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Negocios Sucios
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Libro electrónico169 páginas1 hora

Negocios Sucios

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Información de este libro electrónico

Jennifer, una brillante ingeniera de software, se topa con una oscura conspiración dentro de su reconocida empresa de tecnología. Con la ayuda de amigos y aliados leales, se embarca en una peligrosa misión para exponer a quienes están detrás del nefasto complot. A medida que profundiza, descubre una conexión gubernamental oculta, lo que desencadena una traicionera carrera contra el tiempo. Jennifer y la agente del FBI Rachel Turner forman una alianza poco probable y navegan en una red de engaños y corrupción. La tensión aumenta cuando idean un atrevido plan para infiltrarse en la empresa de tecnología y revelar secretos impactantes. El enfrentamiento culminante revela un cerebro en las sombras. Años después, su legado sigue inspirando a una nueva generación. El viaje de Jennifer refleja la importancia eterna de luchar por la verdad. No te pierdas esta fascinante historia de resiliencia y la búsqueda incesante de la justicia.

IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento30 mar 2024
ISBN9798224852109
Negocios Sucios
Autor

Alvaro Figares

This author was born on February 18, 1969, in Montevideo, Uruguay. He pursued his studies at the University ORT. He possesses a highly active and fertile imagination, along with a persistent interest in learning and expanding his mental horizons. He enjoys traveling, engaging in philosophical discussions, and exchanging ideas with individuals from diverse backgrounds and perspectives. As an independent and free thinker, he is a progressive, open-minded individual who embraces new technologies, scientific advancements, and the latest discoveries in any field. His mind operates intuitively and non-linearly, often experiencing sudden flashes of inspiration seemingly out of nowhere. With a gentle and poetic soul, he holds a deep love and affinity for music. He views music as a natural language, as many of his emotions are nebulous and elusive, making it challenging to verbalize his experiences of life. Furthermore, he is profoundly romantic and frequently finds himself 'in love with love.'" Passionate explorer of emotions, as a novelist, he has taken readers on fearless journeys through unsolved mysteries, high-voltage suspense, and fiery romances. Each page is a world to be discovered, where secrets lurk in every shadow and hearts intertwine in a passionate dance. His words are like magnets, drawing readers into a world where suspense intertwines with romance, and passion burns as brightly as intrigue. Each work is an invitation to immerse oneself in a whirlwind of emotions, where unexpected twists keep readers on the edge of their seats, and sighs of love make them daydream. If you're looking for a read that transports you to enigmatic worlds, makes your heart race with every page turn, and makes you sigh with every love story, then I invite you to delve into his captivating novels of mystery, suspense, and romance. Get ready for an unforgettable literary experience, where mystery and love intertwine in a passionate embrace. 

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    Negocios Sucios - Alvaro Figares

    Capítulo 1:

    El Descubrimiento

    Jennifer Haywood estaba sentada en su escritorio, con los ojos muy abiertos por la incredulidad mientras miraba la pantalla. Las líneas de código en las que había estado trabajando meticulosamente para el nuevo producto ahora revelaban algo siniestro: una puerta trasera que podría explotarse con fines maliciosos. Sintió que el corazón se le aceleraba en el pecho mientras una sensación de temor la invadía. Esto no puede estar pasando.

    Buscando a tientas su teléfono, Jennifer rápidamente envió un mensaje a Ethan Roberts, su compañero de trabajo y confidente. Necesitaba hablar con él, compartir su descubrimiento y buscar su apoyo. Sabía que no podía afrontar esto sola.

    El teléfono de Ethan sonó con el mensaje de Jennifer y él lo miró con el ceño fruncido con preocupación. Conocía a Jennifer lo suficientemente bien como para entender que ella no se habría acercado a menos que fuera algo serio. Inmediatamente se levantó de su escritorio y se dirigió hacia ella.

    Jennifer levantó la vista cuando Ethan se acercó y se le cortó el aliento en la garganta. Ella le hizo un gesto para que se acercara, su voz apenas era más que un susurro. Ethan, he encontrado algo... algo inquietante. Necesitas ver esto.

    Ethan se inclinó y entrecerró los ojos mientras estudiaba la pantalla. Sus cejas se fruncieron más profundamente, reflejando la preocupación de Jennifer. Qué diablos... Jennifer, ¿estás segura de esto? Esto es... esto es enorme.

    Jennifer asintió, incapaz de apartar la vista de la pantalla. He verificado el código varias veces. No hay ningún error. Esta tecnología podría usarse para todo tipo de propósitos maliciosos, Ethan. Tenemos que hacer algo.

    Ethan respiró hondo y su mente se aceleró. Sabía que el descubrimiento de Jennifer podría tener consecuencias catastróficas y debían actuar con rapidez y cuidado. Él puso una mano tranquilizadora sobre su hombro. Lo haremos, Jennifer. Expondremos esta conspiración y nos aseguraremos de que la verdad salga a la luz.

    La determinación llenó los ojos de Jennifer mientras miraba fijamente a Ethan. Gracias, Ethan. Sabía que podía contar contigo. Necesitaremos reunir pruebas, exponer la verdad y evitar que esta tecnología caiga en las manos equivocadas.

    Ethan asintió, su resolución coincidía con la de Jennifer. En primer lugar, debemos tener cuidado. No sabemos hasta dónde llega esto ni en quién podemos confiar. Tendremos que ser discretos y reunir la mayor cantidad de pruebas posible sin revelar la realidad.

    Jennifer respiró hondo, preparándose para el arduo viaje que le esperaba. De acuerdo. No podemos permitir que el Dr. Blackwood y los demás se enteren de nuestra investigación. Ellos son los que están detrás de esto, estoy segura.

    Correcto, dijo Ethan, su voz llena de determinación. Necesitamos ser inteligentes al respecto. Reunir evidencia, documentar todo y, cuando sea el momento adecuado, los expondremos por lo que están haciendo.

    Mientras ideaban su plan, la mente de Jennifer corría con las posibilidades y los riesgos que estaban a punto de correr. Pero sabía que no podía permitir que este secreto permaneciera oculto. Había vidas en juego y ella estaba dispuesta a hacer lo que fuera necesario para garantizar que prevaleciera la verdad.

    Ethan notó el fuego en los ojos de Jennifer y no pudo evitar sentir una mezcla de admiración y preocupación. Sabía que el camino que tenía por delante sería traicionero, pero también sabía que Jennifer tenía el coraje y la inteligencia para afrontarlo de frente.

    No podemos hacer esto solos, dijo Jennifer, con la voz llena de determinación. Necesitaremos ayuda, aliados en los que podamos confiar. Personas que crean en la justicia y no cedan ante la presión.

    Ethan asintió, sabiendo que Jennifer tenía razón. No podían encargarse de esta conspiración por sí solos. Tengo algunas conexiones, personas con las que puedo comunicarme y que podrían estar dispuestas a unirse a nosotros. Necesitaremos toda la ayuda que podamos conseguir.

    Jennifer miró a su alrededor y entrecerró los ojos hacia un grupo de colegas absortos en su trabajo. Tendremos que tener cuidado con a quién traemos, Ethan. La confianza lo es todo en una situación como esta. No podemos permitirnos ninguna filtración.

    Ethan asintió sombríamente. Examinaré a todos personalmente. Necesitamos personas que tengan interés en esto, que crean en hacer lo correcto, sin importar los riesgos. Los encontraremos, Jennifer.

    El peso de la responsabilidad recayó sobre los hombros de Jennifer, pero se negó a dejar que eso la aplastara. Seremos la voz que exponga la oscuridad, Ethan. No dejaremos que nos silencien.

    Cuando los dos amigos comenzaron a idear estrategias y planificar, sus voces se redujeron a susurros y su determinación era inquebrantable. Se habían topado con un oscuro secreto, una conspiración que amenazaba vidas inocentes, y estaban dispuestos a hacer lo que fuera necesario para exponer la verdad.

    Horas más tarde, con la cabeza dando vueltas con detalles y planes, Jennifer y Ethan finalmente dieron por terminada la noche. Sabían que el camino que les esperaba sería largo y traicionero, pero estaban preparados para afrontarlo juntos.

    Fuera de la oficina, cuando el sol comenzaba a ponerse, Jennifer miró hacia el cielo, con una mezcla de miedo y resolución en sus ojos. No podemos darnos el lujo de fracasar, Ethan. No podemos dejar que ganen.

    Ethan estaba a su lado, su voz llena de determinación y un toque de alegría a partes iguales. Jennifer, querida, el fracaso no es una opción. Vamos a exponer esta conspiración como un mago sacando un conejo de un sombrero.

    Jennifer soltó una pequeña risa, apreciando el intento de Ethan de aligerar el ambiente. Esperemos que nuestro truco sea aún más impresionante que eso, Ethan. Hay vidas en juego.

    En ese momento, cuando la oscuridad comenzó a cubrir la ciudad, Jennifer y Ethan compartieron un voto silencioso: un voto de luchar, exponer la verdad y proteger a los inocentes. Estaban listos para embarcarse en un viaje que pondría a prueba sus límites y definiría su futuro.

    El aire de la noche flotaba cargado de anticipación, como si el universo mismo sintiera el peso de su misión. Juntos, estaban listos para enfrentar lo desconocido, preparados para desvelar los secretos que yacían ocultos en las sombras.

    Jennifer respiró hondo y el frío de la noche se filtró hasta sus huesos. Sabía que esto era sólo el comienzo y que el camino que habían elegido los desafiaría en formas que aún no podían imaginar.

    Pero en ese momento, mientras miraba fijamente a Ethan una vez más, una nueva resolución se apoderó de ella. Navegarían juntos por el traicionero camino que les esperaba, siendo su inquebrantable determinación su luz guía.

    Jennifer cuadró los hombros, lista para enfrentar cualquier cosa que se interpusiera en su camino. Hagamos esto, Ethan. Expongamos la verdad y derribemos esta conspiración.

    Ethan sonrió, sus ojos brillaban con picardía. Sabes, Jennifer, podemos terminar en situaciones difíciles, pero he oído que las mejores historias surgen de situaciones difíciles.

    Con una risa, Jennifer asintió, su corazón lleno de miedo y emoción a partes iguales. Juntos descubrirían la verdad y, con cada paso que daban, se acercaban al corazón de la conspiración que amenazaba con consumirlos.

    Capítulo 2:

    La Advertencia

    Jennifer hizo a un lado la pila de papeles sobre su escritorio, con la frustración evidente en su rostro. Había estado intentando toda la mañana encontrar más evidencia que respaldara su teoría, pero parecía que alguien estaba trabajando activamente en su contra. Cada vez que descubría una pista, misteriosamente desaparecía o era borrada de los servidores de la empresa.

    Esto es ridículo, murmuró en voz baja, mirando alrededor de la oficina vacía. Todavía era temprano y la mayoría de sus colegas no llegarían hasta dentro de una hora más o menos. Sabía que tenía que tener cuidado, pero no podía quitarse la sensación de que el tiempo se estaba acabando.

    Justo cuando estaba a punto de darse por vencida por el día, su teléfono sonó en su escritorio. Lo cogió, su corazón latía con anticipación. Era un mensaje de un número desconocido. Dudó un momento antes de abrirlo, casi esperando que fuera otra amenaza.

    El mensaje era breve y críptico: Detente ahora. Es demasiado peligroso. Las cejas de Jennifer se fruncieron en confusión. ¿Quién le enviaría una advertencia como esta? ¿Y cómo supieron en qué estaba trabajando? Ella rápidamente respondió, sus dedos temblaban levemente.

    ¿Quién es? ¿Cómo sabes lo que estoy haciendo? Jennifer esperó ansiosamente una respuesta, su mente corriendo con posibilidades. No podía permitirse el lujo de confiar en nadie, no hasta que supiera con quién estaba tratando.

    La respuesta llegó casi de inmediato; el remitente obviamente estaba ansioso por responder. No puedo revelar mi identidad, pero sé más de lo que piensas. Confía en tus instintos. Ellos te guiarán en la dirección correcta.

    La mente de Jennifer estaba llena de preguntas, pero no había tiempo para pensar en ellas. Tenía que tomar una decisión: ¿ dejaría que esta advertencia la detuviera o seguiría adelante con aún más determinación? No podía permitir

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