La Singularidad Económica

Por Calum Chace

La singularidad económica tendrá lugar en el momento en que la mayoría de las personas no pueda encontrar empleo, porque las máquinas puedan hacer todo lo que los humanos pueden hacer por dinero a un menor costo, más rápido y mejor que ellos. Algunos dicen que esto nunca sucederá, pero la mayoría de los profesionales de la IA creen que sí, aunque no se ponen de acuerdo cuándo. La inteligencia artificial (IA) ya sobrepasa a los humanos en absorber y procesar información. Los robots se están volviendo cada vez más diestros, flexibles y seguros (excepto los militares). La IA es nuestra tecnología más poderosa y debemos comprenderla. Esta tercera edición del libro más vendido de Calum Chace se ha actualizado y ampliado sustancialmente. Sostiene que la singularidad económica es el desafío más importante que enfrentará la humanidad en la primera mitad del siglo XXI, y también su oportunidad más interesante. Los coches autónomos y los teléfonos inteligentes con los que puedes conversar pueden ser los canarios en la mina de carbón, lo que brinde una llamada de atención para todos aquellos que aún dudan de su inminencia. Todos los trabajos se verán afectados, desde los empleos de comida rápida hasta abogados y periodistas. La popular creencia de que la Renta Básica Universal es la solución es sólo parcialmente correcta. Probablemente vamos a necesitar un sistema económico completamente nuevo, y pronto deberíamos comenzar a planificar para prepararnos para la Singularidad Económica. Chace sostiene que el resultado puede ser muy bueno: un mundo en el que las máquinas hacen todos los trabajos aburridos y los humanos hacen prácticamente lo que les place. Pero advierte que existen grandes riesgos, que solo podemos evitar estando alerta a los posibles futuros y planificando cómo evitar los negativos. Chace ha estado escribiendo sobre IA desde 1980 y ha escrito dos libros de no ficción muy vendidos y también dos novelas sobre el tema. En 2017 cofundó el grupo de expertos, la Economic Singularity Foundation. Como dice Hugh Pym de la BBC, “Calum Chace es un reconocido experto en el probable impacto que tendrá la inteligencia artificial en la sociedad. En este libro, llega a algunas conclusiones sorprendentes y radicales, que merecen una cuidadosa consideración".

• Idioma: Español
• Editorial: Calum Chace
• Fecha de lanzamiento: 15 ago 2021
• ISBN: 9781667409771

Vista previa del libro

La Singularidad Económica

Calum Chace

––––––––

Traducido por Tomas Ibarra Cervantes 

La Singularidad Económica

Escrito por Calum Chace

Copyright © 2021 Calum Chace

Todos los derechos reservados

Distribuido por Babelcube, Inc.

www.babelcube.com

Traducido por Tomas Ibarra Cervantes

Diseño de portada © 2021 Rachel Lawston / Tomas Ibarra

Babelcube Books y Babelcube son marcas registradas de Babelcube Inc.

La Singularidad Económica

Inteligencia Artificial y

Capitalismo de lujo totalmente automatizado

––––––––

Por Calum Chace

Tercera Edición

Contenido

Prefacio a la tercera edición

Comentarios de La Singularidad Económica

Sobre el Autor

Introducción

Primera parte La IA en la actualidad

1  ¿Qué es la Inteligencia Artificial?

2  Breve historia de la IA

3  El Big Bang: aprendizaje automático

4  La IA está en todas partes

5  Los gigantes tecnológicos y más allá

6  ¿Qué tan buena es la IA de nuestros días?

7  Ética de la IA

Segunda parte El futuro de la IA

8  Un día cualquiera...

9  Conversión de información en conocimiento - a diferentes velocidades

10  El corto plazo: Amigos y Autos

11  Tecnologías relacionadas

12  Disrupción

13  Curvas exponenciales

14  No es la cuarta revolución industrial

15  Singularidad

Tercera parte La Singularidad Económica

16  La historia de la automatización

17  Lo que la gente hace

18  Vehículos autónomos

19  Quién sigue

20  Lo siguiente: el dinero

21  Sí, esta vez será diferente

22  Argumentos escépticos

23  Desafíos: sentido de la vida e ingresos

24  Renta Básica Universal

25  Capitalismo de lujo totalmente automatizado

26  Pánico

27  Más allá de la Singularidad Económica

28  Cuatro escenarios

29  Escenarios protopianos

30  Resumen y conclusiones

Apéndice 1: Proponentes

Apéndice 2: Escépticos

Agradecimientos

Notas finales

Prefacio a la tercera edición

––––––––

Esta edición estaba casi completa cuando el mundo fue transformado por la COVID-19. Es demasiado pronto para conocer los impactos duraderos de esta espantosa enfermedad y las extraordinarias medidas que se han tomado para combatirla. Sin duda, el virus y sus secuelas contradecirán algunos de los comentarios de este libro, y con el beneficio de la retrospectiva, algunos de ellos podrían parecer una soberana tontería. Ser sobrepasado por los acontecimientos es un riesgo inevitable al escribir sobre el futuro, aunque rara vez sucede tan rápido o tan dramáticamente como en este caso.

Todavía no sabemos si la recuperación económica del virus y las medidas que se tomarán para contrarrestarlo tendrán forma de V, U o L. Eso estará determinado por el tiempo que las economías del mundo tengan que permanecer bloqueadas total o parcialmente, y por la sabiduría y habilidad de sus líderes.

Si la recuperación tiene forma de V, las repercusiones duraderas pueden ser sutiles en lugar de pronunciadas. Si la recuperación tiene forma de U y la depresión económica es prolongada, es probable que el mundo salga muy transformado, y las sugerencias y especulaciones de este libro podrían necesitar una revisión más radical. Tendrán que esperar hasta la cuarta edición.

Pase lo que pase, habrá cicatrices. Ya han muerto muchas personas y muchas más lo harán. Cada muerte es una tragedia y deja a su paso a familiares y amigos en duelo. Las empresas cerrarán y se perderán puestos de trabajo. Mucha riqueza se desvanecerá y las personas que antes disfrutaban de cómodos ingresos se encontrarán en problemas financieros.

Los cambios a corto plazo son imposibles de predecir. ¿Dejará la gente de darse la mano en las reuniones? ¿Retrocederá la ola populista a medida que la gente exija un gobierno más honesto y competente, o prosperará, a medida que el miedo les impulse hacia el nacionalismo o hacia otras soluciones simplistas? ¿Se intensificará la reacción contra las grandes empresas tecnológicas o nuestra mayor dependencia de Internet nos volverá más amables con ellas? ¿Continuará la búsqueda de un propósito corporativo más amplio que el valor para los accionistas, o llegará a ser visto como una indulgencia inasequible por parte de los CEO como en los días de auge del 2019?

A largo plazo, podemos estar seguros de algunas cosas. Personas de todo el mundo se han visto obligadas no solo a experimentar con el trabajo a distancia y las reuniones remotas, sino también a mejorar en ello. Sorprendentemente, muchas de ellas lo han encontrado muy conveniente, sobre todo por todo el tiempo que ahorra. Seguramente retornarán las reuniones grupales, familiares y de amigos, las conferencias y otros eventos, pero habrá un aumento de conversaciones individuales mediante videoconferencia. La automatización de las entregas y de los almacenes se acelerará, aunque la tecnología sigue siendo la mayor barrera para su adopción. Habrá una proliferación de nuevas empresas digitales, incubadas por personas que encuentran soluciones en línea a problemas que nunca supieron que tenían. Y la mayor competencia demostrada por los gobiernos de Asia (que algunos de sus homólogos de Occidente), bien puede acelerar la transición en el equilibrio de poder global.

Hay un par de cosas que deberían suceder como consecuencia del brote de COVID-19. Primero: debemos prepararnos mejor para el próximo. Este no debería habernos sorprendido. Bill Gates nos lo advirtió con cinco años de anticipación. Hollywood hizo una película bastante buena al respecto (Contagio), así como muchas malas. No fue un cisne negro.

Segundo: debemos comprender mejor el asombroso poder del crecimiento exponencial. Tuvimos una prueba de su poder en las crecientes tasas de mortalidad durante la fase inicial del contagio. El crecimiento exponencial está impulsando otros cambios en nuestras vidas, y si lo entendemos bien, los manejaremos mucho mejor.

Comentarios de La Singularidad Económica

––––––––

Un problema al que se enfrentan todos los pioneros de la tecnología, cuando venden su visión del futuro a otros (utilizo comillas porque no hablo de términos monetarios), es lograr que su audiencia se centre en el nuevo desarrollo en un contexto apropiado. Sobre todo, esto significa lograr un equilibrio entre comunicar la importancia del desarrollo propuesto y ubicarlo dentro del universo de otros desarrollos que, entretanto probablemente hayan ocurrido.

El avance de la automatización, descrito con gran cuidado y precisión en este libro, constituirá casi con certeza el sustrato dentro del cual se producirán todos los demás desarrollos tecnológicos —ya sean biomédicos, ambientales o de otra índole— y por lo tanto, dentro del cual deberían discutirse al considerar su valor para la humanidad. Lea La Singularidad Económica si quiere pensar en el futuro de manera inteligente.

Aubrey de Grey - CSO de la Fundación de Investigación SENS; ex investigador de la IA

––––––––

Tras su perspicaz incursión en la floreciente revolución de la inteligencia artificial y los riesgos existenciales asociados, Calum concentra su atención en un desafío a corto plazo: la probabilidad de que las máquinas inteligentes hagan que gran parte de la humanidad se encuentre desempleada en el futuro previsible. Explora los argumentos a favor y en contra de esta afirmación y proporciona una respuesta mesurada, reconociendo los riesgos asociados con un cambio tan radical en nuestra propia identidad, pero también destacando los posibles beneficios significativos. Una vez más, demuestra ser una guía confiable en este tema tan complejo pero fascinante.

Ben Medlock, cofundador de Swiftkey, una de las aplicaciones más populares en Android

––––––––

Es importante que este libro y otros similares sean escritos. No porque el futuro necesariamente ocurrirá exactamente de la manera descrita, sino porque es importante estar preparados si lo hace. Si la automatización nos obliga a cambiar a una organización económica diferente, será mejor que comencemos a sentar las bases para el cambio ahora mismo.

Dr. Stuart Armstrong, investigador asociado James Martin en el Future of Humanity Institute, Universidad de Oxford

––––––––

Chace hace un buen trabajo al responder a la pregunta de si los robots se apoderarán de nuestros trabajos. Sin embargo, lo que más me preocupa, yendo más adelante, una vez que estos robots se hayan vuelto sumamente inteligentes, es si pueden quitarnos la vida. Chace se ocupó de este tema a fondo en su libro anterior, Sobreviviendo a la IA".

Prof. Dr. Hugo de Garis - autor de The Artilect War, ex director del Artificial Brain Lab, Universidad de Xiamen, China

––––––––

Los trabajos del futuro no existen hoy y los trabajos de hoy no existirán en el futuro. La singularidad tecnológica lo cambiará todo, pero su primera manifestación vendrá en el dominio de la economía, muy probablemente en forma de desempleo tecnológico. La Singularidad Económica de Calum Chace hace un gran trabajo al presentar a los lectores de todos los niveles el futuro que estamos a punto de enfrentar. Chace explica lo que podría suceder y lo que podemos hacer para mitigar algunas de las consecuencias negativas del empoderamiento de las máquinas. El libro se ocupa de los ingresos básicos incondicionales, entornos virtuales y tipos alternativos de economías, entre otras cosas. Muy recomendable.

Dr. Roman V.Yampolskiy, profesor de ingeniería informática y ciencias de la computación, director del laboratorio de ciberseguridad, autor de Artificial Superintelligence: a Futuristic Approach

––––––––

Aumento de la productividad sin precedentes y ocio ilimitado: ¿qué podría salir mal? Todo, dice Calum Chace, si no desarrollamos un sistema social adecuado al inevitable mundo de los sistemas inteligentes enlazados. 

Es una falta de imaginación debatir si habrá empleos para los humanos en el mundo automatizado, argumenta Chace; debemos mirar más allá y preguntarnos cómo organizaremos a la sociedad cuando el trabajo no sea necesario para satisfacer las necesidades de la vida. Encuentre una respuesta y la vida mejorará para todos; no lo haga y la sociedad colapsará. Lea este libro para comprender cómo las fuerzas sociales y tecnológicas conspirarán para cambiar el mundo y los problemas que debemos resolver para conseguir la promesa de la Singularidad Económica.

Christopher Meyer, autor de Blur, Future Wealth y Standing on the Sun

––––––––

Es interesante escuchar nuestro propio idioma. Decimos cosas como ganarse la vida, lo que implica que necesita ganarse el privilegio de estar vivo y vivir una vida moderadamente agradable. Esto podría verse tan extraño en el futuro como nos sucede ahora cuando miramos en retrospectiva y decimos de los esclavos que tenían que ganarse la libertad.

Calum Chace da en el clavo con este libro extremadamente oportuno. Probablemente sea cierto que habrá nuevas clases de empleos en los nichos que los humanos sigan explorando en un futuro cercano, pero también deberíamos considerar un objetivo completamente diferente para el futuro.

¿Quién fue en épocas pasadas aquel que contribuyó con las cosas que, a lo largo del tiempo, juzgamos como de gran valor? Fueron quienes contribuyeron a las artes, las ciencias y la invención. ¿Pero quiénes eran esas personas? A lo largo de la mayor parte de la historia estas fueron principalmente las personas que, o bien no estaban obligadas a tener un 'empleo' (porque eran parte de una aristocracia que tenía un papel diferente que desempeñar mientras eran sostenidas por la propiedad y los súbditos), así como los artistas, artesanos, filósofos o científicos que fueron apoyados directamente por esos mecenas y por lo tanto no tenían la necesidad de un típico 'empleo'.

No son los empleos típicos los que se celebran como los mejores de la humanidad y, por lo tanto, probablemente no debería ser nuestro objetivo encontrar aún más categorías de esos trabajos. En vez de eso, ¿no sería mucho mejor si una mayor proporción de la humanidad pudiera encontrar los medios para participar en las actividades preferidas y creadoras de cultura? Teniendo esto en cuenta, me parece que nuestro objetivo debería ser deshacernos de la necesidad del trabajo y el empleo con el único fin de sobrevivir.

Nuestras estrategias para el futuro no deberían consistir en encontrar nuevos empleos remunerados, sino en eliminar la necesidad de ellos y en establecer una mejor y más avanzada estructura social. Aquí es donde es esencial observar los desafíos involucrados y el camino hacia una alternativa exitosa, como lo hace Chace en el capítulo 5.

En lo que respecta a ideas como la renta básica universal (RBU), es útil tener en cuenta que el mundo no es Estados Unidos. Incluso si hay alguna antipatía inicial en los Estados Unidos debido a las asociaciones entre la RBU y lo que ingenuamente podría etiquetarse como pensamiento 'socialista', Los Estados Unidos no desearán quedarse atrás si otras naciones implementan con éxito el cambio. Ahora es el momento de profundizar en los muchos problemas que se plantean en este libro, de iniciar una conversación más amplia sobre esos problemas y de buscar creativamente las soluciones y los resultados más equilibrados.

Randal Koene - fundador de carboncopies.org

––––––––

La Singularidad Económica es fascinante. Calum Chace explora brillantemente las enormes oportunidades y riesgos que presenta a la humanidad el rápido avance de la tecnología, y especialmente la inteligencia artificial. No pude despegarme de este libro.

Ben Goldsmith - Capital Menhaden

––––––––

En su nuevo y vertiginoso libro, Calum Chace explica el desafío al que se enfrenta la humanidad: navegar a través de una transición dramática a la que bautiza como la singularidad económica. Como culminación de una ola acelerada de automatización por parte de robots e IA, esta transición amenaza con hacer más que desplazar a los empleados de la fuerza laboral. Inesperadamente, amenaza con el fin del capitalismo mismo y, potencialmente, con la fractura de la especie humana.

Chace establece convincentemente una gama de opciones, antes de compartir su evaluación de los resultados más creíbles y deseables, para que podamos alcanzar una protopía compartida en lugar de un escalofriante mundo feliz (o peor).

David Wood, presidente de London Futurists

Comentarios de Artificial Intelligence and the Two Singularities

––––––––

Investigado a fondo y persuasivo. El principal argumento de Chace parece ser correcto: debemos prepararnos ahora para la singularidad económica o enfrentar una seria alteración de nuestra civilización".

Stuart Russell, Universidad de California, Berkeley

––––––––

Una guía brillantemente lúcida sobre el estado actual de la IA. No se trata de una alarma distópica, sino de una llamada de atención para empezar a pensar en cómo afrontar la situación: una guía entretenida y reflexiva.

Mark Mardell, presentador, BBC Radio Four

––––––––

Provocador y oportuno: una discusión muy legible y bien informada sobre los posibles cambios económicos en los que deberíamos pensar detenidamente.

Margaret Boden, Universidad de Sussex

––––––––

Calum Chace, un pensador y narrador extraordinario, presenta un relato completo pero fácil de digerir de las cuestiones más apremiantes que rodean a la IA.

Irakli Beridze, Centro de Inteligencia Artificial y Robótica, Naciones Unidas (UNICRI)

––––––––

Este libro proporciona un recurso valioso que describe la historia de la IA y sus capacidades actuales. Chace explora a fondo el asombroso potencial de la IA, pero sabiamente solicita una planificación proactiva que garantice un desenlace positivo.

Ray Eitel-Porter, Accenture

––––––––

Este es el libro que desearía haber escrito. Proporciona una excelente introducción a la IA y nos desafía a todos a participar de manera proactiva en la conversación que debemos tener sobre nuestro futuro.

Shamus Rae, director de disrupción digital, KPMG

––––––––

Esta es una guía completa para cualquiera que desee comprender la IA y su impacto en nuestro futuro. Como siempre, Calum sintetiza complejos conceptos técnicos y filosóficos y los vuelve maravillosamente accesibles.

Daniel Hulme, CEO de Satalia

––––––––

Recomiendo encarecidamente que lea AI and the Two Singularities. El estilo es muy claro y entretenido, y el conocimiento de Calum en esa área es verdaderamente notable.

Simon Thorpe, director, Toulouse Mind & Brain Institute

Sobre el Autor

––––––––

Calum Chace es un celebérrimo autor de libros de ficción y no ficción, enfocados en el tema de la inteligencia artificial. Es ponente habitual sobre inteligencia artificial y las tecnologías relacionadas, y tiene un blog sobre el tema en www.pandoras-brain.com.

Antes de convertirse en escritor a tiempo completo, Calum ejerció una carrera de 30 años en periodismo y negocios, en la que fue mercadólogo, asesor de estrategia y CEO.

Hace mucho tiempo, Calum estudió filosofía en la Universidad de Oxford, donde descubrió que la ciencia ficción que había estado leyendo desde niño es en realidad filosofía disfrazada.

––––––––

También por Calum Chace

Stories From 2045 (editor y colaborador)

Artificial Intelligence and the Two Singularities

Our Jobless Future

Sobreviviendo a la IA

Pandora’s Brain

The Internet Startup Bible (coautor)

The Internet Consumer Bible (coautor)

Para Julia y Alex

LA SINGULARIDAD ECONÓMICA, 3a edición

Un libro de Three Cs

ISBN 978-0-993-21164-5

Primera edición publicada en 2016 por Three Cs

Segunda edición publicada en 2018 por Three Cs

Tercera edición publicada en 2020 por Three Cs

Copyright © Calum Chace 2016, 2018, 2020

Diseño de portada e interior © Rachel Lawston

Lawston Design, www.lawstondesign.com

Fotografía © iStockphoto.com y Shutterstock.com

Reservados todos los derechos

El derecho de Calum Chace a ser considerado el autor de este trabajo ha sido afirmado por él de conformidad con la Ley de Derechos de Autor, Diseño y Patentes de 1988.

Introducción

––––––––

La inteligencia artificial (IA) es la tecnología más poderosa de la humanidad. Y sigue incrementando su poder a un ritmo exponencial.

Para la mayoría de nosotros, la manifestación más obvia de la IA en la actualidad es el teléfono inteligente. Ahora, lo damos por sentado, pero muchos de nosotros estamos pegados a ellos como uña y carne pues ponen todo el conocimiento del mundo a nuestro alcance. No son solo un lujo para las personas en los países desarrollados: brindan sistemas de pago inteligentes, educación e información de mercado que permiten a las personas en los mercados emergentes competir y participar en el mundo moderno.

Su evolución ofrece una analogía intrigante para el desarrollo de la IA en el futuro. Hace treinta años, nadie sugería que tendríamos IA poderosas en nuestros bolsillos en forma de teléfonos, pero ahora que ha sucedido parece algo obvio. También es completamente lógico. Somos animales muy sociales. Debido a que tenemos un lenguaje, podemos comunicar ideas, sugerencias e instrucciones complicadas; podemos trabajar en grandes equipos y organizarnos, producir excedentes económicos, desarrollar tecnologías. Es gracias a nuestra incomparable habilidad para comunicarnos que controlamos el destino de este planeta y de todas las especies que lo habitan. No fue ni pudo haber sido predicho de antemano, pero en retrospectiva, ¿qué podría ser más lógico que nuestra tecnología más poderosa, la IA, se volviera disponible para la mayoría de nosotros en forma de dispositivo de comunicación?

Hace treinta años, no sabíamos cómo se desarrollaría el mercado de la telefonía móvil. Hoy en día, no sabemos cómo evolucionará la disrupción digital que transformará a tantas industrias en los próximos treinta años. No sabemos con certeza si el desempleo tecnológico será el resultado de la automatización del trabajo por parte de la IA, o si la automatización facilitará la creación de nuevos puestos de trabajo como lo ha hecho desde mucho antes del inicio de la revolución industrial. ¿Cuál será el equivalente al fenómeno de los teléfonos inteligentes para la disrupción digital y la automatización? Lo más probable es que sea algo diferente de lo que la mayoría de la gente hoy espera, pero visto en retrospectiva, parecerá completamente natural y predecible.

Hacer pronósticos es arriesgado, en especial si es sobre el futuro, pero este libro describirá una serie de desafíos formidables que nos presentará la IA, junto con sus enormes beneficios. Argumentará que debemos vigilar con sumo cuidado los cambios que están ocurriendo y que debemos desarrollar una gama de opciones de políticas que nos aseguren los mejores resultados posibles. La gama de posibles resultados es amplia, desde los terribles hasta los maravillosos, y no están predeterminados. Serán seleccionados en parte al azar, en parte por su propia lógica interna, pero en parte también por las políticas adoptadas en todos los niveles de la sociedad.

Las personas deben prepararse para ser lo más flexibles posible para enfrentar los desafíos de un mundo que cambia rápidamente. Las organizaciones deben intentar anticipar los cambios más relevantes para ellas y adaptar sus estrategias y tácticas en consecuencia. Los gobiernos deben elaborar regulaciones que fomenten los mejores resultados y rechacen los peores. Hasta cierto punto, también deben desplegar los enormes recursos financieros y humanos a su disposición, aunque dada la incertidumbre sobre los desarrollos futuros que prevalecerán en todas las etapas, deben ser cautelosos al respecto.

La automatización y la superinteligencia son las dos fuerzas que ya podemos anticipar causarán grandes impactos. Muchas personas siguen siendo escépticas sobre una o ambas y, por supuesto, nadie sabe con certeza cómo se desarrollarán. Pero sería muy imprudente ignorarlas.

La llegada de la superinteligencia en caso de que ocurriera, representaría una singularidad tecnológica (por lo general, simplemente denominada la singularidad). Singularidad es un término tomado de las matemáticas y la física, y alude a un punto donde una variable se vuelve infinita y, como resultado, las leyes conocidas dejan de funcionar.[i][ii] Este sería el evento más significativo en la historia de la humanidad, sin lugar a dudas. Descubrir cómo sobrevivir es el desafío más importante al que se enfrenta la humanidad en este siglo. Si evitamos los peligros, la vida mejorará en formas que están literalmente más allá de nuestra imaginación. Una superinteligencia que mejorara recursivamente su propia arquitectura y expandiera sus capacidades podría resolver de manera muy plausible casi cualquier problema humano que se pueda imaginar. La muerte podría volverse opcional y podríamos disfrutar de vidas de dicha y emoción constante. Si nos equivocamos, la extinción no sería el peor resultado posible. Me ocupo de este tema en un libro complementario, Sobreviviendo a la IA.

Mucho antes de eso, la automatización podría conducir a lo que yo llamo una singularidad económica.  Una singularidad económica podría llevar a una élite a poseer los medios de producción y reprimir al resto de nosotros en un autoritario régimen tecnológico distópico. O podría conducir a una economía de abundancia radical, donde nadie tenga que trabajar para ganarse la vida y todos seamos libres para divertirnos, expandir la mente y desarrollar nuestras facultades al máximo. Espero y creo que será esto último, pero es posible que debamos influir en los eventos.  La singularidad económica es el tema de este libro: la probabilidad de que llegue y de que sea beneficiosa.

—-

Las partes uno y dos de este libro (el primer tercio) también sirven como partes uno y dos del libro complementario, Sobreviviendo a la IA.

Primera parte: La IA en la actualidad

Capítulo 1 - ¿Qué es la inteligencia artificial?

––––––––

Inteligencia

Teniendo en cuenta la frecuencia con la que se usa el término inteligencia artificial (IA) resulta muy difícil definirlo con precisión. Podemos decir que se trata de la inteligencia mostrada por una máquina o por un software. El problema surge cuando tratamos de explicar lo que entendemos por inteligencia.

Como la mayoría de las palabras que se utilizan para describir lo que el cerebro hace, la palabra inteligencia es difícil de precisar y hay varias definiciones. La mayoría de ellas conllevan la noción de la capacidad para adquirir información y utilizarla para la consecución de un fin. Una concisa proviene del académico alemán Marcus Hutter y de Shane Legg, cofundador de una empresa llamada DeepMind de la que hablaremos más adelante. Declara que la inteligencia mide la capacidad general de un agente para alcanzar objetivos en una amplio rango de entornos.[iii] Una definición más escueta dice que es: un comportamiento adaptativo orientado a la consecución de objetivos.

Así como resulta difícil de definir, la inteligencia también resulta difícil de medir. Hay diversas clases de información que un ser inteligente podría adquirir y diversos objetivos que alcanzar.

El psicólogo norteamericano Howard Gardner distingue nueve clases de inteligencia: lingüística, lógico-matemática, musical, espacial, corporal, interpersonal, intrapersonal, existencial y naturalista[iv]. Mencionarlas es suficiente: no necesitamos entrar en detalles.

Todos sabemos que las personas varían en el nivel de inteligencia que poseen. Algunos son buenos para adquirir conocimientos fácticos como lo son las fechas de nacimiento de reyes y reinas, pero son incapaces de aplicar su conocimiento para, digamos, hacer nuevos amigos. A otros se les dificulta aprender cosas de libros, pero tienen facilidad para entender lo que otras personas quieren, en consecuencia, se vuelven muy populares. Cuando se piensa en la inteligencia, se asocian una serie de conceptos tales como: razonamiento, memoria, entendimiento, aprendizaje y la planeación.

La inteligencia es, por supuesto, el rasgo distintivo de los humanos: es la característica que nos diferencia de otros animales y nos hace más poderosos. Y somos mucho, mucho más poderosos que ellos. Genéticamente, somos casi idénticos a los chimpancés, y nuestro cerebro no es mucho más pesado que el de ellos por kilo de peso corporal. Pero la diferencia de estructura entre nuestros cerebros ha ocasionado que seamos siete mil millones y ellos solo unos pocos cientos de miles[v]. No pueden escoger su destino, que depende completamente de nuestras decisiones y acciones: probablemente sea una bendición para ellos que no sean conscientes de eso.

Nuestra inteligencia nos permite comunicarnos, compartir información e ideas y diseñar y ejecutar planes de acción. También nos permite desarrollar herramientas y tecnología. Un solo humano desarmado es presa fácil de un león, pero un grupo de humanos trabajando juntos, o un solo humano equipado con un rifle, puede invertir la situación de manera muy efectiva.

Máquinas

La segunda mitad de nuestra definición inicial de inteligencia artificial especificaba que la inteligencia debe ser mostrada por una máquina o por un software. La máquina en cuestión suele ser un ordenador, aunque podría ser cualquier dispositivo creado por humanos, o incluso por extraterrestres. Los ordenadores actuales utilizan procesadores hechos de silicio, pero en el futuro pueden entrar en juego otros materiales como el grafeno.

(Computadora es una palabra antigua que antecede en varios siglos a la invención de las máquinas electrónicas. Originalmente se refería a una persona que calculaba, y a principios del siglo XX las empresas contrataban a miles de empleados para que pasaran largos y tediosos días realizando tareas que podrían haber hecho en segundos si hubieran tenido las calculadoras de bolsillo actuales).

El software es un conjunto de instrucciones que le dice a las señales electrónicas cómo comportarse dentro de una máquina. La cuestión de si la inteligencia reside en la máquina o en el software es análoga a la cuestión de si reside en las neuronas del cerebro o en las señales electroquímicas que transmiten y reciben. La respuesta es que se requieren ambas cosas.

IA estrecha y general

Necesitamos diferenciar entre dos tipos muy diferentes de inteligencia artificial: inteligencia artificial estrecha e inteligencia artificial general (IAG[vi]), que también se conocen respectivamente como IA débil e IA fuerte.

La forma más sencilla de hacer esta distinción es decir que una IAG es un sistema de inteligencia artificial que puede llevar a cabo cualquier función cognitiva que pueda realizar un ser humano adulto. Durante mucho tiempo hemos tenido ordenadores que son súper inteligentes en tareas específicas: algunos pueden sumar mucho mejor que cualquier humano, y otros pueden jugar al ajedrez mejor que el mejor gran maestro de ajedrez humano. Pero los ordenadores están muy lejos de poder vencer a los humanos en cada actividad intelectual. Son una combinación interesante de inteligencia y estupidez: capaces de idear el movimiento de ajedrez más exquisitamente ingenioso mientras el edificio a su alrededor se incendia.

Una de las diferencias entre nuestra inteligencia general y la inteligencia limitada de las máquinas es que podemos aprender lecciones útiles de una actividad y aplicarlas a otra diferente. Aprender a jugar a las serpientes y escaleras hace que sea más fácil aprender a jugar al Ludo. Una máquina que aprende serpientes y escaleras tiene que olvidar eso para aprender a jugar al Ludo. A esto se le llama olvido catastrófico y es algo que los investigadores de IA están tratando de superar.[vii]

Una de las distinciones fundamentales entre la IA estrecha y la IAG implica el establecimiento de objetivos. La IA estrecha hace lo que le decimos, incluso si la ley de las consecuencias no deseadas signifique que a veces debiéramos haber expresado nuestras instrucciones de manera diferente. Una IAG tendrá la capacidad de reflexionar sobre sus objetivos y decidir si es necesario ajustarlos. Tendrá volición.

Inteligencia y conciencia

La inteligencia, la capacidad de procesar información y resolver problemas, es muy diferente a la conciencia, la posesión de la experiencia subjetiva. Valoramos mucho la inteligencia, ya que es la fuente de nuestro poder, pero valoramos aún más a la conciencia. A la mayoría de los humanos le parece bien sacrificar y comer animales que consideramos tienen un nivel de conciencia más bajo que el nuestro.

No hay razón para suponer que los humanos hayan alcanzado el nivel máximo posible de inteligencia, y parece muy probable que en algún punto crearemos máquinas que serán considerablemente más inteligentes que nosotros en todos los aspectos (asumiendo que no nos aniquilemos antes). Todavía no sabemos si esas máquinas serán conscientes, y mucho menos si serán más conscientes que nosotros, si es que esa pregunta tiene sentido. Mucha gente asume que una IAG tendrá autoconciencia y tendrá lucidez, pero esto es más una corazonada que una proposición que se pueda probar.

Terminología

A algunas personas no les gusta el término inteligencia artificial. Al señalar que los coches no son llamados caballos artificiales ni los aviones pájaros artificiales, prefieren términos como inteligencia de las máquinas o computación cognitiva. Simpatizo, pero al menos por el momento, el término inteligencia artificial, o IA, es el que entiende la mayoría de las personas. Usaré los términos inteligencia de las máquinas e inteligencia artificial como sinónimos y, en ocasiones, el término máquinas englobará los sistemas de inteligencia artificial.

Capítulo 2 - Breve historia de la IA

––––––––

Mitos duraderos

Las historias sobre criaturas con inteligencia artificial se remontan al menos hasta los antiguos griegos. Hefesto (Vulcano para los romanos) era el herrero del Olimpo: además de crear a Pandora, la primera mujer, creó autómatas metálicos de aspecto realista.

Más recientemente, la ciencia ficción dio inicio con el Frankenstein de Mary Shelley a principios del siglo XIX, en el que el médico epónimo creó tanto la vida como la inteligencia artificial. Un siglo después, en 1921, la obra de teatro RUR (Robots universales Rossum) de Karel Capek introdujo la idea de un levantamiento en el que los robots eliminan a sus creadores humanos.

Alan Turing

El brillante matemático británico y descifrador de códigos Alan Turing es descrito a menudo como el padre tanto de la informática como de la inteligencia artificial. Pero su logro más famoso no tuvo nada que ver con ninguna de las dos: este fue romper los cifrados navales alemanes en el centro de desciframiento de códigos en Bletchley Park durante la Segunda Guerra Mundial. Utilizó complicadas máquinas conocidas como bombas, que eliminaron una enorme cantidad de soluciones incorrectas a los códigos para llegar a la solución.