La preparación para el vuelo 77

Por Erik Sellin

El atentado de septiembre de 2001 contra el Pentágono formó parte de los ataques terroristas más osados y exitosos jamás organizados. Este libro analiza específicamente el atentado que devastó la sede del Departamento de Defensa, examina a Osama bin Laden, el origen de Al Qaeda y cómo se seleccionó a los secuestradores para el ataque. También describe cómo llegaron estos hombres a Estados Unidos y dónde se reunieron. La segunda parte del libro lleva al lector por un escalofriante recorrido en auto por los lugares de Maryland que los cinco secuestradores frecuentaron en las dos semanas previas al 11 de septiembre. Por último, se ofrece información sobre el atentado y sus consecuencias. Se trata de una visión intrigante de cómo cinco hombres, dispuestos a la destrucción y el terror, vivían y se movían entre la población general, con una facilidad inquietante, en las semanas previas al atentado.

• Idioma: Español
• Editorial: Classic CD Books
• Fecha de lanzamiento: 4 feb 2023
• ISBN: 9781667450315

Vista previa del libro

La preparación para el vuelo 77

con un recorrido en auto de las dos semanas en Maryland antes del ataque del 11 de septiembre al Pentágono

Erik Sellin

Tabla de contenidos

Parte I - Prólogo

Parte II – El recorrido en automóvil

Greenbelt

College Park

Beltsville

Laurel

Parte III – El atentado y las secuelas

Parte I

Los atentados del 11 de septiembre de 2001 fueron planificados durante muchos años en distintos países.

En 1989, la Unión Soviética invadió Afganistán. Los combatientes árabes ahí formaron una alianza con las fuerzas de resistencia locales, que se comenzaron a conocer ampliamente como muyahidines. Estas guerrillas islámicas consiguieron expulsar al ejército rojo. Uno de los combatientes fue Osama bin Laden, quien regresó a Arabia Saudita envalentonado por el hecho de que un ejército improvisado de musulmanes devotos pudiera superar a una superpotencia.

En 1991, Bin Laden salió de Arabia Saudita para dirigirse a Sudán, donde comenzó a establecer campos de entrenamiento para terroristas y atrajo por primera vez la atención de la inteligencia estadounidense. Estados Unidos empezó a presionar a Sudán para que lo expulsara, pero él no podría regresar a Arabia Saudita, ya que su ciudadanía había sido revocada en 1994.

Finalmente, Sudán exilió a Bin Laden en 1996 y este se trasladó a Tora Bora, en Afganistán, en donde se regodeaba con el recuerdo de haber ayudado a expulsar a los soviéticos de la zona. Afganistán estaba sumido en el caos y su ciudad principal sería tomada por un grupo de militantes islamistas llamados talibanes; Bin Laden pronto formó una alianza con sus dirigentes. En agosto emitió una fetua titulada «Declaración de la yihad contra los americanos que ocupan la tierra de las dos mezquitas sagradas», haciendo referencia a aquellos en La Meca y Medina, en Arabia Saudita.

Bin Laden consideraba haber sido llamado para «seguir los pasos del mensajero y comunicar su mensaje a todas las naciones», así como a encabezar un nuevo tipo de guerra para destruir Estados Unidos y acercar el mundo al islam.

Su exhortación cobró fuerza el 23 de febrero de 1998, cuando él y el médico egipcio fugitivo Ayman al Zawahiri emitieron una segunda fetua contra Estados Unidos en dos años. Un periódico árabe de Londres publicó el edicto, en el que se instaba «al asesinato de cualquier estadounidense, ya que era el deber individual de todo musulmán que pudiera hacerlo en cualquier país en el que fuera posible hacerlo... Esto acorde con las palabras del Todopoderoso Alá. 

»No tenemos que diferenciar entre militares o civiles. Por lo que a nosotros respecta, todos ellos [los estadounidenses] son objetivos».

Para entonces, Bin Laden podía atraer y reclutar individuos para atentados cada vez más ambiciosos que consecuentemente atraerían aún más reclutas.

En junio de 1998, Bin Laden fue acusado de conspirar para asesinar a soldados estadounidenses en Yemen. Posteriormente, ese mismo año, fue acusado de nuevo por su implicación en los atentados contra la embajada en África Oriental.

La administración Clinton exigió en repetidas ocasiones a los talibanes que entregaran a Bin Laden; sin embargo, este permaneció en Afganistán.

El grupo islamista Al Qaeda se formó hacia 1989 por militantes islamistas que se oponían a la presencia estadounidense en Arabia Saudita y su apoyo a Israel.

Condoleezza Rice, ex secretaria de Estado, describe en su libro No Higher Honor como «los talibanes aprobaban y en ocasiones apoyaban los esfuerzos de Bin Laden para establecer campos de entrenamiento de Al Qaeda y reclutar extremistas para su causa».

Para agosto de 1998, Bin Laden, que se había aprovechado del malestar económico y social para aumentar su número de seguidores, era el líder indiscutible de Al Qaeda, con Al Zawahiri como su mano derecha.

El 7 de agosto, el octavo aniversario de la llegada de las tropas estadounidenses a Arabia Saudita, explosiones cuasi simultáneas de camiones bomba mataron a 224 personas e hirieron a cerca de 5,000 en las embajadas de Estados Unidos en Nairobi (Kenia) y Dar es-Salam