Teoría de la unión de los 5 continentes

Por Oswaldo Hidalgo Solís

Oswaldo Hidalgo Solís plantea a través de la "Teoría de la Unión de los 5 Continentes", una propuesta para gobernar el planeta tierra. Es un conjunto de ideas muy bien estructuradas que va cobrando mayor importancia día a día. Si bien es cierto, el avance de las tecnologías de la información y las comunicaciones ha contribuido en gran medida a la denominada globalización, también lo es que, por más de 500 mil generaciones no hemos sido capaces de resolver los grandes problemas económicos, ambientales y sociales. El autor sugiere la instauración desde la Organización de las Naciones Unidas, de un solo "Plan de Gobierno Intercontinental" que se base en siete pilares: la persona, la familia, vivienda, salud, educación, trabajo y alimentación, en el marco de la solidaridad producto del fomento de una cultura de paz. Indica que "Más allá de cualquier cuestión efímera, aspiramos a una renovación total en todos los aspectos de nuestras vidas, empezando por nuestra mentalidad, que lo que define nuestra forma de actuar". De fácil lectura y con variados temas, la "Teoría de la Unión de los 5 Continentes" busca motivar a los lectores a que se ocupen de los grandes problemas del mundo actual.

• Idioma: Español
• Editorial: CreaLibros
• Fecha de lanzamiento: 20 nov 2021
• ISBN: 9786124869549

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TEORÍA DE LA UNIÓN DE LOS 5 CONTINENTES. Una propuesta para gobernar el planeta Tierra.

3a. edición, enero 2021

1era. edición digital, noviembre 2021

ISBN digital:

N° 978-612-48695-4-9

Autor:

Oswaldo Hidalgo Solís

Digitalizado y publicado por:

CreaLibros

www.crealibros.com

Noviembre 2021

© Prohibida su reproducción total o parcial

Todos los derechos reservados

DEDICATORIA    

A mis padres Joaquín Hidalgo y Rosalina Solís

por sus ejemplos de vida

A Marlene, mi esposa,

mi amor de toda la vida

A mis hijas Leidy, Lisbeth, Nataly y Adriana

por alentar mis sueños

A mis hermanos

por sus críticas y comentarios.

CONTENIDO    

AGRADECIMIENTOS

MENSAJE DEL AUTOR

PRÓLOGO

1. LOS GRANDES PROBLEMAS DEL PLANETA TIERRA

1.1. Problemas económicos

1.2. Problemas ambientales

1.3. Problemas Sociales

2. ORÍGEN DE LA TEORÍA

2.1. Filosofía del Sidismo

2.2. La historia de Babá

2.3. El retorno a lo moral y lo ético

2.4. El actual rol de la democracia

2.5. El retorno a la ciudadanía ecológica

2.6. Retorno a la cultura

3. PILARES DE LA TEORÍA

3.1. La persona

3.2. La familia

3.3. La vivienda

3.4. La educación

3.5. La salud

3.6. La alimentación

3.7. El trabajo

4. PROPUESTA DE APLICACIÓN DESDE LA ONU

5. DESAFÍOS PARA LA HUMANIDAD DEL SIGLO XXI

5.1. La cultura de la respuesta

5.2. El descrédito de la política

5.3. Las monarquías deben desaparecer

5.4. La mesa redonda

5.5. El nuevo rol de las empresas extractivas

6. PENSAMIENTOS DE LA TEORÍA

7. DISCURSOS DEL CREADOR DE LA TEORÍA

7.1. Discurso del 24 de noviembre de 2016

7.2. Discurso del 24 de noviembre de 2017

7.3. Discurso del 27 de noviembre de 2019

7.4. Discurso del 9 de diciembre de 2020.

EPÍLOGO

BIBLIOGRAFÍA

AGRADECIMIENTOS    

Sean las palabras iniciales, para agradecer a todas las personas que, desde distintos, distintas culturas, distintos sistemas políticos de gobierno y hasta distintas religiones, han contribuido y vienen contribuyendo a mejorar una teoría que inicié hace más de 50 años: La Teoría de la Unión de los 5 Continentes (TU5C)

Sólo me mueve el ánimo de dejar para las próximas generaciones, un sistema de gobierno generador de paz para el planeta Tierra, basado en siete principios que son fundamentales para cualquier grupo social, aún en el marco de la inmensa diversidad cultural y geográfica en la que se desarrolla nuestra especie. Estos principios son: la persona, la familia, la vivienda, la educación, la salud, alimentación y el trabajo.

Agradezco de manera muy especial, a todo el equipo que me viene acompañando durante varios años, en la tarea de difusión de la TU5C. Agradezco también a mi familia por su inmenso apoyo y a quienes me escriben haciéndome conocer sus puntos de vista sobre la teoría. Sus críticas y comentarios, han contribuido en gran medida a la elaboración de la presente edición.

A todos, mi más sincero agradecimiento.

MENSAJE DEL AUTOR    

¿Por qué esperar 500,000 generaciones más, cuando podemos integrarnos intercontinentalmente como una sola gran nación, como una sola raza, como una sola gran familia, con una sola bandera, y con un solo programa de gobierno intercontinental?

Para tomar las decisiones más eficientes y sostenibles para nuestro planeta, debemos aprender de los errores que hemos cometido como especie humana, a través de la historia.

¿Por qué nace la Teoría de la Unión de los Cinco Continentes?

La respuesta a esta interrogante, es totalmente objetiva. No tenemos tiempo para divagar, buscando una respuesta que luego, podría ser desechada por el subjetivismo individual. Objetivamente la Teoría de la Unión de los Cinco Continentes, nace porque las actitudes individualistas de las naciones y países no ha hecho más que generar odio, guerras, afectación del medio ambiente y pérdida de valores, en todo el planeta tierra. El original concepto de política, nacido en la antigua Grecia, como un instrumento para brindar bienestar a las naciones, se ha corrompido. Los partidos políticos del planeta tierra viven en un estado de constante contaminación y descomposición. No son más que ideologías creada por el hombre, que lamentablemente se han convertido en utopías. Nunca en la historia de la humanidad ha existido la justicia, y menos, la justicia social. Los ideales de los partidos jamás se han conseguido y van quedando como un gran listado de mitos. Las opciones políticas que han caracterizado la guerra fría como: capitalismo, comunismo, liberalismo, socialismo, marxismo, imperialismo, etc. no han generado bienestar pleno. Sólo han traído separatismo, o graves consecuencias sociales como los colonialismos. A lo largo de nuestra historia como especie humana, hemos generado grandes fisuras sociales. La dicotomía izquierda – derecha, aunada al concepto de nacionalismo exacerbado, sólo ha generado miserias iguales y peores que las del inicio de nuestra historia.

Mucho daño ha hecho, y viene haciendo a la humanidad, el que cada país se gobierne separadamente bajo el criterio de el que puede, puede o sálvese quien pueda, atropellando o arrasando al vecino. Inclusive, se ha llegado a traspasar mares sólo para invadir y subyugar otras culturas. En otros casos, usando las banderas del nacionalismo y la soberanía, han desarrollado sangrientos expansionismos por medio de guerras. Es la realidad del planeta tierra, el argumento que objetivamente nos lleva a plantear la Teoría de la Unión de los Cinco Continentes. Una oscura tormenta se expande monstruosamente generando los gritos más horrendos, las actitudes más salvajes y violentas, que desencadenan hambrunas, la desigualdades y demás injusticias. En el planeta Tierra crece la confusión sobre el futuro de la especie humana. La actual pandemia Covid-19 muestra nuestra enorme fragilidad. Empezamos a sentir desesperación al no saber cuándo se pondrá fin a la difícil situación de salud que estamos enfrentando como especie humana. Las religiones han quedado impávidas ante los cientos de miles de personas que han muerto tanto en los países pobres, como en los llamados países poderosos, a causa de la pandemia.

Hasta ahora no hemos sido capaces de hacer algo pequeño pero contundente, para cambiar la situación del planeta Tierra. Debemos empezar por la comunicación entre todos los países, para tomar conciencia de le necesidad de unirnos. Sólo así evitaremos que los pequeños incendios que se propagan incontrolablemente, se conviertan en gigantes brasas incendiarias imposibles de apagar. Seguimos destruyéndonos generando las tempestades sociales más despiadadas como la discriminación y la pobreza. Los gobernantes continúan armándose hasta los dientes, amenazando con una guerra nuclear que puede ser la última de las guerras porque moriremos todos. Si algo de discernimiento tenemos, debemos despertar en algún momento nuestra sensibilidad humana, para no crear más fisuras. Debemos formar una nueva mentalidad. Una que cure la actual conducta patológica que, durante siglos, venimos desarrollando.

Imaginemos por un instante que, debido a algún fenómeno de nuestra galaxia o, debido a una guerra nuclear provocada por los humanos, todos los habitantes del planeta tierra desaparecemos. Una de las causas de decepción como especie, será sin duda, no haber hecho lo más valioso que debimos hacer durante los cientos de miles de generaciones que existimos: unirnos. El gran lamento será, no haber encontrado la forma de unificarnos como una sola gran nación, como una sola raza protegida, bajo un solo programa de gobierno intercontinental. No nos estamos dando cuenta de que esta es la gran tarea pendiente. Esta, es la razón de ser de la Teoría de la Unión de los Cinco Continentes.

Para que esta unión sea indisoluble, se debe institucionalizar en el seno de la ONU, una nueva forma de abordar los grandes problemas del planeta Tierra. Este nuevo abordaje debe contemplar la elección democrática de un presidente en cada continente, por un período de dos años. El presidente elegido debe seleccionar un equipo de asesores que puede cambiar de integrantes, en función del problema a abordar. Al interior de la ONU, se debe elegir un comité de selección de mentes brillantes. Este comité debe seleccionar a las personas que más conocimiento científico tienen del problema a abordar. De la interacción entre (1) los cinco presidentes con sus asesores y (2) las mentes más brillantes en el tema abordar, deben salir las propuestas para tratar de la mejor manera, los grandes problemas del planeta tierra. El planeta tierra debe estar gobernado –en el mejor sentido de la palabra- por cinco presidentes en un futuro no muy lejano. Entendamos por gobierno intercontinental, la función de dirigir los asuntos del planeta, de acuerdo a una serie de reglas y en el marco de un concepto amplio que goce de consenso y que respete las diversas manifestaciones culturales, sociales, económicas, geográficas, filosóficas –y hasta religiosas- de todos.

La Teoría de la Unión de los Cinco Continentes plantea que este marco amplio se base en siete principios: la persona, la familia, la alimentación, la salud, la vivienda, educación y el trabajo. El trabajo de los cinco presidentes con el comité de mentes brillantes con propuestas científicas de abordaje a los problemas y bajo el concepto expuesto de gobierno, eliminará las guerras, así como los demás problemas que, durante toda la historia de la humanidad, no hemos sabido abordar.

La Teoría de la Unión de los Cinco Continentes es una alternativa racional para vivir en paz, sin horrores, sin matar a nuestros hijos, nuestras familias, sin destruir ciudades y naciones. Reflexionemos sobre el estado actual de las cosas. Nuestra sobrevivencia como especie va siendo cada vez más incierta. En cambio, si nos integramos intercontinentalmente, es muy probable que nuestra sociedad se desarrolle con mayor seguridad. Nadie sabe el futuro de nuestra existencia. Es probable también que la especie humana sobreviva en los confines del universo aun cuando el planeta Tierra deje de existir. El vertiginoso avance de la tecnología, que cada vez va colocando mayor énfasis en el desarrollo de la inteligencia artificial, nos prepara para buscar vida en otros planetas, como un presagio de que vamos camino a la destrucción del nuestro. Para evitar este fatal colapso, y como ya se indicó, el gran reto que nos falta cumplir, es la integración. No nos queda otro camino.

Pensemos nuevamente y por un instante, que estamos a pocas horas de que nuestro planeta desaparezca, y que somos conscientes de que esto será inevitable. Estamos en un momento en el que nada podemos hacer, para que nuestro planeta se parta en miles de millones de pedazos y las partes mutiladas de nuestros cuerpos se esparzan a todas partes en fracciones de segundos. Lloraremos, gritaremos, nos haremos sentir culpable el uno con el otro, recién en ese instante nos daremos cuenta que de nada han servido los nacionalismos exacerbados, los afanes expansionistas, las políticas imperialistas ni los gobiernos totalitarios. Ante la pregunta que nos haremos: ¿Para qué sirvió tantas guerras, odios, muertes y desolación? La única respuesta que daremos será: ¡para nada! ¡Sólo