Su mano dibuja unos círculos invisibles en el aire; es la mano de una bailaora española que suave se apoya en lo que no se ve, para marcar un ritmo, un pensamiento, una hilvanada a lo que está por decir. Camila Sosa Villada se pausa y mira un espacio en el margen inferior izquierdo de la pantalla, como si fuera un vacío en una esquina de su departamento en Córdoba. Y dice: “Hay algo detenido ahí, que no sé cómo hacer para ponerlo en marcha, para que avance o retroceda respecto a mi imaginación”. Habla de su infancia. Su infancia como un paisaje de campo, de pobreza, de sufrimiento,
TODOS tus brillos
Apr 10, 2023
4 minutos
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos