LOS FAMOSOS TVyN
Charlar con Eugenia León es un verdadero agasajo. Tantas vivencias, tantas anécdotas; tantos tropiezos y tantos éxitos recolectados a lo largo de su carrera, aunque, admite, nunca estuvo preparada para llenar los zapatos de una estrella; no tanto como lo está ahora que renuncia en definitiva al amor tras malas experiencias con hombres que terminaron pagándole mal.
“ASÍ QUISE QUE FUERA MI CARRERA; ACEPTÉ MI MEDIOCRIDAD”
Qué bonitos eran los años ochenta y noventa…
Sí, éramos bien divertidos, unos locochones. No sé si extraño, me he ido adaptando; no he sido tam poco del mainstream de la discografía, no he sido una gran vendedora de discos. Creo que me inscribo más en cantantes de culto…
Pero tienes álbumes muy icónicos, como Cosa de dos; vendió lo que quiso…
Sí, vaya, pero no he sido constante. Pienso en una Yuri, que desde el principio hasta estos tiempos, ha sido toda una estrella.
La construyeron como estrella. Tú eres más de culto, más de nicho… ¿Estás consciente de que esa era la carrera que querías?
Sí, así la quise. La verdad es que no tengo carácter… La gente piensa que me traían como loca; se vendieron muchos discos y llegaba a despertarme en un hotel y no sabía dónde estaba; o sea, volteaba para acá y volteaba para allá. No me acuerdo de las parejas, de esas ni quiero hablar, pero no tenía yo con quién compartir y yo me acuerdo llegara mi casa a llorar y decir: “¡Me siento tan sola!”. Cuando ya te aplaudieron, te dijeron cosas bonitas y te sientes sola, es bien raro.