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Mujer vs Hembra
Mujer vs Hembra
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Libro electrónico109 páginas31 minutos

Mujer vs Hembra

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Mujer vs Hembra es el cuarto libro de poemas escrito por Alicia Medina Flores; sin embargo, el primero en ver la luz. ¿Por qué ha desplazado a los otros, que continúan en el anonimato? La autora ha considerado que esta obra es la mejor y más sincera manera de expresar las ondulaciones, cadencias y movimientos que en la actualidad llaman su atención. Atreverse a tomar de la mano el erotismo y conducirlo de página en página, entre el día y la noche, entre fracasos y batallas, describiendo el ondular de su ser ante las sensaciones sin permitir el desorden que producen las ropas, abre un espacio que le hace reconocible, cierta, humana, encerrando entre sus páginas la sinuosa, delicada y bella forma que adquiere y posee el erotismo en el ser humano. Amor-erotismo, rabia–erotismo, sangre–erotismo, decepción–erotismo; el ahora, la vida, los instantes, lo real, lo cierto.
IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento7 jun 2019
ISBN9789566039112
Mujer vs Hembra

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    Mujer vs Hembra - Alicia Medina Flores

    MI SANGRE

    Pienso,

    pienso en mi sangre, en su ritmo,

    desde donde parte, estación primaria el alma.

    Su rítmico paso por oscuros rincones,

    perdidos,

    olvidados.

    Pienso en ella

    mientras aparecen y desaparecen tras el flujo,

    rostros.

    Busco cicatrices que asoman como sombras y

    cuerpos extraviados.

    Pienso en mi sangre, en su textura y temperatura,

    ese flujo que decide por mí,

    en el que me pierdo cuando retiro mis ropas

    y un hombre extraño se calza mi blusa,

    en ese flujo caliente, caliente como el mío,

    puro, exacto, humano.

    Pienso en ella y en la muerte

    en el color que no se ha de conocer,

    en las aberturas de mi cuerpo

    y por donde ha escapado la vida,

    transformándose

    mirándome de frente, desde arriba

    y a veces con enfado.

    También pienso en el hombre y en su esclavo,

    el pensamiento.

    TRASPUESTA

    Aquí, traspuesta

    en medio de la tarde

    invoco conjuros,

    descuelgo de algún lado

    hipocampos terrestres,

    también blasfemo a veces

    es cierto,

    es que en dos vueltas de mundo

    algo

    torció mi mano izquierda

    volviéndola sumisa y pordiosera,

    algo oscuro, desdentado.

    Entre las púas de su lengua

    se enredaron uno que otro beso,

    unos cuantos suspiros de media noche,

    es lo que quedó,

    es lo que queda.

    Aquí traspuesta la tarde pide permiso,

    y quedo aquí, inquieta.

    CAIGO

    Como lo candente y que escurre

    caigo,

    densa, tibia como mano en un vientre,

    de los cabellos asomando rosas de profundo aroma,

    ¿voy de pie? No lo sé.

    Caigo,

    espesa, ardiente

    con el pubis azulado,

    así como la tristeza,

    como las tardes en tierras lejanas

    como dos manos a solas, caigo.

    DE PRONTO…

    De pronto es lo que es

    la mano

    la boca,

    ese perfil de mendigo y sombra ausente,

    de pronto es eso, lo que es,

    solo cánticos enfermizos

    de unos cuantos pechos inflados,

    o quizás son aquellas estanterías

    donde algún día hubo la dulce miel

    y el reposo por instantes

    de tu mirada clara,

    de pronto es solo hoy

    y este absurdo cuarto descuadrado

    y ventanas colgando de un pie,

    de pronto es seguramente

    este antiguo y profundo hastío

    ese de pensarte y des pensarte

    mientras las puertas siguen con su rito azaroso.

    DEMONIOS MÍOS

    Libres sean señores demonios, libres sean,

    cuando la noche se torne perfecta, vengan y rodéenme,

    descuélguense por mi espalda sin afanes ni culpas,

    diluyan los tormentos que parlotean sobre mis ojos,

    violenten esta lengua, sáquenla de su modorra

    y diviértanse cual niños desnudos profanando mi ombligo,

    vengan, sofóquenme,

    que cargo dedos que parlan

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