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Memorias De Un Inmigrante
Memorias De Un Inmigrante
Memorias De Un Inmigrante
Libro electrónico204 páginas3 horas

Memorias De Un Inmigrante

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Es,sencillamente la historia de mi vida,trascurrida desde los aos 50con una nies llena de travesuras, alegria y extrabagancias de la poca, y con una adolecencia truncada por querer entrar al mundo de los mayores, y pretender ser Grandeetapa vivida con el machismo y la injusticia de la Sociedad de la poca, a pesar de los ostaculos que la vida da, haber podido absorber los buenos consejos de esa Abuela cascarrabia, y los buenos momentos con el cura de mi Iglesia de origen, y con todo lo bueno qu este lindo pais tiene. Principalmente por el amor de mi esposa, hemos podido formar una familia, con amor, respeto y dignidad de ser Latino.

Tratamos de pasar a nuestros descendientes la felicidad de la Vida qu es simplemente El Amor, sin el nunca hubieramos logrado la familia que hoy tenemos y de nuestro dia Miercoles Dia de Familia.

Angelo Alfaro Sr.
IdiomaEspañol
EditorialPalibrio
Fecha de lanzamiento18 ene 2012
ISBN9781463315665
Memorias De Un Inmigrante
Autor

Angelo Alfaro Sr.

Mr. Angelo Alfaro Sr. was born in Lima, Perú. He decided to immigrate to the United States with the intention of making his idea of family reality. More than forty-fi ve years have passed, lives in the state of Virginia next to Ana Maria, his lifelong companion. They have five children and eleven grandchildren. He wrote his first book "Memoirs of an Immigrant" after defeating his own fears, is bold, self-taught learner and lifelong student, avid reader, international chef, social server and has graduated with honors from the university of life in different specialties.

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    Memorias De Un Inmigrante - Angelo Alfaro Sr.

    Contents

    Dedicatoria

    Introducción

    Recuerdos

    Dedicatoria

    Desearia comensar dandole las Gracias a Dios por habrme dado tanto.

    A mi Madre y Abuela por haberme soportado mis años de infancia y adolecencia.

    A la perosna principal mi Esposa,sin ella nada hubiese sido posible principalmente esta historia.

    A mis hijos por dejarme ser Padre Mis nietos por permitirme el poder gozarlos todos los Miercoles.

    Indudablemente a todos los que por un o otro motivo se crusaron en mi vida dejando lindos recuerdos momentos inolvidables, esperiencias invarorables.

    Siento que la vida es como un tren, tiene su comienso y su fin, en su vieje tiene muchas paradas, pasa por paisajes y muchas veces por estaciones de tiempo y puedes ver personas que suben algunas siguen largo viaje contigo y otras se bajan,por tal motivo doy gracias a todas esas personas que viajaron por algun tiempo en mi mismo tren, cada uno elije su parada de destino.

    Introducción

    Mi nombre es Ángelo Alfaro Sr. Desde que adquirí la Nacionalidad Americana, haciéndole meritos a mis nombres de origen por ser extranjero, de donde vengo, es costumbre y tradición de usar más que un nombre, aquí en América del Norte es casi normal el uso de un nombre por lo cual use el primer nombre de pila que mis padres me dieron, y el apellido paterno que también es normal usarlo solamente, hoy se trata de cambiar eso espero será para mejor, algunos cambios son buenos; y el Sr. Su significado en nuestra lengua Hispana señor, por dos razones la primera por ser el primer Alfaro que piso tierra América, y quería que mi hijo fuese Jr y siga la descendencia, y segundo por que humildemente si me considero un Señor padre de familia.

    La narración de estos recuerdos de infancia de mi vida y los primeros años de inmigrante Ya que hoy tengo 60 años de vida y mis recuerdos son tan auténticos y frescos a pesar de tener más vida vivida en este lindo país, llegue a los 20 un adolescente hecho hombre.

    Unas de las razones fundamentales de este libro no es solamente dejarles saber a mis hijos, nietos y algún día bisnietos y tataranietos, para que sepan de donde vienen sus raíces, creo que es de suma importancia dejar récord reales, para que los descendientes sepan su origen familiar.(Los míos los desconozco en su totalidad).

    Ya que esa fue la razón de hacer mi vida en este lindo país, vine cómo muchos han venido por razones personales de diferente índole, todos tiene un porque en la vida.

    Mi esposa y yo decidimos hacer familia en este lindo país, hoy con más de 40 años de casado y haber logrado una familia, Dios ha bendecido a nuestra familia.

    Tenemos 5 hijos y 11 nietos, nuestra familia hoy es de 22, y comenzamos los 2 solamente. Otra de las razones por que no uso nombres de lugar de origen, creo que personalizarlo no seria correcto ya que deben de haber muchos casos semejantes a los de nosotros y no es justo no darle su valor que merece, importante en las narraciones de un inmigrante creo que muchos podrán vivir sus propias experiencias personales, ya que pienso y creo que de una o de otra forma todos somos inmigrantes.

    Nosotros hemos traído nuestras buenas costumbres y adjuntándola con las buenas costumbres de este lindo país tenemos una familia que creo es diferente en todo el sentido de la palabra, y hoy somos La Familia Alfaro-Sosa.

    Recuerdos

    De Infancia

    De La Vida Real.

    Recuerdos simplemente, recuerdos, que es lo más lindo de la vida, el poder recordar.

    El deseo personal es narrar mis recuerdos, ya que creo que a través del tiempo, y la madurez que la vida te da y te enseña a comprender el recorrido por la vida, deja muchas preguntas, qué cuando se es niño no se entiende, tampoco en la adolescencia, y se comienza a entender ligeramente al inicio de la vida adulta, y se comprende en su totalidad en la vejes. Mis Recuerdos son de los años cincuenta, época en verdad agradable é hermosa de haberla vivido, a pesar del tabú y creencias antiguas las cuales transmitía, penurias é incomprensión.

    Época tan hermosa, llena de felicidad y comprensión A pesar de mi corta edad recuerdo momentos y pasos cómo si hubiesen ocurrido hace un corto tiempo, no el tiempo que en realidad a pasado.

    También adjunto recuerdos antes y después de los 70 tiempos que inmigre a este lindo país, y gracias a mis principios y valores de país de origen y lo mucho que aprendí de este lindo país, hoy yo soy, Esposo, Padre, Abuelo y tal ves llegue a ser bisabuelo.

    Indudablemente que mis recuerdos tienen nombre y apellido, pero no deseo perjudicar a ninguna persona todos los nombres son cambiados para tratar de no herir algún sentimiento de los descendientes familiares, la finalidad del libro no es vanagloriarse de la vida, por haberme dado tanto, creo que a través de la lectura se aprende mucho y ayuda a luchar en esta vida que es tan difícil.

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    También pienso en que nombre debería de ponerle a esta historia verídica y personal, aparte de dedicarla a la abuela más buena y Consentidota del mundo, por haberme dado la infancia más hermosa que Un niño pueda haber querido tener, viéndolo del punto Machista (Pero ese es otro tema).

    Esta historia comienza cuándo todavía no existía la televisión, él que hacer de un niño aparte de sus obligaciones cotidianas, de ir al colegió, ayudar en la casa lo mismo que en la Iglesia, hacer tareas y lo más grande jugar, a lo que le venga en gana, no era muchos los juegos que se podían crear ya que todos estaban creados, o mejor dicho inventados.

    Unos de los juegos favoritos era jugar a la pelota de trapo, que se juntaban con las medias de todos los niños para hacer una pelota, Arturo era el encargado ya que por su tamaño y por ser el más alto tenia las manos más grandes, por tal motivo era su trabajo y obligación el hacer la pelota que se tomaba unos buenos 30 minutos que parecían una eternidad, Arturo amigo inseparable, que era como el hermano mayor del barrio, a pesar que su mamá lo llamaba Arturito, recuerdo que nos sentábamos al rededor de Arturo, para sacarnos las medias y tirarlas entre las piernas de Arturo, algunos amigos por su condición de pobreza no tenían medias, buscaban algún trapo para ayudar a la fabricación de la famosa pelota de trapo, que mayormente la capturaba algún policía, que no tenia nada que hacer si no molestar a los muchachos que jugaban, alegremente en la cuadra menos transitada del barrio, pero siempre terminaba casi con un final feliz, ya sea goleada, o a alguien lo llamaba su mamá.

    El jugar con la pelota de trapo, esa pelota que al patearla le dabas vida y era solamente disfrutar por unos minutos de alegría y de picardía infantil en el cuál te sentías cómo que a través de tus piernas y pies eran los de tú jugador favorito, era la época del cañonero Lolo Fernández, Alberto Terry del Perú, Garrincha, BABA de Brasil, era el tiempo del buen football, donde se jugaba por la camiseta, no por cuánto ahí. Así era el football, en esa época en la calle con la pelota de trapo.

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    Yo no era muy bueno para la pelota de trapo, pero si era bueno para las maldades.

    A Dios cada DIA le pido perdón por mis travesuras, pero pienso yo que era simplemente por que desde muy niño nunca me gusto las injusticias de la vida, cómo los niños huérfanos, niños pordioseros, niños pájaro frutero, en fin una cantidad de injusticia ya que era un país del tercer mundo y en el cuál existía mucha pobreza y miseria, cuando niño no sabes la diferencia de clase sociales, existía la clase rica, clase media, clase pobre, clase mísera, yo era un niño que pensaba que mi misión era proteger a todos por tal motivo era él niño Robin Hood, por qué me gustaba proteger a casi todas las personas del barrio, primordialmente a los indefensos. Por muchos años esa fue la línea a seguir cuidar y proteger al menos valido, no por incapacidad física, si no por falta de astucia, palomilla da, en unas palabras picardía infantil.

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    Recuerdo cuando el padre de Fernando llegaba ebrio, casi lo levantaba a punta de patadas, sin razón alguna era uno de esos padres abusivos, que necesitaba el alcohol para sentir hombría, o sentirse padre, sobrio era in responsable, temeroso y torpe, recuerdo que en una mañana, cómo a las 7 a.m. hora de salir para el colegio, veo que venia caminando casi en six sax, ósea cruzando los pasos, bien entonado, yo que me trepo a un árbol, y con la onda que siempre andaba, y los nísperos en el bolsillo, que le apunto a la cabeza y sax que le doy al padre de Fernando y le rompo la cabeza, el pobre medio tambaleando llega a la casa, la esposa sale y le dice, vez Fernando para eso tomas tanto, uno de estos días te vas a matar de una caída, él le dice no mujer algún hijo de su madre, me a tirado algo, mira lo que dices, lo que el licor puede hacer contigo, uno de estos días muerto te vas a quedar de una caída. También pasaba con Frejolito, que lo mandaban a vender periódico, era canillita, yo lo ayudaba a vender así vendía rápido y podíamos jugar más, al igual que Luchin más conocido cómo Serrucho, por su habilidad para la raspadilla, él padre era Raspadillero, él le ayudaba para que él padre tome la siesta, que siempre eran de 3 ó 4 horas, o Rafó, que lo mandaban a lustrar zapatos, que abuso de la niñez, así era ese tiempo, gracias a Dios yo tenia una Abuela, que me consentía a lo grande con decirles que hasta los 14 años me bañaban, increíble pero cierto, un niño después adolescente, creo que ese fue el gran motivo del porqué me fui de la casa de la Abuela, una por que me sentía grande y otra por que ya me daba vergüenza del baño con Maria y sus juegos, (Ese es otro tema). En la época de la Adolescencia, son pocos los padres que toman debida atención a los hijos tantos varones cómo mujeres.

    Recuerdo que cuando no teníamos alguna idea de juego, buscábamos algo de hacer creativo, incluso jugábamos a las adivinanzas, y algunas veces a los yaces, que solamente las niñas jugaban.

    Qué época que sanura, creábamos, creo que esta mal dicho por que ya estaba creado, el juegos de las pelís, que eran películas de los rollos de película del cine, que ya no servían y las cortaban para que los niños cómo nosotros tengamos, cosas para poder entretenernos, y cómo se jugaban las pelís, normalmente se buscaba el frente de una casa que tuvieras las escaleras altas, para poder resbalar las pelís de una en una, las que caían sobre otra esa la ganabas, parecía fácil pero creasen no era tan fácil, unos de los mejores jugadores era Feliz,que se parecia al gato Feliz.

    También jugar al trompo, era agradable ya que no era solo hacerlo bailar, si no que se tenia que llevar el trompo perdedor a la cocina, que era el lugar que se escogía bajo reglas de juegos que siempre las ponía él que daba la idea del juego, se regia y él que perdía el regir, era él que tenia que poner su trompo perdedor, desde la distancia que se a cordada asta la cocina, que así se denominaba el fin de la jornada de juego, cuándo llegaba a la cocina, se paraba el trompo en forma de baile, incrustado en la tierra, y con el trompo Castigador que siempre se tenia uno con púas especiales de acero, mayormente eran puntiagudas y filudas, para poder sacarle una buena lonja al trompo perdedor, esos trompos con púas de acero y puntiagudas eran armas punzantes, que gracia a nuestra época de sanura, nunca hubo un accidente de que alguien clavara ese trompo en la cabeza de alguien o en la mano, cómo digo yo hoy fuimos niños protegidos por la mano divina de Dios, en una palabra somos sobrevivientes de la época.

    Usar esa palabra de sobre vivencia, tal vez suene un poco trágica.

    Pienso cuándo no había la televisión, la gente no se enteraba de lo que pasaba, tanto dentro cómo fuera del país, teníamos que esperar que a través de los periódicos las noticias aparecieran, algunas ni a la semana después.

    Recuerdo una vez que el padre de Roberto falleció en el interior del país, y él se entero a la semana después del entierro, por qué no había teléfono cómo hoy, y muy pocas personas tenían teléfono En la casa. Recuerdo que uno de esos días, que siempre me pegaba Ricardo, yo voy corriendo a mi casa donde la Abuela, que aparte de consolarme me daba dinero y algún dulce, creo yo que me gustaba que Ricardo me pegase, para que con ese pretexto conseguir lo que la Abuela me daba, pero un DIA se encontraba, precisamente uno de sus hijos de mi Abuela él mayor, que todos le decían él Bravo, al verme llorar hizo un gesto de amargura, lo cuál creo que me dio alegría ya que pensé, él iba a salir y pegarle a Ricardo sorpresa para mi cuando me pregunta molestamente QUE A PASADO y respondo que Ricardo me a pegado, me agarra de la mano y para a fuera fuimos, pregunta quien es Ricardo, yo medio acorvadado señalo a Ricardo, y él le pregunta a Ricardo, tú le as pegado a mi sobrino, lo cuál Ricardo contesta frescamente SI, entonces él lo mira, mete la mano al bolsillo saca un billete de 5 y le dice si le pegas otra vez te doy este billete de cinco, él me mira indignado y me dice ‘SI TE DEJAS PEGAR YO TE DOY ENSINMA’, yo pensé inmediatamente ESTE SE VOLVIO LOCO, no se de donde ni cómo fue, pero me salio una amargura y valentía del centro de mi ser, que le metí un golpe a Ricardo, que lo hice tambalear y con las mismas lo tiro al suelo y me tiré encima y a golpe tras golpe, que lo hice ensangrentar de la nariz y boca, desde es día nunca más Ricardo se metió conmigo, creo yo que desde ese día para mi el pelear era divertido y sobre todo el ganar la pelea, desde ese día buscaba casi a diario la peleas con alguien, principalmente a Ricardo, que me pegó por mucho tiempo y yo quería ahora venganza, pero una venganza divertida yo era el ganador ahora. Creo que a partir de ese día mi vida cambio no más cobardía, me gustaba las peleas y sobre todo él ser ganador, pero nunca le pegue a niños menores que yo, buscaba siempre a los chicos peleones, Abusivos que le gustaba darles a chicos que no sabían pelear, yo aprendí muy rápido a pelear y sobre todo era muy ligero y velos en mis golpes y movimientos. Recuerdo cuando había el respeto a la hombría, (cómo era eso).

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    Muy sencillo nunca a faltado algún faltamiento o mal entendimiento por lo cuál cómo país machista y picaresco todo se Solucionaba al golpe, mejor dicho una pelea, una mechada, una sacada al fresco, un paseito, jajá jajá, aquellos apelativos, expresiones de la época infantil, pero lo lindo era que solamente eran dos los que peleaban, nunca hubo carga montón, o un apanado, cuándo se trataba de golpes por un faltamiento o desacuerdo, siempre él que ganaba tenia la razón.

    Y el problema solucionado, el perdedor siempre se disculpaba, un apretón de mano y cómo si nada hubiese pasado. Que siga el juego o lo que se estuviera haciendo.

    Hoy día todo es distinto la venganza, él regresar con otros a darle una paliza, por qué se es cobarde, y sobre todo hoy no se tienen esa dignidad, a la’ hombría’ que uno debe saber ganar, pero También saber perder. El dicho era para un hombre ahí otro hombre. Esos días de picardía infantil, de alegrías, travesuras, tratar de vivir la vida cómo mejor se entendía, gozando cada DIA, recuerdo que Luchin, en el Verano era unos de los amigos más felices, ya que debido a la venta de raspadilla de su Padre, no tenia que trabajar con Don Paco él ropavejero, que era él que Compraba todo lo viejo, y andaban por la calle gritando, COMPRO BOTELLAS, ROPA VIEJA, PERIODICOS COMPROOooooo. Luchin lo imitaba a la perfección, debido a su colaboración laboral. Para los niños no era un trabajo, simplemente una AYUDA.En esos barrios comprendido por una mezcla de personajes de todas las clases sociales, ya que era el corazón del centro de la ciudad, variedad de personajes, que muchos cómo yo salimos en busca de nuevos Horizontes, para poder llegar a una vejes feliz. Algunos que salieron antes no lograron alcanzar lo anegados. Muchos después me entere perdieron la vida, en ese

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