Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Solo $11.99/mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

Sonia Memorias Del Pasado
Sonia Memorias Del Pasado
Sonia Memorias Del Pasado
Libro electrónico263 páginas3 horas

Sonia Memorias Del Pasado

Calificación: 0 de 5 estrellas

()

Leer la vista previa

Información de este libro electrónico

Breve historia sobre el origen de mi relacin con Sonia (ttulo de la obra) as como de sus inusuales consecuencias. Despus de vivir separados cerca de 25 aos, por diversas situaciones nos volvemos a reencontrar iniciando una relacin formal. La combinacin de Sonia conmigo, desencadena casi desde el comienzo de nuestra convivencia que, involuntariamente y posteriormente de forma controlada, provoque yo en ella una serie de estados modificados de conciencia que inician con regresiones a vidas pasadas, visualizaciones de bloqueos energticas en la gente, los cuales dan como resultado distintas enfermedades, algunas ya presentes en las personas observadas, otras en proceso, la habilidad que va despertando en mi para tratar dichos bloqueos con resultados positivos, contactos de Sonia con personas ya fallecidas, entre otras, amigos de la infancia que murieron aos atrs etc. y los resultados de las observaciones de algunas piezas y lugares prehispnicos en esos estados de conciencia.

De igual forma, trata de exponer que cuando uno encuentra, o est destinado a encontrar a su pareja, no importa que tanto tiempo se lleve esto, la combinacin correcta puede dar resultados un tanto inesperados o espectaculares tomando en cuenta que tanto Sonia como yo, somos personas como millones que existen, es decir comunes y corrientes, con vidas aparentemente normales hasta antes de convivir estrechamente.
IdiomaEspañol
EditorialPalibrio
Fecha de lanzamiento30 sept 2010
ISBN9781617641619
Sonia Memorias Del Pasado

Relacionado con Sonia Memorias Del Pasado

Libros electrónicos relacionados

Memorias personales para usted

Ver más

Artículos relacionados

Categorías relacionadas

Comentarios para Sonia Memorias Del Pasado

Calificación: 0 de 5 estrellas
0 calificaciones

0 clasificaciones0 comentarios

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

    Vista previa del libro

    Sonia Memorias Del Pasado - Alfonso A. Rodríguez

    PRÓLOGO

    Lo que a continuación narro, se refiere únicamente a una breve descripción de nuestras vidas actuales, ligada a una serie de eventos y vivencias no muy comunes que han ido girando alrededor de varios recuerdos de nuestras vidas pasadas, así como de los resultados de algunos estados modificados de conciencia que a raíz de esto despertaron en Sonia y que han ido ocurriendo entre ella y yo durante nuestros últimos años de estrecha convivencia.

    En un principio, este proyecto no fue planeado como tal, simplemente eran anotaciones informales que hacíamos de las experiencias que íbamos teniendo en un campo prácticamente nuevo y desconocido para nosotros, con el fin de mantener una referencia en la continuidad de las regresiones que venimos practicando con cierta periodicidad.

    Fue después de una plática con un amigo, durante un seminario, cuando me animó a llevarlo en forma; poco tiempo después de iniciarlo se nos comenzaron a presentar otro tipo de experiencias derivadas de dichas regresiones, las cuales también han ido alimentando este proyecto, así como experimentar en nosotros mismos y en algunos conocidos nuestros lo que al manejo y aplicación de la energía sutil se refiere, al igual que algunos estados de percepción que despiertan en Sonia cada vez que la induzco al estado que nosotros llamamos ver colores, proceso que detallaré más adelante.

    Este es el resultado de más de cuatro años de trabajo, de vivencias y recuerdos de otras vidas, la mayoría, si no es que todos muy emotivos sobre todo porque, entre otras cosas, tanto Sonia como yo nunca hemos tenido ninguna capacitación formal en este campo, todo ha sido conforme se nos han ido presentando los hechos.

    Uno de los objetivos de esto es, no sólo reflejar y compartir experiencias propias, sino ser una especie de guía o de ejemplo, de lo que el ser humano, con sólo proponérselo, o más bien permitírselo, puede llegar a descubrir en sí mismo así como en los demás.

    Es sólo una pequeña muestra también, de algunos de los dones y capacidades así como de la forma en cómo gente común y corriente, en este caso nosotros como pareja, podemos llegar en determinado momento a despertar, cultivar y desarrollar.

    Habilidades que en el común de los casos todos tenemos y conservamos guardadas o reprimidas indefinidamente gracias, entre otras cosas, a una civilización todavía predominantemente materialista basada en el método científico (prácticas utilizadas y ratificadas por la comunidad científica como válidas a la hora de proceder con el fin de exponer y confirmar sus teorías), o muchas de las veces, sumida permanentemente en un dogmatismo religioso y que para este fin solamente hay que voltear un poco al lado espiritual, desapasionadamente, sin caer en fanatismos.

    SONIA I

    (Recuerdos del pasado)

    Me considero una persona normal, puesta tal vez por el destino en el momento preciso ante una oportunidad. No soy terapeuta, tampoco me dedico a la práctica de ningún tipo de terapia, se puede decir que mi formación académica fue, hasta cierto punto dentro de un marco científico, soy ingeniero agrónomo, con algunas especialidades dentro de esa disciplina, nada relacionado con una formación humanista o tendiente a la espiritualidad y aunque soy católico, tampoco soy muy religioso.

    Todo esto se nos ha ido presentando de alguna manera en forma circunstancial, sin haberlo planeado, algo que fue ocurriendo casi sin darnos cuenta, espontáneamente y que hemos ido aprendiendo a desarrollar sobre la marcha, a veces con una práctica constante y que actualmente nos tiene inmersos no sólo en la investigación personal de nuestras vidas pasadas, sino que además, entre otras cosas, nos ha ido introduciendo de forma paulatina en lo relacionado a la sanación (Healing).

    -La sanación se puede decir que es la ciencia de resolver nuestros problemas, enfermedades, dolencias, etc. desde su origen, su enfoque es el campo energético, que es en donde se originan y almacenan la mayoría de nuestros problemas. Una vez que se trabaja la causa los síntomas van sanando (Javier Ruiz Bunker).

    Sonia y yo llegamos casi al mismo tiempo a esta vida, fue en el siglo pasado al inicio de los 60´s; ella llegó primero con diferencia de unos meses. Aún tengo flashazos de mis primeros meses de vida, tengo el desagradable recuerdo del dedo del sacerdote lleno de sal metiéndolo a mi boca y también la impresión de estar de cabeza sintiendo el agua fría caer sobre mi cabeza el día de mi bautizo.

    También guardo imágenes muy claras del corralito de madera con barrotes de color rojo en donde me ponía mi mamá de bebé, los juguetes de plástico que colgaban de éste, el colchón forrado de plástico azul claro, mi oso de peluche musical con un listón rojo en el cuello al que había que darle cuerda en la espalda para que sonara, así como mi cuna colocada al lado derecho de la cama de mis padres casi pegada a la pared, junto al closet; como esos recuerdos, tengo muchísimos más de aquellos días y muchos otros, ya de más grande.

    Sin saber la razón hasta hace poco tiempo, siempre me han llamado la atención los aviones de combate, sobre todo los de la Segunda Guerra Mundial y en especial los de alemanes e ingleses, son como una obsesión, los conozco casi todos, así ocurre también en especial con la Batalla de Inglaterra que es uno de los pasajes de esa guerra que más me impresiona e igual llama mi atención fuertemente, que con nadie más ocurre esto en mi familia.

    Mis amigos, con los que más me identifico, se puede decir que son de toda la vida, nos conocimos durante la primera semana del primer año del jardín de niños, son los que aún conservo y que son para toda la vida, sólo Pepe llegó después.

    Desde muy chicos después de hacer la tarea de la escuela, nos pasábamos la tarde en la calle, sobre todo en el parque jugando futbol, o en casa de Salvador viendo la tele, yo era uno de los que me metía a cenar más temprano, por lo regular a las siete de la noche, si no había problemas. Todo esto fue cuando México era un lugar seguro, cuando uno podía estar tranquilo en la calle jugando a cualquier hora sin ningún peligro.

    Fue durante el verano de 1974 a los trece años de edad cuando nos vimos por primera vez, recuerdo con claridad una tarde entre semana después de la escuela caminando con Daniel y Salvador cuando pasamos sin saberlo frente a su casa, íbamos a conocer a la nueva novia de Salvador que vivía en el mismo andador a tan sólo unas cuantas casas adelante de la de Sonia.

    Ella estaba parada frente a la reja de su casa platicando con Eliuth, en esos días su mejor amiga, sólo nos vimos, pasamos de largo y nos detuvimos a platicar casi enfrente de ellas con varios amigos de Daniel y de Salvador que en ese momento me presentaron, era la primera vez que yo estaba en esa parte de la colonia, momentos después llegó Jaime, el hermano de la novia de Salvador y también lo presentaron conmigo. Platicando con él, ya con cierta confianza, le pregunté quién era ella porque no podía quitarle los ojos de encima y quería que me la presentara, su respuesta fue tajante, no quiso, lo cual no me molestó ni le tomé mucha importancia, había tiempo.

    No sé bien cómo comenzamos a hablarnos, pero nos identificamos casi de inmediato; a partir de ese momento nos la pasábamos viéndonos casi todos los días, cuando llegaba a mi casa en la noche, corría al teléfono a hablarle y nos pasábamos horas platicando como si no nos hubiéramos visto en todo el día hasta que su mamá o la mía se daban cuenta y nos hacían colgar el teléfono.

    Estar con ella era distinto a estar con cualesquiera de mis amigos o con alguna otra amiga, no sólo era atracción física o sexual, sino había algo más, difícil de describir, incluso hoy en día.

    Tiempo después de conocernos llegó a vivir a la colonia Ariel, que era mayor que nosotros, e inexplicablemente para mí se hizo novio de Sonia, pero esto no importaba ya que seguíamos viéndonos casi todo el día, estábamos de vacaciones escolares. A veces daba la impresión de que Ariel, sin decir nada, se molestaba porque pasábamos mucho tiempo juntos, por lo que con frecuencia para evitar verlo, discretamente nos escapábamos toda la tarde y nos íbamos al parque de los Dos Conejos, parque al que difícilmente íbamos todos por estar relativamente retirado de los andadores, nos pasábamos horas los dos solos, nos besábamos, jugábamos, platicábamos de mil cosas, a veces Sonia sacaba una botella de la cantina de su papá y nos la llevábamos.

    En ese entonces teníamos un juego entre nosotros en el que si alguien conservaba un boleto de camión o trolebús y su número de serie sumaba 21 lo podíamos cambiar por un beso en la boca con cualquiera de nuestras amigas y ellas de igual forma con nosotros. El primer beso que le di a Sonia fue por un 21, pero antes, después de negociarlo mucho tuve que aceptar primero cambiar uno con Eliuth, la cual, aparte de que era bastante fea sin importar su buen cuerpo, siempre me desagradó.

    El beso que me dio Eliuth en verdad fue horrible, literalmente me tomó por sorpresa, se me echó encima y sin ningún preámbulo, metió por unos momentos su lengua dentro de mi boca, botándola casi de inmediato a un lado de mi, la sensación había sido muy desagradable, el sabor igual, fue como haber tenido por unos segundos un pez moviéndose dentro de mi boca. Después vino el beso de Sonia . . . inolvidable, a partir de ese momento si había 21´s o no, no importaba, nos faltaba tiempo para besarnos.

    Jaime siempre vio mal nuestra amistad, no le gustaba que nos habláramos y menos que pasáramos mucho tiempo juntos, nunca lo dijo abiertamente pero lo hacía notar. Un día, sin que nos diéramos cuenta, Ariel y Jaime decidieron seguirnos hasta el parque sorprendiéndonos, estábamos acostados platicando, besándonos, cuando llegó Ariel primero y en seguida Jaime, el más molesto por supuesto había sido Jaime, a Ariel al parecer no le había importado mucho la escena.

    Pero después de ese día algo pasó, algo hubo que hizo cambiar todo entre nosotros, no lo entendimos sino hasta 26 años después. Sonia cambió totalmente conmigo, estaba cada vez más distante, me evitaba, puso como una barrera entre los dos. No sé si fue por la edad, la falta de experiencia de ambos o no sé por qué pero nunca nos preguntamos qué había pasado con nosotros desde ese día, solamente comenzamos a alejarnos poco a poco, la atracción que Sonia causaba en mí la fui reprimiendo debido a su rechazo, quedando latente.

    Terminamos por separarnos, las cosas ya no fueron como antes, todo estaba mal sin saber por qué, poco tiempo después del incidente Sonia se embarazó y tuvo una niña de Ariel, ya nos veíamos poco, cada vez menos, hasta que acabé por alejarme de ella por completo.

    Me dediqué a estudiar, terminé la preparatoria y luego la universidad, sin poder olvidarla por completo; durante el tiempo que pasé en la universidad fui varias veces a visitarla a su casa, pero cada vez que nos veíamos, continuaba muy distante e indiferente hacia mí, ya no existía entre nosotros la comunicación de antaño, parecía que había olvidado lo bien que la pasábamos juntos y lo mucho que nos identificábamos, era como si el pasado no le importara gran cosa, por lo que decidí sin más complicaciones ya no intentar nada y no volví.

    Al salir de la universidad, como es normal a esa edad mi vida estaba de cabeza, no sabía lo que quería ni tenía muy en claro mi futuro, tampoco me preocupaba mucho. Lo más importante que acontecía en mi vida en esa época era mi novia a la que me dediqué por completo durante más de cinco años. Después de mantener una relación llena de experiencias, todas muy intensas, decidí terminar con ella y para alejarme de todo esto me fui a vivir a provincia, el tiempo pasó, fueron ocho años. Durante esos años, uno lo pasé viviendo en Sonora, otro en Oaxaca y seis en Torreón, Coah., ahí me casé y divorcié; de Sonia ya no sabía nada, sólo era un eventual recuerdo.

    Durante mi vida tuve pocas vivencias que pudiera considerar fuera de lo común o extraordinarias, en la época en que trabajé como G.O. para Club Méditerraneé en Huatulco (Oaxaca), tuve una experiencia Kundalini, no supe qué me había ocurrido en ese momento hasta varios años después.

    Fue durante una noche después de la inauguración de un restaurante en el pueblo de la Crucecita cerca de Huatulco, varios G.O.´s fuimos invitados al bar de un amigo que acabábamos de conocer en ese evento, el bar era una palapa que estaba junto al mar, en la playa de Chahué, no muy lejos de ahí.

    La reunión prácticamente era para nosotros y para el personal que trabajaba en la palapa; ya tarde, espontáneamente y sin que nadie lo notara, me separé de la reunión, me llevé un banquito de madera del bar y lo puse en la playa, donde reventaban las olas, el mar estaba muy tranquilo y en el cielo no había una sola nube, sólo estrellas, tampoco había luna pero la noche era muy clara; me quedé sentado mirando el mar, las montañas, el cielo, sin ningún pensamiento en especial, abstraído totalmente como formando parte de aquel lugar.

    No se cuánto tiempo llevaba sentado sobre el banquito sólo observando el paisaje cuando comencé a notar un ligero calorcito bajo el asiento del banco, era como si hubiera una llamita debajo de mí que iba creciendo poco a poco. Así estuve por un rato, casi sin hacer caso a esta extraña sensación de calor que iba en aumento, hasta que esta especie de calor comenzó a volverse molesto, pero yo seguía cada vez más inmerso en todo ese espectacular cuadro sin importarme nada.

    Cuando caí en la cuenta de querer saber qué estaba pasando debajo del asiento del banco, de qué cosa era lo que se estaba quemando debajo de mí porque comenzaba a ser insoportable no pude moverme, estaba paralizado, en ese momento sentí que ese calor comenzaba a subir por mi espalda, envolviendo mi columna vertebral, era una sensación eléctrica, luminosa. Era como tubo de luz amarilla que continuó subiendo a lo largo de mi espalda, pasó por mi cuello, subió por la parte trasera de mi cabeza llegando a la frente, envolvió la totalidad de mi cerebro y se concentró en la parte media de éste, cuando todo ese torrente de energía acabó de concentrarse hubo una especie de explosión y en ese momento todo se tornó dorado, el mar, el cielo, las montañas, el aire, todo era dorado, yo sentía que continuaba sentado en el mismo lugar pero a la vez no, era el mismo lugar pero diferente.

    De repente comenzó a llover, eran gotitas doradas, ligeramente oscuras, transparentes y algo viscosas, como gotitas de miel que me fueron cubriendo, caían sobre mi cabeza, llenaban mi cara, mi boca, los brazos, caían en el mar, en las montañas, en todos lados, su sabor era ligeramente dulce, distinto a la miel; perdí la noción de todo, la sensación es difícil de escribir, era como si en esos momentos formara parte del paisaje, de todo lo que me rodeaba, estaba completamente integrado a todo . . . dentro de todo.

    No sé cuánto tiempo estuve así, de pronto como en un salto repentino de una escena a otra, estaba otra vez de regreso, todo permanecía igual, como si no hubiera pasado nada, la reunión a lo lejos aún continuaba sin mí; después de unos minutos, ya recuperado de la impresión, decidí volver con todos, nadie había notado mi ausencia y no le comenté a nadie nada de lo que acababa de sucederme.

    -Kundalini es una palabra sánscrita que significa la que está enrollada, metáfora de la serpiente que se encuentra enrollada sobre sí misma en la base de la columna vertebral, lo que significa que en la base de la espina dorsal de cualquier persona existe una energía potencial que suele descomprimirse y que cuando ocurre es un proceso energético en el que la persona pasa por diversos estados de ser y de conciencia.

    La liberación de esta energía puede ocurrir básicamente en personas que practican técnicas de meditación y saben más o menos lo que sucede y en personas a quienes les pasa de manera espontánea ignorando las causas (21).

    Dos años más tarde, después de haber dejado el club y ya viviendo en Torreón, extrañamente, me casé. Actualmente si alguien me pregunta por qué lo hice no sé qué contestar, simplemente no sé por qué me casé. Durante ese tiempo, comencé a notar que al acercarme a las plantas que tenía en la casa respondían a mí, tenían cierto movimiento al acercar la mano, los dedos, etc. aún así era algo que consideraba casi sin importancia, una especie de dato curioso.

    Un día del que no recuerdo la fecha o tal vez no quiero recordar, ya viviendo en Torreón, Coah., a un par de meses antes de casarme, supe que mi antigua novia había muerto en un accidente automovilístico, un choque en una madrugada en el que murió ella sola.

    Hasta ese momento yo creía haberla olvidado totalmente, pero me di cuenta de que no era así, al conocer esta noticia nació en mí un raro sentimiento de culpa que duró varios años, tal vez por cosas y situaciones que quedaron inconclusas entre nosotros y que de alguna manera debimos de haber resuelto tiempo atrás.

    Durante ese periodo, no supe exactamente cuándo ni cómo, pero a partir de unos meses después de su muerte comenzamos a mantener una especie de comunicación a través de un estado similar al del sueño, en donde con cierta regularidad tratamos de aceptar y solucionar las cosas que habíamos dejado pendientes entre los dos así como el perdonarnos mutuamente algunas otras situaciones un tanto dolorosas para ambos ocurridas durante nuestra relación, proceso que aún no logramos concluir del todo.

    Normalmente es difícil aceptar la muerte por muy natural que sea, pero es más difícil aún aceptar la muerte de alguien, sobre todo alguien muy joven y que aún se siente muy cercano, alguien a quien se quiso demasiado. En el momento en que uno se entera de este desagradable suceso, se vienen a la cabeza muchas cosas, muchos hubiera, muchos sentimientos encontrados, muchas dudas; nace la necesidad y a veces la obsesión de saber en dónde se encuentra esa persona, qué fue lo que pasó, si está bien, por qué se fue, etc. tal vez esas fueron algunas de las razones principales que me llevaron por mucho tiempo a buscarla de distintas maneras.

    Por principio de cuentas y sin siquiera pensarlo, deseché por completo cualquier teoría o explicación religiosa y me dediqué a buscar todo lo relacionado con la muerte, la vida después de la vida, la reencarnación y las vidas pasadas, leí, o más bien devoré todos los artículos, revistas y libros relacionados con estos temas hasta que logré cierta tranquilidad y por fin comencé a entender algo de ese proceso y sobre todo empezó a interesarme cada vez más.

    Como agrónomo en provincia, me dediqué por un par de años al diseño y mantenimiento de áreas verdes y ocho años a la producción de plantas de invernadero y a la asesoría de cultivos hasta su cosecha. Después de una de esas raras y frecuentes crisis económicas del país y el difícil trato con los campesinos y la gente de ese medio comencé a hartarme, me hacía falta la ciudad, la contaminación, mis amigos, no tanta tranquilidad, por lo que empecé a contemplar la posibilidad de dejar todo y regresar a la ciudad de México.

    Mi matrimonio puedo definirlo como un poco intrascendente, durante ese periodo solamente ocurrió algo que puedo considerar como una pequeña introducción tanto a los procesos

    ¿Disfrutas la vista previa?
    Página 1 de 1