Korchito

Por Ida Rego

KORCHITO es un cuento pensado para todas las edades que nos transporta a un mundo imaginario aunque, a la vez, muy real. Las ilustraciones reflejan perfectamente las escenas del texto y los dilogos entre los protagonistas son frescos e imaginativos, contribuyendo a que el lector viva el cuento como si fuera una parte ms de la historia.

• Idioma: Español
• Editorial: Palibrio
• Fecha de lanzamiento: 29 nov 2012
• ISBN: 9781463342531

Ida Rego

Ida Rego Nació en Colombia, de padres españoles y ha vivido en Venezuela durante casi toda su vida. Rodeada de libros desde pequeña, comenzó su viaje al mundo de la escritura en primaria, llevada por su afición a la lectura y su gran imaginación. Esto la llevó a crear continuamente cuentos, versos, historias cortas y frases simpáticas relacionadas con sus vivencias. Sin embargo, no es sino hasta ahora que se da la oportunidad de publicar una de sus obras más queridas, Korchito; un cuento para niños grandes o adultos niños, una historia para creer en un mundo mejor. Tiene tres hijos, cinco nietos y una biznieta, por eso la llaman cariñosamente la Abuela Escritora. El día de su cumpleaños, Carlitos comienza una serie de eventos mágicos con un personaje de otro planeta, cuya aparición genera en el pequeño pueblo motivos para crear un clima de armonía, comunicación, colaboración y sentido de amistad. Sin embargo, todavía le falta conocer otra sorpresa, inesperada para todos; una nueva forma de vivir.

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Copyright © 2012 por Ida Rego.

Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este libro puede ser reproducida o transmitida de cualquier forma o por cualquier medio, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopia, grabación, o por cualquier sistema de almacenamiento y recuperación, sin permiso escrito del propietario del copyright.

Esta es una obra de ficción. Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia. Todos los personajes, nombres, hechos, organizaciones y diálogos en esta novela son o bien producto de la imaginación del autor o han sido utilizados en esta obra de manera ficticia.

Ilustraciones de Delia Cristina González

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Indice

Dedicatoria

Agradecimientos

Capítulo 1: Cumpleaños De Carlitos

Capítulo 2: Carlitos Lleva A Korchito De Compras

Capítulo 3: Korchito Y Carlitos Salen En Bicicleta

Capítulo 4: Korchito Está Enfermo

Capítulo 5: Korchito Y Carlitos Van A La Escuela

Capítulo 6: Carlitos Está Luminoso

Capítulo 7: A Carlitos Le Traen Un Regalo

Capítulo 8: Korchito Y Carlitos Prueban El Regalo

Capítulo 9: Korchito Y Carlitos Van A Misa

Capítulo 10: Una Fiesta Para Recaudar Fondos

Capítulo 11: Korchito Y Carlitos Ayudan A Preparar La Fiesta En La Escuela

Capítulo 12: Fiesta En El Colegio

Capítulo 13: Carlitos Y Korchito Limpian El Carro

Capítulo 14: Tío Venuquino Visita A Korchito

Capítulo 15: Llega Korochito

Capítulo 16: Conociendo A Korochito

Capítulo 17: Korochito Conoce A Los Amigos De Carlitos

Capítulo 18: Korochito Llega A La Escuela

Capítulo 19: Carlitos Invita A La Maestra A Cenar

Capítulo 20: Cumpleaños De Lena, La Mamá De Carlitos

Capítulo 21: Tío Venuquino Llega A Conocer A Rosita Y Al Padre Francisco

Capítulo 22: Preparando La Navidad

Capítulo 23: Noche Del 23 De Diciembre

Capítulo 24: Los Regalos

Capítulo 25: Hoy Es Navidad

Capítulo 26: Noche De Navidad

Capítulo 27: Rosita Responde Al Tío Jesuquino

Capítulo 28: El Viaje

Capítulo 29: Vamplant

Capítulo 30: Despertar En Vamplant

Capítulo 31: El Padre Francisco Va A La Cúpula

Capítulo 32: Aeropuerto En Vamplant

Capítulo 33: Rosita Aprende A Manejar Un Platillo

Capítulo 34: El Hijo De Tío Venuquino

Capítulo 35: Tío Jesuquino Participa Su Matrimonio

Capítulo 36: Base Militar De Vamplant

Capítulo 37: La Boda

Capítulo 38: La Fiesta

Dedicatoria

A mis hijos Carlos, Gonzalo y Sonia

A mi nieta Andrea

A mis nietos

A mi biznieta

Agradecimientos

A mi hija Sonia por su apoyo en la transcripción

A mi hijo Gonzalo por haber encuadernado la primera versión

A mi nieta Andrea por sus revisiones

Capítulo 1:

Cumpleaños de Carlitos

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Hoy era el cumpleaños de Carlitos. En la casa había mucha alegría, todos cantaban, reían, gritaban. Al fin llegó la hora de partir el pastel y comer helados.

Cuando todos estaban reunidos alrededor de la mesa, sonó el timbre. Carlitos se fue corriendo a abrir la puerta, pensando que era otro amiguito. Pero no había nadie y, cuando fue a cerrarla, miró al piso y vio una pequeña caja envuelta en papel brillante de regalo, con una cinta roja encima. Recogió el regalo y vio una tarjetita que tenía escrito Feliz cumpleaños Carlitos, espero que me cuides. Tu amiguito el vamplantiano". Así firmaba.

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Entró corriendo y puso el regalo en la mesa, delante de sus amiguitos. Todos decían gritando: Ábrelo Carlitos.

Carlitos abrió el regalo, sacó un pequeño platillo de la caja. Lo colocó en la mesa y comenzó a moverse, dando vueltas y vueltas. Luego se detuvo y le salieron unas patitas y unos brazos, se prendieron luces rojas, verdes, amarillas. Sonaba una música muy linda. De pronto, salió una pequeña cabeza, con unos lentes oscuros que no le dejaban ver los ojos. Y en las manos tenía rifles.

Todos los niños se escondieron debajo de la mesa, cuando empezó a disparar con el rifle; tenían mucho miedo, pero al ver lo que disparaban, empezaron a reír.

¡Disparaba… caramelos deliciosos!

La mesa se llenó de diminutas bolitas de caramelos. Los niños se pararon para ver el platillo. Después guardó la cabeza, los brazos y por último las piernas y empezó a elevarse, dando vueltas y vueltas. De repente oyeron una voz que salía del platillo. Feliz cumpleaños Carlitos, me voy a dormir, mientras comen la torta. Disfruten del cumpleaños amiguitos, después nos volveremos a ver.

-   ¿Cómo te llamas? - gritaron todos.

-   ¡Me llamo Korchito!

Los niños rieron y se sentaron alrededor de la mesa, a comer su pastel y sus helados. Carlitos lo siguió y vio que, no entendía cómo, se había dirigido a su habitación y había aterrizado en la mesita del computador a dormir.

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Capítulo 2:

Carlitos lleva a Korchito de Compras

El día siguiente a su cumpleaños, Carlitos se levantó muy temprano para ver su pequeño regalo.

-   Korchito, ¿dónde estás?

-   Aquí, Carlitos, junto a tu almohada, esperando que te despiertes.

-   Korchito, ¿por qué siempre usas lentes?

-   Son lentes especiales para la luz.

-   Muéstrame cómo escondes las manos y los pies.

-   Mira, así las escondo, cuando quiero elevarme y si quiero caminar como tú, bajo y saco los pies. También bailo y canto. Mira como zapateo. Tac… tac… ¿te gusta?

-   Claro, me gusta mucho. Creo que seremos los mejores amigos.

-   ¿Sabes? A mí me gusta hacer travesuras. ¿Y a ti?

-   A veces. Pero no debemos hacerlas.

-   ¡Carlitos… Carlitos! Baja, hijo. Ven a desayunar y luego me haces unas compras en el supermercado.

-   Ya bajo, mamá. Estoy con Korchito.

-   Está bien, baja y él te acompañará.

-   Vamos, Korchito. Así te llevaré a pasear.

-   Bueno, vamos.

-   Hola Korchito, ¿cómo estás? - preguntó la mamá de Carlitos -.

-   Hola señora, yo estoy bien.

-   ¿Y de dónde vienes, Korchito, por qué estás aquí?

-   Vengo de Vamplant porque Carlitos cumplía años y quería tener un regalo espectacular.

-   Pues si Korchito, eres muy especial y, ya que te vas a quedar con nosotros, creo que será mejor que me llames Mami, como Carlitos.

-   Está bien, señora Mami. Me gusta llamarla así.

Después de desayunar, salieron como habían planeado.

-   Fíjate, éste es un supermercado. Así le llaman porque uno compra todos los alimentos.

-   ¡Eso parece una pirámide!

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-   No es una pirámide. Son unos potes de alimentos. Los acomodan de esa forma para llamar la atención.

-   Vamos a conocerlo, Carlitos.

-   Korchito, no te alejes de mí, pues el Super es muy grande y te puedes perder.

-   Carlitos, ¿qué pasaría si yo agarro un pote de ésos que acomodaron en forma de pirámide, uno de los de abajo?

-   Caramba, Korchito. ¡No se te ocurra hacerlo! Se caerían todos y nos castigarían. ¿Te imaginas? Nos acusarían con mamá y ¡tremenda paliza!

-   ¡Pues no se lo diremos!

-   Korchito, yo no debo mentir.

-   Está bien, no lo hagamos. Sigamos hacia adentro.

Korchito iba de un lugar a otro. Daba vueltas y volvía junto a Carlitos. Se reía y cantaba:

-   Yo doy vueltas, la, la, la

Mientras tú caminas, la, la, la.

De pronto…se sintió un ruido y una cantidad de potes rodando. Luego en otra fila, otra cantidad de potes. La gente comenzó a gritar, todo se derrumbaba.

-   Cálmense señores - decía el vigilante - No pasa nada, no pasa nada.

-   ¡Korchito, Korchito, ven acá!

-   Corre, corre, Carlitos, antes de que nos atrapen. ¡Ahí va la última pirámide! Mira cómo cae. Corre, ja, ja, ja.

-   ¡Korchito, no hagas eso!

Y puchuplún. Se cayeron todos los potes y Carlitos no tuvo más remedio que correr. Llegó jadeando a la casa. Korchito se había perdido, no