Come según tu estado de ánimo
as tenido un día horrible; sientes cansancio y fastidio al extremo, y una vez en casa, un impulso similar a una fuerza paranormal te dirige al refri. El brócoli lo descartas para otro momento con mejor ánimo. Hoy te mereces pizza y un helado cargado de . ¿Quién no ha sucumbido a la tentación de la comida rápida para confrontar un desamor o un ataque de estrés? Lo cierto es que son falsos bocados de felicidad. “Los alimentos supuestamente reconfortantes, ricos en carbohidratos de absorción rápida (azúcar, harinas refinadas...) y de fácil preparación (precocinados) tienen un efecto pasajero casi inmediato. A largo plazo no mejoran los niveles de serotonina (un neurotransmi-sor que beneficia el bienestar psíquico); además, suelen consumirse de forma
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos