El Gran Maricón
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Novela corta de ficción que narra las peripecias a las que se ve sometido un homosexual, para vivir su mentira, a la que se ve obligado por la sociedad, que aunque ha cambiado mucho en su grado de tolerancia hacia ese colectivo, aún siguen siendo objeto de burla, vejación o represión. Negándose a "salir del armario", por las consecuencias socio-laborales que repercutirían en su persona. Aunque alguno, después de vivir esa lucha agónica durante el tiempo que necesite para asumir su condición ante los demás con naturalidad, haya tenido que "usar" a otras personas, arrepintiéndose del daño causado por su cobardía.
A. Toledano de Diego
Mi vida ha transcurrido entre dos continentes, Europa y América, Madrid (1958) España y Rio de Janeiro (1966-1977) Brasil. Fruto de la emigración de mis padres, habiendo vivido parte de mi infancia y adolescencia allí. Siento un gran orgullo de expresarme en este maravilloso idioma llamado español. Ya que es un bien que atesoramos todos sus hablantes, frente a la pujanza de los medios en inglés. Presente en los cuatro continentes, mantenerlo vivo y fuerte es algo que, nos corresponde como entidad de todos los hispanohablantes. Cada día hay más interés por su aprendizaje donde cada vez hay más número de hablantes en el Mundo. Me entristece que es una pena que muchos hispanohablantes de los EEUU, se sientan acomplejados y se avergüencen de mantener su entidad, al punto que hay padres que solo les hablan a sus hijos en inglés. Como si quisiesen desterrar cualquier rastro que les identifique como hispanos. Como si fuesen ciudadanos de segunda categorí a los que se expresan en nuestra lengua en aquél país. Cuando justamente deberían estar orgullosos de hablar uno de los idiomas más ricos de la literatura universal. Y tampoco olvidar que más de la tercera parte de los EEUU, fue territorio hispano. Siempre sentí interés por escribir, pero por diferentes avatares de la vida lo fui posponiendo, como forma de plasmar mis ideas, pero ahora ha llegado el momento de dar rienda suelta a la fluidez de ideas, dejándolas escritas.
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El Gran Maricón - A. Toledano de Diego
El Gran
Maricón
Aurelio Toledano de Diego 2016
Primera edición Noviembre 2016
Diseño de la portada ATdD
Registro de la Propiedad Intelectual 09-RTPI-08628.6/2016
Depósito Legal M-42361-2016
Todos los derechos reservados
Ninguna parte de esta obra puede ser reproducida o transmitida de manera alguna, sin previo consentimiento del autor.
Hecho e impreso en Madrid – España
Este libro ha sido escrito de manera espontánea, tal como fluían las ideas, sin ser escrito por
un negro, ni maquetado ni pasado por un revisor ortográfico. De forma que todos los errores que puedan hallar en él, deberán quedar supeditados a la frescura de la escritura
.
Prólogo
Esta es una novela corta, que aborda la hipocresía, prejuicios y complejos que hay sobre la homosexualidad. En que más de uno se ha visto obligado por distintos motivos a no salir del armario
. Y los que finalmente han llegado después de mucha lucha, a asumir su condición de salir del armario
a pesar de la brutal represión que la sociedad ha ejercido contra este colectivo.
Felizmente soplan cada día mayor cantidad de vientos con fuerza, para asumirla con naturalidad. Y no que los de su condición se tengan que ver objeto de burla, escarnio y vejación por los demás.
Llegará un momento, en que, haciendo una retrospectiva, nos daremos cuenta de que retrógrados éramos en el pasado, con todo lo que tuviera que ver con la homosexualidad.
De forma que asumiremos que son personas totalmente naturales e iguales que los demás, no extraterrestres como han sido vistos hasta ahora por algunos. Lo que contribuirá a que vivamos en total armonía homosexuales o heterosexuales, sin ser señalados ni discriminados por tal o cual condición.
Madrid, 30 de Noviembre 2016
A. Toledano de Diego
La llegada
Hoy hemos tenido una sorpresa en la empresa, nos hemos encontrado con un nuevo compañero de trabajo, se llama José de Arellano, tiene apellido de abolengo. Es el nuevo ingeniero informático que ha contratado la empresa, ante las necesidades crecientes de ésta. Es apuesto, con un aire de guapetón, cosa que no ha pasado desapercibida para las féminas del trabajo. Que ya se les nota cuchichear sobre el mismo.
El jefe de personal, nos lo ha presentado, resultando ser una persona agradable. Que por cierto nos ha dicho, para los íntimos soy Pepín, cosa que ya lo sois para mi vosotros.
Las miradas inquisidoras hacia su persona son unánimes entre las compañeras del sexo femenino. Que no dejan escapar prenda de escudriñarlo de arriba abajo. Con ese porte elegante que tiene. Me da la impresión que más de una llegará a las manos si es necesario, con tal de ganárselo. Su sitio va a ser una pequeña sala preferente, como aislándole de los demás mundanos, que trabajamos juntos en una gran sala.
Algunas compañeras no disimulan el que se lo comen con los ojos, como diciendo…que buenorro está. Al fin es el prototipo estándar de las mujeres, ya que es muy alto, delgado, de pelo rubio y unos ojos azules que parecen de añil. Esas cualidades, unidas a que es elegante, guapo e ingeniero; hacen de él un bocado tentador. Se instala en su sala para organizar su lugar de trabajo. Como es obvio, Gertrudis aprovecha una excusa, para meterse en su sala y tener la oportunidad de sonsacarle algo.
-Hola Pepín, me permites tutearte, ¿no?
-Pues claro que si encanto.
Como es obvio Gertrudis, talludita como es, se ha derretido ante tales palabras. Tornándose amabilísima con él, cuando los que la conocemos, sabemos que es un cardo borriquero de cuidado. Yo desde mi mesa de delineante industrial, contemplo con buena perspectiva, lo que se va cociendo en el ambiente.
Almudena, el bellezón de la empresa, no tarda en dejarse caer por su oficina. Donde se observa que le está comiendo la oreja
descaradamente.
-Pepín, si no tienes compromiso al salir, me gustaría poder tomar un café contigo, para conocernos.
- Claro mi vida, al salir nos tomamos ese café.
Las correligionarias del trabajo, con el oído avizor, a pesar de la distancia, han captado la situación y parece como si les corroyese la envidia.
Llega la hora de salir y Almudena y Pepín, salen agarraditos del brazo como si se conocieran de toda la vida.
Lo que provoca que se perciban centellas en los ojos de las susodichas de la empresa. Como diciendo, ya se ha salido con la suya esa fresca.
Con ese caminar altivo y elegante Pepín va departiendo con
Almudena, mientras caminan a la cafetería de al lado de la empresa. Como es obvio y siguiendo el guion, Almudena empieza a freírle con el empadronamiento
de turno.
¿De dónde eres Pepín?
Soy de Pamplona, ¿y tú?
Yo soy andaluza, de Granada, aunque llevo muchos años fuera de mi tierra.
Entonces es por eso que casi no se te nota el acento andaluz.
¿Cuál es tu labor en la empresa, Almudena?
Yo soy secretaría de dirección de Don Primitivo. El gerente de la empresa.
¿Estás casado Pepín?
No maja, ¿y tú?
Tampoco, no he tenido suerte con los hombres, aunque tú Pepín, has debido de tener muchas novias, ¿no?
No te creas eh.
A saber, cuántos corazones de buenas mozas habrás destrozado.
Jajajaja…te equivocas hermosa.
Si, si, disimula bien que se te nota que con ese don de gentes que tienes, has debido volver loca a más de una.
Las cosas surgen cuando tienen que ser, le dice Pepín.
Si, en eso tienes razón, las cosas no se pueden forzar, le dice Almudena.
Una vez finalizado el empadronamiento
por parte de Almudena, se disponen a salir de la cafetería, no vaya a ser que a Pepín se le vaya a hacer agobiante el somero interrogatorio al que le ha sometido Almudena. Y ella experta en esas lides, sabe que hay que ir despacio, para que no ponga los pies en polvorosa Pepín.
Al día siguiente. las lobas
están esperando a que llegue Almudena, para ser sometida a un intenso interrogatorio, de cómo le ha ido con Pepín.
-¿Qué tal Almudena?, se te nota radiante.
-Pues sí chicas, porque ayer estuve tomando un café con Pepín y es todo un caballero, muy amable y atento conmigo en todo momento.
Lo que provoca que con el subconsciente se la coman, de pura envidia. Como pensando, menuda suerte ha tenido esta zorra. Sin perder chance, siempre que se tercia, alguna intenta llevárselo al huerto
.
Pero el tipo resulta duro y no lo consiguen, cosa que acentúa aún más el interés de estas, ya que es un reto, la que se lo consiga llevar.
Pero Pepín resulta un buen driblador y consigue irse zafando de todas ellas. Cosa que las vuelve locas, al ver su ego acentuado de