aquel paraíso de los fidelistas?

El miedo vive en la población y su pánico los obliga a ver los colores feos del castrismo como no tan malos, es un miedo enfermizo que aunque ha ido disminuyendo no ha sido lo suficiente como para que los de arriba se sientan inseguro de las barbaridades que a diario cometen. Ese miedo llega hasta la familia que está en el extranjero, porque el régimen es capaz de ajusticiar fuera de sus fronteras o tomar represalias y que mueran de manera inexplicable familiares que dentro de la isla pagan por las cosas que fuera de ella se hacen y que no son del agrado de la cínico-cracia que desgobierna la isla; es un régimen de terror, de ajuste de cuentas, de eliminar con mucha sutileza a todo aquel que no lo comulga, aunque algunas chapucerías han cometido incluso para eliminar a sus propios correligionarios; si se creara una lista, de seguro se correría el riesgo de dejar fuera a muchas personas víctimas fatales del castrismo dentro y fuera de la isla. Actúan como una mafia caponiana, te puedes ir, te puedes esconder que cuando sepa dónde estás te mando tus rosas rojas, no a crédito, sino a pagar en cash en ese momento.

Los países comunistas de Asia: China, Vietnam, no hay dudas que lo son, pero esos países avanzan económicamente y la población tiene otros niveles de vida que no se pueden comparar con la miseria de los esclavos de Cuba, sus economías registran avances de año en año, mientras que la cubana no deja de desacelerarse y venirse abajo de año en año; la otra nación asiática que ostenta una dinastía peor que la cubana y que por cierto es amiga estrecha de Cuba, es Corea del Norte; allí por lo poco que se conoce, no se sabe cuando es de día o cuando es de noche, así es de grande el enclaustramiento en que se mantienen ambos países; ellos dos tienen una emulación socialista para ver quién es más represor, para ver quién lo hace peor.

Cuando algún día los esclavos cubanos sepan qué clase de calaña tenían como dirigentes, entonces algunos se querrán suicidar, otros no lo van a admitir porque no podrán creerlo. En la extinta URSS cuando se supo que Iósif Stalin mató a millones de soviéticos (se dice que 23 millones, otros que si llegó a los 50 millones) mandándolos a los campos de trabajos forzados a la Siberia y no solo por esa vía, sino los que pasó por las armas, entonces a muchos nos parece incierto que algo así haya ocurrido, incluso la forma tan poco ortodoxa en la que mandó a matar a un viejo compañero de armas, que era más inteligente que él, y después de muchos años de sucia persecución le dio caza; igual que hacía FCR.

¿Qué decir de Vladimir Ilyich Ulyanov, Lenin?, ese que nos vendieron como un dios y que ordenó la muerte de sacerdotes con métodos terroristas, que mató y asesinó a opositores políticos, que ordenó la muerte de toda la familia zarista incluyendo niños y mujeres cuando esta ya no representaba amenaza alguna, es verdad que no llegó a matar y a ser cruel en la misma escala que su sucesor porque la muerte le vino muy temprano, a los 54, pero tenía un alma de criminal indiscutible; ¡pero si fue tan bueno y tan querido!, ¿por qué los rusos se deshicieron de sus estatuas y querían remover su cuerpo embalsamado del mausoleo donde este descansa?, ¿por bueno?, ¡nooo!

¿Por qué nunca se le dijo la verdad al pueblo sobre el dirigente chino, Mao Zedong, ¿a cuántos millones no asesinó?, que si 35, que si 45, que si 60 millones, no se sabe a ciencia cierta hasta dónde llegó la mano ensangrentada de este criminal creído con todos los derechos para hacer lo que se le viniera en ganas.

Nunca se podrá determinar con cierto grado de realismo hasta dónde el ex primer ministro de Cambodia, Pol Pot, asesinó a la población de su país durante 1975-79, a cuántas personas asesinó ante los ojos de la comunidad mundial, que si 1.5 millones o que si 2 o que si 3 millones; o de los asesinatos de Mengistu Haile Mariam de la Etiopía que los cubanos fueron a defender con el Gral. Arnaldo Ochoa Sánchez, o los miles de muertos de Francisco Franco, o del exterminio provocado por Sadam Husein de Irak contra parte de las etnias que habitaban su país mientras que el fidelismo le daba total cobertura y apoyo y le mandaba a especialistas para que lo curara de las dolencias que tenía para que siguiera matando a parte de la población iraquí; o Nicolae Ceausescu de Rumania que fue ajusticiado por sus coterráneos por la serie de desmanes que cometió creyéndose por encima de todo su pueblo; con todos ellos, de una forma más estrecha o tal vez discreta como en el caso de Franco, pero con todos ellos, la dictadura cubana tenía relaciones de Amistad, y era bien evidente que estos regímenes no representaban nada bueno para sus pueblos, ¿entonces qué?, ¿cómo justificar la amistad con regímenes y dictadores de tan baja calaña, de tan pobre estirpe, que masacraron a su población, que vivían como los Castros (Fidel y Raúl y sus descendencias)?; por consiguiente ni estos, ni aquellos son buenos na’.

¡Cómo criticar a Augusto Pinochet de Chile, a Rafael Leónidas Trujillo Molina de República Dominicana, a Alfredo Stroessner de Paraguay, a Anastasio Somoza García de Nicaragua y estar de acuerdo con Husein o con Francisco Franco, o con Mengistu Haile Mariam!, ¿Dónde está la diferencia? ¿Cuál es la diferencia entre todos ellos? ¡Porque unos mataron más personas que otros!, ¿eso hace la diferencia? No se alcanza a verla, no existe, unos más que otros fueron todos asesinos.

Pregúntese sobre la diferencia entre un Iósif Stalin y un Adolf Hitler; ¿por qué un Benito Mussolini es malo y un Fidel o Raúl Castro o un Ernesto ‘che’ Guevara, apodado ‘el carnicero de La Cabaña’, van a ser buenos? ¿Cuál es la diferencia entre todos ellos? ¿Cuántos mató aquel y cuántos ha matado esta tripleta?, incluso esta ha sido tan letal que no ha perdonado ni a partisanos favorables a ellos y mucho menos los que se opusieron, ¡ah quizá sea por las ventajas sociales ofrecidas en los primeros momentos!, pero cuántos muertos acompañaron a esas llamadas ventajas y cuántos más no las acompañarían a lo largo de más de 6 décadas, ¿cuántos jóvenes no cayeron para que estos trogloditas brillaran y acumularan méritos para su carrera personal.

¿Y cómo han vivido todos estos años estos zares de la muerte y del sufrimiento de millones de cubanos que han tenido que irse de la isla por la imposibilidad de hacer una vida normal? ¿Cómo han vivido las familias de todos ellos, los de arriba, los llamados dirigentes históricos y los pocos que tuvieron el privilegio de ser elegidos para seguir hundiendo el barco cubano?

En su fatídica intervención ante el consejo de estado de Cuba, para asesinar a cuatro militares cubanos por supuestamente estar enrolados en malos manejos vinculados con la droga. En julio de 1989, FCR decía que ellos habían creado una mafia en el MININT, pero que el MINFAR estaba libre de pecados y no fue recriminatorio con ese cuerpo armado, porque estaba defendiendo a como diera lugar al hermanito que estaba embarcado, embarrado, ensuciado, enlodado, manchado, entalcado en todos aquellos acontecimientos; ¡¿misteriosamente?! el hasta entonces ministro del interior Gral. de División José Abrahantes Fernández fue depuesto del cargo, encarcelado y supuestamente murió en prisión de un ataque al corazón, ¡qué barbaridad, qué falta de talento para mentir!, y eso que aún Fidel estaba con vida, que se supone habría buscado una forma más sensata de decir esa mentira, entonces, ¿cuál era la mafia?, los que mataron, los que injustamente pagaron con sus vidas o los que quedaron con vida para seguir en sus manejos sucios y turbios.

Incluso, los que desde fuera del país acusaban a los Castros de estar enlodados en lo del tráfico de drogas, en especial al cavaliere Raúl, esos que dieron un testimonio casi irrebatible, que cumplieron años de prisión y que no fueron ajusticiados por mostrarse cooperativos para esclarecer todo aquel entarimado y urdimbre del tráfico de drogas, que afectaba a Cuba por el supuesto soporte dado en su camino al mercado americano, esas personas salieron de prisión por perdón de la justicia y por reconocimiento a su colaboración y esa mano derecha del super capo Pablo Escobar Gaviria, ese que respondía al apodo o alias de Popeye, John Jairo Velásquez, falleció a la edad de 57 años, víctima de un cáncer de estómago; uhuhu, ¡qué raro!; una vieja tonada musical decía: mentiras, ¿quién te lo va a creer?, mentiras; pero si de mafia se trata ¿qué es GAESA?

GAESA es una cofradía de supuestas personas decentes que tienen en sus manos el control de las empresas más lucrativas y prósperas de la isla, bajo el mando de un ex nuero de nada menos que de Raúl Castro Ruz, sí aquel mismo, de Raulito, que fue defendido con malas palabras y todo, a cara destemplada, por el hermano que ya falleció y que se llamaba FCR, ¿quién puede admitir semejante grado de desfachatez?, se están comportando como Fulgencio Batista, a quien un hermanito le llevaba cada noche las ganancias y prebendas de lo que se recaudaba por juego y la prostitución a su finca de descanso en Kuquine, pero los revolucionarios fidelistas estaban en contra de aquel proceder y por eso mandaron a morir al Moncada y al Carlos M. de Céspedes a decenas de jóvenes para que situaciones semejantes a esas no ocurrieran, lo que no se sabe que pasó que personas como el gral. Luis Alberto Rodríguez López-Calleja, Presidente Ejecutivo del Grupo de Administración Empresarial y Jefe del V Departamento de las FAR, está al frente de una entidad que atesora grandes cantidades de riquezas y efectivos de los cuales no tiene que rendir cuentas ante los organismos del estado, es una asociación secreta, que maneja grandes sumas de dinero que no reportan al estado, lo socorre solo si el dueño del país Raúl Castro Ruz le dice que aporte a la causa de la miseria cubana.

¿Y qué es eso, no es contra este tipo de práctica contra la que se luchó en el llamado departamento MC?, ¿no fue este tipo de práctica por la que se enjuiciaron a los más altos cargos del MININT en la desgraciada causa-pugna intestina número 2 de 1989 y que le costó no solo los puestos a los más altos cargos del ministerio, sino que le costó la vida a varios de esos altos cargos, unos por suicidios y otros por infartos mendaces al estilo del fidelismo?

En los primeros meses del 2020 Cuba tenía que pagar la parte que le adeudaba al Club de París en ese momento, y no podía pagar porque no había con que; GAESA tiene dinero, tal vez el suficiente para pagar esa deuda o al menos parte de ella, ¿por qué no se usó el dinero de ese pulpo monetario para salvar la situación en la que estaba el país?; ah no, ese dinero no se toca, ¿en qué invierte el MINFAR todo ese emporio, toda esa riqueza?; ah pero para hacerle la vida imposible a los llamados cuentapropistas, para eso sí el gobierno está siempre dispuesto, subiendo los impuestos a las magras entradas de ese sector mientras que las entradas de GAESA que se mueven por arterias de grandes diámetros se mantienen intocables; el gobierno y todo ese conglomerado con despuntes mafiosos lo que busca en obstruir las venillas por donde circula la poca savia que a los cuentapropistas llega, mientras GAESA no se toca; ¿es o no una mafia castroniana lo que se mueve en la isla?

El abuso es como lo dice el clásico refrán: de león para mono y el mono amarrado; es lástima que muchos cubanos no hayan salido del país para que vean cómo se vive fuera de la isla castroniana; los cubanos de la isla están como el padre al que le nace un hijo chino, ese relato lo podrá encontrar el lector más adelante en el texto; de manera que si no abren los ojos les van a pasar 60 años más con ceguera total, que si al menos fuera como la ceguera de Zato Ichi, un samurái japonés capaz de matar una mosca al vuelo con su espada, entonces sí se podría admitir esa ceguera, pero por el camino que van, no se le augura nada mejor, al contrario.

Hay que preguntarse como esclavos que fuimos y que muchos continúan siendo: ¿qué hemos alcanzado en estos 60 larguísimos años, qué tenemos?,