El debate de los secretarios de Hacienda, 1955. Alberto J. Pani, Luis Montes de Oca, Eduardo Suárez y Ramón Beteta

Por Maria Eugenia Romero Sotelo

En este volumen se presentan los documentos de la controversia conocida en la historia económica como el "Debate Ministerial" que
se suscitó en 1955 a partir de la publicación del libro El problema supremo de México de Alberto J. Pani, donde acusa a los exministros
de Hacienda Luis Montes de Oca (1927-1931), Eduardo Suárez (1936-1946) y Ramón Beteta (1947-1952) de ser los responsables de
la inflación que sufría la economía mexicana en ese momento. El documento de Pani, también se puede interpretar como una crítica a Ia
política económica del gobierno del presidente Adolfo Ruiz Cortines y su secretario de Hacienda, Antonio Carrillo Flores, por la devaluación monetaria que sufrió la economía en abril de 1954. El debate de los secretarios de Hacienda es uno de los momentos en que las ideas de dos posturas de política económica en México se confrontan: la liberal y la desarrollista.

• Idioma: Español
• Editorial: UNAM, Facultad de Economía
• Fecha de lanzamiento: 11 abr 2023
• ISBN: 9786073050838

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CONTENIDO

PRESENTACIÓN

ESTUDIO INTRODUCTORIO

DOCUMENTOS

I. LUIS MONTES DE OCA

1. El precio de la moneda, Excélsior, 5 de enero de 1953

2. Inflación y equilibrio presupuestal, Excélsior, 6 de enero de 1953

3. El dilema del control, Excélsior, 7 de enero de 1953

4. El significado del gasto público, Excélsior, 14 de agosto de 1954

5. Las devaluaciones en cascada, Excélsior, 16 de agosto de 1954

II. ALBERTO J. PANI

1. Enjuicia Pani a los Srios. de Hacienda, Excélsior, 3 de mayo de 1955

2. Rayo de esperanza para un México al borde del abismo, Excélsior, 4 de mayo de 1955

3. Solución de Pani al problema financiero, Excélsior, 5 de mayo de 1955

III. EDUARDO SUÁREZ

1. El Problema Supremo de México, Excélsior, 10 de mayo de 1955

2. México no puede seguir devaluando cada seis años, Excélsior, 11 de mayo de 1955

3. Más que estabilizar, elevar el ingreso, Excélsior, 12 de mayo de 1955

IV. ALBERTO J. PANI

1. El Problema Supremo de México. El Ingeniero Pani Contesta los Argumentos del Licenciado Suárez, Excélsior, 27 de junio de 1955

2. El Problema Supremo de México. Refuta el Ing. Alberto J. Pani los Argumentos del ex Secretario Suárez, Excélsior, 28 de junio de 1955

V. RAMÓN BETETA

1.- Desarrollo económico de México en los últimos años

a) Hoy, 13 de agosto de 1955

b) Hoy, 20 de agosto de 1955

c) Hoy, 27 de agosto de 1955

d) Hoy, 3 de septiembre de 1955

e) Hoy, 10 de septiembre de 1955

2. El debate económico de México

a) ¿Cómo industrializar al país?, Novedades, septiembre 7 de 1955

b) La inflación y las obras públicas, Novedades, septiembre 8 de 1955

c) La panacea de la baja de precios, Novedades, septiembre 9 de 1955

d) El problema de las devaluaciones, Novedades, septiembre 10 de 1955

e) Las inversiones extranjeras, Novedades, septiembre 12 de 1955

f) Conclusiones finales, Novedades, septiembre 13 de 1955

Notas al pie

Aviso legal

PRESENTACIÓN

Este volumen El debate de los secretarios de Hacienda, 1955: Alberto J. Pani, Luis Montes de Oca, Eduardo Suárez, y Ramón Beteta forma parte de la Colección de Documentos para el Estudio de la Historia del Pensamiento Económico en México en un esfuerzo por construir la Historia del Pensamiento Económico del país. Hasta ahora, esta colección está conformada por cinco títulos ya publicados gracias al auspicio de la Facultad de Economía y al soporte financiero de la Dirección General de Asuntos del Personal Académico (DGAPA).¹

En este volumen se presentan los documentos de la controversia conocida en la historia como el Debate Ministerial que se suscitó en 1955 a partir de la publicación del libro El problema supremo de México de Alberto J. Pani, donde acusa a los exministros de Hacienda: Luis Montes de Oca (1927-1931), Eduardo Suárez (1936-1946) y Ramón Beteta (1947-1952) de ser los responsables de la inflación que sufría la economía mexicana en ese momento. El documento de Pani, también se puede interpretar como una crítica a la política económica del gobierno del presidente Adolfo Ruiz Cortines y su secretario de Hacienda Antonio Carrillo Flores por la devaluación monetaria que sufrió la economía en abril de 1954. La economía mexicana enfrentó problemas en su ritmo de crecimiento en los años de 1952 y 1953. Esta caída fue acompañada con un incremento general de precios. El gobierno tomó una serie de medidas para detener la inflación y la caída de Producto: dentro de ellas se encuentra un incremento del gasto público. Para el secretario de Hacienda Antonio Carrillo Flores:

Ese descenso en el ritmo del desarrollo económico nacional parece determinado por un conjunto de factores internos y sobre todo externos. Análogo fenómeno ha afectado a las demás naciones, como resultante (…) del agudo proceso de inflación que se desencadenó con el conflicto de Corea, ante los temores de una nueva guerra mundial. Al desvanecerse casi esos temores, y procederse a la liquidación de especulaciones y compras de previsión, se presentó una declinación de la actividad económica coincidente con una demanda menor de los consumidores.²

Continua

En México, a partir de la fecha de dicho conflicto (junio de 1950). Se advirtieron palpables síntomas de ese proceso inflacionario; alza brusca y pronunciada de los precios; auge inusitado en las actividades mercantiles; aumento acelerado de la circulación. Seguido de una baja también acelerada en el fondo de divisas por el apremio con que se acumularon existencias de equipos y materiales que se pensaban iba a escasear; especulaciones monetarias; y como resultado de todo ello, con el agravamiento de nuestra tradicionalmente injusta distribución del ingreso nacional. De junio de 1950 a junio de 1951. El medio circulante, que era de 4 507 millones de pesos en junio de 1950, subió a 6 809 a fines de 1951, esto es, en más de un 50%.³

Ante estos conflictos, sumando además los problemas del campo mexicano, Antonio Carrillo Flores explica que el gobierno no podría darse el lujo de contraer la inversión pública, ni el gasto público. De hacerlo así, el país correría el peligro de hundirse en una depresión. Aquí se encuentran también los elementos que explican la devaluación de 1954, según el secretario de Hacienda.⁴ Algunos sectores no estuvieron de acuerdo con esta política del gobierno, con los que Pani coincidió en su obra crítica en 1955.

Así que el Debate Ministerial es uno de los momentos en que las ideas de dos posturas de política económica en México se confrontan: la liberal y la desarrollista. Los documentos compilados son de gran interés porque ayudan a comprender los argumentos que estas dos visiones tenían sobre el desarrollo económico del país y el nivel intelectual de los protagonistas en el campo de la economía política. Esta polémica, también es importante porque permite apreciar los encuentros y desencuentros en la clase política que dirigía el país. Esta valiosa práctica, de confrontación de ideas, se fue perdiendo poco a poco en la vida pública del país. Ojalá se logre recuperarla en algún momento.

La polémica se dio a conocer en los periódicos Excélsior, Novedades y en la revista Hoy. Los artículos periodísticos presentados son fundamentalmente la respuesta que Eduardo Suárez y Ramón Beteta dieron a Alberto J. Pani. Los otros materiales corresponden a los artículos que sobre el origen de la inflación publicó Luis Montes de Oca en el periódico Excélsior, los cuales por un lado muestran las coincidencias entre Montes de Oca y Pani y por el otro, más allá de las coyunturas, enseñan que la polémica sobre la intervención del Estado en la economía mexicana es de largo aliento.

Agradezco a la Dirección General de Asuntos del Personal Académico (DGAPA) el apoyo otorgado al proyecto Historia de la Ortodoxia en México (PAPIIT-IN305414) que se realizó bajo mi responsabilidad durante el periodo 2013-2016. A la Hemeroteca Nacional por las facilidades prestadas para la obtención de los documentos, a la Fototeca Nacional del INAH por las imágenes tomadas de su acervo, al Centro de Estudios de Historia de México-Carso, a la Coordinación de Publicaciones de la Facultad de Economía por su apoyo para la publicación del trabajo, a las Dras. Leonor Ludlow y Mónica Blanco por su atenta lectura del texto, y a los becarios del proyecto por su apoyo en la búsqueda de los materiales, así como en la ardua tarea de captura: Leticia López Cruz, Miriam Rodríguez Elizalde, Osvaldo Bardomiano Martínez, Jesús Rafael Salguero Samperio y Oscar Gómez Rivera. A Samuel Luna Millán por su valioso apoyo en el desarrollo del programa de trabajo de este proyecto. Mi reconocimiento también a la Facultad de Economía, institución donde realizó mis académicas fundamentales.

ESTUDIO INTRODUCTORIO

El debate de los secretarios de hacienda, 1955: Alberto J. Pani, Luis Montes de Oca, Eduardo Suárez y Ramón Beteta⁵

MA. EUGENIA ROMERO SOTELO

Durante el periodo de entreguerras la controversia, inflación y desarrollo versus estabilidad y desarrollo se llevó a cabo en todas las naciones. México no fue la excepción.⁶ La controversia sobre la orientación de la política económica de los gobiernos de la Revolución mexicana se inició de manera clara desde la época cardenista y se desarrolló a lo largo del siglo XX mexicano, las dos posiciones discuten sobre las bondades o no del gasto público para impulsar el desarrollo y la fuente de su financiamiento. En el país el primer debate se dio en el año de 1937 entre el Consejo de Administración del Banco de México y el Gobierno Federal.⁷ Dos altos funcionarios del Banco Central, Luis Montes de Oca y Miguel Palacios Macedo, encabezaron la crítica a la política económica del gobierno del General Lázaro Cárdenas, le tocó al secretario de Hacienda Eduardo Suárez dar respuesta a dicha crítica. Más tarde, en diciembre de 1938 se reformó la Ley del Banco de México para flexibilizar el otorgamiento de crédito al gobierno. En 1941 se expidió una nueva Ley constitutiva del banco central, la cual aumentaba sus facultades para financiar al Gobierno Federal, así como para determinar los depósitos que podía exigir obligatoriamente a la banca privada. Ambas acciones ampliaron el financiamiento del Banco de México al Gobierno Federal. Lo que reeditó el debate que se dio en el año de 1937 en el que Palacios Macedo fue la cabeza del mismo.

El llamado Debate Ministerial se suscitó en 1955 a partir de la publicación del libro El problema supremo de México⁸ del que fuera dos veces secretario de Hacienda Alberto J. Pani (1924-1927) y (1932-1933). En su libro, Pani acusa a los exministros de Hacienda de ser los responsables de la inflación que sufría el país en ese momento, a causa de la expansión del gasto público y su financiamiento. Los secretarios de Hacienda señalados fueron: Luis Montes de Oca (1927-1931), Eduardo Suárez (1936-1946) y Ramón Beteta (1947-1952).

El Debate Ministerial es uno de los momentos de claro enfrentamiento de las posturas liberal y desarrollista en México. Ya desde tiempo atrás, Alberto J. Pani venía objetando la política económica de los gobiernos de la Revolución, que consideró inflacionista, a partir de su artículo Los orígenes de la política crediticia, publicado en dos partes los días 8 y 9 de marzo de 1950 en el diario Excélsior. Al siguiente año, publicó una compilación de artículos periodísticos con el mismo título, con un anexo de comentarios de distintos personajes sobre su labor al frente de la secretaría de Hacienda, este es el caso: Jorge Prieto Laurens, Agustín Rodríguez (exdirector del Banco de México), Fernando de la Fuente (uno de los autores de la reforma a la Ley orgánica del Banco de México de 1932), y de Ernesto Flores Zavala. Comentarios muy halagadores sobre su obra hacendaria. En realidad, El problema supremo de México es la culminación de las apreciaciones que sobre la política económica venía expresando Pani desde 1950.⁹

Del estudio de esta controversia se han ocupado importantes especialistas: Antonio Manero la dio a conocer en su libro La revolución bancaria en México en el año de 1957 y la llamó el Debate financiero ministerial. Francisco Suárez Dávila lo retoma y lo llama El debate ministerial: primero en su ensayo Dos visiones de política económica en México. Un debate en la historia. Más tarde, el mismo autor construyó una extensa narrativa histórica sobre esta controversia en su ensayo Desarrollismo y ortodoxia monetaria (1927-1952). El historiador Eduardo Turrent en su ensayo Debate Ministerial en México. 1953-1955 la considera una polémica inconclusa.¹⁰ Enrique Cárdenas contribuye al conocimiento y esclarecimiento de esta polémica con su trabajo El mito del gasto público deficitario en México, 1934-1956,¹¹ que como el autor lo explica, estudia el mito ampliamente difundido de que desde los años treinta hasta el gobierno de López Mateos, las autoridades financieras, (….) utilizaron a las políticas monetaria y fiscal para expandir la economía. Ello generó crecimiento, pero sobre todo alimentó la inflación (…).¹² Este es el argumento que Pani sustenta contra los secretarios de Hacienda desarrollistas.

El escrito que ahora se presenta está dirigido a conocer las razones que esgrimieron cada uno de los involucrados en el debate: Eduardo Suárez dio respuesta a las acusaciones en una serie de artículos publicados en el periódico Excélsior. El periódico Novedades publicó la respuesta de Ramón Beteta. Sobre esto último hay que hacer una aclaración: en la presentación de los artículos publicados en el periódico Novedades, se comenta que Ramón Beteta había divulgado en la revista Hoy un amplio estudio sobre los grandes temas de discusión económica de México. Los editores de Novedades explican que el trabajo contiene importantes pasajes y que por la trascendencia en el debate económico de ese momento deciden recoger y presentar en forma de artículos; sólo extractos del trabajo para ser publicados en este diario del 7 al 13 septiembre de 1955. En la revista Hoy el trabajo integro lleva el título de Desarrollo económico de México en los últimos años, los editores de la revista explican que se trata de un escrito presentado por Ramón Beteta en la Universidad Israelita, en Israel, en su calidad de embajador de México en Italia, y fue publicado en cinco partes del 13 de agosto al 10 de septiembre de 1955. Posteriormente a finales de 1955 este trabajo también fue publicado como parte del libro Disertaciones sobre México desde Europa, que recopila varios trabajos del exministro de Hacienda. En la presente compilación se decidió incorporar tanto los artículos publicados en el periódico Novedades como los de la revista Hoy. Los textos periodísticos tienen importancia por su impacto mediático y los de la revista son relevantes por su amplitud y profundidad en el análisis.

Montes de Oca nunca dio respuesta a la censura volcada por Pani a su actuar como secretario de Hacienda. Sin embargo, siguió puntualmente este debate a través de la prensa, esto se infiere por los recortes de periódico que sobre la controversia se encuentran en su archivo personal.¹³ ¿Por qué no dio respuesta pública a Pani? una posibilidad es que ambos coincidieran en muchos de los juicios vertidos en El Problema Supremo de México sobre la política desarrollista. Ya desde hacía mucho tiempo, Montes de Oca estaba en pie de lucha contra la política económica de los gobiernos de la Revolución Mexicana con argumentos muy similares a los de Pani. Por esta razón es difícil de entender la crítica de Pani a Montes de Oca, ambos confluyen en la misma línea de pensamiento. Aun así, este ensayo se ocupa de Montes de Oca con el fin de ubicar su pensamiento en el contexto general del desarrollo histórico del país y sus polémicas. Una razón por la que posiblemente no se ocupó de dar respuesta a las acusaciones es por que para esas fechas se encontraba muy enfermo, muere tres años más tarde en 1958.

La figura de Alberto Pani es un paradigma en la historia económica por introducir en un momento difícil de la economía nacional una política económica anticíclica para salir de la depresión económica en 1932. A la cual Montes de Oca había contribuido al aplicar una política monetaria recesiva. ¿Por qué este exministro de Hacienda, después de introducir medidas menos ortodoxas en la política económica nacional, se manifiesta críticamente contra las medidas de la política económica sostenidas por los ministros de Hacienda Eduardo Suárez y Ramón Beteta durante los periodos presidenciales de Lázaro Cárdenas, Manuel Ávila Camacho y Miguel Alemán?¹⁴ medidas que en su momento él mismo aplicó con el fin de salir de la depresión económica.

Es importante subrayar que en este ensayo no se pretende repetir el análisis del Debate Ministerial que han desarrollado los estudiosos anteriormente mencionados. En el largo plazo, se trata de construir una línea del desarrollo histórico del pensamiento económico en México: el ortodoxo y el desarrollista, los actores que las nutrieron e impulsaron. Se pretende conocer los argumentos de ambas posiciones y su andamiaje conceptual. En ese sentido el presente trabajo es parte de una investigación más larga que busca introducirse en los argumentos de las líneas antes mencionadas de pensamiento económico que se desarrollaron en México de manera consistente durante todo el siglo XX.

Los críticos de la corriente