¡Sigue adelante!: Guía para enfrentar la enfermedad crónica o la discapacidad

Por Tanya Schiefer

El trabajo que implica aceptar que tienes alguna discapacidad o que padeces una enfermedad te obliga a enfrentar tu pasado, tu presente y tu futuro, y el entendimiento de esta nueva situacin también incluye a todas las personas que rodean al individuo que padece alguna enfermedad o discapacidad, tanto familiares como médicos. Es por ello que Tanya Schiefer, quien experimenta una situacin de este tipo, escribi este libro para guiar a todo aquél que desea este cambio de perspectiva en su vida. "Sigue adelante!" es la oportunidad perfecta para tomarte un tiempo y reflexionar sobre las emociones y frustraciones que tal vez experimentars en el camino de tu padecimiento, o en el de un ser querido. En estas pginas, la autora te comparte historias de otros pacientes y varias preguntas que te ayudarn a no perder de vista lo valioso que resulta estar vivo y la fuerza interna con la que cuentas para seguir adelante.

• Idioma: Español
• Editorial: Panorama Editorial
• Fecha de lanzamiento: 17 mar 2017
• ISBN: 9786078469109

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Smiles

El ser humano integral

Quiero aclarar un concepto importante: una persona que padece una enfermedad o discapacidad es un individuo; la enfermedad o la discapacidad es sólo una característica, forma parte de lo que eres, pero no es tu esencia. Antes que ser madre, padre, hijo, sano o enfermo, simpático o serio, somos seres humanos integrales.

El ser humano es un todo indivisible en contacto con un ambiente del cual es inseparable. Una persona puede ser mejor descrita si se consideran cuatro aspectos principales que la constituyen: el físico, el intelectual, el emocional y el espiritual.

Figura 2. Los cuatro aspectos del ser humano.

Para los fines de este libro, definiremos estos aspectos de la siguiente manera:

Aspecto físico. Es todo aquello que tiene que ver con las funciones corporales, como la salud o la enfermedad, la condición física, las habilidades motrices, los cinco sentidos, las horas de sueño, la toma de medicamentos y los efectos que éstos tienen sobre el cuerpo, las funciones de órganos vitales, etcétera. Éste se puede modificar al hacer ejercicio o al utilizar horarios claros para la toma de medicamentos, mediante una buena alimentación, entre otras medidas.

Aspecto intelectual. Abarca las habilidades para asimilar, retener, aplicar y modificar el contexto que te rodea, la capacidad de resolver problemas, aplicar la lógica, y el uso y comprensión del lenguaje escrito. Se estimula por medio del pensamiento, la escritura, el diálogo, la lectura, la resolución de crucigramas o sudokus, el aprendizaje de alguna materia, una manualidad o la memorización.

Aspecto emocional. Éste tiene que ver con la manera como te sientes (triste, animado, dependiente, desmotivado o motivado, solo o acompañado, integrado o rechazado), y se puede modificar si llevas un diario de cosas que quieres agradecer; por ejemplo, al dar o pedir un abrazo, salir a pasear, admirar la naturaleza, platicar con amigos, jugar cartas, pasar más tiempo con tu familia o llevar a cabo aquello que te guste y te haga sentir bien.

Aspecto espiritual. Éste no necesariamente tiene que ver con lo religioso. Lo espiritual, en cambio, es todo aquello que nos conecta con lo inmaterial, con la búsqueda de un sentido de vida, con las creencias filosóficas, con la manera en que consideramos al individuo, la autoconciencia y el valor que le damos a los bienes intangibles, como la amistad, el amor, la liberación de la conciencia y la paz interior. Para algunos, está íntimamente ligado con las creencias religiosas, pero para otros no. Lo importante es que descubras lo que es verdadero y útil para ti, más allá de la religión que te hayan inculcado desde niño.

Estos cuatro aspectos tienen la misma importancia e interactúan en formas complejas. Cuando se ha vivido una pérdida física, el resultado que ello tenga en tu vida y tus habilidades para continuar o aceptar lo que venga dependerán de las emociones que tú sientas en relación con ésta, tus pensamientos y la manera como concibes tu aspecto espiritual. Por eso, en este manual de trabajo te pido que consideres siempre estos cuatro puntos para lograr que tus respuestas reflejen tu ser integral y no se encuentren sesgadas en una sola dirección, lo que propiciaría que tus planes de acción se desequilibren.

¿Qué es una pérdida?

Una pérdida ocurre cuando se tiene un bien, sea una persona amada, una capacidad física e incluso una situación laboral o material, y de manera repentina o gradual ya no está presente.

Se refiere a la ausencia de algo que se tenía, puede ser hasta una ilusión. Cuando tenías algo o a alguien que querías mucho y que por alguna razón (accidente, enfermedad o causas externas) ya no