Simeón El Penúltimo Sabio: Segunda Parte
()
Información de este libro electrónico
Gracias por aceptarme y una gran satisfacción siento de mirar uno de estos tomos en su librero. Recuerden que todo lo que escribo lo hago sin sal para que ustedes le den la sazón necesaria. Gracias por aceptarme.
Su amigo Martin Reyes Armenta “Fray”.
Martin Reyes Armenta
Quiero hacer de mi Mexicali, que todo el mundo hable de mi ciudad, de mi Mexicali. De su gastronoma, de sus boxeadores, de nuestra gente. Amo mi ciudad clida que cobija a quien fro tenga. Su amigo, Martin Reyes Armenta, de un cachanilla al mundo.
Lee más de Martin Reyes Armenta
Boxeadores Cachanillas De Tres Generaciones Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl Espíritu Del Corredor Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl Rey David: Y La Sandalia Mágica Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl Campeon Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEfra Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCovid-19 Héroes Anónimos Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesMaria Ramona Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEntre Los Puños Y La Razón Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLibro Anónimo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl Penúltimo Sabio Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Relacionado con Simeón El Penúltimo Sabio
Libros electrónicos relacionados
El Penúltimo Sabio Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCristianos Extraterrestres Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesSilbido Apacible Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesYo espero ver a Jesús: Una llamada de alerta al pueblo de Dios Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El Crisol Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa Plegaria Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCaminando con Jehová mi Dios: Las profecías que me dio Jehová cuando me apartó para él Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLecciones Para Escuela Dominical: 62 Personajes Bíblicos: La Enseñanza en la Clase Bíblica, #3 Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesQuebrando la intimidación: Cómo vencer el temor y liberar los dones de Dios en tu vida Calificación: 3 de 5 estrellas3/5A Través De La Biblia En Poesía Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl Llamado De Dios a Los Hombres Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones¡Encadenados Para Ser Libres!: Conciertos De Oración En Cinco Continentes Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesDios Impresionante Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLos Astoria Calificación: 5 de 5 estrellas5/5En nombre de la Bestia Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl Lugar Secreto del Poder de Dios Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Viviendo el Reino Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesViviendo Por La Gracia Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLiberado del poder de las tinieblas: ENTREGA POR EL GRAN PODER DE DIOS Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLos Antiguos Mensajes Del Profeta Isaías En Verdades Contemporáneas: “Sesenta Y Nueve Meditaciones Matutinas” Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa Victoria Final Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEn La Intimidad: "Jeremías 33:3" Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesHasta que todos sepan: Dedicado de todo corazón a Jesús y a su sueño Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Soy Jesús, vida y esperanza Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesA El Sea La Gloria Por Lo Que Hizo En Mi Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Jesús Vino Para Salvar a los Pecadores: Una conversación sincera con los que anhelan la salvación y la vida eterna Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La Morada De Los Demonios: Por qué Dios no actúa Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesDios envió a un hombre: Cómo cumplir con el propósito de Dios en medio de las dificultades Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl cristianismo del siglo XXI... y más: Un catecismo laico para todos Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLos cinco minutos de Dios: Meditaciones para cada día del año Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Ficción general para usted
Crimen y castigo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El metodo de la domadora de mamuts Calificación: 4 de 5 estrellas4/5100 cartas suicidas Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Crítica de la razón pura Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Esposa por contrato Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Vaya vaya, cómo has crecido Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La Divina Comedia Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La Ilíada y La Odisea Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Poemas de amor Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Poesía Completa Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Meditaciones Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Alicia en el País de las Maravillas & A través del espejo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La milla verde (The Green Mile) Calificación: 5 de 5 estrellas5/5EL PARAÍSO PERDIDO - Ilustrado Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El mito de Sísifo de Albert Camus (Guía de lectura): Resumen y análisis completo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Rebelión en la Granja (Traducido) Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Leviatán - Espanol Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Una y mil veces que me tropiece contigo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La Iliada: Clásicos de la literatura Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La Ilíada Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La riqueza de las naciones Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Cuentos para pensar Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Sobre la teoría de la relatividad Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Reto de valientes: El honor comienza en el hogar Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Obras Completas de Platón: Biblioteca de Grandes Escritores Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Diario de un seductor Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Las 95 tesis Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Arsène Lupin. Caballero y ladrón Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Mañana y tarde Calificación: 5 de 5 estrellas5/5¿Cómo habla un líder?: Manual de oratoria para persuadir audiencias Calificación: 5 de 5 estrellas5/5
Categorías relacionadas
Comentarios para Simeón El Penúltimo Sabio
0 clasificaciones0 comentarios
Vista previa del libro
Simeón El Penúltimo Sabio - Martin Reyes Armenta
Copyright © 2020 por Martin Reyes Armenta Fray
.
Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este libro puede ser reproducida o transmitida de cualquier forma o por cualquier medio, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopia, grabación, o por cualquier sistema de almacenamiento y recuperación, sin permiso escrito del propietario del copyright.
Esta es una obra de ficción. Los nombres, personajes, lugares e incidentes son producto de la imaginación del autor o son usados de manera ficticia, y cualquier parecido con personas reales, vivas o muertas, acontecimientos, o lugares es pura coincidencia.
El texto Bíblico ha sido tomado de la versión Reina-Valera © 1960 Sociedades Bíblicas en América Latina; © renovado 1988 Sociedades Bíblicas Unidas. Utilizado con permiso. Reina-Valera 1960™ es una marca registrada de la American Bible Society, y puede ser utilizada solamente bajo licencia.
Fecha de revisión: 08/10/2020
Palibrio
1663 Liberty Drive
Suite 200
Bloomington, IN 47403
ÍNDICE
Prólogo
Introducción
Capitulo 1 Arribo de Jesús, María y José, al templo
Capitulo 2 Jose es vendido por sus hermanos
Capitulo 3 Moisés, el regreso a Israel (éxodo) Liberación.
Capitulo 4 Samuel, Saúl y David
Capitulo 5 Samuel como Juez
Capitulo 6 Saúl primer Rey de Israel
Capitulo 7 Adulterio de David
Capitulo 8 Sabiduría de Salomón
Sobre el Autor
Esta odisea, en la cual me aventuro comenzó por una inquietud que tuve acerca de un pasaje bíblico. ¡Si, efectivamente! empezó por una frase utilizada en uno de mis libros Yo sí quiero ser profeta en mi tierra
Uno de mis hermanos me hizo el comentario acerca de esa frase, la cual es la siguiente.
- ¡Así es querido hermano! Todos queremos ser profetas en nuestra tierra y en cualquier otro lugar. Reflexiono y me pregunto ¿Toda la gente desearía ser profeta en su tierra? - me contesto - ¿sería estupendo serlo? ¡Será un orgullo o, por orgullo! ¿Y, quien me niega esa alegría? Es un afán de buscar el reconocimiento De que valgo
El que logre serlo, será su máximo sueño ¡Y por qué no! Sin embargo, pesa la palabra bíblica (Nadie es profeta en su tierra) La fuente de la Sabiduría. Yo creo en ti, querido hermano ¡Ahora, tú debes creer en ti!
– ¡Qué bonita observación! A partir de esa conversación con mi hermano no quede tranquilo ya, que lo que hago es en plena confianza en mi persona ¡Orgullo! No lo creo, ¡buscar reconocimiento! Tampoco lo creo. En un día de esos que te encuentras en total paz contigo mismo busqué, encontré y tomé la Biblia, al abrirla me llevó a Lucas 4- 22 En su evangelio explica ¡No es este el hijo de José! Y él les contestó: Seguramente ustedes me recordarán el dicho… ¡Médico… sanate a ti mismo! Has aquí en tu patria lo que nos cuentan realizaste en Cafarnaúm - Jesús añadió – Ningún profeta es bien recibido en su patria
(Lc4, 24) – No solo eso encontré, me profundice un poco más y miré un versículo muy pequeño, Lucas 2, 25 pasaje tan hermoso que leí detalladamente: Un anciano llamado Simeón, que es muy bueno y piadoso, me encantó tanto ese pasaje bíblico que fue mi inspiración para escribir este libro, ya, que su gracia y fe era total, Dios, estaba con él, le otorgó el derecho y el honor de hacer cumplir la profecía de Moisés, en presentar al hijo, al cordero, ante nuestro padre Dios. No es con intención de demostrarme el que valgo
el escribir este libro segunda parte continuación de El Penúltimo Sabio
simplemente, me gustan los retos.
Con todo el respeto que se merecen aquí les dejo esto queridos y fieles lectores esperando sea de su total agrado ¡Daré todo de mí! – Aunque la verdad sea dicha, sin presumir ser perfecto para no frustrar mis emociones de continuar ¡Me doy, siendo el mejor de los peores! Lo escribo sin sal, para que ustedes pongan la sazón necesaria. Gracias por tener este libro en sus manos.
Cuando tengan un sueño, una inquietud ¡no desistan! Atrévanse a realizar eso que desconocido es, después conocido será, no teman al fracaso ya, que únicamente fracaso será si no se atreven a realizar sus sueños.
Lo más sencillo es empezar con el Evangelio donde nos encontramos directamente con Cristo, que es la luz, la verdad y la palabra de Dios. Las páginas del Antiguo Testamento contienen enseñanzas muy importantes, sin embargo, el que las lee después de haber leído a Cristo, las comprenderá mejor, no solo eso, sino que le encontrará otro sabor.
No crean que yo vine a suprimir la Ley o a los profetas. No vine a suprimirla sino para darle su forma definitiva. Les aseguro primero cambiaran el cielo y la tierra antes que una coma de la Ley.
Mateo 5, 17.
Prólogo
Simeón, era un anciano de Jerusalén muy bueno, justo, piadoso creía fervientemente en Dios. El espíritu Santo estaba en él. Ya cansado y anciano, sin perder esa fe de encontrar al niño para presentarlo ante el señor nuestro padre, que nacerá de una Virgen, por obra del Espíritu Santo. El que será llamado El cordero de Dios, El Nazareno, Emmanuel, El Mesías.
Simeón, de joven tuvo una visión, un ángel de Dios se le reveló cuando dormido se encontraba. Al despertar dijo a su padre: La alianza nueva y definitiva que este niño formará, ¡Padre, no habrá necesidad de esperar otra revelación publica! Con la venida de este niño recaerá la fe cristiana. Comprenderemos todo su contenido en el transcurso de los siglos venideros así sucederá. Partiré, para hacer cumplir la profecía de presentar al niño a nuestro padre Dios, niño que de una Virgen nacerá.
Simeón, partió de Jerusalén llevando consigo incienso, oro, y mirra, que su padre le dio antes de partir; así entregárselo al niño que del vientre de una virgen nacerá, Jesús, por nombre llevará, su misión será ¡Salvar a los hombres de nuestros pecados! Será el Cristo, el cordero de Dios, el que cargará los pecados del mundo.
Doy vida a Simeón, creando un personaje dándole vida transportándolo en sus años de juventud, hasta ponerlo ya anciano en el templo de Jerusalén, donde lo describe Lucas en su evangelio; a partir de ahí, de ese pasaje bíblico entra el personaje de Simeón, que así lo describo. Era un hombre sano, fuerte, Dios lo llenó de gloria, sabiduría para poder evangelizar, el evangelio es el corazón de todas las escrituras por ser el testimonio principal de la vida la doctrina de la palabra echa carne. Con este reconocimiento que Dios diera a Simeón, enseñar la Alianza que Dios hiciera con Abraham, la buena nueva en los pueblos que fuera llegando donde el creyera que nacería el niño Dios.
La visión que en su sueño tuviera Simeón, al presentarse el ángel ante él, fue: ¡Yo soy el que soy! Tu misión será presentar a mi hijo en el templo de Jerusalén. Te daré entendimiento de los descendientes de Abraham, Isaac, y Jacob. Simeón se aventuró a cumplir lo que estaba en las escrituras en el evangelio de Lucas. No sin antes hablar con su interior haciéndose preguntas. ¿Señor, porque me haces entender lo que tú sabes acontecerá? Quiero saber si entendí lo que en mi sueño discerní – Simeón escuchó la voz del ángel en respuesta - ¡Simeón, Simeón, no te aflijas! Si al que envié antes de mi hijo, tus ancestros escucharon de él ¡lo ignoraron! Si conocimiento te doy a lo que mi hijo vendrá a la tierra y te doy la gracia de presentarlo ante mí ¡no te aflijas! Hablaras no te escucharan, más tú harás mi voluntad, en los siglos venideros habrá alguien que si valorará la enmienda que te encomendé.
– Una vez terminando la plática con el ángel de Dios, Simeón, se sintió liberado, con la confianza de poder hablar del pasado, presente, futuro, partiendo, marchándose de Jerusalén, con la gloria de Dios. Encontrando dificultades por el camino en cada pueblo donde llegaba, teniendo que desprenderse de lo que su padre le diera para entregárselo al niño cuando lo encontrara. Pasaron los años, nunca claudicó en la búsqueda de lo que tenía encomendado, no quería morir sin encontrar el pesebre que él sabía que nacería el que viene a salvar los pecados del hombre con esto cumplir su misión encomendada por Dios. (Lucas 2, 25) presentar al niño Dios, en el templo de Jerusalén.
Introducción
¡Padre! Haced que preparen agua, pan, para ir en busca del que vendrá a curar los pecados del hombre.
¿De qué hablas, Simeón, hijo mío?
- ¡Padre, la palabra de Dios es fuerza de Dios vivo! Para el que cree en la salvación en una nueva alianza. Un nuevo Testamento que dejará el niño Jesús, cuando él se haga hombre.
¿De que hablará esa nueva alianza de la cual hablas Simeón? De qué nuevo Testamento te refieres.
-Le diré padre, nos ofrecerán la verdad definitiva de la revelación divina. Su objetivo principal será ¡Jesucristo! El hijo de Dios encarnado, sus obras, sus enseñanzas, su pasión y su glorificación. Así como los comienzos de su Iglesia bajo la acción del Espíritu Santo. Me lleno de gracia padre, de ser yo, el que presente al niño ante nuestro Dios. Quiero me des tu permiso al igual tu bendición para salir en busca de ese niño cumplir lo encomendado por el ángel de Dios cuando dormido me encontraba. ¿Tres días dijiste padre, dormido me encontré platicando con el ángel de Dios?
- Así es mi pequeño Simeón, preocupado me tenías, pues de tu sueño no despertabas.
En efecto padre, te digo que tuve revelaciones del ángel de Dios diciéndome Los justos conmigo vivirán, las almas de los justos están en mis manos no alcanzarán ningún tormento
Me enseñó el camino que eh de seguir, padre. ¡Quiero ser justo padre! Tengo que cumplir y servir a todo aquel que necesite de Dios. Esa es la misión que eh de seguir ¡encontrar al niño que vendrá a dar su vida por nosotros!
- ¡Que cartas presentaras querido Simeón! Yo te creo, porque eres mi hijo; ¡allá afuera te tomarán por un falso profeta! El señor todo poderoso lo dijo ¡Israelitas, no hagan caso a todo aquel que se diga ser profeta!
- ¡No soy profeta padre! si dijera que profeta soy no fuera digno de llevar acabo lo que tengo encomendado; el señor dijo ¡hay de los pastores que dejen se pierdan mis ovejas y dispersen! ¡Padre! Simplemente mi misión será, buscar al que nacerá de una virgen, vendrá dar amor. ¡Le repito padre! No soy profeta, simplemente hablaré lo de mi revelación cuando dormido me encontraba. Pues bien, esto es lo que escuché sobre lo que hablaba el ángel de Dios a sus profetas ¡a sus profetas padre! Seamos buenos, compasivos y sinceros con nuestros hermanos, no estar pensando cómo hacerles el mal a nuestros semejantes, no oprimir al extranjero, ni al pobre, ni a la viuda, ni al huérfano. De acuerdo con lo dicho padre, lo repetirá el niño que busco ya una vez sea adulto.
-Mi querido hijo, Simeón, ya que hablaste respecto a no oprimir a la mujer viuda, tenía pensado ofrecerte por esposa a una mujer buena y piadosa que acaba no hace mucho de enviudar, se la pasa en el templo sirviendo al señor con ayunos y oraciones; más respetaré tu decisión daré mi bendición así cumplas tu voluntad de lo que nuestro Dios, padre de Abraham, Isaac, y Jacob, te encomendó. ¿Cuál es el camino que has de seguir mi querido Simeón?
- Pues bien, padre, lo que me encargó cumplir el ángel de nuestro Dios, ya una vez haya encontrado al niño del cual te hablo, será, presentar al que será el Mesías ante su padre El Dios de todos
que nacerá de una Virgen, que encontrará el favor de Dios, dando luz al niño que de nombre llevará Jesús. A esta madre le traspasaran el corazón más, con esto los hombres sentirán respeto, amor, la veneraran al igual que a su hijo Jesús, por los siglos de los siglos. El ángel de nombre Gabriel, le anunciará ¡de ti, nacerá un hijo que de nombre pondrás Jesús! El que nos dará la luz eterna el que puede hacer todo y observar todo, el puro, el que no se corrompe, ¡será grande, padre! con justa razón le llamaran ¡hijo del altísimo! al que Dios le dará el trono de David. Gobernará por siempre al pueblo de Israel y su reinado no terminará jamás. ¡Espero padre! Tener otra visión más, ya que fue todo lo que me dijo el ángel, ignoro cuando, donde se llevará este suceso, ciento en mi corazón que será por los alrededores de Jerusalén, Galilea, por las orillas del rio Jordán, o por las calzadas de Belén.
- De acuerdo pequeño Simeón, daré por adelantado tu herencia, bueyes, cabras, mulas puedes disponer de ello para que se te plazca hacer lo que gustes, puedes venderlas así obtener dinero para que a la vez compres un poco de Mirra, incienso y un poco de oro para que lleves y entregues al que dices será el Rey de Israel. Llévate, dos mozos te servirán para guía y compañía.