Los Antiguos Mensajes Del Profeta Isaías En Verdades Contemporáneas: Sesenta Y Nueve Meditaciones Matutinas

Por Eleazar Barajas

El autor comenta que la maana comenz a leer el libro de Isaas en su tiempo devocional con Dios fue algo diferente que las anteriores. En esa ocasin, por alguna razn tom un cuaderno y un lapicero aparte de su Biblia que estaba usando para sus devocionales.

Los pasajes llamativos a su inters personal los fue subrayando como lo acostumbraba a hacer. Pero, ahora tom nota de aquello que Dios le estaba hablando. Y fue as como nacieron estos cuatro libros sobre los mensajes del profeta Isaas.

Algunos de ustedes ya conocen al Autor de este libro, anteriormente a publicado el libro titulado: Halloween a la luz de la Biblia, y ahora se ha lanzado al proyecto de cuatro novelescos libros sobre los mensajes del profeta Isaas. Son libros en los que narra sus experiencias personales en su andar ministerial, educacional y profesorado.

Este primer libro, abarca desde una dedicatoria hasta el capitulo veinte con su respectiva conclusin. Deseamos que as como han sido de bendicin para el autor estos devocionales, lo sean tambin para cada lector.

-Farid Snchez

• Idioma: Español
• Editorial: Palibrio
• Fecha de lanzamiento: 29 jun 2012
• ISBN: 9781463329693

Eleazar Barajas

El Reverendo Eleazar Barajas es pastor en: Ministerios Huntington Beach California, USA [e-mail]

Vista previa del libro

Los Anttiguos Mensajes

Del Profeta

Isaías

en Verdades

Contemporáneas

sesenta y nueve meditaciones matutinas

Libro Dos

Eleazar Barajas

Copyright © 2012 por Eleazar Barajas.

Número de Control de la Biblioteca del Congreso

de EE. UU.:   2012908940

ISBN:   Tapa Dura                   978-1-4633-2968-6

               Tapa Blanda               978-1-4633-2970-9

               Libro Electrónico     978-1-4633-2969-3

Diseño de portada:

Geovanni Méndez

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407872

Contents

Introducción

Coces Contra El Aguijón

Apoyo Equivocado

Luz y Oscuridad

Día de Duelo Nacional

Dios Establece

Gemid, Gemit y Gemit

Falsas Alabanzas Al Justo

He Aquí, Este es mi Dios

Más que Sanados; ¡Salvados!

Salgamos y Volvamos

"Extraña Tarea

¡Qué Equivocación!

El Dios de las Oportunidades

No lo Necesito

Koinonía

Todo dependía del lazo

Una Pequeña Luz En las Densas Tinieblas

Hermosa Convivencia

¿Por qué Piensas que Dios los Librará?

Sólo un Rumor

¿Quién es Quién?

El Señor Está Aquí

Para Salvar

No Me Importa

Conclusión

Bibliografía

Endnotes

Dedicatoria

Dedico con profundo respeto y sinceridad esta serie de cuatro libros a dos hombres que me brindaron su amistad y apoyo en el ministerio pastoral y educativo en México y en los Estados Unidos.

Al pastor que puede hacer de estos escuetos bosquejos presentados en estos libros, profundos y conmovedores mensajes:

Rev. Yamile Fernández

Pastor del Centro Familiar Cristiano Buenas Nuevas

En Santa Ana California.

Y a un buen amigo en el ministerio pastoral que desde hace más de treinta años, en lo que a mi se refiere, le ha hecho y le sigue haciendo honor a su apellido. Me refiero al:

Rev. Héctor Hugo Leal

Pastor de la Iglesia Bautista Vida Eterna

Santa Ana, California.

Introducción

Gracias por continuar conmigo en este viaje espiritual en el cual estamos viajando desde el Oriente hacia el Occidente y viceversa. Durante más de diecisiete días hemos estado al lado de uno de los profetas más grandes del profetismo israelita; Isaías. Al comenzar este segundo periodo, además de que me alegró que sigan conmigo, seguimos conociendo la ciudad de Jerusalén y sus alrededores de la misma manera como lo hicimos en el Libro Uno; es decir, de una manera espiritual, y lo seguiremos haciendo al lado del mismo guía: el Profeta Isaías. Por tal motivo, considero justo el que nos detengamos un poco y conozcamos algo más de la vida y del curriculum de este gran siervo de Dios.

Era un tiempo en que los asirios amenazaban a los israelitas con conquistarlos. En ese mismo tiempo, sucedieron cambios que también afectaron a los habitantes de Judá. Al rey Manases le sucedió su hijo Pekaía: "que fue asesinado por Peka tras dos años de gobierno. Peka tomó el trono de Samaria en el 740-39 y comenzó una agresiva política anti-asiria. La muerte de Uzías, el notable rey de Judá y el más sobresaliente desde los días de David y Salomón, ocurrió el mismo año.

Durante este año de tensión en el país y en el exterior, el joven Isaías recibió su llamado profético."¹ De acuerdo a Kely M. Yates, Isaías: "El hijo de Amóz nació en Jerusalén por el año de 760 A. de C., cuando Amós el profeta estaba predicando en el reino del norte. Su ministerio activo comenzó como por el año 740 A. de C., el año en que murió el rey Uzías. Durante cuarenta años radico en su ciudad natal, dando a los reyes, a las princesas de la corte y al pueblo, el candente mensaje que enviaba Dios por su conducto… . En su trabajo le esperaban durezas, peligros, chascos y contratiempos, pero con la fortaleza de Dios, saldría victorioso.

Como hombre de estado, Isaías no tiene competidor entre los profetas… . Su fe en Dios, le dio las bases para fundar sus consejos, pero la sutil penetración de los problemas humanos, era en él una ventaja sobre muchos de sus contemporáneos… . Como un pregonero incansable de la justicia social, Isaías no tiene quien lo iguale entre los profetas."² De acuerdo a la Wikipedia, la enciclopedia libre, el nombre Isaías significa: "Yahveh es salvación o el Señor es salvación. Isaías [es] considerado uno de los profetas mayores. Se le conoce así por el extenso material que contiene su libro.³ Un libro que se puede considerar como una antología.⁴ A este respecto, Roland Kenneth Harrison, dice que: La justificación para describir la obra como una antología en el mejor sentido de la palabra es suministrada por el versículo inicial de la profecía que constituye un encabezado para la obra y habla específicamente del material revelado que Isaías hijo de Amoz recibió en visiones acerca de Judá y Jerusalén en los días de Uzías, Jotam, Acaz y Ezequías".⁵

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Dibujo del profeta Isaías recibiendo revelación

Dibujo hecho por: Giovanni Méndez

"Se cree que el ministerio profético de Isaías llegó a durar cerca de medio siglo, es decir, desde el año que Azarías terminaba su reinado en Judá hasta probablemente los tiempos del rey Manasés. Según los libros apócrifos Vida de los Profetas (1:1) y la Ascensión de Isaías (5:11-14), Isaías murió aserrado durante la persecución provocada por el rey Manasés, parece que el libro de los Hebreos en 11:37 hace referencia a este hecho.

Isaías fue un firme opositor a la política de alianza de los reyes de Judá con los imperios y llamó a confiar en la alianza con Jehová. En particular se opuso al protectorado de Asiria que el rey Acaz propició para enfrentarse a los reyes de Damasco e Israel. El rey Ezequías quiso unirse con los reyes de Egipto pero también a esta alianza el profeta Isaías se opuso. Y tenía razón en oponerse a dichas alianzas, pues él confiaba firmemente en la protección de Dios. Y fue así que, cuando las tropas asirias de Senaquerib sitiaron Jerusalén, Isaías apoyó la resistencia y anunció la ayuda del Señor Dios y la ciudad se salvó.

El Cristianismo estima que el Libro de Isaías anunció el nacimiento, el sacrificio y la gloria de Jesús el Mesías y, además, el alcance universal de la salvación. Esta es en parte la razón por la cual al profeta Isaías se le considera como el Príncipe de los Profetas.⁶

Después de este corto relato de la biografía y ministerio profético de Isaías quien nos está sirviendo de guía en el territorio de Palestina, en especial en la ciudad capital de Judá; Jerusalén, tal y como lo hemos leído en el libro uno, en donde he puesto la Dedicatoria y la Introducción general a toda esta serie de cuatro libros. Ahora, me permito recordarte que aunque estoy usando el sentido masculino esto no significa que a ti, mujer o hermana en Cristo te deje afuera de los relatos de este libro dos, recuerda que lo hago solamente por asuntos literarios. También hago una segunda aclaración: este libro dos, no fue seleccionado de una manera literaria, ni teológica o profética, sino que, al igual que el anterior y los que vendrán después, los he seleccionado a mi propio criterio.

Así, pues, en este Libro Dos, te invito a meditar en las grandezas de Dios y en su amor y poder salvífico, así como su incomparable misericordia tanto como para sus amados israelitas como para los enemigos de su pueblo. Meditaremos en estos asuntos de suma importancia mientras recorremos otros lugares de la ciudad de Jerusalén, así como las ciudades vecinas a los israelitas y al mismo tiempo, viajaremos en nuestro espíritu a nuestro continente una y otra vez, especialmente a México y los Estados Unidos de América.

Como seguramente ya te has dado cuenta, este libro dos está compuesto de veintidós devocionales, los cuales no fueron escogidos de una manera especial, sino que los he puesto en este libro sencillamente como una serie de meditaciones devocionales o, tal vez estudios bíblicos. Están aquí con la misma idea y sentir de cómo Dios me los dio durante las hermosas mañanas en mi recamara o en la cocina de mi apartamento en la ciudad de la Habra, California. Claro que, después de pasar el borrador al formato de este libro, he enriquecido dichos devocionales con un poco de investigación, la cual se hace notar en este y los otros libros del mismo tema.

Espero, pues que, así como han sido y siguen siendo de bendición para mi estos Devocionales matutinos o si prefieres llamarlos estudios o mensajes bíblicos, también lo sean para ti mi estimado amigo y compañero en este viaje espiritual a la ciudad de Jerusalén con nuestro guía; el profeta Isaías. O, tal vez seas tú mi hermano en Cristo Jesús, tú que también me has estado acompañando en estos viajes al Oriente y a nuestro continente de una manera espiritual, espero, pues que te sean de gran bendición.

En Cristo:

Eleazar Barajas

Coces Contra El Aguijón

En el Libro Uno conocimos un poco sobre una de las ciudades más antiguas del mundo; Damasco. ¿Lo recuerdas? ¿Te acuerdas que nuestro guía nos hizo estar atentos en las consecuencias de esa ciudad norteña situada en el Asia Menor llamada Damasco? Fue un recorrido largo el que hicimos para llegar hasta esa ciudad siriaca. Ya sabemos que esta es una de las ciudades más antiguas del mundo sirio, se encuentra más o menos a unos 240 kilómetros al norte de Jerusalén, así que, en los tiempos del profeta Isaías se necesitaban entre seis o siete días para llegar a Damasco saliendo desde Jerusalén.⁷ ¡Sí que en ese entonces estaba lejos! Y tú y yo, compañero de viaje, ¡ya hemos estado allí! Ayer estuvimos en esa antigua ciudad.

Bueno, ahora ya estamos nuevamente en la ciudad de Jerusalén. La pregunta que me he hecho esta mañana, es: ¿hacía donde nos llevará ahora el profeta Isaías? ¿Qué lugar conoceremos hoy? De seguro conoceremos algo más de este país palestino y sus vecinos, pues Isaías es un guía incansable. Espero que sea un viaje corto; todavía estoy cansado del viaje a Damasco. Estoy aprovechado estos minutos matutinos para descansar un poco mientras me saboreo un rico pastelito acompañado con mi inseparable café matutino. Seguramente que el profeta Isaías llegará de un momento a otro por nosotros.

¡Te lo dije! Aquí está nuestro guía. Como buen caballero que es, espera unos minutos afuera del lugar en donde nos hospedamos; espera para que estemos listos para iniciar el viaje turístico de hoy. Nos saluda con el acostumbrado Shalom al cual correspondemos con una mediana reverencia al estilo judío. Después del saludo comenzamos a caminar tras él. Vamos en dirección hacia el sur de la ciudad de Jerusalén. Cruzamos la ciudad de David y llegamos hasta el Estanque Viejo que se encuentra al norte del Jardín Real. De allí nos dirigimos hacia ese hermoso Jardín. Por un momento pensé que una vez más disfrutaríamos de la belleza y la frescura de este paraíso en medio del desierto en las orillas del Valle de Hinom, pero, ¡no fue así! El profeta Isaías sigue caminando hasta que llegamos al manantial de En-roguel, muy al sur de la ciudad de Jerusalén. Allí se para el profeta y mirando hacia el territorio africano, comienza su profecía sobre Egipto, diciendo:

He aquí el Señor va montado sobre una nube veloz y llega a Egipto;

se estremecen los ídolos de Egipto ante su presencia,

y el corazón de los egipcios se derrite dentro de ellos.

. . . Entonces el espíritu de los egipcios se apocará dentro de ellos;

confundiré sus planes,

y ellos acudirán a los ídolos, a los espíritus de los muertos,

a los médium y a los espiritistas.

. . . Las cañas junto al río, a orillas del Nilo,

y a todos los sembrados junto al Nilo

se secarán, serán esparcidos, y no serán más.

Se lamentarán los pescadores,

y harán duelo todos los que echan anzuelo en el Nilo;

los que extienden sus redes sobre las aguas desfallecerán.

. . . No son más que necios los príncipes de Zoán;

el consejo de los más sabios consejeros de Faraón se ha vuelto torpe.

¿Cómo decís a Faraón:

Yo soy hijo de los sabios, hijo de los antiguos reyes?

Pues bien, ¿dónde están tus sabios?

Que ellos ahora te declaren,

y te han saber lo que el Señor de los ejércitos

ha determinado contra Egipto.

Han obrado neciamente los príncipes de Zoán,

se han engañado los príncipes de Menfis;

han extraviado a Egipto

los que son la piedra angular de sus tribus.

El Señor ha mezclado en medio de ella un espíritu de distorsión,

y ha hecho extraviar a Egipto en todas sus empresas,

como se tambalea el ebrio en su vómito.

Isaías 19:1-3; 7-8; 11-14.

Mientras escucho este mensaje aquí parado junto al manantial de En-roguel, en mi mente se han quedado algunas expresiones como: "confundiré sus planes; no son más que necios los príncipes de Soán; el consejo de los más sabios consejeros de faraón se ha vuelto torpe; Han obrado neciamente los príncipes de Soán"; se han engañado los príncipes de Menfis; El Señor ha mezclado en medio de ella un espíritu de distorsión y ha hecho extraviar a Egipto". Son expresiones que me han hecho recordar algunas de las experiencias en el campo misionero en la región de San Felipe Usila, Oaxaca. ¿Te parce bien si dejamos por un rato al profeta Isaías aquí en el manantial de En-roguel y nos trasladamos a la sierra chinanteca en Oaxaca, México? . . . Gracias. ¡Vámonos! Y mientras vamos de regreso a esa hermosa sierra mexicana, te cuento lo siguiente.

Cuando el ex sacerdote católico Luís Pacheco y Modesto su ayudante, quienes eran dos de los líderes chinantecos dentro del grupo cristiano en la Región de San Felipe Usila, se unieron para contradecir las enseñanzas bíblicas que impartían el doctor John F. Hall y los miembros de la Escuela Bíblica, conocida como: Centro Educativo Indígena, ubicado en la ciudad de Córdoba, Veracruz, los problemas de críticas, desprecios y malos consejos eran la "comidilla" de esos días de los años setentas y parte de los ochentas.

Ambos, Luís y Modesto se presentaban como los hombres por los cuales Dios dictaba su voluntad entre los chinantecos; supuestamente recibían día tras día revelaciones divinas en las cuales Dios les ayudaba a la supuesta interpretación correcta de las Escrituras. Así que, apoyados en las nuevas interpretaciones bíblicas y visiones que casi a diario tenían ambos; Pacheco y Modesto, contradecían las enseñanzas de la doctrina de la justificación por la fe, predicando una justificación en base a las obras. La doctrina de la santificación por la acción del Espíritu Santo, la cambiaron por la santificación en base a las nuevas revelaciones, los sueños y las visiones. La doctrina de la salvación por gracia era un asunto de obras más que la acción de la sangre de Cristo. Aún el mandato de la Gran Comisión de Id, pues, y haced discípulos de todas las naciones (Mateo 28:19) la habían convertido en un proselitismo de Id y criticad la doctrina bíblica de los otros.

Indiscutiblemente, pues, lo que estaban haciendo con sus necias acciones era dar "coces (Patadas) contra el aguijón". ¡Estaban dando coces contra los miembros del Centro educativo Indígena y contra la doctrina bíblica que tanto los maestros como los estudiantes y misioneros del CEI anunciaban!

Aunque el grupo, que se llegó a llamar; "Los Pachequistas", nombre que fue adoptado por el apellido de Luís Pacheco, tomó fuerza en los años setentas. Para mediados de los ochentas casi habían desaparecido por completo de la Región de Usila.

Luís Pacheco dejó la región usileña por problemas con sus colegas y por una supuesta inmoralidad sexual. Modesto no pudo seguir engañado más a sus seguidores. ¡Se le acabó la Biblia para sus argumentos! Es decir, ¡No pudieron dar más coces contra el aguijón! Después te cuento un poco más sobre este llamado Movimiento Pachequista, pues hoy quiero que pensemos en el mensaje de Isaías y en base a lo que te he contado sobre dicho movimiento y a la luz de los versículos de Isaías capítulo diecinueve, te comento que hay por lo menos cuatro cosas que resultan por la necedad de estar dando coces contra el aguijón.

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El doctor John F. Hall comentando su clase de Romanos

Fotografía tomada por el autor.

CONSECUENCIAS DE DAR COCES CONTRA EL AGUIJÓN

Dios, haciendo una invitación a los sedientos, dijo:  . . . la palabra que sale de mi boca: No volverá a mi vacía, sino que hará lo que yo deseo y cumplirá con mis propósitos (Isaías 55:11, NVI). Su palabra hará… y esto mismo sucede con el ser humano, cada palabra que sale de su boca; cada hecho, y cada pensamiento, tienen sus consecuencias; nada de lo que decimos, hacemos o pensamos queda sin consecuencias ya sean estas positivas o negativas. De esta manera, pues, el dar coces contra el aguijón trae, por lo menos, las siguientes cuatro consecuencias.

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El exsacerdote Luis Pacheco, (de sombrero al frente del grupo), en el camino hacia San Felipe Usila. Fundador del Grupo Pachequista en la región chinanteca usileña.

Fotografía tomada por el doctor John F. Hall

I.- Una de las primeras cuatro consecuencias de dar coces contra el aguijón es el juicio divino.

Compañero de viaje, ¿te acuerdas de cuando el profeta Isaías entró al templo y tuvo la visión del Todopoderoso? ¿Te acuerdas que cayó literalmente acostado boca abajo ante la presencia gloriosa del Señor excelso y sublime, sentado en su trono? (Isaías 6:1, NVI). Isaías sabía por experiencia propia que el estar frente a la presencia divina del tres veces SANTO Señor Todopoderoso (Isaías 6:3), era una experiencia aterradora. ¿Será por esa experiencia personal que en esta ocasión dice que a los ídolos de Egipto les sucederá lo mismo que a él? ¿Será por eso que dice: Se estremecerán los ídolos de Egipto ante su presencia? (Isaías 19:1).

Oh, tal vez, al pronunciar estas palabras, el profeta se está acordando de que una vez, hace mucho tiempo, durante el ministro de Moisés en Egipto, los ídolos de ese lugar, no solamente se estremecieron ante la presencia del Dios de Moisés sino que, aun más, fueron derrotados juntamente con sus adoradores. ¿Será por eso que dijo estas palabras acerca de los ídolos de Egipto? Probablemente que así fue.

Y es que, compañero de viaje, el libro de Éxodo cuenta la historia de cuando Moisés fue comisionado por Dios para ir a Egipto y sacar al pueblo de Israel de ese territorio en donde eran esclavos por más de 400 años. Fue en ese entonces cuando por primera vez en la historia bíblica los ídolos de Egipto se estremecieron ante la presencia del Dios Todopoderoso, el Dios que representaba y anunciaba Moisés ante faraón y sus líderes juntamente con sus magos. Uno de los muchos dioses o ídolos de los egipcios era el río Nilo. "Puesto que Egipto dependía de las aguas del Nilo para su subsistencia, lo deificaron y le dieron el nombre de Hapi; incluso se componían himnos para rendirles culto.⁸ Era, pues, un dios muy respetado y adorado como un poderoso dios, sin embargo, la Escritura, dice:  . . . y ejecutaré mi sentencia contra todos los dioses de Egipto. Yo soy el Señor (Éxodo 12:12 NVI). Y, ¡Así fue! En el gran río Nilo, sus aguas se convirtieron en sangre produciendo una gran mortandad de los peces y con ello una pestilencia tan grande que los egipcios no pudieron beber sus aguas (Éxodo 7:14-20).

Otro de los dioses que fue afectado por la presencia del Todopoderoso Dios de Israel fue la diosa Hequet. Dios le dijo a Moisés que le advirtiera a faraón que si no dejaba salir al pueblo israelita, Dios llenaría al país de Egipto con ranas. ¡Y faraón no hizo caso del mandato de Dios! Así que, por la necedad de faraón al no dejar salir de Egipto al pueblo de Israel, la diosa Hequet se estremeció y se hizo aborrecible para el pueblo egipcio. Compañero de viaje, sé que te estás preguntando, ¿qué tiene que ver las ranas de Egipto con la diosa Hequet? Compañero, te saco de dudas. "La rana (o sapo) era considerada sagrada por los egipcios. A la diosa Hequet, que tenía cabeza de rana, se le atribuía un poder creador, y era la que ayudaba a las mujeres en el momento del parto".⁹ Y a la orden de Moisés, desde los arroyos, ríos y lagunas, esta diosa salió en grandes cantidades a tal grado que aun el mismo faraón la despreció (Éxodo 8:1-10).

El dios Apis, representado por un toro, el dios Ra, que tenía la cabeza de halcón, la diosa Hator que era representada por una vaca, el dios Anubis con cabeza de chacal o perro, el dios Mut con cabeza de buitre, el dios Khnum que tenía cabeza de carnero, estos son algunos de los ídolos egipcios que fueron afectados directamente por el poder del Dios que Moisés anunciaba; el cual era EL Dios de Israel. Fueron afectados por causa de la dureza del dios principal en Egipto, El Faraón, el cual también fue puesto a temblar y se estremeció con gran dolor por la muerte de su primogénito (Éxodo 11:1-6; 12:29-30). Dios hizo su juicio; los ídolos de Egipto no