La Sorprendente Genealogía De Mis Tatarabuelos

Por Ramón Rionda

Esta es una obra de investigacin genealgica y biogrfica, en la cual se resean ramas muy interesantes con grandes personajes histricos, todos ellos ancestros directos de las familias:

Aguirre Benavides, Alburquerque, Alfonso, Almaraz, Alvarez de Azagra, Alvarez de Toledo, Amador Rionda, Ansorena Monterde, Avellaneda, Bessing Rionda, Bethencourt, Chacn, de Gonzlez Argelles, de la Cueva, de la Cerda, de las Casas, de Mercado, Daz de Mendoza, Enciso, Enrquez, Eriz, Fajardo, de Guevara, Fernndez de Crdoba, Fernndez de Lara, Fernndez de Santilln, Gmez Gallardo, Guzmn, Hurtado, Leyva, Lugo, Luna, Luria, Maldonado, Mendoza, Tous, Monroy, Muz Enciso, Muz Fonnegra, Muz y Vera, Muz, Njera, Ordieres Herrera, Ortz de Ziga, Peraza, Prez de Lara, Prez de Traba, Ponce de Len, Pombeiro, Quezada, Reyes Retana, Rionda Jacobs, Rionda Ruz de Teresa, Rodrguez de Monterroso, Romaes, Ruz de Baeza, de Haro, Snchez de Teruel, Sarmiento, Tovar, Tellez Girn, Venegas, Varona, Vera, Xrica, Yaez, Zepeda y de muchas otras familias.

El rbol genealgico que se presenta en este libro, comprende ramas en diversas etapas de la historia. Una de ellas llega hasta pocas bblicas con Abraham y los reyes de Jud e Israel. Otras ramas nos llevan a los Merovingios, al imperio romano de occidente y a los vikingos fundadores de Inglaterra. Otras ramas nos sumergen en la edad media y posteriormente en la edad moderna; con importantes ancestros en Espaa, Portugal, Francia, Italia, Alemania, Polonia, Rusia y Hungra: Carlomagno; Don Pelayo; El Cid Campeador; los reyes de Portugal; los reyes de Navarra, Len y Castilla; los reyes de Italia, Polonia y Hungra; los reyes de Francia e Inglaterra y emperadores Bizantinos. Cada rama incluye una breve semblanza biogrfica de cada uno de los personajes en turno.

• Idioma: Español
• Editorial: Palibrio
• Fecha de lanzamiento: 1 may 2015
• ISBN: 9781506501376

Ramón Rionda

El autor de esta obra es Ramón Rionda, investigador mexicano-español, autor también de la singular obra “No Todos los Monólogos son Locos”, poesía mono vocálica y cuentos cortos, publicada por Palibrio en 2010.

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Copyright © 2015 por Ramón Rionda.

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Fecha de revisión: 13/05/2015

Palibrio

1663 Liberty Drive

Suite 200

Bloomington, IN 47403

707627

CONTENIDO

INTRODUCCIÓN

I. EL TRONCO

II. LAS RAMAS

Rama A CID CAMPEADOR

Rama A-1 Navarra

Rama A-2 Vikinga

Rama B PELAYO rey de Asturias

Rama B-1 Visigodos

Rama B-2 Emperadores Romanos

Rama C Navarra León Castilla

Rama D Hugo Capeto y Urraca I

Rama Da Hurtado de Mendoza

Rama D-1 Reyes de Aragón y Canarias

Rama D-1a Reyes de Inglaterra y Francia

Rama D-1b Emperadores Bizantinos

Rama D-2 Sacro Imperio Romano Germánico

Rama D-3 Barcelona y Portugal

Rama E Carolingia

Rama F Merovingia

Rama G Imperio Romano de Occidente

Rama G-1 Sajona

Rama H Duque de Alba de Tormes

Rama I Duque de Alburquerque

Rama J Reino de Hungría y Polonia

Atila y los Hunos

Rama J-1 Reyes de Italia

Rama K Judía

ANCESTROS Y SU LOCALIZACIÓN

A mi esposa Adriana,

a mis hijos Ramón, Santiago y Diego,

a mi primer nieto Luca,

a mis hermanos Luis y María del Consuelo,

a mis primos y primas de González Argüelles,

a mis sobrinos y sobrinas,

a mis futuros descendientes

INTRODUCCIÓN

Mi abuelo, don Luis Gonzaga Federico José de la Luz del Corazón de Jesús de González Argüelles Nájera, conocido por sus nietos simplemente como Tata, era un viejo afable y cariñoso, siempre listo para platicarnos alguna historia. El tema recurrente eran sus experiencias durante la revolución mexicana y en particular, la referente a su corta pero supuestamente cercana relación con Pancho Villa. Esta relación resultó por accidente, ya que según nos platicaba, en alguna ocasión Villa quiso hacer un comunicado por escrito y Tata era la única persona en ese momento a su alrededor, que sabía leer y escribir.

Otro de sus temas favoritos era la alcurnia de las familias y siempre, en la primera oportunidad, presumía de su parentesco con el Marqués de Argüelles y al tiempo que mencionaba la palabra Marqués, elevaba una ceja a la manera que lo hacía Pedro Armendáriz en sus películas. Mucho tiempo después del fallecimiento de Tata, logré finalmente averiguar quién fue el Marqués de Argüelles: don Ramón Argüelles Alonso, un asturiano que a mediados del siglo XIX dejó su pueblo natal a muy temprana edad, para buscar fortuna en Cuba.

Según lo reseña Juan Alberto Berni González en su página web, en el apartado de GRANDES TABAQUEROS, don Ramón Argüelles Alonso se convirtió al paso de los años en uno de los hombres más ricos y poderosos de la Habana, gracias a su habilidad para los negocios. Fue importante tabacalero, prestamista y según algunos historiadores, traficante de esclavos. Sirvió en el ejército colonial español y además de jugar a los soldados, donaba fuertes sumas de dinero para el mantenimiento de los mismos soldados y sus generales, lo cual debió haber sido visto con muy buenos ojos en España, porque en 1897 el rey Alfonso XIII le concedió el título de Marqués de Argüelles, como reconocimiento a su apoyo a la Corona.

Fuera de este personaje, con el cual a la fecha no he podido establecer ningún vínculo de parentesco, no recuerdo haber oído a Tata hablar de ninguno de sus antepasados más allá de sus abuelos, simplemente porque el viejo no tenía idea de su genealogía, la cual también sus hijos y sus nietos ignorábamos. De haber tenido el mínimo atisbo sobre sus notables ancestros, creo que no habría utilizado al Marqués de Argüelles para legitimar su buena cuna.

El descubrimiento de los ancestros de la familia de González Argüelles Nájera, se logró gracias al interés de mi esposa Adriana por la Genealogía y a su compulsiva afición a la investigación. Primeramente se pudo construir el tronco y las dos ramas principales, de lo que posteriormente se convertiría en un árbol genealógico asombroso. Con el tronco y sus dos ramas principales ya establecidas, se fueron haciendo las ligas con diversos árboles genealógicos investigados y curados por especialistas en genealogía en varios países, principalmente a través del portal de genealogía Geni.com.

Las ramas genealógicas investigadas siempre fueron en línea directa ascendente; es decir, al padre o la madre de cada uno de los ancestros en turno. El resultado fue sorprendente: antepasados condes, marqueses, duques, príncipes, emperadores y reyes, muchos reyes; de diferentes épocas, orígenes étnicos y religiones. Unos buenos y otros no tanto. Varios muy malos y uno que otro Santo.

La información disponible para dar una semblanza de cada uno de nuestros ancestros, varía en cuanto a cantidad y calidad. En algunos casos, la información en las diversas fuentes de información es tan vasta que se podrían escribir varios libros sobre un mismo personaje; en otros, la información disponible es mínima y apenas suficiente para establecer el siguiente eslabón.

Algunas de las fuentes de información consultadas presentan datos inconsistentes en fechas de nacimiento o muerte de los personajes, o variaciones en sus nombres y apellidos. Así tenemos por ejemplo, algún ancestro que nació 10 años después de la muerte de su madre y algún príncipe que sucedió en el trono a su padre a la muerte de este, pero la coronación está fechada años antes de la muerte del progenitor y como esto, hay inconsistencias variadas que merecen una investigación mas profunda, para validar algunas fechas y corregir otras.

Otra situación que ocasiona confusión, es la variación en nombres a través del tiempo, por diferentes razones, como puede ser modernización del lenguaje, traducciones de diferentes idiomas o diferentes interpretaciones de historiadores y genealogistas. Por ejemplo, tenemos a García Álvarez de Toledo y Meneses, que resulta ser el mismo que Garci Suárez de Meneses y Toledo, y también es Alvar García de Toledo, que es el nombre original; pero este personaje cambió su nombre por García y tomó como apellido el patronímico de Álvarez que siguieron usando varios de sus sucesores. Otro ejemplo es Suer o Suero Téllez o Telez de Meneses, que es el mismo personaje. Otro mas es Mor Soares da Mayo, también conocida como María Suárez de Amaya. Otro más, Pedro Bertrand o Beltrán, Pedro Bernaldez de San Fagud, y Pedro Beltrán de Sahagún, son el mismo personaje.

En ocasiones los apellidos de los hijos no correponden al de su padre, lo cual se explica porque durante la edad media en España, era costumbre que se adoptara como apellido para los hijos el patronímico del primer nombre del padre; así los hijos de Fernán García tendrían como apellido Fernández y los hijos de Sancho Rodríguez tendrían como apellido Sánchez, etc.

Para asegurarme de la veracidad de la información, analicé los datos de las diferentes fuentes a mi alcance, cotejando la información y los parentescos de los personajes, ascendentes y descendentes, y traté dentro de lo posible, incluir todos los nombres y apellidos del ancestro, con sus variantes.

Vamos a encontrar que un mismo ancestro o varios de ellos, aparecen en diferentes ramas genealógicas. Esto resulta normal cuando se cruzan o fusionan las ramas, por matrimonios entre algunos de los personajes que las conforman, dando origen a descendencia que a su vez forma otras ramas. Descubriremos cosas muy interesantes, como que nuestros tatarabuelos ancla, doña Luisa Teresa Yldefonsa Sánchez de Teruel y Ortíz de Zúñiga, y su marido, don Diego Muñoz y Vera, de los cuales se levantan todas las ramas de este árbol, resultan estar emparentados por tener una misma rama genealógica entre los siglos IX y XII, al ser descendientes directos de dos hermanos.

Espero que este trabajo sea de interés no solo para la familia de González Argüelles Nájera, ya que las ramas genealógicas presentadas están formadas por ancestros que lo son también de las familias Aguirre Benavides, Alburquerque, Alfonso, Almaraz, Alvarez de Azagra, Alvarez de Toledo, Amador Rionda, Ansorena Monterde, Avellaneda, Bessing Rionda, Bethencourt, Chacón, de la Cueva, de la Cerda, de las Casas, de Mercado, Díaz de Mendoza, Enciso, Enríquez, Eriz, Fajardo, de Guevara, Fernández de Córdoba, Fernández de Lara, Fernández de Santillán, Gómez Gallardo, Guzmán, Hurtado, Leyva, Lugo, Luna, Luria, Maldonado, Mendoza, Tous, Monroy, Muñóz Enciso, Muñóz Fonnegra, Muñóz y Vera, Muñóz, Nájera, Ordieres Herrera, Ortíz de Zúñiga, Peraza, Pérez de Lara, Pérez de Traba, Ponce de León, Pombeiro, Quezada, Reyes Retana, Rionda Jacobs, Rionda Ruíz de Teresa, Rodríguez de Monterroso, Romaes, Ruíz de Baeza, de Haro, Sánchez de Teruel, Sarmiento, Tovar, Venegas, Varona, Vera, Xérica, Yañez, Zepeda y muchas otras familias más, que conforman el sorprendente árbol genealógico de algunos de mis antepasados.

Finalmente, agradezco a mi esposa Adriana su entusiasta participación en la investigación de las diferentes ramas que aquí se presentan, sin la cual este libro no existiría.

I. EL TRONCO

Luis Gonzaga Federico José de la Luz del Corazón de Jesús de González Argüelles Nájera (Tata), nació en la Ciudad de México en 1889 y murió en 1971. Fue el doceavo hijo, de trece, de María Susana Manuela Nájera Muñoz, con Eduardo de González Argüelles San Román. Sus hermanos fueron María de la Luz Susana, que casó con Agustín Ansorena Monterde; María Concepción; José de la Luz Eduardo Paulino; María, que casó con Eduardo Gómez-Gallardo Suárez Teruel; Manuel Francisco; Carlos Gregorio Federico; Juana Elvira María de la Luz Damiana, que casó con su cuñado Agustín Ansorena Monterde, al enviudar de su hermana María de la Luz Susana; María de la Luz Isabel; María Piedad de la Luz Julia Federica, que casó con Adrían Aguirre Benavides; Lucía Antonia, que casó con Rafael Gerónimo Aguirre Benavides; Cirilo Diego Alfonso, y Eugenia Casimira Federica.

En 1913 contrajo matrimonio con María Estela Campos Castelazo, procreando siete hijos: Eduardo, María del Consuelo (mi madre), José Luis, Andrés, Susana, Manuel y Carlos, todos ellos ya fallecidos.

Su abuela materna fue María Susana Norberta Manuela Muñoz Fonnegra, mi tatarabuela número 1, y con ella damos inicio al tronco de nuestro árbol genealógico para llegar a sus bisabuelos, doña Luisa Teresa Yldefonsa Sánchez de Teruel y Ortíz de Zúñiga, y don Diego Muñoz y Vera, mis tatarabuelos número 4.

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Luisa Teresa Yldefonsa Sánchez de Teruel y Ortíz de Zúñiga (tatarabuela número 4), nació en Granada, España, en marzo de 1729. No se tienen registros del lugar y fecha de su muerte. Fue hija de Francisco Sánchez de Teruel Quezada y Zepeda, II Conde Villamena de Cozbijar, y de Teresa Micaela Ortiz de Zúñiga Fernández de Santillán y Venegas. Casó con Diego Muñoz y Vera, procreando a Alvaro Muñoz Sánchez de Teruel (casó con Manuela Perero Aponte) y a Lorenzo Muñoz y Sánchez de Teruel (casó con Josefa Enciso y con María Magdalena de Campo).

Diego Muñoz y Vera (tatarabuelo número 4), nació el 19 de junio de 1716 en Ciudad Real, Castilla, La Mancha, España. Tampoco se tienen registros del lugar y fecha de su muerte. Hijo de Alvaro Muñoz de Loaysa y de Torres, y de María Guadalupe de Vera Varona. Casó con Luisa Teresa Yldefonsa Sánchez de Teruel y Ortíz de Zúñiga, y fue padre de Alvaro Muñoz Sánchez de Teruel (casó con Manuela Perero Aponte) y de Lorenzo Muñoz y Sánchez de Teruel (casó con Josefa Enciso y con María Magdalena de Campo).

Lorenzo Muñoz y Sánchez de Teruel (tatarabuelo número 3), nació en Ciudad Real, Castilla, La Mancha, España. Hijo de Diego Muñoz y Vera con Luisa Teresa Yldefonsa Sánchez de Teruel y Ortiz de Zúñiga. Emigró a México antes de 1790, estableciéndose en San Martín Texmelucan, Puebla. Casó con Josefa Enciso y al enviudar casó con María Magdalena de Campo. Fue padre de Alvaro Muñoz Enciso, y de Diego Muñoz y Enciso.

Alvaro Muñoz Enciso (tatarabuelo número 2), nació en 1793 en San Martín Texmelucan, Puebla, lugar donde murió aparentemente asesinado en 1854. Hijo de Lorenzo Muñoz y Sánchez de Teruel, y de Josefa Enciso. Casó el 1 de enero de 1826 en la Parroquia del Sagrario en la Ciudad de México, con María Loreto Josefa Francisca Manuela Fonnegra y de Agudo. Tuvieron diez hijos: Alvaro Cleofas, María de Loreto, María Susana Norberta Manuela (casó con José Francisco de Paula Rogue de Nájera Alvárez), María Josefa, María Carolina (casó con Francisco Urquiaga y Lerdo de Tejada), María de los Angeles Josefa Pomposa, Lauro Nicanor Francisco de Paula, Eduardo Luis (casó con Soledad Llaca Michaus), María Aurora Petra y Genaro Enrique, todos ellos Muñoz Fonnegra.

María Susana Norberta Manuela Muñoz Fonnegra (tatarabuela número 1), nació el 6 de junio de 1828. Hija de Alvaro Muñoz Enciso y de María Loreto Josefa Francisca Manuela Fonnegra. Casó con José Francisco de Paula Rogue de Nájera Alvarez. Tuvo catorce hijos: María de la Concepción Josefa (casó con José Manuel Marcos Ordieres Herrera), Manuel Francisco, María Susana Manuela (casó con Eduardo de González Argüelles San Román), Camilo Enrique Alvaro, Julio María, José Francisco de Paula (casó con Josefa de la Garza y Gutierrez), Loreto (casó en 1878 con Tomás Reyes Retana), Manuela, Eduardo, Vicente, Leobardo Eduardo, María del Rosario Gerarda Cándida, María Dolores Lina, y otro mas, todos ellos Nájera Muñoz.

II. LAS RAMAS

Una vez definido el tronco, comienza la diversión. Los tatarabuelos número 4, doña Luisa Teresa Yldefonsa Sánchez de Teruel y Ortíz de Zúñiga, y su marido, don Diego Muñoz y Vera, son nuestros ancestros ancla; de los cuales se levantan todas las ramas de este árbol, hasta llegar a alturas insospechadas.

Sin pretender dar mayor importancia a una rama sobre otras, sin ningún orden en particular y por el solo gusto de hacerlo, inicio este recorrido con el Cid Campeador y parte de su rama Navarra, ancestros directos de doña Luisa Teresa Yldefonsa.

Rama A

CID CAMPEADOR

Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador (tatarabuelo número 25), caballero andante que inmortalizara Charlton Heston en 1961, en su película El Cid. Nació en 1048 en Vivar, cerca de Burgos en España. Fue hijo de Diego Laínez y de Teresa (María, Sancha) Rodríguez Alvarez de Amaya. Quedó huérfano de padre y por fortuna se pudo educar en la corte del rey Fernando I con su hijo, el príncipe Sancho. Los dos chicos crecieron juntos y se hicieron grandes amigos, al grado de convertirse años después en compañeros de batalla y andanzas, peleando juntos contra los moros que dominaban por esos días Zaragoza, Coimbra y Zamora, época en la cual nuestro héroe fue armado caballero y luego nombrado alférez y príncipe de la hueste de su amigote, el entonces ya rey de Castilla, Sancho II. Poco tiempo después la gente comenzó a llamarlo Campeador, por haber vencido en duelo de campo al alférez del reino de Navarra, añadiéndole Cidi o Mío Cid, expresión de admiración y respeto que en árabe significa amo o señor. Sancho II murió en el campo de batalla en Zamora y el nuevo rey, Alfonso VI, le hizo la vida imposible al Cid, desterrándolo de Castilla en 1081. Siete años después, el Cid decidió ayudar al rey moro de Valencia, Al-Qádir, a someter a sus paisanos enemigos gobernantes de Albarracín y Alpuente. En 1089, Alfonso VI trata de reconciliarse con el Cid, pero otra vez la mala química se interpone y lo vuelve a desterrar. A partir de ese momento su popularidad empieza a escalar a niveles de un rock-star y en menos de un año ya es señor de los reinos moros de Lérida, Tortosa, Valencia, Denia, Albarracín y Alpuente, sus hazañas van de boca en boca. En 1093 asesinan a su protegido Al-Qádir y Valencia es tomada por su enemigo acérrimo, Ben Yehhaf. El Cid asedió durante 19 meses la ciudad y finalmente entró triunfal en ella. El Cid se había matrimoniado con Jimena Díaz, señora de Valencia, hija del Conde de Oviedo y para colmo, nieta de Alfonso VI. Con ella tuvo tres vástagos: Diego; María (Doña Sol), y Cristina Jimena (Doña Elvira). María casó con el conde de Barcelona, y Cristina con el infante Ramiro Sánchez de Navarra. Como regalo de bodas el Cid dio a sus yernos sus famosísimas espadas, la Tizona y la Colada (hoy puedes comprar réplicas idénticas en Toledo), las cuales hizo que le fueran devueltas junto con sus hijas, al segundo o tercer pleito conyugal entre ellas y sus nobles maridos. El domingo 10 de julio de 1099 muere el Cid y nace la leyenda del súper héroe. Sus restos y los de Jimena su esposa, descansan en la catedral de Burgos.

Cristina Jimena (Doña Elvira) Rodriguez Díaz de Vivar (tatarabuela número 24), nació probablemente en Valencia en 1075. Hija de Rodrigo Díaz de Vivar el Cid Campeador y Jimena Díaz, señora de Valencia. Por presiones de Alfonso VI, su padre la casó con el infante Ramiro Sánchez de Pamplona (como veremos mas adelante, también es nuestro tatarabuelo), al cual le gustaba empinar el codo y una vez en estado etílico, la emprendía en contra de la desamparada Cristina, propinándole sendas palizas. El Cid, viendo el maltrato a su hija y estando ya en total desavenencia con Alfonso VI, la obliga a abandonar al golpeador Ramiro, no sin que antes este le hubiese hecho cuatro hijos: García VI el Restaurador Ramírez, rey de Pamplona; Sancho Ramírez de Navarra; Elvira Ramírez de Navarra, y Alonso Ramírez de Navarra.

García VI el Restaurador Ramírez, rey de Pamplona (tatarabuelo número 23), nació en 1105. Fue rey de Pamplona de 1134 hasta su muerte. Hijo del infante Ramiro Sánchez, el Mike Tyson de Navarra y de Cristina Jimena Rodríguez Díaz de Vivar. Casó con Margarita de L’Aigle con quien tuvo tres hijos: Sancho VI el Sabio, rey de Navarra; Blanca de Navarra, y Margarita de Navarra. Enviudó en 1144 y rápidamente, en tremendo braguetazo se casó con Urraca la Asturiana, hija de Alfonso VII rey-emperador de León y de Castilla. Con ella tuvo una hija, Sancha de Navarra. El 24 de junio de 1144 se celebró en la ciudad de León el matrimonio entre Urraca Alfonso la Asturiana y el rey García Ramírez de Pamplona. Según refiere la Chronica Adefonsi imperatoris: El emperador envió legados a los condes, príncipes y duques del reino para que vinieran con toda su milicia a las nupcias reales. La noticia complació a todos, especialmente a los asturianos y a los hombres de Tineo; y obedeciendo la orden del monarca vinieron a las bodas con espléndida comitiva […] El aposento nupcial había sido preparado por la Infanta doña Sancha en los palacios reales, ubicados en San Pelayo. Alrededor de dicho aposento pululaba una multitud ingente de histriones, de mujeres y doncellas, cantando acompañados de aparatos de viento, trompetas, cítaras, laúdes y toda suerte de instrumentos. El Emperador y el rey García estaban sentados en un trono regio elevado a las puertas del palacio imperial; los obispos y los abades, los condes, los duques y los príncipes, en asientos preparados en torno a los soberanos. Caballeros llegados de diversas partes de España atraídos por la fama de los festejos, haciendo correr a sus caballos aguijoneándolos con las espuelas, golpeaban unos tableros preparados al efecto con lanzas, según la costumbre de la tierra, para exhibir así su pericia y su valor juntamente con el de las cabalgaduras. Otros mataban con venablos toros enfurecidos por el ladrido de los perros. Por último, dejaron en medio del ferial a un cerdo para que los hombres con los ojos vendados se apoderaran de él matándole. Los «cazadores», apresurándose a dar muerte al animal, se golpeaban y herían mutuamente, entre el delirio de los espectadores. Y hubo así gran fiesta en aquella ciudad y bendecían a Dios que conducía todas las cosas por buen camino. Estas bodas se celebraron en la era centésima octogésima segunda después de la milésima, el mes de junio. A partir de ese momento, los reyes de Navarra y Aragón se convirtieron en parientes del rey-emperador de León y de Castilla. García VI el Restaurador Ramírez y su nuevo suegro lanzaron la campaña de reconquista de Almería, triunfando y logrando expulsar a los moros en 1147. García VI murió en Lorca, Navarra, el 21 de noviembre de 1150.

Sancho VI el Sabio, rey de Navarra (tatarabuelo número 22), nació en 1132. Fue el primer gobernante de su dinastía en abandonar el título de Rey de Pamplona, para adoptar el de Rey de Navarra. Hijo de García Ramírez el Restaurador y de su primera esposa Margarita de l’Aigle. Casó con Sancha de Castilla, hija del rey Alfonso VII de León. Tuvieron seis hijos: Berenguela, casada en 1191 con Ricardo Corazón de León, rey de Inglaterra; Sancho VII el Fuerte, rey de Navarra; Blanca (Blanche); Teresa, y Constanza, fallecidas a muy corta edad. Se la pasó en pleito con su suegro Alfonso VII, quien a sus espaldas había acordado con Raymond Berenguer, IV conde de Barcelona, repartirse el Reino de Pamplona y para colmo, el Papa no lo reconocía como rey, porque según él, Alfonso I había dejado en su testamento el reino para las órdenes del Temple, del Hospital de San Juan de Jerusalén y del Santo Sepulcro de Jerusalén. Optó por casar a su hermana Blanca con su cuñado Sancho de Castilla, hijo nada menos que de su suegro Alfonso VII. El rey murió al poco tiempo, ascendiendo al trono el cuñado. El cuñado, Sancho III de Castilla murió a su vez repentinamente, dejando el trono a su único hijo Alfonso VIII de Castilla de tres años de edad, dando por un rato un respiro a Sancho VI. El resto de su vida fue un lío; pleitos, alianzas e intrigas con todos los nobles del vecindario. Ya de adulto Alfonso VIII de Castilla y Alfonso II de Aragón, decidieron unir fuerzas en contra de Sancho y para reafirmar esta unión se casó el primero con Leonor de Plantagenet, hija de Enrique II, rey de Inglaterra, y el segundo con Sancha de Castilla, tía del Rey de Castilla (no es la misma Sancha de Sancho). Todo quedaba en familia y Sancho VI en el peor de los mundos. Los ricachones del reino abandonaron a Sancho, y los ejércitos de Castilla y de Aragón lo atacaron varias veces hasta que finalmente tomaron su castillo de Leguin y con esto cayó la defensa de Pamplona. Sancho tuvo que devolver algunas tierras en disputa y a cambio recibió algunos dineros y asunto arreglado. Sancho VI falleció el 27 de junio de 1194, recibiendo sepultura en la catedral de Pamplona.

Blanca (Blanche) de Navarra, condesa consorte de Champagne (tatarabuela número 21), nació en Navarra en 1177 y murió el 13 de marzo de 1229. Era hija de Sancho VI rey de Navarra y de Sancha de Castilla (hija de Alfonso VII rey de León), y hermana de Sancho III de Castilla. Se casó el 1 de julio de 1199 con Teobaldo III de Champagne. Tuvo un hijo: Teobaldo. Blanca tuvo una vida difícil y muy activa. A partir de la muerte de su marido, se tuvo que hacer cargo de la administración del condado de Champagne, en calidad de regente. La regencia estuvo llena de dificultades, comenzando porque su cuñado Enrique II de Champagne, había dejado una deuda muy elevada que Blanquita no pudo pagar. Además, sus enemigos políticos cuestionaron la legitimidad de su hijo Teobaldo para heredar el condado, siendo desafiada la sucesión por la hija de Enrique II, Filipa y su marido Erard conde de Brienne. Este pleito duró varios años hasta que Teobaldo llegó a la mayoría de edad y Blanca pagó una sustanciosa cantidad a los Brienne para asegurar la estabilidad del gobierno de su hijo. Su hermano Sancho que ya era rey de Navarra con el nombre de Sancho VII el Fuerte, casado pero sin hijos legítimos, se retiró a un convento y Blanca tuvo ahora que gobernar como regente el Reino de Navarra. Tras la muerte de su hermana Berenguela que no tuvo descendencia de Ricardo Corazón de León, las Cortes de Navarra presionaron en su retiro a Sancho VII para nombrar heredero suyo a su sobrino Teobaldo. Blanca murió el 13 de marzo de 1229.

Teobaldo I rey de Navarra y conde de Champagne (tatarabuelo número 20), nació el 1201 en Troyes, Champagne. Hijo de Blanca de Navarra y el conde Teobaldo III de Champagne. Fue rey de Navarra y conde de Champagne y Brie como Teobaldo IV. Sucedió a su tío Sancho VII en el trono navarro, pero se hubo de enfrentar a Jaime I de Aragón, a quien correspondía el trono según un acuerdo entre éste y el anterior monarca. En 1239 marchó a combatir a Tierra Santa en una cruzada que resultó un fracaso; pero no todo fue pérdida, el ejército cruzado hacía escala en Chipre tras luchar en Tierra Santa y al continuar el viaje de regreso a Champagne, cuando Teobaldo reparó en los viñedos de uva blanca que inundaban el camino, su sabor dulce le atrapó, eran uvas chardonnay. No lo dudó, mandó cortar varias cepas y las llevó consigo a Champagne. El resultado lo conocemos todos, bueno, casi todos: burbujeante champagne. Durante su reinado selló pactos con Castilla, Aragón e Inglaterra, que le permitieron consolidarse en la corona. Gobernó ayudado por nobles de Champagne, quienes recibieron importantes cargos. Redujo la importancia de las tenencias como división territorial e implantó cuatro grandes distritos encomendados a merinos (el merino era un cargo administrativo existente en las Coronas de Castilla y de Aragón y en el reino de Navarra en la Edad Media; encargado de resolver conflictos en sus territorios, cumpliendo funciones que en la actualidad son asignadas a los jueces), a quienes atribuyó funciones fiscales y de orden público. Estableció sus leyes por escrito, elaborando un Cartulario Magno con todas ellas e inició la compilación de las tradiciones jurídicas de la monarquía navarra conocida como Fuero General. Se casó en tres ocasiones, primero con Gertrudis de Dagsburg en 1220, de la cual se divorció sin hijos. En 1222 se casó con Inés de Beaujeu, con quien tuvo a otra Blanca de Navarra. Enviudó y se casó con Margarita de Borbón, tuvieron a Leonor; Pedro;