Historias No Contadas

Por Leyda Flores

La migración en nuestros países, en general afecta a todos, en los diferentes ámbitos de la vida, pero en especial a las mujeres. Las mujeres en estas historias representan las de miles o millones de mujeres que se ven obligadas a salir de su país para poder asumir el rol de proveedoras absolutas en sus familias. Es una necesidad económica lo que les empujó, motivó y les dio el valor necesario, para arriesgarse en una travesía; que en ese tiempo era menos peligrosa que ahora. Sobre todo, por la presencia de los grupos criminales organizados.

El común denominador entre ellas es la necesidad de cubrir sus necesidades prácticas ante su papel de madres solteras; con un padre desaparecido. Por diferentes circunstancias, igual de dolorosas y con consecuencias que afectan toda la familia. Estas historias nos muestran esos peligros reales en la travesía y a su llegada al país en una situación que la coloca en una posición de vulnerabilidad. Como es el no tener documentos que les dé acceso a mejores trabajos, salud, educación, entre otros

A la par, las mujeres son conscientes que su mano de obra barata es apetecida; y dada su vulnerabilidad, ellas no se organizan; no reclaman sus derechos; se ausentan menos del trabajo y aceptan salarios bajos por la necesidad de enviar remesas a sus familias.

Todas ellas son unas triunfadoras, porque al final, no solo lograron llegar al país; sino, que con su trabajo, educaron a sus hijas e hijos. Dándoles una oportunidad de vida diferente a la de ellas. Sin tomar el papel de víctimas, por lo sucedido. Lo usaron para proponerse metas, que han sido alcanzadas. Sus historias están llenas de nostalgia; por el tiempo perdido, con su familia en especial. Con sus hijas e hijos. Y llenas de secretos que han salido del baúl, y ahora los comparten con ustedes.

Estas historias le harán entrar en la vida de cada una de estas mujeres e identificarse con ellas.

• Idioma: Español
• Editorial: Page Publishing, Inc.
• Fecha de lanzamiento: 17 nov 2020
• ISBN: 9781643344775

Vista previa del libro

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Historias No Contadas

Leyda Flores

Derechos de autor © 2020 Leyda Flores

Todos los derechos reservados

Primera Edición

PAGE PUBLISHING, INC.

Conneaut Lake, PA

Primera publicación original de Page Publishing 2020

Diseño de portada creado por: Heidy Solangel Ferrera Flores.

ISBN 978-1-64334-476-8 (Versión Impresa)

ISBN 978-1-64334-477-5 (Versión electrónica)

Libro impreso en Los Estados Unidos de América

Dedico este libro de historias a todas esas mujeres que han sido muy importantes en mi vida. A través de ellas aprendí grandes lecciones de la vida real, sobré violencia y que ayudaron a formarme en la defensa de los Derechos de la Mujer como un compromiso de vida esté donde esté.

A mi madre, que sufrió violencia durante muchos años y que a mis 10 años de edad, no entendía cómo una mujer tan fuerte, inteligente y proveedora en casa, podía aguantar tanto a un hombre que no era nada. Un hombre a quien convertí en el hombre invisible en mi vida; para evitar que la rabia invadiera mi vida y me llenara de odio contra todo. Lo convertí en el hombre invisible para que me diera energías de avanzar y querer hacer cambios en mi vida, aun cuando tuve que dejar mi casa, mi madre y mis hermanos con esa corta edad. Escapando de casa con 25 centavos; justo para pagar el bus que me conduciría a un nuevo destino.

A mi excuñada, a quien le tengo muchísimo cariño y agradecimiento; por ella, di el paso tan difícil de denunciar a mi propio hermano. Él es producto de esas relaciones violentas que vivimos. Y a todas esas mujeres que alguna vez han pasado por mi oficina, me crucé en un bus o en la parada de un tren que me confiaron sus historias para orientar el tema de la violencia de género, y buscar una solución a esta creciente problemática.

Gracias a todas por las lecciones aprendidas.

Travesía

Me tuve que marchar hoy… Los amo

Me levanté ese día y sin mirar atrás, cerré tras de mí, la puerta

Sin hacer ruido, callada, con el alma a punto de salir de mi cuerpo

Y las lágrimas amenazando con salir a borbotones de mis ojos

aún cansados y rojizos por el desvelo de ayer.

Los vi allí tendidos, durmiendo casi uno sobre otro, para darse calor por la falta de una colcha que calmé el frío que entra por las mil rendijas de la pared.

Me persigné y pedí a ese mi Dios que me diera fuerzas para iniciar este viaje sin regreso…

Este viaje de esperanza a un país desconocido que ofrece maná y miel

Este viaje por la vida, por la comida, que llevaré a la mesa y por la ganas de dar a mis hijos un nuevo y mejor amanecer.

Y emprendí este viaje sola, acompañada de las fotografías de ellos…

Acompañada de mi soledad, mi angustia ante lo desconocido, mi miedo a ese camino perverso, lleno de trampas sobre todo para nosotras las mujeres.

Nosotras que llevamos el sello de las débiles, las lloronas, las que se pueden abusar, golpear y manipular porque así fue decretado por esta sociedad hipócrita donde las mujeres no contamos más que para parir.

Pero la fuerza para lograrlo me la da el recuerdo de la debilidad de mi madre que en mí, se convirtió en fortaleza, de mi abuela que la empujo a volar, de mi bisabuela esa vieja flaca y fuerte que me enseñó a no temer y nunca volver atrás.

Escrito por: Leyda Flores

12/16/2016

Agradecimientos

Antes, quisiera agradecer a estas mujeres que me permitieron escribir sus historias: Rosalina; Pilar; Arleth, Albina, Ana Julia y Sandra, Karla, Ligia y mi querida amiga Nelly.

A la familia de Zunilda por confiarme esta historia de tanto dolor. A mis hijos, que como siempre han apoyado mis locos proyectos. En especial a mi hija, que hizo la pintura para la portada de este libro. A mi adorada nieta, por quien pido cada día al universo que nunca tenga que sufrir ningún atropello.

A CEUS (Blanca Molina), como espacio donde se engendró este proyecto hace algunos años, producto de mi experiencia trabajando en Estados Unidos.

A Damaris Rostran, la persona con quien compartí este proyecto y me motivó a seguir adelante y sacarlo a la luz.

Al universo que siempre me empuja a seguir adelante, sintiéndome viva a través de las palabras que escribo.

Introducción

La idea de escribir estas historias de mujeres migrantes vino después de compartir tantos testimonios con mujeres que emigraron a los Estados Unidos.

Siendo originarias de distintos países: todas han vivido diferentes experiencias, sin embargo, todas han vivido la violencia de género; y sufrido el silencio en que se sumergen estas experiencias. Experiencias reprimidas por años y en algunas ocasiones, por toda la vida.

Este silencio produce en las mujeres consecuencias negativas que se traducen en enfermedades físicas y mentales, que no les permite tener una buena calidad de vida.

Cuando tienen la oportunidad de compartir estas experiencias (en lugares que consideran seguros) ayudan a otras mujeres a entender que no están solas, que le pasa también a otras mujeres.

La violencia contra las mujeres se ha incrementado en el mundo a pesar de todos los esfuerzos realizados. El panorama se pinta de la siguiente forma; luchar por los derechos de las mujeres ha incrementado el odio que el machismo genera sobre los hombres, ante los pequeños espacios "ganados" por las mujeres.

Obviamente esto pone en un alto riesgo a determinado grupo de mujeres; entre ellas las que emigran de su país en busca de mejores oportunidades. Por lo tanto, es importante que se conozca los riesgos a los que se exponen en busca de ese mejor futuro y el alto precio a pagar. Posiblemente unas desistan de iniciar esa búsqueda, posiblemente otras prefieran vivir su propia experiencia; pero el cometido de estas mujeres que han compartido su historia se cumplirá: que otras mujeres conozcan sus historias.

Tabla de contenido

¿Por qué emigramos las mujeres?

Emigrar no es una opción, es una decisión de vida

Historia número 1

Historia número 2

Historia número 3

La Peor Experiencia De Mi Vida, Fui Violada Por Un Extraño

Historia número 4

Historia número 5

Historia numero 6

Historia número 7

Historia numero 8

Historia número 9

Dedicatoria

Dedico este libro de historias a todas esas mujeres que han sido muy importantes en mi vida. A través de ellas aprendí grandes lecciones de la vida real, sobré violencia y que ayudaron a formarme en la defensa de los Derechos de la Mujer como un compromiso de vida esté donde esté.

A mi madre, que sufrió violencia durante muchos años y que a mis 10 años de edad, no entendía cómo una mujer tan fuerte, inteligente y proveedora en casa, podía aguantar tanto a un hombre que no era nada. Un hombre a quien convertí en el hombre invisible en mi vida; para evitar que la rabia invadiera mi vida y me llenara de odio contra todo. Lo convertí en el hombre invisible para que me diera energías de avanzar y querer hacer cambios en mi vida, aun cuando tuve que dejar mi casa, mi madre y mis hermanos con esa corta edad. Escapando de casa con 25 centavos; justo para pagar el bus que me conduciría a un nuevo destino.

A mi excuñada, a quien le tengo muchísimo cariño y agradecimiento; por ella, di el paso tan difícil de denunciar a mi propio hermano. Él es producto de esas relaciones violentas que vivimos. Y a todas esas mujeres que alguna vez han pasado por mi oficina, me crucé en un bus o en la parada de un tren que me confiaron sus historias para orientar el tema de la violencia de género, y buscar una solución a esta creciente problemática.

Gracias a todas por las lecciones aprendidas.

Travesía

Me tuve que marchar hoy… Los amo

Me levanté ese día y sin mirar atrás, cerré tras de mí, la puerta

Sin hacer ruido, callada, con el alma a punto de salir de mi cuerpo

Y las lágrimas amenazando con salir a borbotones de mis ojos

aún cansados y rojizos por el desvelo de ayer.

Los vi allí tendidos, durmiendo casi uno sobre otro, para darse calor por la falta de una colcha que calmé el frío que entra por las mil rendijas de la pared.

Me persigné y pedí a ese mi Dios que me diera fuerzas para iniciar este