Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Solo $11.99/mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

Accidentalmente Casada con un Millonario (Parte 1)
Accidentalmente Casada con un Millonario (Parte 1)
Accidentalmente Casada con un Millonario (Parte 1)
Libro electrónico132 páginas2 horas

Accidentalmente Casada con un Millonario (Parte 1)

Calificación: 4 de 5 estrellas

4/5

()

Leer la vista previa

Información de este libro electrónico

El millonario, Brandon Cates, está a punto de perderlo todo: desde su fortuna hasta su gran empresa.

Su única esperanza es Marjorie Reynolds.

El Director de Operaciones ha huido para dirigir la llamada fusión, un nombre bonito para definir una adquisición. La empresa conseguiría mantener su nombre y su marca bajo la seguridad de Power Regions Ltd. Probablemente, sería dirigida por un nuevo ejecutivo. Pero la fecha de caducidad de Brandon Cates está llegando y el juego está a punto de cambiar. Había fallado en intentar cambiar los términos del testamento, por lo que su malvada madrastra lo iba a adquirir todo. Lena Cates tenía un equipo de abogados a su alrededor como buitres. Para mantener el control, Brandon tenía que estar casado en su treinta cumpleaños.

Cuando una borracha Marj Reynolds escucha su historia en una discoteca en Las Vegas, se les ocurre una idea loca que puede funcionar. Marj no se puede creer que haya aceptado una proposición así. Pero sabe que le dará a Brandon las llaves de su millonario reino. Marj lo hacía por luchar contra la opresión y la injusticia. Rechazaba que ganara la malvada madrastra, o como ella la llamaba la malvada reina. Porque si esta malvada reina ganaba, Marj perdería su trabajo también. Y ya tenía suficientes deudas. Brandon está seguro de que la tiene en el bolsillo.

O eso cree…

¿Podrá Brandon convencerla de que siga con el papel de ser su nueva mujer?

Algunos lectores puede que ya conozcan a Marjorie Reynolds del libro El Hijo del Jefe: https://www.amazon.es/hijo-del-jefe-Sierra-Rose-ebook/dp/B01LMH1PBC

Ahora Marj tiene su propia trilogía. Para mayores de 18 años debido al contenido sexual.

 

IdiomaEspañol
EditorialBadPress
Fecha de lanzamiento14 abr 2018
ISBN9781547525607
Accidentalmente Casada con un Millonario (Parte 1)

Relacionado con Accidentalmente Casada con un Millonario (Parte 1)

Libros electrónicos relacionados

Romance contemporáneo para usted

Ver más

Artículos relacionados

Comentarios para Accidentalmente Casada con un Millonario (Parte 1)

Calificación: 4.2 de 5 estrellas
4/5

15 clasificaciones1 comentario

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

  • Calificación: 5 de 5 estrellas
    5/5
    Excelente libro me encanto no puedo esperar el tercero ya lo busqué pero no esta

Vista previa del libro

Accidentalmente Casada con un Millonario (Parte 1) - Sierra Rose

Capítulo 1

Marjorie Reynolds llamó a la puerta de su anciana vecina. Vivían en el mismo edificio y habían sido amigas durante años. Marj había ido a comprarle algunas cosas. Cuando María abrió, sonrió.

–Gracias. –dijo ella, saludando con la mano.

Marj le sonrió.

–No es nada. Te he cogido las medicinas también.

–Gracias, cielo. Veo que te has acordado de la comida del gato. –dijo acariciándole la cabeza a su gato mientras él soltaba algún maullido.

– ¿Cómo me iba a olvidar de Cuddles?

–Eres un cielo. ¿Qué haría sin ti? Mis seis hijos se han independizado y se preocupan muy poco por mí, y yo no puedo conducir a ningún lado. Pero tú siempre has estado aquí para mí. Siempre. Eres mi guardaespaldas, la versión femenina, por supuesto.

Marj puso las bolsas en la mesa.

–Me tomaré eso como algo bueno, como que tengo que luchar contra los malos. Siempre que yo no sea la damisela en apuros.

–Creo que las dos sabemos que eres una mujer muy independiente.

Marj sonrió y le ayudó a sacar la verdura, después jugaron a las cartas.

–Te tengo que presentar a mi nieto. Él es mi...

–Estrella. –acabó Marj.

–Espera. ¿Hemos tenido esta conversación antes?

María estaba empezando a desarrollar demencia y eso le preocupaba a Marj. Era una persona tan amable y maravillosa. Siempre tenía una sonrisa en la cara y le hacía reír.

–Sí, cielo. Hemos tenido esta conversación antes. Incluso, salí con tu nieto Michael hace unos meses.

–Oh, es verdad. Te robó. Te quitó el dinero del alquiler. Lo siento tanto. Ahora está metido en temas de drogas. Pero solía ser un chico muy bueno.

–Está bien. No fue tu culpa. –aseguró Marj.

–Es muy guapo.

–Mucho. Pero no muy estable.

María dejó escapar un gran suspiro y Marj sonrió, dejándole ver que eso había sido un incidente del pasado.

– ¿Qué pasó entonces con el chico guapo en Starbucks? –preguntó María. –El que se parecía al de Crónicas Vampíricas. Y no. No soy muy mayor para ver esa serie. Puede que tenga ochenta, pero aún me gustan los tíos buenos, con piercings y ojos azules. Mi corazón es muy joven.

Marj se rio con ganas.

–De todos modos, me enteré de que estaba casado.

– ¿De verdad? –se pasó la mano por la barbilla. – ¿Y el tío ese grande, musculado que siempre veíamos corriendo? El que te sonreía cuando estaba todo sudado y caliente.

–Es gay.

– ¡Sabía que era demasiado guapo! –soltó.

Marj se rio.

– ¿Y el soñador rubio de la tienda de libros?

–Resulta que estaba quedando con otras tres clientas.

–Oh, qué cabrón.

–Sí. Llevo buscando por el Señor Correcto, pero me sigo decepcionando con los hombres que conozco. No creo que haya un Príncipe Encantado o un caballero con armadura brillante para mí.

–Seguro que sí. –dijo señalando la foto de ella con su marido. –Yo encontré al mío y estuvimos felizmente casados durante cincuenta años antes de que se muriera.

–Espero ser tan afortunada como tú algún día.

–Lo serás. ¿Qué tal esa página de citas, Blender? ¿Está ayudando?

–Tinder. –le corrigió Marj riendo. –He conocido a mucha gente genial, pero nadie con quien quiera quedar.

–Bueno, estoy segura de que encontrarás el match perfecto en Blender.

–Tinder.

–Como sea. No te fijes solo en los guapos porque esos son los que dan problemas. ¿Qué buscas en tu perfil?

–Alguien que parezca que quiere hacer cosas divertidas, y definitivamente, alguien que me haga reír.

–Tal vez, deberías quedar más para tomar cafés. Hablar mucho online no es natural. Conocer a alguien cara a cara es como hay que hacerlo. Si no funciona la cosa, siempre te quedará un nuevo amigo.

–Sí. Son una gran práctica para cuando aparezca mi alma gemela. Ir de citas es toda una aventura.

–Las citas online han cambiado el juego, sin duda.

– ¿Para mejor o para peor?

–Creo que hacen el proceso romántico forzado y deshumano. ¿Por qué no conoces a un buen hombre en la iglesia?

–Creo que me voy a centrar en mi carrera y en mi nuevo trabajo. –dijo dejando algunas cartas sobre la mesa.

María dejó más cartas.

–Sí, deja que el amor venga de forma natural. Sé que has dicho que es divertido y excitante, pero creo que los encuentros casuales son lo mejor.

–Tengo que admitir que es agotador mantener las mismas conversaciones todas las noches. Es como si me estuvieran entrevistando sin descanso. Como si todos los días fuera la primera cita. ¿Cómo pueden buscar estos tíos una relación seria?

–Creo que lo que quieren es un polvo rápido.

Las dos se rieron con ganas.

Capítulo 2

Marj no debería haber estado pensando en el bronceador en espray. Debería haberse centrado en orientarse en su nuevo trabajo. Aun así, se había echado unos diecinueve botes de bronceador en las piernas para salir de casa como una supermodelo. Así que, en vez de estar escuchando al formador de PowerPoint, Marj estaba obsesionada con lo bonitas y largas que se veían sus piernas bronceadas, aunque no pegaban mucho con la falda que se había puesto. Demasiado para intentar parecer profesional en su primer día, pensó.

Tenía suficiente con la deuda del préstamo de estudiante que no había pensado con tranquilidad.  Qué desperdicio, pensó con irritación. Había querido parecer sexy y como si hubiera estado de vacaciones en la playa, en vez de alguien que solo iba al Starbucks una vez a la semana, por razones de presupuesto. Ella estaba en márquetin por negocios, pero su alma era de contable, o eso le había dicho su amiga Britt, que sí era contable. Corrección, su mejor amiga Britt, la contable que se había acabado casando con un millonario. Marj suspiró, posiblemente en alto, porque el profesor le echó una mirada antes de pasar a la siguiente diapositiva.

Marj sabía que todas las empresas pensaban que eran muy especiales y que tenían que construir la cultura con muchos procedimientos de formación, pero, francamente, ella era buena en márquetin y sabía cómo había que hacerlo sin toda esa formación. Era un reto dejar el móvil en el bolso. Quería comprobar sus redes sociales y ver si había habido algún cambio en su cuenta de Tinder. Aunque estaba perdiendo la confianza en las aplicaciones de citas. No había conocido a nadie medio decente desde que ella y Luke cortaron. Y por cortaron quería decir desde que él se tiró a su secretaria.

Se obligó a tomar notas, aunque no tenía ninguna intención de mirarlas luego. Marj escribió nombres de competidores, que ya conocía, y anotó que el actual Director de Operaciones había sido el líder de una multinacional con sede fuera de Londres. Si esto solo era prepotencia o si era algo real del nuevo mánager, no estaba segura. La cosa era que deseaba tener un nuevo Director de Operaciones por una simple razón. En su anterior trabajo, antes del fiasco de Luke, la Consultoría Creativa había sido adquirida por el grupo Fitzsimmons, que incluía a nuevo Director de Operaciones que estaba muy bueno y que se había acabado enamorando de Britt. Así que, si tuviera un nuevo ejecutivo, quizá estaría buenorro o tendría algún pariente soltero que quisiera conocer a una chica cansada pero bien formada en márquetin.

Hasta que el hipotético Millonario Encantador (mucho más deseable que un simple Príncipe Encantador) apareciera y le hiciera feliz, estaba atada a otros treinta años de objetivos demográficos. Intentaba no mirar a sus piernas. Le molestaba tanto cómo quedaba ahora lo que se había echado.

Cuando el curso de entrenamiento acabó, se bajó a la entrada del edificio y comprobó el teléfono. Una llamada perdida de Britt. Había estado intentando contactar con Britt durante dos días, pero no lo había conseguido. Britt estaba de viaje con su marido, el adorable millonario de la banda. Como no era lo suficientemente perfecto, escribía canciones sobre ella y las tocaba con la guitarra mientras tenía más dinero que la mayoría de las naciones de América Central. Era difícil no sentir amargura por la unión de Britt y Jack, pero Marj hacía lo que podía. Porque quería a Britt y un hombre realmente perfecto era la única solución, porque nadie más se la merecía. Quería que Britt fuera así de feliz. Simplemente quería que Jack tuviera algún hermano igual de bueno para ella.

En realidad, tenía un hermano, pero eso no había salido bien con Marj. Habían ido a cenar y parecía que la cosa avanzaba hasta buen puerto, hasta que se fue y se casó con otra chica. Marj tendría que ir de caza lejos de la familia política de su mejor amiga para encontrar pareja.

Empezaba a pensar que el romance y los finales felices no eran para chicas como ella. Britt era un cielo, sin mencionar lo fiel y responsable que era. Así que no es que estuvieran compitiendo por los mismos hombres. Había tipos de hombres, claramente. Y alguien que quisiera la dulzura de Britt no se habría fijado nunca en alguien como Marj.

Marcó el número de Britt, y su amiga contestó a la primera.

– ¡Hola,

¿Disfrutas la vista previa?
Página 1 de 1