Márgenes de ciudad: (27 ́street) - Poesía

Por Sender Escobar

Como toda ciudad, sus habitantes observan al margen, no del lugar donde habitan, sino desde los recuerdos. El mar, los viajes, la ciudad y los versos duermen en el libro. Nihilismo y esperanza conviven, como la fe y la desilusión, personajes de una sola heroína o cantantes de ritmos cósmicos, suben al escenario cuando la página abierta llama por ellos. Márgenes de Ciudad es un concierto de rock, donde una hora antes del amanecer, movida por la nostalgia, la madrugada solicita prorroga.

• Idioma: Español
• Editorial: Eduardo Angarica Freire
• Fecha de lanzamiento: 24 oct 2022
• ISBN: 9781005603823

Sender Escobar

Ingeniero Industrial. Conversador por naturaleza, pelotero frustrado, despistado irremediable. Gusta de improvisar sobre la marcha y no hacer más nada que no sea ver televisión cuando hay eventos deportivos. Su sinceridad es cruel e irreverente. Cree en la fidelidad como arma de destrucción masiva.Graduado del Curso XX del Centro de Formación Literaria Onelio Jorge Cardoso. Ha publicado artículos, crónicasy entrevistas en diferentes medios digitales. Posee en proceso editorial el libro de narrativa Descuentos por la casa editora española Punto Rojo. Fue uno de los veinte escritores escogidos para formar parte del libro de fotografías y poemas Donde Anida la Poesía del realizador audiovisual Roberto Chile.Actualmente trabaja en un libro de crónicas sobre cine.

Vista previa del libro

Tuvieron una sola heroína

Basquiat

…trato de pensar en la vida.

SAMO, firma para excluidos del paraíso.

Tierra de oportunidades selectivas.

La calle es el hogar perfecto para

escapar hasta de la misma voluntad.

Nacen realidades en un spray verídico

sin otra alegoría que un mundo de perfectos anónimos.

Poesía cruda, que señala a quienes tienen por principio ignorar.

Hablan las paredes un idioma confuso pero sincero.

Colores de una tormenta que ha cruzado el mar.

En forma de personas, sueños,

delirios, frustraciones y olvido.

Jazz…

El sonido de una trompeta en un dibujo

improvisa la próxima reunión, donde el destino se vuelve tu amigo.

El éxito sonríe con una malicia que por instantes decides ignorar

cuando los mundos se convierten en pinturas de vudú.

Reinos invisibles de sonrisa macabra.

Sigues la dirección de esas flechas lanzadas al vacío

en cuadros que eternizan un nombre.

Soy inmortal:

Repites una y otra vez cuando la ansiedad se detiene

y otro poco de tranquilidad llega dentro de una aguja.

Soy inmortal:

Dices a todos y escuchas el anuncio del boleto que lleva tu nombre

para el viaje más largo.

Soy inmortal:

Pintas un confuso cuadro que terminas antes de empezarlo.

Soy inmortal:

La frase perfecta queda para siempre en esa última obra

que escapa de ti, que tantas veces intentaste dibujar.

Soy inmortal:

Por fin lo consigues, pero la inmortalidad lleva un dolor conocido.

Se extingue como el humo del