Vagabundo sin retorno

Por Saúl Martínez

Un breve apunte sobre el poemario

“Vagabundo sin Retorno”

La Literatura nos permite presentar y desarrollar temas esenciales; hoy les presento nuevas ideas personales, en ellas les hablo del realismo social y de la vida que existiría si todos sintiéramos amor.

Amor al prójimo, y en especial a Dios, y a un nuevo ser que está por nacer. Por medio de la literatura podemos hablar de lo bueno y malo, de todo lo que sucede en nuestro país, así como a nivel mundial.

Si muchos hablan de mejores oportunidades de vida, trabajo, salud, educación, etc.; da tristeza escribir estas palabras, porque las oímos mencionar día a día y de esto nada de nada.

De lo que vivimos en el país solo existen preguntas sin respuestas para toda la población paupérrima de nuestro país, para los desempleados, para los que no tienen un techo, educación, salud, alimentación, mientras que aquel llamado padre de la patria, solo del sarcasmo que hace día a día al ver a su pueblo caminar desde el amanecer hasta el atardecer, sin esperanza de obtener empleo. No cabe duda que vivimos en la calle, de la amargura.

Quisiera que en esta patria, a la cual amo tanto, no existieran quejas, dolores, sufrimientos, explotación, desempleo, ni mucho menos la marginación. Hay muchas veces que quisiera morir y nacer en otro tiempo, en donde no exista la explotación, sino solo amor y vivir con un espíritu lleno de ánimos hacia el éxito y la superación.

Saúl Martínez.

• Idioma: Español
• Editorial: Page Publishing, Inc.
• Fecha de lanzamiento: 17 nov 2020
• ISBN: 9781643346748

Vista previa del libro

I

Políticos... políticos... mentira tras mentira

Todos parecen ser protagonistas del programa de Chespirito, cada tres o cinco años ofreciendo esperanza, paz, trabajo y oportunidades, algo que nunca sucede. Siempre ofreciendo como Kiko al Chavo el cual siempre es engañado. Siempre con el mismo disco, quizás ya rayado, diciendo tengan paciencia, así como dice el Chavo cada vez que comete un error. No se trata solo de decir, tengan paciencia, lo mejor es que salgan a las calles y hagan acto de conciencia.

Político... político... Siempre gritando con tu discurso, así como grita la Chilindrina con un llanto lleno de mucha falsedad, así como tú lo haces, engañando con tus palabras a mis hermanos de esta patria la cual amo tanto, aunque esté llena de mucha corrupción.

Si a la niña Cleotilde la llaman la Bruja del 71, setenta y uno; ustedes son los ladrones del siglo veintiuno XXI.

Ustedes lo único que saben hacer es cobrar impuestos y más impuestos, así como el Señor Barriga cobrando la renta de los que viven en la vecindad. Siempre cobran impuestos, no les importa dejar sin comer a niños y ancianos, los que pasan sin desayuno, almuerzo y cena. Ellos caminan por las calles con tristeza como alma en pena.

Si a Don Ramón lo golpea la doña Florinda a nosotros nos golpea la pobreza, por la falta de oportunidades que atravesamos en nuestro país.

Al acordarme de Chespirito me llena de risa toda su gracia. Al acordarme del político se me llenan de lágrimas los ojos, al saber la desgracia que nos están haciendo pasar.

II

¿Para qué existen las leyes?

¿Para qué existen las leyes? Solo para favorecer a los de arriba, llamados los de Cuello Blanco. Leyes... leyes... ¿para qué existen? Solo para que sean declaradas en contra de los pobres, llamados los de Cuello Oscuro. Quisiera que existiera una ley en donde el dinero no hable para favorecer al rico y existieran jueces que no dudaran, una, dos ni tres veces para ocupar las famosas leyes en contra de ricos y pobres.

Si las leyes se ocuparan, como debe de ser, los ricos llorarán mares de lágrimas, se arrastrarán como culebra venenosa, maullarán como lobos sin jauría, apestarán como can descompuesto.

Los pobres seríamos felices, tendríamos paz, la que siempre hemos soñado, una paz que es ilusión, fantasía y anhelada y por los de arriba esa paz es robada.

No me canso de preguntarme ¿para qué existen las leyes? Entre más leyes, más jueces existan, más ricos y explotadores habrán. Entre más leyes, más jueces, más marginación y más pobres de hambre morirán. Perdón, no pinto paredes... Pinto verdades.

III

¿Por qué vivir globalizados?

Si nuestros antepasados nos cuentan historias de la vida de antes, ya después de la guerra veremos que era mejor de lo que vivimos hoy.

¿Por qué injusticia? ¿Dónde ha quedado la paz y el amor? Hay veces que no dejo de pensar que las compañías extranjeras tienen más poder que el Gobierno de mi patria. Ese poder transnacional es la causa de tanto malestar