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Divinos Dioses Espaciales 2: Divinos Dioses Espaciales, #2
Divinos Dioses Espaciales 2: Divinos Dioses Espaciales, #2
Divinos Dioses Espaciales 2: Divinos Dioses Espaciales, #2
Libro electrónico264 páginas2 horas

Divinos Dioses Espaciales 2: Divinos Dioses Espaciales, #2

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Keila es la perfecta revolucionaria:
No posee cosas como inteligencia, cordura o sentido común,
Pero tiene algo mucho más importante: ¡Armadura de trama y la ayuda telepática de Rangda, la malvada demonio espacial!

Este libro es la secuela de Dioses Divinos del Espacio: Las tonterías de Abraham y es una comedia negra y parodia de la Divina Sedición, del mismo autor.
Es el año 2872 y la joven, bella, y completamente loca Keila Eisenstein está huyendo de su acosador milenario, el ContraAlmirante Bjorn Muller. Escapando de él una decimonovena vez, Keila se estrella en el asteroide colonia Edén, altamente reconocido como el escenario del eterno reality show “Los Tontos de la Era de Bronce” 
Convencida de que en Edén se encuentra su destino, Keila mata a la involuntariaestrella principal de “Los tontos de la edad de Bronce” Abraham Goldstein, lo que hace que el show se cancele. Keila simula su muerte al borrar su cuenta en redes sociales e insta a su amante Metatrón a que haga un comunicado de prensa culpando de la cancelación del show a Bjorn Muller. 
Bjorn, convencido de que Keila está muerta, ya que no puede imaginarse que ella haya borrado su cuenta de SpaceBook voluntariamente, vuelve a la Tierra para unas vacaciones. ¡Las vacaciones se ven arruinadas, ya que Bjorn es culpado por causar la cancelación del show favorito de todos!
Estando “muerta” Keila construye un movimiento revolucionario contra el Concejo Terrestre opresor. A pesar de su falta de inteligencia y sentido común, su armadura de trama corre a su favor, y con la ayuda de la malvada demonio espacial Rangda, está destinada a liberar a la humanidad de la opresión del incompetente hato de villanos que forma el Concejo Terrestre.
Pero ¿es realmente una buena idea confiar en una malvada demonio espacial para liberar a la humanidad de un grupo de opresores plutócratas?

IdiomaEspañol
EditorialBadPress
Fecha de lanzamiento18 sept 2019
ISBN9781071508589
Divinos Dioses Espaciales 2: Divinos Dioses Espaciales, #2
Autor

Martin Lundqvist

Martin's background Martin is a Swedish male born in 1985 He has lived in Australia since 2012, and has been with his partner Elaine Hidayat since 2013. Martin's writing history Martin wrote wrote his first book, the psychological crime thriller James Locker: The Duality of Fate back in 2013.  After that Martin had a break from book writing for a couple of years. In late 2016, Martin decided to take up book writing again and he finished his Science Fiction novel The Divine Dissimulation a year later. In July 2018 Martin finished his third book, The Divine Sedition. which constitutes the second book in The Divine Zetan trilogy. In 2018 Martin also wrote a short-story for children Matt's Amazing Week and a parody novella called Divine Space Gods: Abraham's Follies In January 2019 Martin finished writing Divine Space Gods II: Revolution for Dummies Martin's style Martin is a multi-genre writer who likes to mix up his works. So far he has released works in the crime, science fiction, humor and children genre, and he intend to write more genres in the future to mix up his repertoire and improve his writing.

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    Divinos Dioses Espaciales 2 - Martin Lundqvist

    Capítulo 1: Arrepentimientos, tecnología de control mental y una adicción al Spacebook

    Keila Eisenstein se levantó del suelo donde había estado un tiempo con unas fuertes convulsiones. Las convulsiones ocurrían de vez en cuando, y Keila había visitado a un médico por ellas. Desafortunadamente, la medicina que detenía las convulsiones también ponía fin a sus visiones Divinas y ella no quería perderlas, así que simplemente tenía que conformarse con un temblor incontrolable de vez en cuando.

    Keila miró los cadáveres de Joshua y Abraham. ¿Los había matado? Y si lo hizo, ¿Por qué haría algo así? Teniendo en cuenta que Keila era la única en la habitación, y que de hecho sostenía un arma humeante, concluyó que ella debía ser la asesina. ¿Pero por qué haría eso?

    De matar a Abraham, la respuesta fue obvia. Él era el malvado tirano por el que ella había venido a Edén, para detenerle y usurparle el poder. Pero ¿Por qué matar a Joshua? Aunque era molesto, pegajoso y un amante pésimo, parecía una locura matarlo. Pero entonces Keila recordó de repente: Una malvada demonio extraterrestre llamada Rangda le había ordenado matar a su amante, en una visión autoritaria. En tales circunstancias, lo único sensato era acatar, ya que parecía imprudente discutir con la malvada alienígena.

    Con ese asunto resuelto, Keila pasó a un tema más importante. ¿Cómo iba a tomar el control de Edén para poder reanudar su inútil rebelión contra el Concejo Terrestre y su némesis Björn Muller? Matar al capo del mundo asteroide Edén fue un buen comienzo, pero Keila sabía por experiencia que matar al jefe no la convertía en la nueva jefa automáticamente. Keila había matado al líder del Concejo Terrestre antes de ir a Edén, y en lugar de convertirse en la líder de la Tierra, la habían perseguido e intentado matar durante cuatro años seguidos. ¡Hablando de guardar rencor!

    Finalmente, Keila ideó un plan a prueba de tontos. Usaría el replicador de partículas, que estaba convenientemente colocado en la habitación en la que se encontraba, para hacer una copia del chip de control mental alienígena que Abraham había usado para controlar las mentes de los Edénitas. ¡Si Abraham podía hacerlo, ella también!

    Keila activó el replicador de partículas para hacer el chip GOD, que significa Gran Opresor Desesperado, y la pantalla mostró que tardaría 2 horas en completar el microchip. Qué mala suerte, ¿No? ¿Y si alguien pasara por ahí en ese largo período? Keila concluyó que eso no era muy probable. Abraham era un gilipollas, y sus empleados probablemente siempre que podían se mantenían lo más lejos posible de él.

    Keila consideró pasar las dos horas haciendo algo útil, como leer el indispensable manual de operaciones que venía con la tecnología de control mental, pero decidió que mejor no. Su teléfono había estado muerto durante días, y se moría por saber qué había pasado en su programa de televisión favorito, Las esposas ricas de Warner Brothers en los últimos días.

    Se conectó a Spacebook para publicar una actualización de estado cuando vio algo interesante. Su antiguo némesis, Björn Muller, también había actualizado su situación. Björn escribió: Bebiendo whisky en el sofá espacial con unos hermosos drones. ¡Esto causó un ataque de celos y una epifanía en Keila! ¡La razón por la que Björn Muller y el ejército siempre parecían aparecer donde ella estaba, a pesar de que había estado tratando de evitarlo desde que rompieron, era porque él la seguía en las redes sociales! En una jugada maestra, Keila desactivó su cuenta de Spacebook, y en la razón de la desactivación escribió: El usuario ha perecido. Ja ¡Eso los engañará!

    Luego puso un episodio de su programa de televisión favorito en la habitación privada de Abraham, pero sin querer también lo puso en todos los monitores de la estación de control espacial de Edén en la que se encontraba. Esto alertó al grupo de soldados de Abraham, los Ángeles, de que algo andaba mal, ya que Abraham aborrecía Las esposas ricas de Warner Brothers y nunca lo vería.

    Keila se levantó como un resorte del sofá cuando Samael y los otros Ángeles irrumpieron en la habitación.  Samael y los demás levantaron las armas, y Samael gritó:

    -  ¡¡Alto!! ¡¿Quién eres y qué haces aquí?!

    Keila:

    -  Soy Keila Eisenstein de la Alianza Marciano-Humana, y estoy viendo la televisión.

    Samael:

    -  Sí, puedo ver eso. Pero más allá de tu terrible gusto cuando se trata de programas de televisión, ¡También eres un intruso! ¿Dónde está nuestro gran maestro Abraham?

    Samael miró los cadáveres de Abraham y de Joshua y continuó hablando:

    -  ¡Diablos! ¿Mataste a nuestro gran maestro Abraham?

    Dándose cuenta de que la verdad podría no ser popular, Keila decidió mentir:

    -  No, no lo hice. Joshua ahí mató a Abraham, y luego se suicidó arrepintiéndose de lo que había hecho.

    Samael:

    -  Ok. Entonces, ¿Qué haces aquí? ¡Ninguna mujer debería poner un pie en esta habitación!

    Keila *risitas*:

    -  Oh, soy la stripper que fue solicitada para celebrar el cumpleaños de uno de los Ángeles.

    Samael:

    -  ¡Mientes! No celebramos cumpleaños por aquí. Sólo celebramos la gloria de Abraham.

    Metatrón, otro ángel al que nunca le había gustado Abraham en primer lugar, decidió que era hora de intervenir. No era su cumpleaños, pero Samael no lo sabía, y quería ayudar a esta hermosa y joven mujer, así que decidió intentar:

    -  Vamos, Samael. Es mi cumpleaños. Hemos sido compañeros durante 60 años, Abraham finalmente se ha ido, ¡Celebremos y deja que esta bella dama haga un baile erótico para mí!

    Samael:

    -  Ok. A mí tampoco me molestaría mirar. Mataré a la intrusa más tarde.

    -  ¡Ahora baila, MUJER!

    Keila echó un vistazo a la pantalla del replicador de partículas, que mostraba que el tiempo faltante de creación del Chip GOD era de cinco minutos. Mientras se levantaba, Keila se dio cuenta de un defecto en su fachada de desnudista. ¡No sabía bailar en absoluto! Además, estaba herida, ya que tenía una bala en la pierna de su pelea previa con el guardaespaldas de Abraham, Abaddon. Se levantó, cojeando y bailando horriblemente mientras pretendía sonreír melosamente en medio del dolor. Afortunadamente, Keila tenía un cuerpo sensual y ardiente y, a pesar de sus pobres técnicas de baile, se las arregló para hipnotizar a los ángeles hambrientos de sexo el tiempo suficiente para que el chip GOD de control mental estuviera completo.

    Keila corrió a la máquina replicadora de partículas de manera desesperada, agarró el chip de control mental y se lo encajó en el oído izquierdo. ¡Ay! Por desgracia se insertó el chip del lado incorrecto, ya que había sido demasiado histérica como para leer el manual, así que, en lugar de obtener el control absoluto, la acción liberó una explosión psiónica que la noqueó a ella y a todos los demás en la habitación. ¡Bum!

    Capítulo 2: Metatrón despierta y decide poner a la desorientada e ignorante Keila Eisenstein a cargo.  

    Un rato después, Metatrón se despertó con un terrible dolor de cabeza, preguntándose por qué había estado bebiendo demasiado otra vez. Luego abrió los ojos y se dio cuenta de que no era una resaca lo que estaba experimentando, sino algo mucho más único y potencialmente peligroso. Un cortocircuito en la tecnología de control mental alienígena que había causado una explosión psiónica que dejó a todos inconscientes.

    Metatrón miró a su alrededor y vio que todos sus colegas, así como la extraña y misteriosa mujer, su futura jefa de mentirillas, Keila, seguían desmayados. Qué suerte que se despertó primero. Metatrón, sabiendo que ella había matado a Abraham y que eso le daba el legítimo derecho de ser la favorita, llevó a Keila a una unidad de soporte vital y luego insertó el chip GOD de manera correcta para evitar otra explosión accidental. Luego conectó su cuerpo dormido y su mente despistada a la máquina detectora Divina, y, a modo de broma, la transportó a un mundo alucinatorio, de modo que la reacción inicial de Keila cuando se despertó fuera la de pensar que en verdad había muerto y había ido al cielo.

    Metatrón repasó su plan a prueba de tontos mentalmente:

    Deshacerse de Abraham: Listo.

    Insertar correctamente el chip de control mental en Keila, la sucesora predestinada: Listo.

    Convencer a los otros de que Keila era la elegida en medio de los reclamos de los otros Ángeles: Pendiente

    Hacerse amigo y seducir a Keila, para que lo promueva a esposo de-facto: Pendiente.

    Dejó el cuerpo inmóvil de Keila acostado en la máquina detectora Divina con su cabeza aún unida por tubos de metal y volvió a acostarse en el suelo, pretendiendo estar inconsciente para poder fingir que se despertaba al mismo tiempo que los otros Ángeles. Una hora después, Samael y los demás se despertaron.

    Samael *aturdido*:

    -  ¡Despierten todos! ¿Qué ha pasado? ¿Dónde está la intrusa?

    Metatrón *pretendiendo que acaba de despertar*:

    -  Eh, ejem, ¿Han comprobado si está conectada a la máquina detectora Divina?

    Samael:

    -  Lo está. Pero ella también debería haber quedado noqueada por la explosión.

    -  ¿Cómo sucedió esto?

    Metatrón:

    -  Es inexplicable, ¿Verdad? Debe haber sido la voluntad divina de Yahvé lo que lo hizo posible.

    -  Debe ser una señal de que debemos elevarla al liderazgo y seguir sus locos mandamientos, así como seguimos a Abraham bajo la orden de Yahvé, la Divina Deidad, durante todos estos años.

    Samael:

    -  Sí, debe significar eso.

    Samael *proclamando en voz alta*:

    -  ¡Compañeros ángeles! ¡Ahora debemos seguir a nuestra nueva profetisa divina, Keila Eisenstein, para cumplir los mandatos de Yahvé, ya que Abraham está muerto!

    Samael recibió por respuesta un suave murmullo de los otros ángeles, que aún estaban demasiado confundidos para entender lo que estaba sucediendo, pero al menos nadie parecía molestarse en discutir. Todos se dirigieron a sus habitaciones salvo Metatrón, que planeaba esperar a que Keila se despertara.

    Capítulo 3 Metatrón seduce a Keila Eisenstein y hace de ella una aliada.

    Keila abrió los ojos, después de lo que pareció un muy largo sueño. Las cosas se veían bien desde su punto de vista ya que era recibida por la encantadora sonrisa del increíblemente guapo Metatrón, el apuesto y maduro ángel.

    Metatrón:

    -  Buenos días, Señora Gran Maestra Keila. Soy Metatrón, a su servicio.

    Keila:

    -  Recuerdo haberte visto antes de la explosión. Tú fuiste el que dejó la puerta de la estación espacial abierta para mí, ¿Verdad?

    Metatrón:

    -  Es cierto. Me alegra que recuerde ese detalle. ¿Se encontró con Yahvé, el Dios de nuestro pueblo?

    Keila:

    -  Lo hice, y él no es de mi incumbencia. ¡Soy marciana, no edenita! En el planeta Marte adoramos al Verdadero Creador, el padre de todos los seres.

    Metatrón *risitas*:

    -  Ok. No destruyamos nuestra potencialmente beneficiosa relación mutua discutiendo sobre religión.

    Keila *sonríe*:

    -  Buen punto.

    -  Como sea, vi a tu dios Yahvé en la Dimensión Divina. Pero no dijo mucho. Estaba muerto, y parecía estarlo desde hace mucho tiempo....

    Metatrón:

    -  ¡Oh, no! ¡Abraham debe haberlo matado y nos mintió todo este tiempo! ¿Qué será de nosotros ahora?

    Keila:

    -  En realidad, no. Vi la carta de suicidio de Yahvé. Lleva muerto un milenio.

    Metatrón:

    -  Bueno, son noticias fascinantes. Pero será mejor que vaya yo mismo y lo vea con mis propios ojos. Sin embargo, no se me permite usar la máquina para ir al cielo, sólo a Abraham se le permitía.

    Keila:

    -  Si me asciendes al liderazgo te dejaré usar la máquina todo lo que quieras.

    Metatrón:

    -  Genial. Sabía que tomé la decisión correcta cuando decidí ayudarte a matar a Abraham y nombrarte para Gran Maestra de Edén.

    Keila:

    -  Buena onda. ¿Pero por qué los otros aceptarían hacerme su líder? ¿Y qué hay para ti en ello?

    Metatrón:

    -  Los engañé para que creyeran que Yahvé te escogió y salvó tu vida después de que ocurrió la explosión psiónica cuando, de hecho, fui yo quien te rescató.

    -  Personalmente, me gustaría que me ascendieran a segundo al mando de Edén. También he estado de mala racha un muy largo tiempo.

    Keila:

    -  Estaría encantada de ascenderte a la posición que quieras.

    -  En cuanto a tu mala racha, ¿Te das cuenta de que tengo una bala en la pierna, una bala en el brazo y un terrible dolor de cabeza de la explosión psiónica que debería haberme matado?

    Metatrón:

    -  Sí, ahora que lo dices, suena razonable. Gracias, Gran Maestra Keila. Te conseguiré un robot médico para que cure tus heridas de inmediato.

    Keila:

    -  Gracias, Metatrón. Llámame, Keila de ahora en adelante. Ahora ve a descansar un poco. ¡Tenemos muchas cosas que hacer en los próximos días!

    Después de que Metatrón salió de la habitación Keila sonrió. Todo había salido exactamente como ella esperaba, y pronto Björn Muller y el resto del Concejo Terrestre sentirían su ira mientras guiaba al pueblo marciano hacia la libertad. En cuanto a sus sentimientos por Björn y Joshua, habían desaparecido hace tiempo, y ahora aparece Metatrón, guapo y lindo al mismo tiempo, ¿Pero tener relaciones sexuales con él inmediatamente después de sufrir lesiones que ponían en peligro su vida? La gente era así de estúpida solo en las películas. Keila le ordenó al robot médico que le diera una fuerte dosis de morfina y cayó rendida en un dichoso sueño.

    Capítulo 4 Los escépticos Adal Schneider y Markus Bauer interrumpen la celebración de Björn Muller

    Más tarde ese mismo día Björn Müller disfrutaba de otra celebración privada en sus aposentos. Su última celebración un par de días antes había terminado abruptamente cuando Adal Schneider le dijo que Keila había logrado escapar de su nave en una capsula y se había estrellado en Edén justo antes de que su nave fuera destruida. Pero esta vez su muerte era segura. Su cuenta de Spacebook había sido desactivada, y el código de error que aparecía era Usuario ha fallecido. Como Keila era una adicta a las redes sociales, ¡Esta era una prueba definitiva de que en efecto estaba muerta!

    Alguien golpeó a la puerta de Björn y, para su desgracia, era su mano derecha, el capitán Adal Schneider, y su jefe de científicos Markus Bauer. Björn comprendió al instante por las miradas de desaprobación en sus caras que esta iba a ser otra situación seriamente repugnante. Björn suspiró y dijo:

    -  ¿Qué pasa ahora mis queriditos?

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