Historias con Olor a Jabón Chiquito

Por Roberto Tinajero Corona

Historias con Olor a Jabón Chiquito es un libro con diez historias sobre experiencias chuscas y divertidas sucedidas en habitaciones de motel. Anécdotas que fueron contadas al autor por uno o más de los protagonistas y que son relatadas de forma amena y cómica.
Incluye una guía de sabios consejos aportados por expertos en el arte del uso y disfrute del jabón chiquito que te servirán para regocijarte mejor en esos encuentros íntimos en el motel. Además, una divertida sección de quejas y sugerencias donde los clientes frecuentes a los moteles sugieren cambios o se quejan por algunas fallas en el servicio

• Idioma: Español
• Editorial: Roberto Tinajero Corona
• Fecha de lanzamiento: 5 nov 2020
• ISBN: 9781005932251

Roberto Tinajero Corona

ROBERTO TINAJERO CORONA, nacido en Apatzingán, México, en 1969, es ingeniero civil por la Universidad de Guadalajara. Escribió en diversos medios locales y en 2009 publica su primera obra, “El Secreto de La Pacanda” es una novela de ficción que se desarrolla en escenarios de Morelia y Pátzcuaro, en Michoacán y en Ciudad de México. A esta siguió una colección de relatos titulada “Historias con olor a jabón chiquito”, que es un compendio de historias reales y chuscas sucedidas en las habitaciones de moteles de paso.Su obra “Democracia en la Mira”, una novela negra, se presentó el 29 de junio de 2018 en la Biblioteca Pública de la ciudad de Morelia, Michoacán. Democracia en la Mira, una novela cruda que sin ambages nos lleva por la desesperanza humana, por el sinsentido de la existencia saciada solamente con la sangre de quienes tuvieron en sus manos la justicia pero la desecharon por la ambición desmedida que caracteriza a la clase más poderosa de nuestro país.

Vista previa del libro

Historias con Olor a Jabón Chiquito

Roberto Tinajero Corona

Copyright 2012 Roberto Tinajero Corona

Diseño de portada: Fernando Morales Gutiérrez

ISBN 978-1719502412 

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Tabla de Contenidos

En la recepción

1. El verdadero amigo

2. ¿Qué número era?

3. La junior suite

4. Quique, no me dejes aquí

5. La inocente.

6. Tres, bendita multitud.

7. Hermano, te cayó a ley.

8. Sin gorrito no hay fiesta.

9. Ya ni modo.

10. No sigas la luz.

Check out

Apéndices

I. El manual.

II. Quejas y sugerencias.

Sobre el autor

En la recepción

Si el tamaño no importa, el olor sí, créanmelo. No existe nada tan acusador como el típico e inconfundible olor a jabón chiquito. Ese aroma a rosas, que revela el sublime pero ilícito contacto con una criatura de Venus, es detectado por algunas mujeres con la misma habilidad con la que identifican, entre miles, el llanto de su hijo.

Esa pastilla, que en la mayoría de los casos su vida no llega más allá del uso que dos personas le pueden dar, es capaz de echar de cabeza al más discreto de los amantes. Así, entre los amigos, quien despide el olor a jabón chiquito, acompañado de una sonrisa estúpidamente feliz, declara silenciosamente el unto reciente de la pequeña, grasosa e higienizante pastilla de jabón. Resulta, también, que si para eliminar el aroma del látex —que combinado con el sudor y otros fluidos corporales engendra el tufo más acusador— un cachondo y distraído Don Juan utiliza el jabón chiquito, seguramente tendrá una historia cómica que, con un poco de suerte y paciencia, lograremos escuchar.

En muchos casos esa suerte no es necesaria, tal vez un poco de paciencia, sí. Nunca falta ese donjuanesco y bien bañado galán que a la menor provocación nos cuenta su o sus historias; así, en poco tiempo la cantidad acumulada de éstas llega a ser tal que recordarlas es casi imposible, sin embargo, la comicidad y originalidad de algunas es tanta que bien vale la pena escribirlas, además, es la única forma de preservarlas y transmitirlas.

Tengamos presente que además del buen rato que pasaremos narrando cada una de esas historias, algunas contienen verdaderas lecciones de agilidad mental, ingenio y sagacidad; es más, su uso y aplicación ha llegado a salvar más de un matrimonio, así como la honra y buen nombre de quien, en una situación de a tiro gacha, ha recurrido a ellas

La redacción del pequeño ejemplar que ahora tiene en sus manos ha sido posible gracias a la desinteresada participación de quienes protagonizaron las olorosas historias que están a punto de leer. Lo que no recuerdo es si cambie o no los nombres de los protagonistas, por lo tanto, cualquier parecido con la realidad pude ser o no mera coincidencia.

Por último —lo digo así porque es la última parte de este ejemplar— incluí un pequeño prontuario de sabios y prácticos consejos, producto, claro está, del uso y reúso del jabón chiquito. Dichos consejos han sido aportados por cada uno de los protagonistas que, con singular alegría —y confiados en su anonimato—, participaron e hicieron posible este material. No olvidemos que la aplicación de tales recomendaciones lo podrán ayudar a evitar, y también a su pareja eventual, el ser sorprendidos in fraganti. Úselos bajo su propio riesgo.

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1. El verdadero amigo

Tanto va el cántaro al agua, hasta que se rompe. Y así le paso a mi amiga Sugey, una voluptuosa y bien proporcionada mujer (esto último me lo dijo el coprotagonista de esta olorosa historia) que, con todo y sus encantos no pudo lograr que su esposo saciara en ella sus calenturas, pues resulta que Diego, su marido, llegaba varios días a la semana en la madrugada o, simplemente, no llegaba. Así, la buena Sugey, cansada y al mismo tiempo insatisfecha —vaya usted a saber cómo pasa eso—, también buscó donde saciar sus calenturas,