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Silent Hill: Traición: Silent Hill, #1
Silent Hill: Traición: Silent Hill, #1
Silent Hill: Traición: Silent Hill, #1
Libro electrónico711 páginas27 horas

Silent Hill: Traición: Silent Hill, #1

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#La Edición Extendida contiene todo el texto original de la Edición Vainilla, pero incluye los Extras para Jugadores, como mapas, imágenes y los finales alternativos. Se ha hecho todo lo posible para asegurar que las imágenes se muestren correctamente en varios dispositivos y aplicaciones. Si las imágenes no se muestran correctamente en su dispositivo / aplicación, por favor, pruebe una alternativa para disfrutar al máximo#

"Silent Hill" tiene más de una vez un lienzo, pintado por la mancha de tus pecados. Considera esto como tu infierno personal".

Trevor se despierta de otra pesadilla de Silent Hill justo antes de recibir una llamada de la policía que lo persigue tras el aparente suicidio de su esposa, Caroline. Apenas escapa con su amante Kathy y su mejor amigo Jay Nixon, la policía les sigue de cerca en la oscura carretera. Durante la persecución, una niebla cubre la carretera y un extraño hombre con un objeto metálico en la cabeza hace que se estrellen en las afueras de Silent Hill.

Cuando Trevor se despierta, se encuentra solo en el lugar del accidente sin saber dónde están los demás. Su búsqueda de ellos no sólo revela que la ciudad está encantada con criaturas aterradoras, sino que también está manchada con pistas de la presencia de Caroline. A medida que su lucha por la ciudad brumosa lo acerca al paradero de Kathy, Trevor se entera de la verdad de la muerte de Caroline. Y con este conocimiento, descubre que todos los que tuvieron algo que ver con su miseria se han reunido en Silent Hill para dar cuenta de sus pecados.

En medio del dolor y la sangre se encuentra el misterioso guardián de Caroline con la pirámide metálica en su cabeza... y está listo para hacer justicia por su traición...

**ADVERTENCIA**
Este libro sólo es apto para adultos (18+). Contiene un contenido aterrador y sexual. Algunas escenas pueden ser consideradas violentas, grotescas o perturbadoras. No lea si se siente ofendido por dicho contenido o si es menor de 18 años. Los actos que ocurren en esta historia no están destinados a fomentar actos similares en la vida real.

***AVISO***
Se ha obtenido el permiso de los distribuidores y agentes oficiales de Konami para escribir esta obra de ficción basada en la franquicia Silent Hill. No es una adaptación de ninguna de las películas o juegos, sino una historia única ambientada en la ciudad titular. Se puede ver más información sobre estos derechos en el blog del autor en www.celenicearth.wordpress.com.

IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento16 sept 2021
ISBN9781667413587
Silent Hill: Traición: Silent Hill, #1

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    Vista previa del libro

    Silent Hill - Shaun M Jooste

    SILENT HILL: TRAICIÓN

    Edición extendida

    Una novela de horror sobrenatural

    Por Shaun M Jooste

    Copyright © ShaunMJooste 2020

    ISBN: 978-0-620-73133-1

    Primera publicación en 2016 por Celenic Earth Publications, Cape Town, SOUTH AFRICA

    Todos los derechos reservados

    Ninguna parte de este e-Book, sean el texto o las imágenes creados por el autor para el propósito de esta novela, pueden ser reproducidas o transmitidas por cualquier forma o medio, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopias, grabaciones o cualquier forma de sistema de almacenamiento y recuperación de la información, sin el permiso escrito por el autor.

    Este es un libro de ficción. Cualquier nombre o personaje, negocio o lugar, evento o incidente, son ficticios. Cualquier parecido con personas reales, vivas o muertas, o con eventos actuales es enteramente coincidencia.

    Advertencia- Este libro es adecuado para adultos (+18) únicamente. Tiene contenido horripilante y sexual. Algunas escenas pueden ser consideradas grotescas y perturbadoras. No lo lea si usted se ofende por tal contenido o si usted es menor de 18 años. Los actos que ocurren en esta historia no están destinados a fomentar actos similares en la vida real.

    El permiso para escribir esta obra de ficción basados en la franquicia de Silent Hill fue otorgado por distribuidores y agentes relevantes y oficiales de Konami. No es una adaptación de ninguna de las películas o juegos y Konami no está de ninguna forma afiliada con este producto, ya que es una historia única establecida en el pueblo titular. Todos los derechos para la franquicia de Silent Hill aun permanecen con Konami y sus distribuidores oficiales.

    Más información sobre estos derechos pueden ser obtenidos en el blog del autor en www.celenicearth.wordpress.com

    ––––––––

    OTRAS NOVELAS POR EL AUTOR

    CRONICAS DE LA TIERRA CELÉNICA

    The Windfarer

    The DragonRider

    The Sadgi

    CONTENIDOS

    PREFACIO
    Prólogo: Persecución intensa

    PRIMER ACTO: LOS PERROS SALVAJES DE LA JUSTICIA

    Pesadilla
    La Gracia Salvadora
    Misterios en la Niebla
    Recuerdos Polvorientos
    Llaves Encantadoras
    La Escuela Primaria de Midwich
    El Arte del Tiempo
    Las Palabras del Tiempo
    Las Notas del Tiempo
    Oscuridad Hirviente
    Runas de la Creatividad
    Los Sabuesos del Infierno
    Los Dioses Torturados

    CONTENIDO

    SEGUNDO ACTO: SANGRE DE UN ASESINO EN SERIE

    El Guardián de Raven
    La Tumba de las Sombras
    Hospital de Alchemilla
    La Bolsa del Alquimista
    Corredores Oscuros
    Terapia Psiquiátrica
    Victimas Silenciosas
    Las Hierbas Curativas
    Levantando a Lázaro
    Los Pacientes Amputados
    Cuidados Intensivos
    Confesiones de un Asesino en Serie

    CONTENIDO

    TERCER ACTO: LA BESTIA CON CUERNOS

    Estación de Suministros
    Encontrando a Silver Sally
    Cazando en el Hogar Sagrado
    La Investigación Secreta
    Cuarto del Asunto Salaz
    Huesos Enterrados del Soplador
    Mansión del Suicidio
    El Laberinto del Minotauro
    Traición de la Bestia
    Penitencia
    Recompensas Justas

    ––––––––

    FINALES ALTERNATIVOS
    Esta novela es dedicada a mi esposa e hijos, por todo su grandioso amor, paciencia, apoyo y ánimo mientras escribía la novela.

    ––––––––

    Una dedicatoria especial a Howard Lonstein y Ronelle Hendricks, quienes asistieron proveyendo el permiso necesario para escribir mi propia historia basada en Silent Hill de Konami y por apoyarme a través del proceso.

    ––––––––

    in Midwich Elementary’s Library
    Finalmente, la última dedicatoria para George Boeree, antiguo profesor de la universidad de Shippensburg en Pensylvania, por permitirme el uso de su nombre y los artículos relevantes utilizados en la biblioteca de la escuela primaria de Midwich.

    PREFACIO

    Nunca pensé que escribiría un prefacio para una novela de ficción, y me pregunto si alguna vez lo haré de nuevo. Cuando comencé planeado y escribiendo ‘Silent Hill: Traición’ {SHT}, no tenía intención alguna de escribir un prefacio del todo. Oh, cómo han cambiado las cosas.

    Desde que mis entrevistas y anuncios sobre SHT llegaron al público general, ha habido una mezcla de emoción e incredulidad. Que a alguien desconocido se le hubiera dado permiso por Konami de escribir una novela de Silent Hill, especialmente desde que ‘Silent Hill’ fue cancelado, era demasiado para muchos.

    Han habido muchas preguntas respecto a esta novela, las cuales han sido principalmente contestadas en mi blog (www.celenicearth.wordpress.com) o en varios sitios web donde se encuentra la discusión. Como estoy seguro que muchos de mis lectores quizás no han visto estas discusiones, quisiera clarificar algunos puntos antes que comience a leer esta historia.

    He indicado en muchos lugares y en las redes sociales que Konami y Ster-Kinekor Entretainment me han dado el permiso de escribir esta novela. Cuando me acerqué a Konami con mi propuesta, ellos me indicaron que estaban cómodos con la idea pero recomendaron que discutiera la materia con sus distribuidores en Sudáfrica donde resido ya que ellos tenían los derechos legales de los productos de Konami aquí, e indicaron que estos eran Ster-Kinekor Entretainment.

    Una vez que Stein-Kinekor Entretainment habían comprobado que no estaba adaptando ninguno de los juegos y estaba escribiendo mi propia historia original, estaban conformes que procediera. Lo cual me lleva a mi próximo punto. Este ‘permiso’ ha llevado a muchos a cuestionar por qué Konami y Ster-Kinekor nunca emitieron un comunicado de prensa anunciando esta novela. Durante mi discusión con ellos, era claro que aunque me dieron el permiso de escribir esta novela, ellos no están afiliados con ella. Esta novela es independiente y no se considera uno de sus productos oficiales. Si lo desea, puede ver la novela como fan-ficción publicada en forma de novela.

    Entonces, ¿por qué crear una novela de Silent Hill, especialmente desde que Konami parece haber pedido todo interés en la franquicia y ‘Silent Hills’ fue cancelado? He estado jugando Silent Hill desde su primer lanzamiento en el Playstation 1, lo cual estoy seguro de que muchos otros lo han hecho. Sin embargo, a diferencia de otros, he disfrutado cada juego en la serie y los he incluido mentalmente a todos en el dogma de Silent Hill. Me he asombrado cuantos fans han ridiculizado los últimos juegos en la serie, afirmando que Konami lo está entendiendo mal. Cómo rayos los creadores de su propia serie van a entender mal su propia serie es algo que no entiendo. Silent Hill pertenece a Konami, y si ellos desean llevar el pueblo en una nueva dirección, esa es su propia prerrogativa.

    Ahora, estoy seguro de que probablemente he enfadado muchos de ustedes con esa declaración. Como ustedes, tengo una sensación de que Silent Hill es parte de mí. Probablemente los angustiaré más diciéndoles que llevaré Silent Hill en mi propia dirección. Hay muchas opiniones de lo que Silent Hill es y no es, sobre el culto y sus orígenes y su involucramiento, de lo que el pueblo realmente representa, etcétera. No voy a pretender favorecer ninguno de ellos. Esta es mi historia de Silent Hill y por lo tanto tiene mis creencias personales y experiencia en el pueblo maldito. Como resultado, siempre habrán choques con lo que otros creen, basados en su propia experiencia y conocimiento extenso.

    Por lo tanto, si quiere realmente disfrutar esta historia como fue destinada a ser disfrutada, le sugiero que la lea con mente abierta. Si está leyendo esto en un intento de encontrarle fallos, los encontrarás.

    Silent Hill tiene un lugar sagrado en mi corazón, así que estoy encantado de tomar este paso y jugar una parte especial en esto. Aunque siempre me gustó más el aspecto de thriller psicológico que las inclusiones del culto. Originalmente sólo iba a incluir una pequeña mención de la Orden, cuando de repente me di cuenta de cómo puedo hacer evolucionar el culto al siguiente nivel. Así que, a pesar de mi plan original de tocar levemente el tema del grupo secreto, he decidió que tendrán un papel más prominente en la trama general de la serie.

    El elemento más importante que quiero mencionar es mi inclusión de Pyramid Head, lo cual parece haber causado consternación entre comunidades de Silent Hill. A pesar de las varias formas en que PH ha sido representado en diferentes juegos y películas, la mayoría de los fans creen que PH está sólo vinculado a Silent Hill 2 y a James Sunderland. Esta nunca fue una creencia que yo compartiera. En mi perspectiva, los sirvientes de Valtiel usan estos y otras formas sagradas sobre sus cabezas para representar a Valtien en sus deberes.

    Esta creencia mía es crítica en esta novela, ya que Valtiel juega un papel más importante que nunca. Aunque los ‘guardianes’ en novelas futuras serán representados en otras formas, quise empezar la primera novela con la primera representación y esta era Pyramid Head. La persona dentro de la máscara es distinta y la usa por sus propias razones, pero no obstante he decidido apegarme a esta decisión.

    Como nota final, he notado que muchos han leído nada más la sinopsis, vieron la mención de una esposa difunta e inmediatamente lo relacionaron con SH2. Estoy seguro que, a medida que avance, lo va a comprar con muchos otros juegos en la serie. Es la naturaleza del asunto. Si escribo sobre lluvia pesada que cae, los fans gritarán ‘¡Downpour!’. Si los llevo por un centro comercial, los fans gritarán ‘¡SH3!’. Es difícil llevarlos por cualquier parte de Silent Hill sin alguna forma de similitud o familiaridad.

    Realmente espero que los lectores disfruten esta novela. No tengo expectativas que nadie se convierta a mis creencias sobre Silent Hill, o que traicionen sus propias nociones sobre la franquicia. Sinceramente nada más quiero ofrecerles mi propia historia en esta maravillosa, ciudad embrujada que he llegado a amar. Disfrútela, no la disfrute... ese poder recide en usted.

    En amor y gracia

    Shaun M Jooste

    PRÓLOGO

    Persecución intensa

    Trevor McKenzie se movió suavemente en la cama, la sábana desplazándose sobre la mujer desnuda a su lado mientras él se agitaba suavemente en su sueño. El sol aún no había salido, dejando a los dos amantes apaciblemente disfrutando su abrazo, sólo el viento inquieto afuera insinuando el porvenir.

    Su corto cabello marrón frotaba contra la gran almohada blanca que compartía con la mujer de cabello castaño rojizo entre sus brazos. La cama doble se encontraba en una rústica habitación que necesitaba una mano de pintura hace ya unos cuantos años, al igual que el resto del apartamento 202 de South Ashfield Heights.

    El rostro de Trevor se volvió una mueca, sus delgadas cejas arqueándose sobre su pálida frente. Su brazo derecho agarrado del borde de la cama, mientras fruncía los dientes en dolor e ira. Su hombre izquierdo se sacudió. Causando que la mujer levantara la cabeza asustada. Sus gemidos se volvieron profundos, sonando como el gruñido oscuro de un sabueso rabioso.

    ¿Trev? la mujer lo llamó suavemente, atemorizada de despertarlo. A pesar de esto, llevó su tacto a su pecho, causándole que se levantara en un frenesí estrepitoso y apretara su antebrazo. Ella se retiró, alarmada por la oscuridad de sus ojos y el olor a azufre emitido por su respiración ronca.

    SILENT HILL, gimió en una oscura voz masculina, con un sutil trasfondo femenino en su interior.

    Kathy Georgeades entró en pánico e intentó arrancar su brazo de su apretón de mordaza. Cuando se dió cuenta que no podia liberarse, arqueó su espalda sobre la cama, ingorando la sábanas que cayeron de la parte superior de su cuerpo. Alcanzó el vaso de agua que tenía en la mesa de noche y contorsionó su cuerpo de vuelta a él. El agua salpicó sobre su rostro, haciendo que él sacudiera su cabeza alejándose de ella y liberara su brazo.

    Ella se salió de la cama, de pie en el piso y mirándolo para cualquier señal de violencia. Él estaba secando sus ojos con sus manos, su pecho parecía estar respirando más gentilmente que lo que estaba durante su episodio de posesión. Kathy se agachó a recoger la bata del suelo por sus pies y cubrió su desnudez. Despegó el largo cabello rojizo de la parte de atrás de la bata y se ató la faja sobre el vientre.

    ¿Qué...qué pasó? Pregunto Trevor, mirándola con sorpresa.

    Estabas teniendo una pesadilla, Respondió Kathy. Nos hare un poco de café.

    Kathy se alejó sin darle oportunidad de responder. Él se agarró la cara con las manos en un vano intento de lavar los restos de su mal sueño. Trató de recorder cualquier cosa de su sueño, algo que desencadenara lo que le había causado tanto miedo. El único fragment que conserve fueron las palabras Silent Hill en una protesta gutural.

    Necesitaba salir del apartamento por un momento. Tomar algo de aire fresco, lejos de los malos recuerdos, lejos de todo lo que le recordara lo que había pasado...

    Trevor encontró su par de jeans negros favoritos, unos calcetines negros con sus botas y se puso una camiseta gris antes de ponerse una camisa de cuadros rojos y verde sobre ella. Mientras pasaba por el guardarropas en la pared, se miró al espejo en la puerta. Su corto cabello marrón estaba empapado del sudor durante su sueño, sus ojos verdes brillando con la niebla de su estela.

    Tomando su cellular de la mesa de noche salió de la habitación. Trevor bajó por el pasillo, detectando los pies de Kathy junto al inodoro a través de la puerta del baño que estaba ligeramente entreabierta. Pasó junto a ella y redujo su paso al entrar en el área de la cocina del salón.

    Miró hacia el techo. El ventilador estaba encendido, aunque él recordaba haberlo apagado antes. Trevor sintió los escalofríos en su espina dorsal viendo las aspas girando. Casi esperaba que se despegara y cayera del techo, esperando que los soportes adicionales que había colocado hace unos meses se rompieran de pronto y tiraran el ventilador de nuevo.

    Sin embargo, las aspas continuaban girando, burlándose de él con cada sonido que hacía cortando el aire espeso y húmedo.

    ¿Trevor? Preguntó Kathy por detrás, haciéndolo saltar. No había la había escuchado tirar de la cadena. Ella retrocedió ante su reacción, mirando el área del salón para ver qué lo había alarmado.

    Pensé que había apagado el ventilador anoche, aclaró, frotándose la frente.

    Lo hiciste, pero lo puse de nuevo hace unos momentos. Se estaba poniendo muy mohoso aquí.

    Ella le frunció el ceño, pasando cautelosamente delante de él hacia el área de la cocina. Trevor vio el ventilador girar por un momento más antes de ir hacia el salón, tomando asiento frente al pasillo de la habitación. Se quedó mirando fijamente la pantalla de la televisión en blanco.

    Justo encima de la pantalla de la televisión había un cuadro de otra mujer pelirroja en un uniforme de enfermera sentada en una cama. Trevor había encontrado muchas pinturas en la habitación cuando se mudó y había vendido muchas de ellas, pero esta en particular le había gustado. Kathy siempre había insinuado que era porque la mujer del cuadro se parecía a ella. En la esquina del cuadro estaba inscrito el nombre Rachel.

    Trevor recordó que había intentado lo mismo una vez, inspirado por el inquilino anterior del apartamento. A pesar de sus mejores intentos de no hacerlo, miró hacia la esquina del salón por la ventana y vio la pintura que estaba escondida detrás del mueble de la pared. El pelo rubio era visible desde la parte del cuadro que sobresalía. Instintivamente hizo que Trevor volviera a mirar al abanico. El zumbido de las aspas comenzó a sonar como el rechinar de engranajes.

    Ya te lo mencioné antes, dijo Kathy suavemente mientras colocaba las tazas de café en la mesa en el centro del salón, No es saludable que nos quedemos aquí, especialmente después de lo que sucedió.

    Lo sé, respondió mientras ella se sentaba a su lado. Empezaré a buscar un lugar hoy.

    Eso dijiste la última vez, replicó ella. Él sonrió, y luego le miró su brazo.

    ¿Yo hice eso? Preguntó Trevor, señalando el moretón que se estaba formando en su brazo.

    No te preocupes, respondió ella, sonriendo tranquilamente bajándose la manga de la bata. No estabas en un buen estado mental.

    Él asintió, pero Kathy pudo ver por su expresión que no se perdonaría tan fácilmente por haberla lastimado. Ella tomó su café, y se dirigió a dárselo cuando sonó el teléfono.

    Trevor miró el bolsillo de su pantalón tentativamente, decidiendo si responder. Su mente estaba todavía nublada por el mal sueño, así que aceptó la tasa de café mientras dejaba sonar el teléfono hasta su conclusión. Kathy simplemente lo miró, sin saber qué decirle.

    Su teléfono apenas había dejado de sonar cuando Kathy oyó sonar su teléfono desde la habitación. A diferencia de Trevor, ella se dirigió a contestar. Trevor vio su cuerpo flexible moverse por el pasillo hasta que estuvo fuera de vista. Cerró sus ojos para saborear el rico sabor del café e inmediatamente tiró la taza.

    El líquido de la tasa se vertió sobre la sucia alfombra del salón. Él se incline hacia delante, girando la taza en posición vertical para inspeccionar el contenido. Parecía y olía a café, pero cuando lo probó podría jurar que tenía un sabor como de ... hierro. Como si hubiera probado la sangre de una herida superficial.

    Trevor, es Jay, dijo Kathy mientras regresaba al salón con el celular en mano. Dice que necesita hablar contigo ahora.

    No quiero hablar con nadie en este momento, dijo, despidiendo el teléfono con la mano. Lo llamaré mañana.

    Él dice que es urgente, amor, respondió Kathy, poniendo el teléfono en sus manos. Dice que es sobre...ella.

    Trevor la miró a los ojos y supo inmediatamente de quién estaba hablando. Le picó su dedo anular donde solía estar el anillo de bodas, pero lo ignoró. Se puso al teléfono al oído y escuchó el sonido de sirenas en el fondo.

    Jay, ¿Qué pasa?

    Trev, vete inmediatamente de ahí hombre, replicó Jay del otro lado. La policía se acerca.

    ¿Por qué? dijo, poniéndose de pie de pronto. Kathy lo miró fijamente con los ojos ampliamente abiertos, preguntándose qué le había causado tal consternación.

    Ellos lo saben, hombre, respondió Jay. Trevor tenía dificultades para escuchar sus palabras a través del ruido de las sirenas.

    ¿Cómo diablos podrían saberlo? Le dijo a Jay, y luego le susurró a Kathy que se vistiera. Ella entendió la señal y corrió de Vuelta a la habitación.

    Algún informe forense que surgió. Encontraron nuevas pruebas.

    Me dijiste que el caso se había enfriando, dijo Trevor, su respiración se había vuelto muy profunda mientras trataba de evitar el pánico que se elevaba dentro de él.

    Así fue, respondió Jay. Así fue. Entonces el informe de algún terapeuta estremeció la estación. Alguien lo ha derramado todo.

    ¿Quién?

    Bueno, no soy yo, respondió Jay. A sí que al menos que hayas estado viendo a la doctora Emily Kaufman...

    No lo he hecho, intervio Trevor. Me he mantenido lejos de cualquier forma de consejería.

    Entonces solo pudo ser Philip, hombre, dijo Jay. A menos que se lo hayas dicho a Kathy.

    No, pero no creo que ella sea estúpida, dijo Trevor. No sería ella; ella no me traicionaría.

    Escucha, podemos discutir esto más tarde, dijo Jay. Estamos de camino hacia ti ahora, saliendo de la estación. Váyanse.

    Trevor cortó la llamada, sin molestarse en despedirse. Corrió a la habitación y se metió al armario. Agarró una bolsa de deporte azul extragrande, comenzó a meter algo de ropa adentro. Metió la mano debajo de sus camisas en uno de sus estantes y tomó su billetera con su dinero, tarjetas y su licencia de conducir.

    Kathy había terminado de vestirse y había guardado algunos artículos en una bolsa de viaje. Él se dio cuenta por su expresión que ella tenía muchas preguntas en mente, pero eligió guardarlas para después. Ella tomó las llaves del auto y se las tiró al salir del dormitorio.

    Cuando llegaron al salón, Trevor se hizo a un lado para dejar pasar a Kathy primero. Al darse vuelta para hacerlo, vio el cuadro de ‘Rachel’ en el suelo junto al mueble de la televisión. Miró a la pared... su pintura estaba allí en su lugar, la mujer le sonreía. El nombre ‘Caroline’ sangraba por la esquina superior. Podría jurar que ella tenía una sonrisa que él no había pintado.

    ¡Trevor! Llamó Kathy desde la puerta que ya había abierto, alcanzándolo con la mano.

    Corrió hacia ella, tomándola de la mano. Al cerrar la puerta con la otra mano, agarrándose de su bolsa, vio el ventilador del techo moverse y caer al suelo. Su corazón latía con fuerza, su aliento se atascó en su garganta, mientras Kathy lo empujaba hacia las escaleras.

    El pisoteo de las escaleras superó el martilleo de su corazón en su cabeza. Trató de escuchar más allá del ruido por el sonido de sirenas. Todo lo que podía oír eran sus pies en los escalones de madera.

    Llegaron a la planta baja e hicieron su camino hacia las puertas dobles del vestíbulo. Por fuerza de hábito, Trevor dirigió su mirada hacia los buzones que colgaban firmemente contra la pared. Se detuvo en su camino cuando la mano de Kathy dejó la suya, su impulso la llevó hacia delante antes que ella también se detuviera.

    No tenemos tiempo para esto, dijo Kathy precipitadamente. Trevor la miró preguntándose cuánto sospechaba o realmente sabía. Parecía tener una enorme prisa para alguien que no sabía lo que estaba pasando.

    Espera, hay algo en mi buzón, dijo Trevor mientras caminaba hacia el objeto rojo sobresaliendo de la pequeña abertura del buzón.

    Sacó el papel rojo que parecía estar chamuscado en los bordes. Estaba en blanco del lado inicial, pero al darle vuelta dos palabras estaban escritas en el centro:

    Silent Hill

    En la parte superior derecha del papel vio un extraño símbolo. Empezó a estudiarlo más de cerca cuando el tirón de Kathy en su brazo le recordó que estaba siendo perseguido por la policía.

    Guardando el papel en una de las secciones superiores de la bolsa de lona, hizo su camino fuera de los apartamentos hacia el auto de Kathy esperándolos en el parqueo. Lo abrió y saltó al asiento del conductor. Escuchó las sirenas a lo lejos mientras ponía en marcha el automóvil, Kathy cerrando la puerta de pasajero de golpe mientras lanzaba la bolsa de lona hacia el asiento trasero.

    El carro azul de dos puertas dio marcha atrás en la bahía y avanzó a toda velocidad hacia la calle. Trevor observó el tráfico acercándose en ambas direcciones. Al acercarse a la salida del parqueo, vio los autos policiales acercándose por la derecha. Kathy le agarró la pierna derecha con temor.

    Trevor vigilaba el tráfico cuidadosamente. Mientras el carro rugía en la carretera, pateó el acelerador para una vuelta y luego lo soltó de nuevo. La parte trasera del auto giró, permitiéndoles pasar al carril derecho. El tráfico del carril izquierdo se desvió para esquivarlo, causando que no de los sedanes les diera un golpe en la parte trasera. Trevor luchó contra el volante para corregir el equilibrio y luego se apresuró hacia la autopista.

    Un enjambre de autos policiales los siguió en persecución. Trevor vio por el retrovisor como uno de ellos los alcanzaba, los árboles del bosque rodeando cada lado de la carretera. Intentó distinguir el conductor del vehículo policial más cercano, pero aún estaba demasiado lejos.

    Debes de estar preguntándote qué está pasando, dijo Trevor finalmente, usando la conversación para luchar contra la excesiva tensión acumulándose a su interior. Habían despejado la mayor parte del tránsito y parecían tener un camino despejado por delante.

    Asumo que tiene algo que ver con la muerte de Caroline, respondió Kathy, insegura de su evaluación.

    Algo así, accedió.

    Pero no entiendo, declaró Kathy finalmente, pensé que habías dicho que se había suicidado.

    Así fue, respondió él. Trevor abrió la boca para decir más, pero las palabras se atascaron en su garganta. Tragó con fuerza y lo intentó de nuevo, pero lo que necesitaba decirle no salía.

    Ok, dijo Kathy, frotando su pierna, sea lo que sea, puede esperar a que salgamos de este lío.

    Trevor la miró para ofrecer una sonrisa de gratitud y luego miró detrás de ella para ver uno de los policías a su lado. Vio los nombres J. Nixon y F. Johnson escritos en la puerta del vehículo policial, aunque Trevor sólo vio a un hombre en el carro. El policía tomó la radio del megáfono.

    ¡Deténganse ahora mismo!, gritó el policía, y luego asintió con la cabeza hacia los otros policías. Hizo un movimiento de desviación al volante del auto de policía.

    ¿Qué está hacienda? Preguntó Kathy, desconcertada.

    Tratando de ayudarnos dijo Trevor cuando entendió lo que el oficial quería que hiciera. Agarrate con fuerza.

    Trevor tomó el volante con fuerza y desvió el carro primero a la derecha y luego a la izquierda hacia el carril del policía. Se aseguró de chocar contra el lateral del auto policial y luego golpear el frente cuando el oficial redujo la velocidad.

    El carro de policía giró y su parte trasera chocó contra uno de los otros carros policiales. Esto causó una reacción en cadena de vehículos policiales que chocaron entre sí., ya sea fuera de la carretera en el bosque o hacia los otros carriles de tráfico en sentido contrario. Trevor se alejó a toda velocidad hacia la luz de la mañana justo cuando notó una neblina que se movía desde el bosque.

    El oficial Nixon dio vuelta a su carro y persiguió a Trevor. Kathy miró hacia atrás y vio que los seguían otros dos vehículos policiales habían sobrevivido al accidente.

    No creo que los perdamos en la autopista, dijo Kathy.

    Me desviaré en la próxima salida, dijo Trevor, viendo como las sirenas de los tres vehículos detrás de él parpadeaban pálidamente en la niebla espesa. ¿Hay un libro de mapas en tu carro?

    Kathy se inclinó hacia el asiento trasero y se revolvió en el suelo. Después de un momento de búsqueda alrededor de los asientos y la basura, se llevó el libro a su regazo. Lo abrió, buscando rápidamente su área. Tan pronto como encontró la página correcta, su dedo trazó el camino en el que estaban.

    No, dijo suavemente, con el dedo parado en la siguiente salida del mapa.

    ¿Qué pasa? preguntó él, desconcertado por el tono de la voz de ella.

    Nada, dijo apresuradamente, mirando hacia atrás a los vehículos de la policía. Sólo necesito encontrar otra salida.

    Trevor estaba a punto de interrogarla cuando una señal verde apareció en el lado izquierdo de la carretera. Tragó con fuerza al ver el destino de la señal.

    Trevor, no lo hagas, suplicó Kathy, la miró una vez, y luego al espejo. Vio el desvío que había delante.

    Todo me ha llevado a esto, dijo Trevor finalmente, Todas estas pesadillas de los últimos meses.

    ¿Creí que ya habías avanzado? Preguntó Kathy.

    Yo también, dijo Trevor, girando el carro de repente hacia la salida. Te amo Kathy. Pero necesito saber por qué se suicidó.

    ¿No es obvio? Respondió Kathy.

    Caroline no se suicidaría por nosotros. Al menos no la Caroline que conocí.

    Sabes... a veces la verdadera naturaleza de una mujer sale a la luz cuando es realmente traicionada.

    Trevor compartió otra mirada con ella. Una vez más se preguntó cuánto sabía realmente.

    ¿Por qué Silent Hill? preguntó ella bajo su impactante mirada. ¿Qué te proporcionará Silent Hill que no puedas encontrar en otro lugar?

    Mis sueños, los mensajes en mi teléfono, el papel rojo en mi buzón, respondió Trevor. "no creo que sea una coincidencia.

    Pero Caroline está muerta, Kathy lo intentó de nuevo. ¿Quién podría darte respuestas allí?

    ¿No me dijiste que Phillip fue transferido del hospital Brahms al hospital Alchemilla en Silent Hill?

    Sí, pero ¿qué tiene que ver Phillip con esto?

    Trevor se quedó callado, dejando que Kathy lo mirara confundida. Miró en el espejo al desvío de la autopista cuando la policía llegó.

    El oficial Nixon detuvo su carro en la curva, haciendo que los otros dos se detuvieran también. Alcanzó la radio y se dirigió a sus canales.

    Iré tras ellos, dijo a los demás. Esperen aquí.

    Pero ese camino ha estado abandonado por años, respondió la mujer de la radio. El puente está colapsasdo. No hay nada ahí.

    Entonces bloqueen este camino, dijo el oficial Nixon. Prepárense para detenerlos si regresan.

    Afirmativo, respondió la mujer.

    Trevor relajó su pie del pedal, haciendo que Kathy mirara hacia atrás en la niebla. Ella sólo vio la sirena de un vehículo siguiéndolos en su oscuro camino hacia Silent Hill. El camino comenzó a subir y el oficial Nixon se mantuvo a corta distancia detrás de ellos.

    Se siente tan extraño regresar a Silent Hill, dijo Kathy, sintiéndose más tranquila para hablar.

    ¿Cuándo fue la última vez que viste este lugar? Preguntó Trevor.

    Fui a la escuela aquí, respondió, mirando hacia abajo y jugando con los dijes de su brazalete en su muñeca. Me sentí en casa allí, más que con mis padres. Tenía buenos amigos.

    Eso suena genial, sonrió Trevor. nos vendrían bien unos buenos amigos ahora mismo.

    ¿Y tú? preguntó ella de vuelta. ¿Cuándo fue la última vez que estuviste aquí?"

    Vine al complejo turístico hace algunos años, respondió. Kathy notó que la pregunta parecía preocuparle Llegamos al ferry en los muelles de Toluca cerca del complejo, así que nunca llegué a ver la ciudad realmente.

    La radio se encendió de repente e hizo un ruido momentáneo. Trevor y Kathy la miraron mientras a luz de la radio parpadeaba y el dial de la señal comenzó a sintonizarse a o largo de su ancho. Trevor se agachó para apagarla y recibió una descarga eléctrica tan pronto sus dedos la tocaron.

    Trevor miró hacia atrás y vio un destello de un cartel en la carretera. La niebla se cuajó en una masa más densa, oscureciendo las palabras del cartel. Sin embargo, antes de que la señal se hubiera desvanecido, Trevor juró que había visto el nombre del a ciudad en ella.

    Trevo..., una voz femenina en la radio gruñía, haciendo que la miraran de nuevo. No... a Silent Hi...aléjate. No me busqu... Por favor Tr...ale...te

    ¡Trevor, cuidado! Kathy gritó, señalando el camino que tenía delante.

    Un gran hombre sin camisa estaba de pie delante de ellos. La luz del auto brillaba sobre el extraño objeto metálico sobre la cabeza del hombre. Su musculoso torso herido brillaba en la niebla espeluznante. Se estaba desvaneciendo cuando de repente la niebla se levantó un poco y reveló una enorme roca en el camino.

    Trevor maniobró, haciendo todo lo posible por evitar la roca. Intentó acelerar de nuevo, haciendo que la cola del carro girara demasiado. El oficial en el vehículo de policía se estrelló contra el costado del auto, enviando su carro a dar saltos mortales sobre sus costados y chocando contra una barrera cerca del borde del camino...

    Primer Acto

    LOS PERROS SALVAJES DE LA JUSTICIA

    Pesadilla
    La Gracia Salvadora
    Misterios en la Niebla
    Recuerdos Polvorientos
    Llaves Encantadoras
    La Escuela Primaria de Midwich
    El Arte del Tiempo
    Las Palabras del Tiempo
    Las Notas del Tiempo
    Oscuridad Hirviente
    Runas de la Creatividad
    Los Sabuesos del Infierno
    Los Dioses Torturados

    1

    PESADILLA

    Trevor agitó su cuerpo dolorido, gimiendo mientras intentaba abrir los ojos. Podía sentir un líquido pegajoso en su mejilla y el lado de su cuello, y su cuerpo estaba en una posición incómoda. Intentó moverse, pero el dolor le hizo exhalar rápidamente y quedarse quieto.

    Finalmente se las arregló para abrir los ojos. Estaba tumbado contra la puerta del carro, con el cuello ligeramente doblado contra el reposacabezas de su asiento. Miró hacia la puerta del pasajero y se dio cuenta de que el carro estaba tumbado de lado. Pasando sus dedos por su cuello, sintió un charco de sangre que se había acumulado allí.

    Intentó moverse de nuevo y luego notó que algo se movía en su vientre. Viendo una banda dorada, la recogió para inspeccionarla más de cerca. Vio los eslabones que se supone que contienen los amuletos y se dio cuenta de que era el brazalete de Kathy. Todos sus amuletos habían desaparecido.

    De repente se dio cuenta de que Kathy no estaba en su asiento. Se levantó, sólo para hacer una mueca de dolor y volver a acostarse. Tomándolo más despacio, se movió hasta que pudo ver sobre su asiento en la parte trasera del carro. También estaba vacío.

    Trevor miró por el parabrisas para ver si podía detectar algún movimiento, pero todo lo que pudo ver fue niebla. Parecía que se había vuelto mucho más densa que antes y apenas podía ver más allá de la parte delantera del carro.

    Colocando el brazalete de amuletos en el bolsillo de su camisa, reunió su fuerza y coraje y se dirigió hacia la puerta del pasajero. Le llevó unos minutos, pero finalmente logró salir del vehículo. Se paró junto a él en el camino, entrecerrando los ojos en la niebla en un intento de ver a Kathy. Su ojo captó el vehículo policial que los había perseguido en el carril opuesto.

    Al llegar, se asomó por la ventana lateral rota. No había nadie allí, o ninguna señal de dónde había ido el oficial. Trevor estaba a punto de dar un paso atrás cuando vio una radio de la policía incorporada en el tablero del carro. Metió la mano y tomó el receptor.

    ¿Hola? le habló, esperando que ya estuviera en la frecuencia correcta. ¿Alguien puede oírme? Hola?

    Nadie respondió. Ni siquiera recibió ninguna forma de estática. Comprobó los niveles de energía y vio que la batería aún estaba completamente cargada por la luz verde de su lado. Dejó caer el receptor, sintiendo que no tenía sentido seguir intentándolo.

    Dándose la vuelta, vio el gran cartel que se asomaba delante de él. Tenía dos focos en la parte superior, pero incluso con toda su luminiscencia Trevor tuvo que caminar más hacia adelante para leerlo. Cuando caminó lo suficientemente para ver las grandes palabras blancas escritas en el letrero verde a través de la niebla, leyó:

    Bienvenido a Silent Hill

    Le provocó escalofríos a Trevor. Algo lo quería aquí, y hasta hace poco había pensado que era Caroline. Pensó en la radio del carro que se había encendido sola, recordando la voz que le había hablado. Había intentado distinguir la voz entre el ruido del crepitar y estaba casi seguro de que había sonado como la de Caroline.

    Sin embargo, ante la señal de bienvenida del pueblo, ya no estaba seguro de nada. Demasiadas preguntas le golpearon en la cabeza. ¿Es aquí donde sus sueños también lo llevaban? ¿Quién era el hombre con el extraño objeto metálico en su cabeza? ¿Dónde estaba Kathy? ¿Dónde estaba Jay?

    Tranquilízate, viejo Trev, dijo suavemente, sacudiendo las últimas telarañas de su cabeza. No es momento para la histeria.

    Buscó en su bolsillo su teléfono móvil y lo sacó, contento de ver que había sobrevivido al accidente. La luz del teléfono parpadeó momentáneamente y luego arrojó un extraño resplandor en la niebla. Comprobó la energía de la batería, que era suficiente. Sin embargo, la señal era inexistente. La barra de señal mostraba un símbolo de SOS que significaba que sólo podía hacer llamadas de emergencia.

    Y esto se sentía exactamente como una emergencia.

    Trevor marcó el número de emergencia y esperó mientras el teléfono sonaba. Estaba a punto de colgar de nuevo cuando alguien respondió.

    ¿Hola? Intentó Trevor.

    Por respuesta, todo lo que obtuvo fue un gruñido grave. Pensó por un momento que el gruñido sonaba muy canino, pero se dio cuenta de que era mucho más profundo; como el núcleo de un fuego ardiente.

    Colgó. Necesitaba moverse. Miró hacia atrás por el camino lejos de la ciudad y se preguntó si Kathy habría tratado de regresar. Caminando de nuevo por el camino hacia la roca, quedó alerta por en el extraño hombre de cabeza metálica que había visto. Una vez pasado el peñasco, vio que tenía mucho más que hombres extraños de los que preocuparse.

    La carretera se rompió abruptamente. Trevor caminó hasta el final del camino, se arrodilló y miró por encima del borde con cuidado. No había nada allí excepto un abismo sin fin. Ni siquiera la niebla penetró en esa oscuridad. Su cabeza se tambaleó por el vértigo y cayó sentado alejándose del acantilado.

    Esto es una locura, dijo Trevor en voz alta, aunque sólo sea para oír el sonido de algo más que la nada que lo rodea. Debo estar soñando. Esto no puede ser real.

    Se levantó y volvió a los vehículos. Una vez más se preguntó dónde podría estar Kathy y por primera vez dejó pasar otro pensamiento subconsciente. Si ella se había despertado a su lado, ¿por qué no lo despertó? O al menos lo hubiera esperado. ¿Y dónde estaba el oficial? Seguramente el oficial habría comprobado que estaba bien y luego se hubiera esforzado por despertarlo.

    De repente se sintió muy solo y aún más seguro de que esto era un sueño. Aún así, no podía quedarse ahí esperando. Su impaciencia se hubiera apoderado de él. Dio un paso adelante en el camino, dando sus primeros pasos deliberados en la ciudad de Silent Hill.

    ––––––––

    Trevor revisó su teléfono después de sentir que había estado caminando durante horas. El tiempo mostró que sólo habían pasado quince minutos. Justo cuando empezaba a preocuparse por si se había perdido, vio un grupo de edificios delante de él y se dio cuenta de que finalmente había llegado a la ciudad.

    Los edificios parecían abandonados. Habían sufrido el abuso del vandalismo y los graffitis hace algún tiempo, pero no pudo detectar nada moderno en ellos. Incluso la escritura de algunas de las paredes enlucidas se había desvanecido en algunos lugares.

    Justo cuando vio una tienda a su izquierda, se dio cuenta de que había llegado a un cruce de cuatro vías. Se dirigió a una de las esquinas de la acera para ver si podía ver los nombres de las calles. Aunque no conocía las calles de Silent Hill, esperaba que si se perdía, saber los nombres le ayudaría de alguna manera a encontrar la salida.

    La carretera por la que se dirigía era Bachman Road y la que la cruzaba era Finney Street. Hizo una nota mental y miró a ambos lados de Finney. La niebla lo cubría todo y no podía ver muy lejos. En la soledad del momento, no tenía ni idea de adónde se dirigía o qué debía hacer.

    Escuchó un aleteo de alas y miró hacia arriba para ver un cuervo negro aterrizar en un poste de luz mirándolo fijamente. Trevor se sintió incómodo bajo su mirada y decidió bajar más lejos por la calle Bachman.

    Observando los edificios que pasaba para ver si había señales de vida, notó más cuervos aterrizando en los árboles de la derecha. Permanecieron más cerca de la calle Finney que en la dirección en la que se dirigía, lo que le hizo sentir un poco mejor al ganar distancia de ellos. Cuando miró de nuevo al frente, la cortada de la frente empezó a picarle.

    ¿Qué demonios? Trevor dijo, mirando sus dedos. Frotó las puntas de los dedos, sintiendo la suavidad de la sustancia. ¿Esto es ceniza o nieve?

    Miró hacia arriba, tratando de detectar la fuente del elemento a la deriva. Dando vueltas, todo lo que pudo ver fue más de la niebla que caía en la ciudad, dándose cuenta de que había estado caminando en ello desde que despertó del accidente de coche.

    Girando de nuevo para alejarse de los cuervos, vio una luz tenue a la izquierda. Trevor corrió rápidamente hacia ella, esperando sus primeros signos de vida humana. Viendo el cartel Café 5to2 en el techo del edificio, se dirigió a las grandes ventanas de vidrio que emitían la luz desde el interior.

    Golpeó el marco de vidrio, esperando que llamara la atención de alguien. Apretando su cara contra el cristal, miró dentro. A pesar de que la luz estaba encendida, no había nadie dentro del área pública o detrás del mostrador que sirviera a los clientes. En el extremo derecho del mostrador, vio algo circular dibujado en rojo en la pared. Parecía sangre seca.

    Trevor intentó la puerta y la encontró cerrada. Dando vueltas, buscó cualquier cosa con la que romper las ventanas. En la base del árbol más cercano vio una gran piedra redonda, lo suficientemente grande para poder lanzarla con suficiente impulso. Se apresuró a recogerla y la apuntó a la ventana.

    Trevor. Su brazo permaneció quieto sobre su hombro. Miró hacia el camino en dirección a los cuervos. Podría jurar que había escuchado la voz de Kathy. Manteniendo la piedra en su mano, los dedos apenas se tocaban entre sí, se movió lentamente hacia los cuervos.

    Trevor...

    Ahí estaba otra vez. Esta vez estaba seguro de que era ella. Vio una forma en la niebla y ésta corrió de él. Trevor impulsivamente corrió hacia ella. Vio los árboles con los cuervos delante de él y se aseguró de mantenerse alejado de ellos.

    Llegó a la calle Finney, y miró a la izquierda por la carretera. Estaba silencioso otra vez, excepto por algunos graznidos de uno o dos cuervos. Bajó por la calle Finney, vigilando a ambos lados de la calle por si había alguna señal de la misteriosa figura. Vio varios bancos en las aceras y algunos árboles más, pero la figura había desaparecido.

    Trevor se detuvo cuando apareció un callejón entre dos edificios. Parecía oscuro y presagiador y estaba a punto de alejarse de él cuando le llamó la atención un rastro de sangre que corría por el lateral de un edificio en el callejón. Inspeccionando el rastro más allá, parecía como si alguien hubiera pasado sus dedos ensangrentados por la pared a lo largo de su longitud hacia la oscuridad.

    Un gran grito femenino sonó en la niebla del callejón, causando que Trevor corriera hacia adentro con abandono. La niebla pareció desvanecerse, reemplazada por la oscuridad sofocante, mientras seguía el callejón con la poca luz que quedaba. Otro grito le hizo acelerar su paso con la oscuridad que ahora parecía ahogar el aire de su garganta. Cuanto más se adentraba en el callejón, más se agarraba al cuello, lo que le hacía toser y balbucear mientras se apresuraba a llegar a Kathy.

    El camino llegó a su fin y se golpeó la rodilla en la esquina de una pared de ladrillo. Gritó, cayendo hasta su otra rodilla. Apenas tuvo tiempo de lidiar con el dolor cuando escuchó un leve y lloroso gemido. Mientras su cabeza giraba por el doloroso latido de su rodilla, miró a su alrededor en la oscuridad, tratando de encontrar su fuente.

    Trevor buscó en su bolsillo su teléfono, lo sacó y encendió su luz. Lo hizo brillar en el callejón que lo rodeaba, moviéndolo de un lado a otro y de nuevo cuando el ruido de los lamentos parecía acercarse. Sonaba muy parecido a un bebé llorando suavemente, pero también había maldad en él. Ya no estaba muy seguro de si era un lamento o una risa oscura.

    Entonces lo vio. Se arrastraba lentamente hacia él. Al principio parecía normal, excepto el hecho de que no llevara ropa. Sus ojos brillaban en blanco con la luz tenue de su teléfono. El bebé paró de gatear y levantó la parte superior de su cuerpo, con los brazos extendidos hacia algo encima de él.

    Trevor levantó el teléfono con temor. A medida que la luz subía por los brazos del bebé y pasaba los dedos, revelaba los zapatos y luego las piernas suspendidas en el aire. Movió su espalda hacia la esquina más cercana, esperando que de alguna manera lo protegiera. La luz del teléfono reveló una falda azul que cubría la cintura de la persona que estaba encima de él y luego la delgada barriga descubierta.

    Se movió sobre el torso, cubierto por camisa verde holgada, e iluminó la cara. Los ojos muertos de la mujer miraban en su dirección, la sangre alrededor de su boca se ha secado. Le llevó un momento darse cuenta de que tenía una soga alrededor del cuello, y que estaba suspendida de la losa de ladrillo encima de ellos.

    Trevor se levantó en pánico, listo para salir corriendo por el callejón, cuando la luz del teléfono cayó al suelo. Ahora estaba lleno de bebés bloqueando su camino, pero había algo intensamente mal en ellos. Sus expresiones se habían deformado en rostros demoníacos con colmillos que sobresalían de debajo de sus labios. Sus dedos tenían largas garras que sobresalían por el suelo mientras todos se arrastraban hacia él.

    Sin pensarlo, levantó la mano para lanzar la piedra hacia ellos cuando se dio cuenta de que ya no la tenía. Se agachó para buscarla en el suelo, pero no la encontró por ninguna parte. Volvió a mirar a los bebés cuando se le acercaron de un salto y empezaron a devorar su cuello, brazos y piernas, siendo el llanto de Trevor el que ahora llenaba el callejón...

    2

    LA GRACIA SALVADORA

    Trevor se despertó con un impulso, de sobresalto en su asiento. La luz se reflejó en sus ojos y tardó un momento en recuperarse. Frotando sus ojos, los abrió lentamente y se dio cuenta de lo que le rodeaba.

    Recordó este lugar. El mostrador de madera se extendía desde la pared a la derecha a lo largo del edificio, con el área de servicio detrás de él. Mesas de madera llenaban el área de asientos a su alrededor, con los extraños objetos en ellas habiendo sido abandonados hace mucho tiempo.

    Siguiendo la línea de taburetes de bar en el mostrador, vio una máquina de pinball al final de la pared derecha. También había una escotilla de servicio en ese lado del mostrador que parecía conducir a una zona de cocina oculta en la parte posterior.

    Una imagen pintada en rojo en la pared sobre la escotilla de servicio le ayudó a recordar dónde había visto el edificio. Trevor no estaba seguro de si había estado soñando antes, pero había visto el mismo símbolo en la pared cuando se había parado fuera del Café 5to2, golpeando las ventanas.

    Se sentía anciano y le dolían todas las articulaciones al acercarse al símbolo. Tenía dos círculos concéntricos en el perímetro exterior con tres círculos más pequeños en el centro; dos abajo, uno arriba. Dentro de los símbolos concéntricos exteriores había letras antiguas que parecían un cruce entre los alfabetos húngaro y nórdico. Estas letras estaban divididas por un ojo en la parte superior, lo que parecía escalas de justicia a la izquierda, un objeto con un tridente en la parte inferior y un extraño símbolo a la derecha que no podía identificar. Trevor también se dio cuenta de que las letras húngaras estaban reflejadas y no estaban orientadas en la dirección correcta.

    Había otras pequeñas imágenes alrededor de los círculos internos, pero era el rovásírás húngaro con el que Trevor estaba más familiarizado. Si había algo que Caroline amaba de él, era su pasión por la mitología antigua y los idiomas. Ella, por supuesto, se había inclinado más por la filosofía antigua, pero no podía dejar de complacerse en sus cuentos de lugares y criaturas mitológicas.

    Trevor trazó sus dedos en los cuatro palabras húngaras escritas al revés: , , , .

    Alizer... Alessa... Dahlia... Incubas, leyó Trevor en voz alta, empezando por la parte superior derecha y moviéndose en el sentido de las agujas del reloj alrededor del círculo. Frunció el ceño, ninguno de los nombres significaba nada para él.

    Es un símbolo de culto, dijo una voz femenina de repente, haciendo que Trevor girara y cayera contra la máquina de pinball. Se levantó en posición vertical de nuevo, con el corazón latiendo en su pecho.

    Lo siento, se disculpó tímidamente. No sabía que tenía compañía.

    Ella sonrió aceptando su explicación. Estaba de pie detrás del mostrador, en el lado izquierdo más oscuro del otro extremo. Mientras se acercaba a él, él vio pelo corto y rubio que apenas le tocaba los hombros y unos magníficos ojos verdes que brillaban más de lo que la luz tenue del café debería haber permitido.

    Su piel pálida se complementaba con una camiseta deportiva amarillo claro que era lo suficientemente apretada en la parte superior de su cuerpo como para revelar sus pechos de tamaño medio, pero no lo suficiente como para revelar el tamaño de su vientre. Trevor podía ver su cintura curvada sobre el borde del mostrador, que estaba cubierta por unos jeans azules y un cinturón marrón.

    Eso se llama el Halo del Sol, explicó, asintiendo al símbolo rojo de la pared. No es el único símbolo de este tipo aquí en Silent Hill.

    ¿De dónde viene? preguntó, volviéndose para mirarlo de nuevo. ¿Qué significa?

    Se deriva de algún culto que una vez existió aquí, explicó, en los primeros días de Silent Hill. El grupo creía que tenía algún poder místico, aunque me atrevo a pensar que, si existió el poder se ha ido hace mucho tiempo.

    ¿Qué clase de poder?

    Bueno, los dos círculos exteriores se supone que representan la resurrección, y los tres círculos interiores son el presente, el pasado y el futuro. He leído en alguna parte que nunca debe ser dibujado en azul o negro.

    Trevor la miró con sospecha por un momento. Ahora no sólo se preguntaba de dónde había venido, sino también cómo es que sabía tanto sobre el símbolo.

    ¿Eras miembro de esa secta? preguntó cuidadosamente, sentándose en un taburete de bar.

    ¿La Orden?, respondió ella, resoplando de risa a partir de entonces. Oh, cielos, no. Aunque estoy intrigada por ellos. Es parte de mi razón de estar aquí. He estado estudiando esta mística ciudad desde su caída, desde que la abandonaron a los fuegos que aún arden bajo ella. Las culturas que se quedaron atrás, las creencias religiosas... estoy muy metida en todo esto.

    Estoy a favor de los estudios sobre lo místico y mitológico, reconoció Trevor, pero aún así la miraba con escepticismo. Sin embargo, tenía poco interés en la historia de la ciudad en ese momento. ¿Sabes lo que significan los cuatro nombres en el círculo?

    Sólo puedo adivinar que el poder del Halo fue la magia que se invocó sobre las cuatro personas cuyos nombres están en él, respondió, suspirando suavemente. Me temo que todavía hay demasiados misterios para que yo los resuelva.

    Dejando las últimas palabras en sus labios, miró a Trevor intensamente, como si fueran a tener alguna importancia para él. Le hizo sentir incómodo, así que volvió al símbolo y colocó su palma derecha sobre él.

    Bueno, cualquier poder que tenía antes definitivamente parece haber desaparecido ahora,

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