Donde se fabrican los sueños

Por Anabella Corridoni

¿A dónde vamos cuando soñamos? Donde se fabrican los sueños abre las puertas a la fábrica de ilusiones más grande del universo.

Margot es curiosa, le gusta leer y siempre tiene una respuesta para una pregunta que nadie hizo. Pero últimamente le obsesiona saber de dónde vienen los sueños. Está segura de que en algún lugar, en un mundo paralelo, existe un fabricante que - mediante pócimas y recetas - envía sueños al mundo entero. Junto a su hermano Roco - que tiene el talento de conectarse con la naturaleza mejor que con los seres humanos - emprenderán el camino hacia el mundo de los sueños para encontrar al fabricante y solicitarle que envíe el "más perfecto de los sueños para amar niños" a su madre, Leticia Roland, una mujer fría que fuma sin cesar y grita que no soporta a los niños. Donde se fabrican los sueños es una historia de ilusiones, esperanza y aventuras que permite ver a través de los ojos de una niña que es posible encontrar la magia en la vida cotidiana.

• Idioma: Español
• Editorial: Caligrama
• Fecha de lanzamiento: 17 mar 2016
• ISBN: 9788491124221

Anabella Corridoni

Anabella Corridoni nació en Argentina pero desde hace algún tiempo su hogar es itinerante. Desde pequeña su familia la llama "Matilda", en referencia al personaje del libro de Roald Dahl, dado que pasaba horas en la biblioteca de su pueblo regresando a casa cargada con una pesada mochila repleta de libros. Sus estudios en relaciones internacionales la llevaron hasta África donde trabaja en una Misión de Paz de Naciones Unidas. La literatura ha formado siempre parte de su vida. Con el libro Donde se fabrican los sueños realiza su incursión como escritora al mundo de la literatura infantil.

Vista previa del libro

© 2016, ANABELLA CORRIDONI

© 2016, megustaescribir

            Ctra. Nacional II, Km 599,7. 08780 Pallejà (Barcelona) España

Esta es una obra de ficción. Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia. Todos los personajes, nombres, hechos, organizaciones y diálogos en esta novela son o bien producto de la imaginación del autor o han sido utilizados en esta obra de manera ficticia.

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ISBN:   Tapa Blanda           978-8-4911-2421-4

             Libro Electrónico   978-8-4911-2422-1

Contents

Una familia muy especial

Donde se fabrican los sueños

Una visita inesperada

El más perfecto de los sueños golpea la puerta

Sobre el autor

Una familia muy especial

---¿Dónde se fabrican los sueños? ---le preguntó Margot a su mamá mientras volcaba los cereales dentro de su taza de leche.

---¿Qué pregunta es esa? En ningún lugar, los sueños no existen por eso desaparecen cuando te despiertas y luego ya no puedes recordarlos. Mejor que dejes de hacer preguntas inútiles y te apures a servirle el desayuno a tu hermano porque van a llegar tarde al colegio. Lo último que necesito en este día es que los hagan volver a casa por llegar tarde y tener que pasar la tarde entera escuchando tus preguntas extrañas ---Fue la respuesta de su madre mientras encendía el cigarrillo número seis de la mañana.

Es que Margot estaba convencida de que en algún lugar, no muy lejos de su casa, existía una fábrica donde alguien, aún no había descifrado quién, creaba los más extraordinarios sueños a partir de los deseos y miedos de las personas para ayudarlos a conseguir lo que anhelaban. Si no, ¿Cómo se explicaba que justo cuando ella tenía tanto miedo de fallar en su examen de matemáticas soñara todas las respuestas correctas la noche anterior? Alguien había mezclado los ingredientes necesarios para fabricar su sueño y se lo envió exactamente la noche antes de la prueba. Margot estaba segura: mientras ella dormía ocurrían cosas increíbles a su alrededor.

Lo que Margot no podía comprender era por qué el fabricante de sueños no se había ocupado todavía de su mamá. Leticia Roland, la madre de Margot, era una señora alta, muy delgada, casi siempre estaba nerviosa o a punto de gritar, a su alrededor había una constante nube de humo, se podría describirla como una especie de pequeña chimenea ambulante, y no le gustaban los niños. No es que Margot lo sospechara, ella misma se lo recordaba cada día cuando Roco, su hermano menor, demoraba horas en terminar su comida.

--- ¡Por eso detesto a los niños! ¡Están siempre con la mente en otro mundo pensando quien sabe cuantas cosas inútiles! ---gritaba Leticia en medio de una nube de humo y saliva mientras quitaba el plato de la mesa.

Si tan solo el fabricante de sueños mezclara los ingredientes necesarios y le enviara a su mamá el "más perfecto de los sueños para amar a los niños" la vida de Margot cambiaría por completo. Fue en ese momento, mientras se quitaba los restos de leche y cereales que ocupaban ahora el lugar de un bigote, cuando comprendió su misión en la vida: descubrir la ubicación de la fábrica de los sueños para convencer al fabricante de enviar a Leticia Roland el más perfecto de los sueños para amar a los niños.

Esa mañana mientras caminaba junto a su hermano al colegio Margot no podía dejar de reflexionar sobre el inexplicable mundo de los sueños. Roco, dos años menor, corría detrás de su hermana mientras sostenía un paquete de galletitas con una mano y con la otra se sacudía el cabello intentando quitarse el aroma a humo que tanto odiaba y que su madre le impregnaba cada mañana durante el desayuno. Cuando se cansaba de correr