Malicia Maquiavélica: Malicia, #29

Por K'Anne Meinel

Cuando tu vida es un desastre, y estás rodeado de enemigos, ¿cómo combates las probabilidades abrumadoras en tu contra? Alice y Kathy deben enfrentar más que problemas de salud; las precupaciones de la vida y una letanía de agravios se acumulan en contra de ellas. 

• Idioma: Español
• Editorial: Shadoe Publishing
• Fecha de lanzamiento: 12 may 2023
• ISBN: 9798223496731

K'Anne Meinel

K’Anne Meinel è una narratrice prolifica, autrice di best seller e vincitrice di premi. Al suo attivo ha più di un centinaio di libri pubblicati che spaziano dai racconti ai romanzi brevi e di lungo respiro. La scrittrice statunitense K’Anne è nata a Milwaukee in Wisonsin ed è cresciuta nei pressi di Oconomowoc. Diplomatasi in anticipo, ha frequentato un'università privata di Milwaukee e poi si è trasferita in California. Molti dei racconti di K’Anne sono stati elogiati per la loro autenticità, le ambientazioni dettagliate in modo esemplare e per le trame avvincenti. È stata paragonata a Danielle Steel e continua a scrivere storie affascinanti in svariati generi letterari. Per saperne di più visita il sito: www.kannemeinel.com. Continua a seguirla… non si sa mai cosa K’Anne potrebbe inventarsi!

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NOTA DEL EDITOR

Esta es una obra de ficción. Los nombres, personajes, lugares, e incidentes son el producto de la imaginación del autor o se utilizan ficticiamente, y cualquier parecido con personas reales, vivas o muertas, establecimientos empresariales, eventos, o locales es totalmente coincidente.

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MALICIA MAQUIAVÉLICA

LIBRO 29

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Cuando tu vida es un desastre, y estás rodeado de enemigos, ¿cómo combates las probabilidades abrumadoras en tu contra? Alice y Kathy deben enfrentar más que problemas de salud; las preocupaciones de la vida y una letanía de agravios se acumulan en contra de ellas.

Alice se sentó de repente. Había estado soñado, y la pesadilla que casi se la llevó fue de Emily parada frente a uno de los edificios que habían quemado. Le tomó un minuto darse cuenta de que estaban en casa en su cama, y Kathy estaba dormida junto a ella.

Kathy. Por Dios, el día no había ido bien mientras el personal médico la hurgaba y la pinchaba, le hacían radiografías y exploraciones, y le sacaban sangre. No podían entender por qué tenían tantos problemas, y su respiración se estaba volviendo cada vez más irregular a medida que discutían sobre qué tratamiento darle. Ella no había estado durmiendo bien, principalmente porque se habían quedado hasta tarde para llevar la guerra a su enemigo. Anoche había estado demasiado cerca.

Alice se acostó de nuevo mientras pensaba en el incendio del almacén. Habían eliminado una fábrica de drogas, y sabía que Artum haría que alguien pagara por eso. Habían arrojado cientos de miles de dólares en efectivo a las mujeres, y ella esperaba que lo usaran sabiamente, pero también se preguntó ¿cuántas de esas seis mujeres eran adictas a las drogas que habían estado embalando? ¿Cuántas de ellas realmente escaparían de la difícil situación en la que estaba segura de que no habían pedido ser arrojadas? Una o más de ellas probablemente regresarían a la única vida que conocían, y sin duda señalarían con el dedo a las dos mujeres que habían visto con la adolescente.

Dios, Emily habían visto tanto anoche. No había habido respuestas de la adolescente sorprendida sobre lo que deberían hacer con ella. Alice las había llevado a casa a regañadientes, deteniéndose en una gran tienda de cajas para deshacerse de algunas de las pruebas en el SUV, metiéndolas en varios contenedores de basura lejos de la escena del crimen y en lugares donde sabía que no había cámaras. Kathy y Emily quisieron ayudarla, pero Kathy estaba tosiendo demasiado y podría atraer la atención sobre ellas, y Alice estaba tan enojada con respecto a Emily, que le hizo señas de que volviera al SUV. Ella normalmente hubiera llevado el resto de la evidencia a la casa en el valle pero no quería llevar a Emily allí.

Pensó en la amenaza que ese hombre Iggy había hecho contra su hija, su Emily, la hija de su corazón. Ella amaba a Kit también, pero Emily era su sangre. Ella sabía sin duda que esta era su hija de la mezcla única de ella y Kathy. Ella no hubiera permitido que su amada hija fuera llevada a la prostitución y terminara como esas mujeres, esclavas virtuales de... Y fue entonces cuando Alice pensó en la clínica que había salvado a Emily. Casi se sentó de nuevo para despertar a Kathy. Debían llevarla a ver al Doctor Wilkerson.

***

No entiendo por qué esta gente estaba ahí, pero esto era definitivamente una fachada para un laboratorio de drogas, declaró el investigador de la escena del crimen, señalando las ruinas ardientes de un almacén una vez grande. ¿Por qué ese estaba esposado a un escritorio?

"El Departamento de Policía de Los Ángeles, el Departamento de Bomberos de Los Ángeles, la Agencia Antidrogas (DEA), y algunos otros acrónimos, incluido el FBI, estaban todos muy, muy interesados en este incendio –incluso por encima de los otros incendios sospechosos que habían estado investigando últimamente.

***

¿Crees que Alice Weaver está involucrada en esos incendios sospechosos en Los Ángeles? alguien mencionó mientas discutían sus casos actuales.

¿Por qué no? él se encogió de hombros. Ella no está haciendo mucho en línea, señaló la computadora que estaba monitoreando las acciones que Alice estaba comprando en Internet, al menos las que podían encontrar. Las cosas habían estado bastante tranquilas durante mucho tiempo. Lo que no sabían era que eran acciones ficticias, y su propia computadora les estaba dando información falsa. Alice no tenía motivos para invertir más si no quería. Ella tenía suficiente dinero para que le durara el resto de su vida, suficiente incluso para que durara el resto de la vida de sus hijos. Si ella quisiera, su dinero duraría durante varias vidas durante varias generaciones. La cantidad de acciones que compró eran pequeñas en comparación con lo que ya poseía, lo que proporcionaba un ingreso legal que ella podía reivindicar en sus impuestos. Ella había comprado algunas cosas sólo para una condonación. También había comprado algunas acciones sólo para traer dinero al país que ahora podía reclamar.

***

Artum estaba convencido de que era Alice Weaver encendiendo las llamas que le estaban costando tanto dinero. Fue justo después del pedido de ella y su rechazo que estas cosas comenzaron a suceder a sus propiedades, así que él comenzó a investigarla. Leer acerca de la casa que había comprado en Malibú, que ya estaba en el mercado, no le interesó. Pero la casa en Palos Verdes lo fascinaba. Incluso encontró el listado original que decía:

¡Una finca privada en las prestigiosas Fincas Palos Verdes ofrece estilo resort viviendo en su mejor momento! Esta finca aislada cuenta con sensacionales vistas panorámicas del Océano Pacífico desde casi todas las habitaciones de la casa. Una renovación total fue diseñada y completada por el famoso arquitecto Don Hendrickson durante los últimos tres años. Esta renovación es un equilibrio perfecto de refinamiento y estilo de vida resort. Esta finca superará todas sus expectativas, desde el gran atractivo de la vereda y un enorme vestíbulo hasta una amplia sala de estar y comedor formal. También incluye una gran suite principal, cocina gourmet, una fantástica biblioteca, sala multifunción de medios de comunicación y familiar, dos cuartos de personal con su propia cocina/lavandería/comedor. ¡Cancha de tenis para no fumadores con vista al océano, bodega para vino/cigarros, fantástico gimnasio casi al aire libre con su propio baño y dos garajes con espacio para un total de 9 autos! Los terrenos de la línea del parque están profusamente diseñados y rodeados por 3 lados de zonas verdes. ¡Esta es una de las pocas fincas arquitectónicas de estilo contemporáneo en la colina, con grandes ventanas llenas de luz solar y vistas! ¡Por favor no se pierda esta gran propiedad, que tiene tanto para ofrecer!

Él habría enviado a sus chicos a ver la casa pero no quería que se interesaran demasiado en ella todavía. Él sabía la dirección ya que Alice incluso se las había dado para rescatar a Kathy, que ellos habían fracasado con su negativa. Tenía que moverse con calma. No podía dejar que nadie supiera que una mujer lo estaba superando. Y entonces, se le informó que una de las compañías de su holding había sufrido otra pérdida, una de las más grandes hasta la fecha. El laboratorio había ardido con Richard Pasternack y varios de sus guardias dentro. No se mencionaron a las mujeres que tenían trabajando en el laboratorio. ¿Cómo diablos alguien había descubierto que él era dueño de ese edificio? No había estado en las listas de Sebastian. Él era dueño bajo el nombre de otra compañía. ¿Alice Weaver tenía gente investigándolo? Recordaba cosas que Sebastian le había dicho, cómo ella había entrado en sus casas, dondequiera que él estuviera. ¿Era ella la causa de todos estos problemas? Él tenía superiores a los cuales debía pagarles; no podía permitirse esta vergüenza. La gente a