El viento comenzó a mecer la hierba
Por Emily Dickinson
4.5/5
()
Información de este libro electrónico
Como señala Juan Marqués en la presentación, sus poemas «además de ser escritos, en principio, exclusivamente para la inmensa minoría de sí misma, fueron, a un tiempo, complicadísimos y simples, alegres y tristes, transparentes y enigmáticos. Son poemas que acompañan y ayudan a vivir a quien los lee, que enseñan a observar mejor, que obligan a ser más compasivo».
Emily Dickinson
Emily Dickinson was an American poet. She was born in Amherst, Massachusetts, into a prominent family with strong ties to its community.
Relacionado con El viento comenzó a mecer la hierba
Libros electrónicos relacionados
El viento comenzó a mecer la hierba Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Cartas de Emily Dickinson: un campo minado Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPreferiría ser amada Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Poemas a la muerte Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Cielo desnudo Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Poesía completa Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La asesina rubia Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Canción negra Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Ariel Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Tres mujeres Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Emily Dickinson: Un estudio de poesía en traducción al español Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCorreo literario Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa poesía temprana de Emily Dickinson: El primer cuadernillo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa poesía temprana de Emily Dickinson: Cuadernillos 2 & 3 Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLas grandes mujeres Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Las hijas de Blossom street Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Flush Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Escritos: Imágenes de género Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Niño de piedra con delfín Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa poesía temprana de Emily Dickinson. Cuadernillos 4, 5 & 6 Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPoesía no completa Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Hojas de hierba Calificación: 3 de 5 estrellas3/5La caja de los deseos Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEmily Dickinson: Oblicuidad de luz (95 poemas) Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa poesía temprana de Emily Dickinson. Cuadernillos 9 & 10 Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPoemas de Currer Bell Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La belleza oculta de las palabras cotidianas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa extensión de mi cuerpo Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Transformaciones Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesKew Gardens: y otros cuentos Calificación: 4 de 5 estrellas4/5
Ficción general para usted
Poemas de amor Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Meditaciones Calificación: 4 de 5 estrellas4/5EL PARAÍSO PERDIDO - Ilustrado Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Crítica de la razón pura Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Esposa por contrato Calificación: 3 de 5 estrellas3/5La Ilíada Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Vaya vaya, cómo has crecido Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La Divina Comedia Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La casa encantada y otros cuentos Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Animales mágicos Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La Ilíada y La Odisea Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Fortuna Calificación: 5 de 5 estrellas5/5¿Cómo habla un líder?: Manual de oratoria para persuadir audiencias Calificación: 5 de 5 estrellas5/5100 cartas suicidas Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Crimen y castigo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El libro de los espiritus Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Arsène Lupin. Caballero y ladrón Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La Iliada: Clásicos de la literatura Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Las 95 tesis Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Cartas Filosoficas de Séneca Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El mito de Sísifo de Albert Camus (Guía de lectura): Resumen y análisis completo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Rebelión en la Granja (Traducido) Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El verano en que mi madre tuvo los ojos verdes Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La riqueza de las naciones Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La llamada de Cthulhu Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Poesía Completa Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El Principito - (Anotado) / (Ilustrado): Incluye ilustraciones / Dibujos Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Mañana y tarde Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Grandes esperanzas Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El mercader de Venecia Calificación: 4 de 5 estrellas4/5
Categorías relacionadas
Comentarios para El viento comenzó a mecer la hierba
11 clasificaciones0 comentarios
Vista previa del libro
El viento comenzó a mecer la hierba - Emily Dickinson
Goicolea
PRESENTACIÓN
La poesía, dicen, es la memoria del mundo. Sin ella, añaden, no seríamos capaces de comprender bien el pasado, no sabríamos cómo se ha constituido el presente y estaríamos completamente indefensos ante las puertas del futuro. La verdadera poesía, aseguran, no sólo debe servir para agitar el planeta sino que de hecho no ha dejado de sacudirlo durante siglos y ha forzado o acelerado grandes cambios. Al parecer la poesía, aunque nadie la lea, penetra en las conciencias y en las naciones y da enérgicos empujones a la Historia, inventa y derriba dioses, funda y destruye regímenes políticos, declara guerras y mueve montañas… Y lo cierto, sin embargo, es que los más sublimes y profundos poemas que se escribieron en un siglo tan aparatoso, tremendista y sobreactuado como el XIX fueron escritos en la pequeña ciudad norteamericana de Amherst por una de las más sigilosas y solitarias mujeres de las que haya quedado noticia.
Además de ser escritos, en principio, exclusivamente para la inmensa minoría de sí misma, los de Emily Dickinson fueron, a