Estudio sobre sectas, religiones y otras falsas enseñanzas: Una apologética evangélica

Por Edgar Treviño

Este es un libro muy necesario para nuestro tiempo, el engaño religioso es grande y complejo, por otro lado, es el deber de cada cristiano conocer lo que enseña la Biblia y también la historia de la iglesia, para así poder entender las falsas enseñanzas doctrinales que proliferan en estos tiempos. En este libro

• Idioma: Español
• Editorial: ibukku, LLC
• Fecha de lanzamiento: 6 feb 2020
• ISBN: 9781640864801

Vista previa del libro

Dedicatoria

Este libro quiero dedicarlo a varias personas, en el área de la apologética cristiana, en memoria de Dave Hunt (1926-2013) apologista evangélico que muchos años se dedicó a exponer los errores de religiones, sectas, y muchas otras falsas enseñanzas, era un especialista en ese campo, su ministerio me inspiro para entrar de lleno a la apologética (1 P. 3:15) y defender la fe (Judas 3) contra toda falsa enseñanza que vaya en contra del cristianismo bíblico, y a ser un bereano (Hechos 17:11). Dedico también este libro a mi madre Aurora, a mis hijos, Verito y Daniel, a mi esposa Mónica, a mi familia en general, y también a todos aquellos que me apoyaron en mi labor de la apologética cristiana todos estos años.

Edgar Treviño

México, 2019

Prólogo

El cristianismo a lo largo de los siglos ha enfrentado muchos opositores, desde el ámbito teológico, práctico y político, ya desde sus inicios surgieron falsas doctrinas que fueron denominadas herejías, las cuales hicieron necesario que se respondieran de forma razonable a los argumentos contrarios a esta. La fe cristiana evangélica centra sus bases en las escrituras y es por medio de ellas que se hace frente a todo este cumulo de ataques a la misma, existen ataques que provienen del exterior de la fe cristiana y otros que provienen del interior. Hace algunos años en 1995 leía el currículo del instituto bíblico al que iba a ingresar, y me llamó la atención una materia Religiones Sectas y Herejías cuando la cursé nos dieron una bibliografía muy simple, pero lo que noté es que no había un solo libro latinoamericano que incluyera de forma concisa el material necesario para la materia en cuestión.

Durante el curso centré la atención en una palabra muy importante APOLOGÉTICA, que es un área de la teología que centra sus estudios en defender la fe cristiana. A través de los años ha sido motivo de estudio personal para saber cómo responder a quienes se oponen, en mi búsqueda por internet en la víspera del cambio de siglo, me adentré en los llamados foros de discusión y ahí conocí uno de los hermanos más conocedores de ese campo teológico tan importante en español, el hermano Edgar Treviño, impactó mi vida por los conocimientos que en múltiples debates esgrimía contra proponentes de diferentes religiones y sectas como el Catolicismo romano, la nueva era, los testigos de Jehová etc.

Edgar Treviño se ha dedicado muchos años al estudio de la apologética y escrito una incontable cantidad de artículos sobre distintas religiones sectas y herejías, el texto que anhelé tener para aquella materia, ahora él nos lo ha hecho disponible en este compendio bastante completo, donde de forma organizada analiza las propuestas doctrinales de muchos grupos y movimientos sectarios que eran necesarios abordar, es una obra pertinente y actual que no dudo se volverá el libro de texto por excelencia de seminarios e institutos bíblicos. En un estilo franco, sistemático y analítico, nos presenta no solo estas distintas corrientes doctrinales y grupos sino una respuesta bíblica concisa y defensa pertinente que hace frente a aquellas doctrinas que el apóstol Pablo dijo que era necesario presentar una defensa y tapar la boca para que dejaran de trastornar a los creyentes (Tito 1:11).

Es un honor para mí recomendar al hermano Edgar Treviño y la obra que nos presenta, pues es un autor latinoamericano versado en la materia, su obra nos ha llegado a este tiempo como trabajo pertinente, que permitirá no solo el aprendizaje, sino liberar a muchas personas que se encuentren atados a estas doctrinas, y sacar de las tinieblas y confusión a muchos otros, que no habían tenido una manera de responder y confrontar con la palabra de Dios a aquellos que se oponen al cristianismo. Hay mucho trabajo aun por hacer de parte de nosotros los lectores y estudiosos, las herramientas están siendo puestas en nuestras manos.

Lic. Arturo Perales.

Pastor Iglesia Centro Gracia

y maestro Instituto Bíblico Palabra de Vida.

Introducción

Con gran alegría hago la introducción a este libro excepcional de nuestro amigo y gran investigador de los cultos religiosos, Edgar Treviño. En este libro el autor aborda las falsedades que han surgido a través de los siglos por los diferentes cultos, religiones y movimientos, y les ofrece una respuesta bíblica, científica e histórica muy documentada para el beneficio y conocimiento del pueblo de Dios, el cual estaba muy necesitado de esta joya de la apologética cristiana.

La necesidad de la apologética cristiana

Ante los ataques e inventos de muchos cultos y movimientos religiosos se hace necesario presentar una defensa de la fe cristiana. El apóstol Pedro escribió:….santificad a Dios el Señor en vuestros corazones, y estad siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros (1 Pedro 3:15)

La palabra defensa (del griego: apología) en el contexto de la Biblia indica: una defensa de la conducta y de las doctrinas bíblicas. Esta defensa debe ser razonable porque la fe cristiana lo es. Además, debe ser presentada con amor y mansedumbre, ya que nuestro interés por los que cuestionan nuestra fe necesita conocer la verdad por nuestro testimonio.

La mejor defensa es una buena ofensiva

En esta obra no solo se presenta una defensa de las verdades bíblicas; sino también se examina y analiza de manera crítica las doctrinas de los diferentes cultos y movimientos religiosos. Los temas examinados por Edgar Treviño son los siguientes:

El Corán, la guerra en el islam, el culto a la santa muerte, la maternidad del espíritu santo, el código da Vinci, la Nueva Era, el budismo, el hinduismo, la ciencia cristiana, el libro de Mormón, el bautismo mormón, Pare de sufrir, el Tarot, la cienciologia, la teología gay, una defensa de la resurrección de Jesús, si Nerón fue el anticristo, los Testigos de Jehová, el papado, y más temas que el lector podrá encontrar en este libro.

¿Por qué un libro más de apologética?

El interés de todo apologista es aportar algo nuevo cuando escribe, y en este libro se ofrecen nuevas y muchas respuestas, las cuales no se han presentado en otras obras. Las respuestas están muy bien documentadas y muy bien fundamentadas. La mayoría de los libros de apologética presentan respuestas básicas y con poco fundamento, pero en esta obra el autor se propuso responder de manera profunda a las creencias de los diferentes cultos y movimientos religiosos para conocimiento y beneficio del pueblo cristiano.

La bibliografía usada para este libro es muy vasta. El autor no solo se ha tomado muchos años (desde 1995) investigando estos temas, sino también se ha valido de muchos libros y fuentes, además de los comentarios más importantes de la apologética cristiana. En este libro se busca fortalecer la fe de los cristianos y la protección del engaño y charlatanería teológica de aquellos que vienen disfrazados como ángeles de luz. La lectura de este libro es fascinante. Lo invito a leerlo de principio a fin.

Su hermano en Cristo, Danny Totocayo, apologista cristiano evangélico.

Autor de los libros La fe ciega del ateo y

Catolicismo Romano: un camino hacia el infierno

Presentación

Abreviaturas en el libro:

AT- Antiguo Testamento

NT- Nuevo Testamento

Para muchas personas hablar de una secta, religión, y falsas enseñanzas, es un enigma, y algo complejo, el que se acerca a este tema sin conocerlo sabe que está ante un mar de información, y que muchas veces es incomprensible, ciertamente el estudio de estos temas es muy amplio, en este estudio ofrezco una apologética evangélica sobre el tema (soy cristiano evangélico) y una ayuda para aquellos lectores que conocen muy superficialmente este tema, para los que lo desconocen totalmente, y también para aquellos que quieran conocer más del estudio de las religiones comparadas, lo cual incluye también por supuesto el estudio de sectas y otras falsas enseñanzas. La apologética es la es defensa de la fe.

Vivimos en tiempos donde hay mucho engaño religioso y mucha confusión, no solo por religiones que tienen siglos de estar establecidas, sino también por sectas y otras falsas doctrinas. En este libro al lector se le presentara un escrutinio, evaluación y refutación, de doctrinas muy conocidas y que miles de personas las creen en todo el mundo, mi metodología es tener en primer lugar la autoridad y suficiencia de la Escritura (2 Tim. 3:16-17), la Biblia, y en segundo lugar la historia, indagar si esta ha sido presentada correctamente por aquellos que dicen hablar en nombre de Dios siguiendo supuestamente lo que enseña la Biblia, o si estas enseñanzas han seguido el camino de invenciones por parte de los hombres en nombre de Dios y la Biblia (en otros casos doctrinales y religiosos ninguna de estas fuentes se dice que siguen) para sus propios fines.

El libro no es exhaustivo, no trato la totalidad de lo que creen las sectas, religiones, y toda falsa enseñanza en general que pudiera existir, pero si trato sectas y religiones muy importantes, así como otras falsas enseñanzas también muy populares actualmente, y que pueden servir al lector como una base para conocer más sobre estos temas. Este libro no es tampoco un ataque contra las personas que creen determinadas creencias, es simplemente una refutación y exposición de doctrinas que no tienen base bíblica ni histórica desde una perspectiva y apologética cristiana evangélica.

El Dr. Walter R. Martin (1928-1989), un apologista cristiano evangélico muy destacado también (Llamado El Padrino de la apologética anti cultos y religiones comparadas), fue el pionero a nivel mundial en la exposición y refutación de sectas y religiones que contradicen al cristianismo bíblico histórico, cuando escribió su famoso libro The Kingdom of the Cults (El Reino de las Sectas) publicado por primera vez en 1965. El Dr. Walter Martin fundo en 1960 El Christian Research Institute (Instituto de Investigación Cristiana). Muchos otros apologistas después de él siguieron ese mismo camino, lo que se conoce también como apologistas anti culto (yo he seguido también esa línea). El tema en si es muy interesante y de mucha instrucción, también de mucha bendición, porque a través de muchos de estos estudios, muchas personas esclavizadas en doctrinas falsas las han abandonado. El Dr. Walter Martin es otro de los apologistas evangélicos que han influido mucho en mí y a quien también respeto mucho.

Hay muchas doctrinas que millones de personas aceptan sin cuestionarlas, y no indagan el origen de estas doctrinas, y si tienen base bíblica e histórica, en otros casos aquellos que promulgan doctrinas falsas tienen sus versículos bíblicos de prueba (hacen una falsa interpretación de estos textos bíblicos) para supuestamente darles las pruebas a sus seguidores de que lo que están enseñando es bíblico y tiene fundamento, lo que se puede llamar en otras palabras también como mentiras con verdades.

En este libro también he incluido una refutación a libros como el Código Da Vinci, que a pesar de ser una novela, muchas personas en el mundo han creído que es algo histórico el contenido de ese libro de Dan Brown, no es así, como tendremos oportunidad de ver en este libro. Otras enseñanzas falsas muy populares en México y entre los latinos que viven en Estados Unidos es el culto a la Santa Muerte también trato ese culto en este libro, su origen y sus errores, hablo también de la resurrección de Jesús y su veracidad, un capítulo sobre Jonás y su historicidad, el Budismo, el Mormonismo, los Testigos de Jehová, el Corán, el Islam, la Nueva Era, el Papado y más doctrinas muy difundidas, que desde la perspectiva bíblica evangélica e histórica son erróneas. El capítulo sobre Pedro, el papado y la infalibilidad papal, es el capítulo más largo de todo el libro, así lo demanda ese tema que es muy amplio, y también muy importante.

Los invito al análisis de estas y otras doctrinas, creídas por muchas personas, y que seguramente sorprenderá a muchos como se originan, y como se han construido para que sean aceptadas por la gente. Hablar de sectas y religiones es un tema nada sencillo, muchos han perdido familia, amigos, y trabajo por hablar de estos temas, sobre todo cuando alguna de las personas involucradas tiene un fanatismo extremo. Hay muchas personas con las que no se pueden siquiera tocar estos temas, se enojan, se insultan, se separan, lo cual demuestra la poca tolerancia y madurez que tienen al hablar de esto.

Para los que estamos de lleno en estos temas, cualquier intercambio de opiniones con otra persona es solo eso, un dialogo o debate, no pensamos en ningún momento en enojarnos, perseguir e insultar a las personas que difieren de nosotros (aunque lamentablemente muchos que conocen de estos temas si insultan), en pleno siglo XXI debemos cambiar esa forma de ver las cosas cuando hablamos de otras creencias. El islamismo por ejemplo si persigue y asesina a los que no aceptan su religión, sobre todo en países donde el islam domina. En sectores de Chiapas, México, los católicos tradicionalistas también persiguen a los evangélicos.

Quiero aclarar al lector que algunos links de webs pudieran no abrir correctamente, pero esto es debido a la actualización que naturalmente hacen las páginas de internet, sugiero al lector ir al sitio de google para buscar aquellas fuentes que no abrieron. Por otro lado, las fuentes que he documentado de libros son exactas, y pueden ser verificadas para el que quiera acudiendo a esos libros.

Las sectas falsas, por regla general, aceptan algunas enseñanzas bíblicas, rechazan otras y añaden nuevas doctrinas. Predican otro evangelio, torciendo la verdad para su propia perdición (2 P. 3:16). Otra característica que identifica a un grupo como una secta falsa es que se compone de personas que siguen ciegamente a un innovador de doctrinas e ideas. (1)

Son fundadas por hombres que proclaman una nueva verdad; reinterpretan la Biblia para que esta esté de acuerdo con sus nuevas enseñanzas; ponen demasiado énfasis en algunas doctrinas bíblicas y pasan por alto otras o las rechazan; la mayoría de las sectas falsas aceptan los libros de doctrina escritos por sus fundadores como la fuente máxima de autoridad; rechazan las doctrinas bíblicas de la Trinidad y la deidad de Jesucristo. (2)

Cambian de tiempo en tiempo sus doctrinas y prácticas; enseñan la salvación por obras; algunas emplean engaño en sus actividades proselitistas; la infraestructura de creencia de las sectas falsas se caracteriza por la mente cerrada; la infraestructura de creencia de la típica secta falsa produce el dogmatismo e intolerancia hacia todos los otros sistemas religiosos.(3)

Por regla general, el fundador asevera que ha recibido una revelación sobrenatural y esta se ubica por encima de la Biblia. Puesto que él es el mensajero de Dios tiene una autoridad absoluta. Sus adeptos tienen una gran fe en sus enseñanzas. (4). No se deben confundir los profetas/fundadores de sectas con reformadores o evangelistas legítimos, tales como Martin Lutero y Juan Wesley. Las diferencias son importantes. (5)

Las sectas tradicionales se diferencian en creencias y estructura de gobierno a las denominaciones protestantes y evangélicas, las sectas tienen una estructura muy jerárquica y centralizada (un líder indiscutible), niegan la autoridad y suficiencia de las Escrituras, creen que sus buenas obras contribuyen a su salvación, alegan haber recibido otras revelaciones, niegan la trinidad, tuercen la Escritura, y han añadido otros libros autoritativos a la par y en algunos casos, por encima de la Biblia.

Las personas pertenecientes a las sectas, y queremos decir, empleando las palabras de Webster, a cualquier religión heterodoxa o espuria son las más difíciles de evangelizar. Debemos tener esto en cuenta, no sea que al primer contacto con ellas se apodere de nosotros el desaliento. (6). Una secta es una perversión, una deformación del cristianismo bíblico. Como tal rechaza las enseñanzas que la iglesia cristiana ha sostenido a través de la historia. (7)

Walter Martin nos da una buena definición de lo que es una secta cuando dice:

Por tanto, una secta es un grupo de personas polarizadas alrededor de la interpretación que alguien hace de la Biblia y caracterizado por grandes desviaciones con respecto al cristianismo ortodoxo en lo que se relaciona con las doctrinas cardinales de la fe cristiana, particularmente con el hecho que Dios se hizo hombre en Jesucristo. (8)

Aun una religión respetable, si incurre en grandes desviaciones de las doctrinas principales de la fe cristiana puede caer en la categoría ya sea de enseñar doctrinas sectarias o de plano de una secta, no importa como se llame, su antigüedad o la cantidad de miembros que tenga. Tampoco importa ni le da credibilidad que diga que habla en nombre de Dios ya que las sectas también dicen eso.

En el cristianismo evangélico la autoridad máxima es la Biblia (Juan 5:39; 1 Cor. 6:4; 2 Tim. 3:16-17; Apoc. 22:18-19) y bajo esa autoridad es como se juzga y se compara una doctrina profesada con lo que dice la misma Escritura. Muchas sectas y religiones así como otras falsas enseñanzas, también dicen seguir lo que dice la Biblia, pero esta afirmación es desmentida cuando se comparan sus creencias con la Biblia ¿por qué? porque no cuadran, la Biblia es usada solo como un falso frente para refugiar sus creencias y tratar de probar lo que dicen que creen, muchos con y sin intención, pero lo hacen erróneamente, porque tuercen la Biblia, la cual por otro lado dicen seguir con devoción. No solo una creencia opera así, sino muchas, incluso aquellos que ya están convencidos por una creencia, ignoran que su creencia no tiene fundamento en la verdad bíblica.

Hemos visto la definición de lo que es una secta, ahora vayamos a la definición de lo que es una religión.

¿Qué es religión? Parece que todo el mundo sabe lo que es, pero la halla difícil de definir, pues toma tantas formas diversas. Por regla general, es reconocer que existen poderes sobrenaturales invisibles pero activos en el mundo y adorarlos. Puede ser un dios personal, dioses, espíritus o simplemente una fuerza de la naturaleza. A veces, consiste en un conjunto de valores o prácticas de conducta, como en el caso de la religión de Confucio. (9)

De modo que se suele describir la religión como un conjunto de creencias, actitudes y practicas institucionales. Pero la religión evangélica abarca más que esto. Incluye una experiencia personal con Dios realizada por fe en Cristo: Esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado (Jn. 17:3). Es una vivencia de compañerismo con Dios y una vida de fe, adoración, amor, santidad y servicio espiritual. (10). ¿Cómo difiere la religión de la teología? La teología se trata solamente de la parte intelectual, o sea la formulación de las doctrinas; la religión abarca al hombre entero. La teología es la teoría mientras que la religión es la práctica. (11)

Seguramente como ha pasado en otras ocasiones con otros libros que dicen la verdad, a aquellos que no les gusta que se hable de sus errores bíblicos, te dirán que este libro no debes de leerlo, que te podría confundir, que nada es cierto, que es anti tal o cual religión o secta, pero debes de darte la oportunidad de leer este libro por ti mismo y llegar a tus propias conclusiones, ya sea a favor o en contra, debemos ser bereanos (Hechos 17:11). Hay sectas y religiones que se oponen a que se hable de sus errores, y lógicamente todo aquel libro que proceda así tratan de desacreditarlo, pero una cosa es desacreditar y otra refutar. Generalmente sus alcances son solo lo primero, y no lo segundo, y más cuando se habla la verdad incómoda.

Sí, hay sectas y religiones que realmente no les interesa la verdad de la Palabra de Dios, solo les interesa el dinero, el control sobre los que acuden a sus reuniones, la fama, estos serían los famosos lobos con piel de oveja de los cuales nos hablan las Escrituras (Mateo 7:15) eso era siglos atrás y lo es todavía hoy. Es por eso la necesidad de exponer los errores bíblicos de quienes se dicen que hablan en nombre de Dios.

Tengo dos grupos de Facebook Los Errores de la Apologética Católica Romana (año 2011) https://www.facebook.com/groups/229698033739189/?ref=bookmarks y

Refutación de sectas, falsas religiones y liberalismo teológico (año 2013) https://www.facebook.com/groups/426418854133691/ los invito a que se añadan a mis grupos para seguir conociendo los errores de sectas, religiones, y otras falsas enseñanzas.

Dios los bendiga

Edgar Treviño

México, 2019

(1) Pablo Hoff, Otros evangelios pag. 12. Editorial Vida.

(2) Hoff., Ibíd. 12-13.

(3) Hoff., Ibíd. 14-15.

(4) Hoff., Ibíd. 15.

(5) Norman Geisler y Ron Rhodes, Respuestas a las Sectas pag. 12. Editorial Patmos.

(6) J. K. Van Baalen y Alberto F. Roldan, El Caos de las Sectas pag. 337. 2 Edición corregida y aumentada. Libros Desafío.

(7) Josh McDowell y Don Stewart, Estudio de las sectas pag. 11. Editorial Vida.

(8) Walter Martin, The Rise of the Cults. Santa Ana, California: Visión House Publisher, 1980, p. 12 citado por McDowell y Stewart., Ibíd. 11

(9) Pablo Hoff, Teología Evangélica, tomos 1 y 2 págs. 13-14. Editorial Vida.

(10) Hoff., Ibíd. 14-15.

(11) Hoff., Ibíd. 15.

1-El Corán

Al estudiar el Corán y su historia, uno se percata que los argumentos más importantes que los apologistas musulmanes presentan en su favor, después de una evaluación crítica y objetiva no se mantienen en pie. Veremos como el Corán copia parcialmente los relatos bíblicos pero los redefine a conveniencia de su religión (los islamiza), los relatos contradictorios de Mahoma sobre la revelación que recibió del ángel Gabriel transmitiéndole la palabra de Ala con otras versiones, la guerra en el islam, y otras cosas más. El islam ha tomado mucha fuerza en su expansión en occidente, y no precisamente a través de la espada, a como originalmente se expandió, y es parte de la naturaleza de su religión, también a través de su proselitismo.

Los musulmanes creen que el origen del Corán se encuentra en Ala (85.22). Así, cuando llego el momento adecuado, de acuerdo a la voluntad de Ala, el ángel Gabriel dicto revelaciones a Mahoma. Mahoma le recito las palabras a su esposa y luego al pequeño grupo que se convirtieron en sus primeros seguidores. Los primeros miembros no solo memorizaron los contenidos recibidos, también comenzaron a escribirlos. Después de que Mahoma murió, varios líderes musulmanes compusieron la edición final del Corán. (1)

La mayoría de los musulmanes rechazan absolutamente las teorías sobre el supuesto origen humano del Corán. El islam, con toda certeza, afirma que el Corán tiene un autor: Ala. No es el libro de Mahoma. Ellos dicen que no se trata de un libro humano. Es divino. Muchos estudiosos creen que el Corán carece de confiabilidad histórica ya que no se puede relacionar directamente con Mahoma. Los musulmanes creen que el Corán es perfecto y no contiene errores. (2)

Lo que Ala le revelo a Mahoma fue trasmitido fielmente por el profeta, de acuerdo a la tradición musulmana, con una excepción famosa y sorprendente. Temprano en su trabajo como profeta, Satanás engaño a Mahoma haciéndole creer que los verdaderos seguidores de Ala podían adorar a tres deidades árabes. Por un periodo breve, uno de los capítulos del Corán contenía la aprobación de tal adoración pagana. (3)

Tan pronto como Dios le conto a Mahoma el engaño de Satanás, el profeta elimino el pasaje ofensivo. Desde entonces, esos versos han sido llamados los versos satánicos. Ese episodio de la vida del profeta se menciona en el Corán, en el hadiz o tradiciones sobre el profeta, y en innumerables libros. Es a partir de este incidente que Salman Rushdie título su controvertida novela. (٤)

El Corán contiene 114 suras o capítulos, y más de 6,000 versos. Los suras están organizados por tamaño, con los capítulos más cortos cerca del final. Se cree, por lo general, que los últimos capítulos fueron escritos primero y pertenecen al periodo en que el profeta estaba en Medina. Los capítulos más largos se escribieron posteriormente y se conocieron después que el profeta conquisto La Meca. (5)

El Corán también se aborda a sí mismo como un tema. Satanás, se nos dice, no es el autor. Mahoma tampoco podía ser el autor, puesto que el Corán afirma, era completamente analfabeto. Solo Ala podía haber producido un libro así. El Corán dice de sí mismo que es claro, comprensible, escrito en árabe puro, libre de error y que contiene el mensaje universal, que guiara a los oyentes a la salud y a la salvación eterna. (6)

Nunca deja de asombrarnos el hecho de que muchos musulmanes sienten que tienen el perfecto derecho y la libertad de criticar la Biblia y decir que es falsa y contradictoria, pero siempre que alguien se atreve a criticar el Corán en el mismo sentido, ellos lo rotulan de rudo, ofensivo y racista. (7)

Y en muchas ocasiones quienes cuestionan o critican el Corán son perseguidos y asesinados en donde el islam este en mayoría.

La palabra árabe para contar es Qur’ an, o Contar en español, y significa narración o lectura. Así que el Corán, el libro sagrado de los musulmanes, es la narración de las revelaciones dadas a Mahoma. Durante un periodo de diez años Mahoma divulgo muchas otras revelaciones. Alentado por su esposa, empezó a predicar en las calles y mercados de La Meca. Mahoma nunca clamo ser divino, pero insistió en que Ala le había llamado a ser profeta. (8)

El Corán o Alcorán es el libro más santo del islam, y se cree que es la revelación definitiva de Ala al hombre. Reemplaza a todas las revelaciones anteriores, entre ellas la Biblia. Contiene la palabra de Ala, tal como fue entregada oralmente a Mahoma por Gabriel. Los musulmanes reconocen también la Ley de Moisés, los Salmos y los evangelios, pero los consideran sumamente corrompidos. (9)

Según la tradición musulmana, el ángel Gabriel se le apareció. En realidad, en el Corán hay cuatro relatos diferentes de lo sucedido, que se contradicen entre sí. Los musulmanes han decidido decir ahora que fue Gabriel, y toman esto como señal de que Mahoma fue un profeta enviado a los árabes. (10). El Corán da cuatro relatos conflictivos de este llamado original a ser profeta. O uno de estos relatos es verdad y los otros falsos, o todos son falsos. Todos no pueden ser ciertos. En el Corán Mahoma describió su llamado inicial a ser profeta y apóstol en cuatro ocasiones diferentes. (11)Primero se nos dice, en Sura 53:2-18 y Sura 81:19-24, que Ala se le apareció personalmente a Mahoma en forma de hombre y que Mahoma lo vio y oyó. Esta versión se abandonó más tarde, y entonces se nos dice en Sura 16:102 y Sura 26:192-194 que el llamado de Mahoma fue emitido por el Espíritu Santo. Puesto que Mahoma no discute realmente sobre quién o qué es este Espíritu Santo, esto también se abandonó más tarde. (12)

El tercer relato de su llamado original se da en Sura 15:8, donde se nos dice que los ángeles son los que bajaron hasta donde estaba Mahoma y le anunciaron que Ala lo había llamado a ser profeta. Aun este relato se enmienda más tarde en Sura 2:98, de forma que es solo el ángel Gabriel que le emite el llamado a Mahoma y le entrega el Corán. (13)

Este último relato de su llamado original se vio influido por el hecho de que Gabriel había jugado un papel preponderante, tanto en el nacimiento de Jesús como el de Juan el Bautista. Algunos eruditos creen que Mahoma supuso que era perfectamente apropiado que el siguiente gran profeta en sucesión, puesto que era el mismo, debía también recibir el llamado de Gabriel. Este cuarto y último relato de su llamamiento inicial es el que la mayoría de los musulmanes y no musulmanes han oído. (14)

Una de las esposas favoritas de Mahoma, llamada Aisha, informa en las tradiciones que las revelaciones iniciales del profeta no le llegaron nunca por medio de un ángel, sino que se las enviaron a través de sueños: Las primeras revelaciones que recibió el profeta fueron en realidad sueños, y el nunca soñó, sino que sucedió de una forma tan regular como el amanecer (Mishkat 24:5). (15)

Dada la afirmación en otros lugares de la tradición islámica de que las primeras experiencias de Mahoma estaban llenas de dudas en cuanto a su fuente, e incluso del temor de que pudiera estar poseído, la falta de claridad o de certeza con respecto al verdadero agente del contenido del Corán es penosa para los que tratan de sopesar las afirmaciones del islam. (16)

A veces, Mahoma revelaba material que contradecía alguna revelación anterior. Como argumento lógico, afirmaba que Ala había anulado la anterior e instalado la posterior como una versión nueva y mejorada. Así, en el Sura 2:106 se hace declarar a Ala: Si abrogamos una ley (un versículo) o provocamos su olvido, aportamos otra mejor o semejante. ¿No sabes que Ala es omnipotente? . (17)

Aunque nos cause asombro, a Mahoma nunca pareció incomodarle la falta de coherencia que hay en afirmar que el Corán es la réplica perfecta del libro eterno de Dios, y al mismo tiempo declarar que a veces Dios les debe dar una forma nueva a las revelaciones anteriores, o incluso anularlas. (18). El concepto de abrogación (mansukh) es una manera de superar algunos errores corregidos por los versos anteriores (llamados nasikh). (19)

Otro problema con la idea de que el Corán proviene de manera pura de parte de Dios es la doctrina de la abrogación. Esta doctrina permite que un versículo o pasaje del Corán cancele, invalide, reemplace o sustituya otro versículo o pasaje. El Corán menciona esta doctrina de auto cancelación en varias citas. (20). Según la ley de abrogación dentro de hermenéutica coránica (véanse los suras 2:106; 13:39; 16:103), cuando hay un conflicto o un cambio en las enseñanzas, la revelación posterior siempre vence a los textos anteriores. (21)

El Corán dice que la Kaaba fue el primer santuario ungido para la humanidad…en el cual Abraham se puso en pie para orar; y…la peregrinación (Hajj) a la Casa es una obligación delante de Ala para (toda) la humanidad, para aquel que puede encontrar el camino hacia allí (Sura 2:125; 3:96-99; 5:97). También profesa que Abraham e Ismael construyeron juntos la Kaaba (Sura 2:127). De hecho, Abraham (Ismael ya no estaba con él ya que junto con su madre Agar fueron expulsados del hogar) vivió en Hebrón, en Canaán. (22)

La idea que el emprendió un exhaustivo viaje, transitando cientos de kilómetros a través del desierto árabe hacia la Meca (para construir un templo de ídolos que sería usado por los árabes paganos) es una atrevida fantasía que choca de frente con el sentido común, con todo lo que la Biblia dice sobre Abraham, y que además no tienen ningún dato histórico para sostenerla. (23)

Mientras el Corán afirma que esta amistad se debe a la sumisa obediencia de Abraham a los mandatos de Ala, y depende de ella, la Biblia destaca en cambio la confianza de Abraham en las promesas hechas por Dios en su gracia. Sobre todo Romanos 4, el apóstol Pablo indica con claridad que la justificación de Abraham ante Dios no es el resultado de sus propios esfuerzos por ganarse el favor de Dios, sino del agrado de Dios ante la confianza de Abraham en las numerosas promesas que Él le había hecho. (24)

El erudito del Nuevo Testamento William Hendriksen nos dice sobre Romanos 4 lo siguiente:

Pablo enfatiza ahora la importancia de la promesa de Dios y su cumplimiento. No fue por medio de la ley que Abraham recibió la promesa. Las obras o el mérito humanos nada tuvieron que ver con ella. Fue la fe en la promesa lo que importaba. Cf. Ga. 3:9, 29. (25)

El Corán se equivoca también en su enseñanza de como Abraham fue justificado.

El Corán, supuestamente inspirado por Ala a través del ángel Gabriel, ¿es la Palabra de Dios? En contraste con miles de manuscritos antiguos que tenemos de la Biblia, el Corán fue escrito en hojas de palmera, piedras, huesos y cualquier cosa que estaba disponible cuando Mahoma comenzaba a recitar. Algunas revelaciones fueron recitadas de memoria, sin nada escrito que las sustente. La esposa favorita de Mahoma, Aisha, dijo que faltan más de cien versículos en un solo capitulo, ya que los mismos fueron comidos por animales domésticos que ella poseía. (26)

Los cuatro califas que sucedieron inmediatamente a Mahoma son denominados los califas guiados con justicia. El Corán (que fue revelado en un periodo de dieciséis años) no se completó mientras Mahoma vivió, sino muchos años después, bajo la guía de Uthman Ibn Affan, el tercero de estos cuatro. Cuando le propusieron a Abu Bakr, el suegro de Mahoma y el primer sucesor, que editara una versión oficial del Corán, objeto debido a que Mahoma no había dicho nada sobre hacer tal cosa. Alguien que había memorizado el Corán mientras Mahoma aún vivía protesto diciendo que la versión de Uthman no era correcta. Este último contesto a estas sinceras interrogantes haciendo que se quemaran todas las copias que pudieran servir de rivales a la suya. (27)

Muchos Suras del Corán (Suras 36: 38; 50; 68 etc) tienen títulos tan extraños que ni siquiera los eruditos musulmanes saben lo que significan: Taha, Yasin, Sad, Qaf, Nun, etc. Otros tienen nombres sin sentido como La hormiga (Sura 27). Ese capítulo describe una batalla entre el ejército de Jinn de Salomón (seres espirituales, posiblemente buenos, aunque en general malignos) y hombres, pájaros y un ejército de hormigas. (28)

La historia consiste en que Salomón escucha a una hormiga llamada Tahina, la cual habla a una distancia de tres millas. Hay una abubilla que aparece tarde, ya que estuvo con la reina de Saba. Salomón le hace volver para que predique el evangelio. ¡Y debemos creer que esto es una revelación de Ala! (29)

Mahoma, bajo la inspiración de Ala, dice que al despertar uno debe sonarse la nariz tres veces para deshacerse del diablo, el cual pasa la noche en las narices del hombre (Sahih Bukari, IV, 516; Muslim I, 462). ¿Es esta la Palabra Santa de Dios, el fundamento de una religión verdadera? De hecho, el quedarse dormido puede ser muy peligroso para un musulmán. Mahoma dijo que bostezar es algo satánico (Bukhari IV, 509). En cuanto a los musulmanes que se duermen al orar, el profeta dijo que Satanás les orina en sus oídos (Bukhari II:245). (30)

En cuanto a las mujeres, deberían estar particularmente preocupadas, ya que Mahoma profeso que se le había permitido dar un vistazo al infierno, y que la mayoría de sus habitantes eran mujeres (Bukhari 1.28, 301; II:161). Uno debe tener mucho cuidado de no levantar la mirada cuando está orando. Abu Huraira escucho al profeta decir: La gente debería evitar elevar sus ojos hacia el cielo cuando está suplicando en oración, no sea que sus ojos les sean quitados. (Muslim I, 863) (31).

Pero desde una perspectiva positiva, Mahoma tiene un remedio incluso para aquellos que están en el infierno. Al pasar por dos tumbas en un cierto día, el profeta fundador del islam se detuvo, tomo una hoja verde de palmera, la partió y coloco una mitad en cada tumba. Oh apóstol de Ala. ¿Por qué has hecho eso? , le pregunto la gente. Mahoma respondió, Deseo que su castigo (en el infierno) sea disminuido hasta que ellas (las hojas de palmera) se sequen (Bukhari II: 443). (32)

Los musulmanes responden diciendo que la Biblia ha sido corrompida y que las enseñanzas presentes no son, por lo tanto, dignas de confianza; solamente el Corán es puro y libre de corrupción, este argumento no puede defenderse ni con hechos históricos, ni con textuales, ni siquiera con el mismo Corán. (33)

Por ejemplo, Mahoma no se encuentra en ningún lugar de la Biblia, pero el Corán declara que el mismo Mahoma se describe en la Tora y en el Evangelio. Los discípulos de Cristo obviamente eran cristianos, pero el Corán enseña que los discípulos de Cristo eran musulmanes. Se dice que ellos pronunciaron: Creemos y testificamos que somos musulmanes. (34)

El Corán también enseña que Abraham no era judío sino musulmán: No; Abraham en verdad no era un judío, ni siquiera cristiano; sino musulmán. Pero los judíos consideran a Abraham un judío. Los cristianos consideran a Abraham un judío. Jesús mismo considera a Abraham un judío. Todo el mundo considera a Abraham un judío con excepción de los musulmanes. (35)

El Corán está repleto de distorsiones bíblicas. Casi todos los episodios bíblicos discutidos en el Corán tienen información adicional y/o bíblica que agrega: Los nombres y eventos de los libros y profetas del Antiguo Testamento son copiados en el Corán. Sin embargo, a menudo las historias del Corán son confusas y enredadas. Esto significa que el autor del Corán es culpable de agregar y pervertir la Palabra de Dios, algo que el mismo Dios prohíbe (Proverbios 30:5-6). (36)

Ya sea la descripción de la caída del hombre, de Moisés y la zarza ardiendo, Noé y el arca, José en Egipto, o las vidas de Zacarías, Juan el Bautista, María y Jesús y otros personajes bíblicos, el Corán repetidamente contradice la enseñanza bíblica. En Sura 26:55-60 se dice que los israelitas eran una banda pequeña muy inferior a los egipcios. Pero en Éxodo 1:7-10 los egipcios admiten que los judíos eran más numerosos y poderosos que ellos. (37)

En Sura 2:56, 57,61 los judíos regresaron a Egipto después del Éxodo, lo cual bíblicamente nunca fue correcto. Sura 3:41 declara que Zacarías se quedó sin habla por tres días. Pero bíblicamente no fue sino hasta el nacimiento de Juan- nueve meses después (Lucas 1:18-20). En vista de esto, ¿Cómo pueden los musulmanes confiar en el Corán cuando explícitamente declara confirmar el libro de Moisés y los Evangelios?. (38)

El Corán tiene contradicciones hasta dentro de sus propias páginas. Por ejemplo en Sura 11 el Corán enseña que el hijo de Noé se ahogó en el Diluvio. El Corán mismo contradice esto en Sura 21, donde declara que le salvaron (Noé) y a su parentela de la gran calamidad. Entonces en Sura 11 se afirma la enseñanza de que uno de los hijos de Noé pereció en el Diluvio, mientras que en Sura 21 todos los hijos de Noé se salvaron. De acuerdo a la Biblia, todos los hijos de Noé se salvaron (Génesis 6,7) y se dan las genealogías (Génesis 9:18-10:32). (39)

Las contradicciones doctrinales y de otra índole en el Corán son las razones por las cuales los musulmanes ortodoxos no buscan el resolver las declaraciones que se contradicen, sino simplemente afirmarlas ambas a la vez. (40)

No tiene sentido en el Corán afirmar dos textos contradictorios a la vez. Uno es verdad y el otro es falso. Y como hemos visto ya sabemos cuál es el texto falso.

En Sura 2:100 el Corán mismo enseña: "Y por cualquier versículo que abrogamos o echamos al olvido, traemos uno mejor o semejante a él; ¿no sabes que Dios es poderoso sobre todo? Este versículo puede servir al musulmán como una razón para las contradicciones entre el Corán y la Biblia o el Corán consigo mismo. En ningún lugar del Corán Ala identifica los versículos que ha abrogado o destituido. ¿Cómo puede entonces el musulmán saber cuáles versículos son legítimos y cuáles no? (41)

Aunque los apologistas musulmanes pudieran refutar al cristianismo, esto no probaría la verdad del islam. El islam tendría en sus propios méritos que presentar verificaciones independientes de que es una revelación de Dios. Y como tal evidencia no existe, es precisamente al llegar a este punto que el apologista musulmán sale derrotado.(42)

La evidencia es clara y contundente, el Corán es obra humana, no divina.

Además del Corán circularon numerosas tradiciones orales –Hadiths- sobre supuestas palabras y dichos del profeta. Dos siglos después de Mahoma un tal Al-Bukhari había reunido cerca de 600,00 Hadiths o tradiciones, de las que desecho buena parte y considero que solo 7.000 podían ser tenidas por auténticas. La primera vida de Mahoma basada en el Corán y en las Hadiths es la compuesta por Ibn Jisham –Sirat ar-Rasul- en el siglo IX. (43)

A diferencia del Nuevo Testamento, el Corán no representa la culminación y cumplimiento de la revelación profética del Antiguo Testamento hebreo. Es algo nuevo y aislado que mezcla parte del judaísmo con algo de cristianismo para obtener una síntesis nueva a gusto de Mahoma. Usa, a su albedrio, personajes e historias bíblicas acomodándolos a su particular interpretación religiosa. Es decir: que hace con la Biblia lo que no podemos hacer si queremos ser fieles a la revelación divina dada a Israel: quitar o añadir indiscriminadamente. (44)

Los seguidores de Mahoma no adoran a este como dios, simplemente le respetan como profeta. La denominación musulmanes viene del vocablo Islam, que significa sumisión a la voluntad de Ala. A muchos de los santos del Antiguo Testamento, y al mismo Cristo, los tienen por profetas iguales a Mahoma, si bien este recibió una revelación más completa y perfecta que aquellos, en su opinión. (45)

Otro factor de expansión es que se trata de una religión con libro sagrado y con pretensiones de revelación, elementos todos ellos copiados de la revelación hebreo-cristiana. El islam adopto todo lo que le convenía de los relatos bíblicos, pero desecho la divinidad del Mesías, la necesidad de la muerte expiatoria y la resurrección y ascensión del Señor. (46)

Aunque de todas las grandes religiones mundiales el Islam es la que ofrece más competencia al cristianismo por sus pretensiones de ser una revelación divina, sin embargo, cuando la examinamos de cerca nos damos cuenta de su fragilidad, su origen meramente humano y su carácter tan infinitamente por debajo del de la revelación bíblica. (47)

La razón para creer que Mahoma es un profeta, es que así lo establece el Corán, la revelación definitiva de Dios; a la vez, la razón para creer que el Corán es la Palabra de Dios es que así lo afirma Mahoma, profeta de Ala. Y así podríamos seguir siempre dentro del mismo círculo. Debemos agregar, además, que Mahoma no recibió la revelación delante de todo el pueblo como Moisés, sino que la recibió en secreto, lo cual da lugar a sospechas. (48)

Mucho se ha insistido en que Mahoma no es más que un simple mensajero. Esto lo han señalado musulmanes y no musulmanes por igual, puesto que el Corán afirma claramente que Mahoma no hizo milagros. Si la primera interpretación es correcta, y Mahoma no hizo milagros, luego, no puede ser profeta, porque no hay evidencia de confirmación divina. Los versos en Sura 17:90-93 respaldan esta visión. Allí leemos que la gente desafía a Mahoma a hacer milagros para confirmar que es el profeta de Ala, y él les responde lo siguiente: ¡Gloria a mi Señor! ¿Y que soy yo sino un mortal, un enviado? . (49)

El vano esfuerzo de algunos musulmanes modernos de establecer que cuando Jesús predijo la venida de un Consolador en los capítulos 14, 15, 16 de Juan se está refiriendo a Mahoma, se desploma al suelo cuando uno lee Juan 14:26, donde al Consolador se lo identifica específicamente como el Espíritu Santo, a quien el Padre enviaría en el nombre de Jesucristo. (50)

Mahoma jamás afirmo que él era el Espíritu Santo que había venido en el nombre de Jesucristo. Por lo tanto, descubrimos que mientras la venida de Cristo fue precedida por numerosas profecías, la venida de Mahoma no fue precedida por ninguna. (51). La única señal a la que Mahoma podía apelar seria la existencia de sus revelaciones, las Suras, que componían el Corán (Sura 29:47-51). (52)

A pesar de las descabelladas pretensiones de algunos apologistas musulmanes modernos, Mahoma no escribió personalmente el manuscrito final del Corán. Su muerte fue inesperada, no solo para sus seguidores sino también para el mismo. Ni siquiera tuvo la oportunidad de juntar los registros desparramados de algunas de sus suras. (53)

Los eruditos occidentales saben perfectamente bien que en conflictos posteriores entre musulmanes y cristianos ha habido musulmanes que procuraron renovar la vida de Mahoma de forma que correspondiese más estrechamente a la vida de Jesucristo. Según Ali Dashti, estas historias son un ejemplo de la fabricación de mitos e invenciones de historias de los musulmanes. (54)

Estas leyendas posteriores, que dicen que se hicieron predicciones para la venida de Mahoma, añaden un elemento sobrenatural a su nacimiento, lo describen haciendo milagros, dicen que era sin pecado y perfecto, y que ascendió al cielo. Pero estas pretensiones no se encuentran en el Corán ni en las primitivas tradiciones musulmanas. (55)

El Corán fue escrito en dos ciudades y en diferentes momentos de la vida de Mahoma. Del total, noventa y dos suras fueron escritos al principio de su ministerio y los últimos veinticuatro se escribieron en Medina durante los últimos días de su vida. Los teólogos musulmanes comprenden que el Corán tiene dos partes distintivas. Al principio de su carrera, mientras estaba en La Meca, Mahoma recitaba versículos que eran cordiales para los no musulmanes. (56)

El llamaba a los cristianos y a los judíos Pueblos del Libro y los respetaba y honraba. Los musulmanes sostienen que este fue el periodo en que él era políticamente débil y luchaba por obtener apoyo. Entonces, se dirigió a los monoteístas, con la idea de que ellos lo respaldarían. Los siguientes dos versículos se hallan en el Corán de La Meca. (57)

Los creyentes, los judíos, los cristianos, los sabeos, quienes creen en Ala y en el último día y obran bien. Estos tienen su recompensa junto a su Señor. No tienen que temer y no estarán tristes. (Corán 2:66). (58)

No cabe coacción en la religión. La buena dirección se distingue claramente del descarrió. Quien no cree en los taguts y cree en Ala, ese tal se ase del asidero más firme, de un asidero irrompible. Ala todo lo oye, todo lo sabe. (Corán 2:256) (59)

Estos versículos y otros de los primeros escritos de Mahoma pueden fácilmente comprenderse como que dicen cosas como: 1. Todo el que cree en un solo Dios (Ala) deberá ser respetado y no molestado. 2. No deberá haber un intento de obligar a los pueblos (especialmente a los cristianos y a los judíos) de conversión al islam. 3. Los cristianos y los judíos no tienen nada que temer al islam. (60)

Los musulmanes citan estos versículos y otros similares a los occidentales para demostrar que el islam es una religión de paz, amor y perdón. Sin embargo, la segunda parte de la historia es que una sección del Corán fue escrita en Medina. Cuando Mahoma llego a Medina, fue aceptado tanto como líder político y general militar con grandes talentos en la conducción de los hombres. (61)

En Medina libro muchas batallas, incluyendo varias en contra de tribus judías de las que se informa que todos los hombres fueron asesinados y sus posesiones tomadas por los victoriosos. En esta etapa de su vida, el ya no necesitaba a los cristianos y a los judíos que en realidad no tenían gran fuerza militar (si bien las tribus judías eran bastante ricas). Sus sueños de un movimiento de influencia ahora se reconocían. Ahora se volvió contra los que estaba cortejando y comenzó a escribir palabras tales como:

…matad a los asociadores dondequiera que les encontréis. ¡Capturadles! ¡Sitiadles! ¡Tendedles emboscadas por todas partes! . (Corán 9:5) (62)

Si alguien desea una religión diferente del islam, no se le aceptara y en la otra vida será de los que se pierdan. (Corán 3:85) (63)

¡Profeta! ¡Combate contra los infieles y los hipócritas! ¡Muéstrate duro con ellos! . (Corán 66:9) (64)

Retribución de quienes hacen la guerra a Ala y a su enviado y se dan a corromper la tierra: serán muertos sin piedad, o crucificados, o amputados de manos y pies opuestos, o desterrados del país. Sufrirán ignominia en la vida de acá y terrible castigo en la otra. (Corán 5:33) (65)

Si no llega a ser por una prescripción previa de Ala, habríais sufrido un castigo terrible por haberos apoderado de aquello. (Corán 8:68) (66)

El lenguaje de Mahoma había cambiado. Sus últimas palabras ordenaban hacer daño a los no musulmanes. Solo aquellos no musulmanes que se convirtieran al islam y practicaran sus deberes religiosos exigidos escaparían del horror de su ira. No importa como los musulmanes intenten explicar el segundo conjunto de versículos, los terroristas los usan, diciendo que el fin justifica los medios. (67)

Es por eso que es muy importante saber cómo y porque Mahoma cambio de la paz a la guerra, como hemos visto, y no solo citar las partes del Corán donde él hablaba de paz en sus inicios, porque esas citas no estarán tomando en cuenta el segundo periodo y el desarrollo posterior del cambio de Mahoma, las dos partes distintivas del Corán, como se mencionó anteriormente. Citar solo la primera parte del Corán donde se habla de paz y decir que el islam solo enseña paz, es anacrónico, porque no toma en cuenta el cambio posterior a la guerra contra los infieles enseñado por Mahoma.

Según las declaraciones del Corán, la meta final del islam es lograr una sumisión mundial al Corán, cualquiera sea el costo. Los que Occidente rotula como terroristas por lo general son personas que buscan obedecer al Corán. Lo que complica más las cosas es que los musulmanes del mundo hoy día ignoran u ocultan su conocimiento de las enseñanzas de todo el Corán. (68)

Es un error también negar que los terroristas islámicos no estén siguiendo el Corán, y solo se trata de un islam extremista y no lo que falsamente se ha llamado un islam moderado, el cual puede existir en fieles, mas no en lo que representa, y es el islam en sí. El cambio en la enseñanza de Mahoma y sus hechos posteriores, prueba que no existe el islam moderado. Citar el Corán en el periodo de La Meca que era de paz y omitir e ignorar el periodo de Medina que era de la guerra y este último el que lo consolido y expandió, es no presentar en un contexto histórico correcto como se escribió las dos partes del Corán y lo que enseña realmente el Islam.

Al observar la diferencia entre el Corán de La Meca y el de Medina, podemos ver que se usan diferentes partes del Corán en diferentes zonas del mundo. En Occidente, se usa del Corán de La Meca, que enseña tolerancia y aceptación. En el mundo islámico el Corán de Medina tiene una fuerte presencia. Ambos son coránicos pero se dan dos mensajes diferentes. Ambos observan el Corán pero es fundamental comprender la muy importante doctrina de la abrogación. (69)

Al observar las dos partes del Corán, se nos dice que los primeros versículos son inferiores a los últimos. Por ende, ambas ideas de yijad son coránicas pero cuando se trata de una interpretación final, esos versículos que abogan por la violencia son más importantes porque abrogan las declaraciones moderadas anteriores. (70)

Nabeel Qureshi, un musulmán convertido al cristianismo nos dice:

Por ejemplo, el versículo coránico que he visto citado más que ningún otro para defender la visión pacifica del islam es el 5:32. Lo he visto citado en la CNN, la MSNBC, la ABC, y en innumerables materiales de dawah para demostrar que el Corán se opone al asesinato. Lo que omite cada una de esas referencias es la primera línea del versículo, que deja explicito que la prohibición de asesinato estaba dirigida específicamente a los judíos; no era una enseñanza enviada a los musulmanes. Es el siguiente versículo el que se refiere directamente al islam y a los musulmanes: Retribución de quienes hacen la guerra a Ala y a su enviado y se dan a corromper en la tierra: serán muertos sin piedad, o crucificados, o amputados de manos y pies opuestos, o desterrados del país. Por desgracia, este versículo también es ignorado en el proceso de citación selectiva. (71)

Esta omisión de los medios de comunicación occidentales y la citación incorrecta del Corán, fuera de su contexto histórico, es la que ha sembrado en las mentes de muchas personas que el Corán enseña solamente la paz. Pero cuando se estudia más profundamente al islam y al Corán descubrimos que no es así.

Sura 17:1 es el único versículo del Corán que menciona Al-Aqsa, que significa el lugar más distante de adoración (es decir mezquita). No existe nada en este versículo, sin embargo, que siquiera sugiera que Jerusalén es el destino del viaje nocturno de Mahoma. La idea no fue presentada hasta mucho más tarde. Sura 17:1 no estaba entre los versículos del Corán que originalmente se inscribieron en árabe dentro del domo. Se añadió como pensamiento posterior hace poco tiempo. Este hecho es prueba suficiente que esta estructura no fue construida teniendo en cuenta el supuesto viaje nocturno de Mahoma. (72)

La evidencia de manuscritos antiguos demuestra que el Corán evoluciono con el tiempo; distintos eruditos musulmanes le añadieron marcas diacríticas para definir palabras. Aunque los expertos concuerdan en que el Corán actual es cercano a lo que Mahoma hablo, la evidencia de manuscritos rivales, miles de variantes, versículos en conflicto y versículos faltantes comprueba, sin embargo, que es dudoso que el Corán actual sea una complicación exacta y 100 por ciento precisa. (73)

Aunque los musulmanes creen que el Corán existe en el cielo, que ha bajado y ha sido revelado por Ala a través de Gabriel, y luego entregado a Mahoma, la evidencia del uso material prestado de otras historias religiosas muestra que este material no pudo haber preexistido en el cielo con Ala. En el Corán hay textos que provienen de fuentes judías, cristianas e incluso paganas, y que revelan el componente humano dentro del Corán. Estos préstamos muestran que Mahoma aprendió y acepto estas historias religiosas como verdaderas y las recito como parte del Corán. (74)

Es cuestionable en cierto modo que Mahoma fuera verdaderamente un iletrado. Como destaca una autoridad, las palabras árabes al umni traducidas el iletrado profeta del Corán (7:157) es posible que quisiera decir algo más que iletrado. Pfander agrega que la frase árabe no significa el iletrado profeta sino el profeta gentil y esto no implica ignorancia. (75)

Hay evidencia para indicar que Mahoma no fue analfabeta. Por ejemplo, cuando el pacto de Hudaibah fue firmado, Mahoma tomo la pluma de Ali, llamo la atención a las palabras con las que Ali lo había señalado como el apóstol de Dios y escribió en vez con su propia mano las palabras "hijo de Abdu’llah. La tradición nos dice también que cuando estaba muriendo Mahoma pidió una pluma y tinta para escribir un mandato señalando un sucesor, pero sus fuerzas fallaron antes de que escribiera los puntos señalados. Si en verdad fuese cierto que el profeta fue iletrado, no habría seguido lógicamente lo que el Corán le impuso a el por Dios. (76)

Los libros santos de los musulmanes incluyen los dichos de Moisés, los profetas, David, Jesús y Mahoma. Sin embargo, los musulmanes creen que todos los dichos anteriores han sido perdidos o corrompidos y que solo el Corán ha sido preservado sin error. También pretenden anular todas las anteriores revelaciones. Recordemos, los libros santos mencionados en el islam no son exactamente como nuestras Escrituras bíblicas. (77)

Acerca de la crucifixión, el Corán afirma en la Sura 4:156: No lo mataron y no lo crucificaron, sino que así les pareció. La mayoría de los musulmanes creen que Judas fue puesto en el lugar de Cristo y que Cristo fue al cielo. La Biblia enseña que Cristo fue a la cruz para pagar por los pecados de los hombres, murió, y resucito de entre los muertos, se apareció a los discípulos y entonces ascendió al cielo (1 Corintios 15:3, 4). (78)

También rechazan la Biblia como el único libro autoritativo sobre el que basar todas las cuestiones de doctrina, fe y práctica. Cuando el islam rechaza la verdad de la Palabra escrita de Dios, no solo quedan en una posición distinta de la cristiana, sino opuesta a la cristiana en casi todos los particulares. (79)

Puesto que los musulmanes proclaman que el Corán carece por completo de errores, ya que tiene su fuente en la mente perfecta de Dios, la mayoría de ellos no están dispuestos a realizar un examen crítico de su contenido. Las siguientes preguntas estarían prohibidas: ¿Qué fuentes pre coránicas influyeron en Mahoma? Puesto que el Corán reconoce la inspiración plena de la Biblia, ¿Por qué hay serias discrepancias en ciertos puntos entre lo que dice la Biblia y lo que enseña Mahoma? ¿Cómo llego el Corán a tener la forma en la que lo hallamos hoy? (80)

Este tipo de preguntas se ve como algo que deshonra a Dios y a su profeta. La respuesta, bastante simple, es que Dios se lo dijo todo a Mahoma; nada vino del propio pensamiento del profeta. Las palabras de Dios se conservaron y recogieron de manera perfecta antes de la muerte del profeta, y el Corán es hoy justo el mismo que era cuando se presentó por primera vez al mundo hace casi catorce siglos. (81)

Si hay discrepancias entre el Corán y la Biblia, la culpa es de los judíos y los cristianos, los cuales han pervertido la verdad que recibieron en sus orígenes. El Corán, por la perfecta sabiduría y poder de Dios, restaura y aclara la verdad, tal como les fue dada en el principio a Moisés y a Jesús. Tratar de ahondar tras las palabras reveladas del Corán es no creer su fuente divina y así deshonrar a Ala. El musulmán fiel considera que no debe hacer esto. (82)

Los musulmanes son bastante críticos contra la Biblia, pero si uno aplica el mismo criticismo también al Corán, es inaceptable para ellos. Para ellos el Corán es incuestionable. El rehusarse a no juzgues mi revelación y mi libro, puede encontrarse también en cualquier secta. A pesar de eso, si hay apologistas musulmanes que están dispuestos a debatir el Corán y sus diferencias con la Biblia, como el muy conocido Shabir Ally. El Corán tiene serios errores sobre Cristo, y de otros temas, y no es una revelación de Dios, es un libro creado por el hombre y que contradice la Biblia en doctrinas fundamentales. Hay quienes erróneamente llaman al Corán La Biblia de los musulmanes como si existieran dos Biblias, y el Corán fuera revelación de Dios.

(1) James A. Beverley, Islam, una introducción a la religión, su cultura y su historia pags. 21-22. Grupo Nelson.

(2) Beverley., Ibíd. 23.

(3) Beverley., Ibíd. 23.

(4) Beverley., Ibíd. 23.

Cuando Salman Rushdie publico sus versos satánicos, una novela imaginaria e irreverente acerca de Mahoma y el Corán, fue sentenciado a muerte por el Ayatola Khomeini, líder religioso de Irán. (Timothy George, ¿El mismo Dios? comprendiendo las diferencias entre el cristianismo y el islam, pag. 46. Editorial Mundo Hispano)

(5) Beverley., Ibíd. 23.

(6) Beverley., Ibíd. 27-28.

(7) Robert A. Morey, La invasión islámica pag. 111. Editorial Portavoz.

(8) Fritz Ridenour, ¿Cuál es la diferencia? Una comparación entre las principales sectas y credos religiosos a la luz de la Biblia pag. 93. CLIE.

(9) Ron Carlson y Ed Decker, Realidades sobre doctrinas falsas pag. 129. Editorial Unilit.

(10) Carlson y Decker., Ibid. 125.

(11) Morey., Ibid. 68.

(12) Morey., Ibid. 68.

(13) Morey., Ibíd. 68-69.

(14) Morey., Ibíd. 69.

(15) Mateen Elass, Comprenda el Corán, pag. 33. Editorial Unilit.

(16) Elass., Ibid. 33-34.

(17) Elass., Ibid. 37.

(18) Elass., Ibíd. 37-38.

(19) Norman Geisler y Abdul Saleeb, Islamismo al descubierto, pag. 212 Editorial Vida.

(20) Josh McDowell y Jim Walker, Diferencias entre el islam y el cristianismo pag. 269 Editorial Mundo Hispano.

(21) Elass., Ibíd. 185-186.

(22) Dave Hunt, El Día del juicio, el Islam, Israel y las