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The Shockwaver
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Libro electrónico870 páginas9 horas

The Shockwaver

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Información de este libro electrónico

Gus Breuer (22) es un cantante, cuyas presiones económicas lo conllevan a reparar un inusual escáner de una chatarrería. El escáner estalla y le proporciona poderes de repulsión magnética. Su vida de entrecruzará con Ernest Znitch (38) un afamado científico que tras perder todos los derechos de sus inventos, fabrica un plan suicida para recuperar sus prototipos físicos de una central policíaca.

IdiomaEspañol
EditorialShpirtk
Fecha de lanzamiento29 feb 2020
ISBN9781393952640
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    The Shockwaver - Sebastián Rincón

    The Shockwaver

    Copyright© 2020 por

    Sebastián Rincón Aguilar (Shpirtk)

    Draft2Digital Edition

    ‘‘La compasión es el acto más humano. Nativo, pero abandonado cuando más crudo se pone nuestro mundo’’

    .

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    Shockwaver

    Un adolescente duerme sobre el regazo de su papá. Las barandas de la camilla casi lo asfixian. Luces que titilan de vez en cuando. El doctor dijo que ya han cambiado varias veces el reflector pero siempre sucede lo mismo.

    —¡BIIIIIIIIIIIIIIIIP!

    El marcador de detiene y como si se ahogara el padre se mueve atrozmente y despierta. Ambos despiertan.

    — (Desesperado) ¡Papá, papá! ¿Qué sucede? El pitido se detiene.

    — (Con voz desgastada) No tienes que comprenderlo hijo.

    Los doctores se acercan con derrame, y revisan varios de sus signos. No paran de hacerle preguntas.

    —‘’Señor responda’’ ‘’Respire profundo, dígame la región del dolor’’.

    Pero él no quiere contestar.

    El joven llora:

    —¡DI LO QUE TE ESTÁ PASANDO!

    —No te acobardes, los hombres no lloran.

    —(Traga saliva) Dime que estás bien.

    —(Se traba) Te amo hijo.

    —(Disgustado) No, no, papá no es momento de eso ahora, ¡responde lo que te dicen!

    —Siempre se trató de lo que tú harás. Ya ganaste.

    —¿Cuántas veces hablaremos de eso?

    —(Sonríe y se coloca en dedo entre los labios) Shhhh...

    El marcado no para de lanzar niveles críticos y el hombre comienza a toser. En medio de eso vuelve a hablar.

    —Revisa la gaveta.

    —¿Qué?

    En medio del desespero de los doctores el joven saca de la gaveta más próxima una caja.

    —Es la mosca, hijo.

    —Lo sé papá ¿por qué la trajiste?

    —Algún día, será el estandarte. Debes terminarla, mejorarla y crear algo mejor. Termina todo lo que yo no pude terminar, mis proyectos.

    —Papá yo...

    —Prométeme que lo lograrás, mi pequeño campeón.

    —Yo...

    —Ya ganaste, porque eres un campeón.

    —Supongo que...

    —Prome... —¡¡BIIIIPPPPPPPPPP!!

    Los doctores interrumpen.

    —Lo que me temía, procedan con el desfibrilador.

    Hacen varios intentos y nadie responde las infantes preguntas del joven. Hasta que dejan de esforzarse.

    —(Disgustado) Es todo, prepárenlo.

    Atónito, quiebra el tiempo. Detiene los segundos y como si el aire estuviera a punto de explotar, se lanza con el desfibrilador sobre su padre.

    —¡¿QUÉ ESTÁ HACIENDO?! ¡DETÉNGASE!

    —No me interesa ¡Es mi papá!

    —¡ESTÁ LOCO, QUÍTESE!

    Los doctores lo alejaban con fuerza. Él, sin embargo, parecía ser más fuerte. Los golpes no tardaron, parecía evocar su frustración sobre las batas blancas. Es así como llegó la seguridad y contra eso no pudo; fue golpeado en la cabeza y lo hombros hasta que aflojó un poco y lograron arrastrarlo hacia afuera de la habitación.

    Un sujeto lo calmaba en medio de sus llantos e intentos de zafarse:

    —No es tú culpa, era muy difícil, déjalo descansar...

    —¡NO, NO, DÉJENME IR!

    —¡Cálmate! ¡Espera afuera!

    —¿QUÉ HACEN? ¡SUÉLTENME!

    —(Abriendo bien los ojos) ¡No con esa actitud!

    —(Susurra amargamente mirando la puerta) Sí tan sólo pudiera entrar allí. Infiltrarme.

    .

    .

    .

    ...

    Capítulo I: Trucos

    Hay una bóveda. Las luces apuntan hacia ella, está en un escenario. Se aprecia un cartel que tiene escrito: Bóveda de máxima seguridad bancaria, sistema electrónico Nivel V. El silencio permanece, parece que hay algún tipo de problema, y entonces: ¡CLAC! Una bala redonda golpea la puerta y se adhiere. La bala posee un led rojo. Parpadea, el led parpadea y de la bala emana algo parecido a un polvo oscuro. El polvo se mueve y entra en una ranura junto a la pantalla. La bóveda tiene esa pantalla para visualizar si está abierta o cerrada y justo debajo hay botones del 0 al 9 como los de cualquier teclado. La contraseña es de 16 números.

    GESCHLOSSEN

    Se lee en la pantalla, pero no por mucho tiempo, han pasado sólo 7 segundos desde que la bala fue disparada. La pantalla cambia ahora, parpadea:

    ————

    ————

    ENTRIEGELT

    La puerta suena. Suena como cuando una gaseosa es abierta, luego rechina mientras se abre lentamente. Rechina fuerte y la oscuridad crece en tus ojos. Una silla es echada un poco hacia atrás, se escuchan pasos, como de zapatos elegantes en un piso de lata. Un hombre camina hacia adelante, termina de empujar la puerta y entonces la luz descubre su rostro. Él baja de la bóveda, y se mantiene caminando hacia adelante, mira fijamente hacia el centro, lleva puesto un saco azul marino y una camisa violeta oscuro. Es Znitch y mientras se ajusta las mangas dice:

    —Znitch: Nanotecnología, esos fueron sólo 30 segundos y yo tarde 6 y medio en salir. Máquinas impensables, grandes maravillas de la ciencia imperceptibles. Y bajo nuestro control. De esto se trata el mañana, una vida donde las enfermedades tendrán que pelear más que con anticuerpos, con bestias metálicas inteligentes, donde temibles armas, bombas y maldades con sistemas impenetrables, son vulnerables ante algo microscópico que en nombre de la justicia son nuestra salvación. Usos simples para mejorar nuestra calidad de vida, usos modestos para construir una civilización más capaz y usos enormes para hacer de un futuro

    hostil, el mañana que todos deseamos. Les ofrezco la solución, a casi cualquier cosa donde nuestras manos por muy ágiles que sean no sirven de mucho...

    Znitch voltea hacia la izquierda, mira a su compañero Gref que está junto al proyector y le dice:

    —Znitch: (Entrecerrando los ojos) Sigo pensando que lo de salir de la bóveda es algo exagerado, parece que intento hacer un truco de magia Gref.

    —Gref: (Levantando por un momento las cejas) A mí me parece perfecto, todos lo demás laboratorios planean espectáculos así.

    —Znitch: A ver si la policía se decide por nosotros. O mejor aún el ejército.

    —Gref: Ningún terrorista tocaría esta ciudad. Ni siquiera los carteristas. ¡Ni siquiera ellos! (se ríe)

    Znitch ríe y se acerca a Gref.

    —Znitch: (Sonriendo) ¿Quién lo diría? Terminamos tú y yo como conferencistas... Debería usar esto en el laboratorio (Se mira los zapatos y con sus manos hace la seña hacia abajo) a ver qué pasante me supera.

    —Gref: Es nuestro proyecto (con rostro de confianza ridícula) ¿Quién hablará mejor que nosotros en la Feria de Nuevos Proyectos?

    —Znitch: Nadie. Pero por ahora sólo me preocupa ese tono de cian (mirando a las diapositivas de fondo). Creo que le quedaría mejor algo más (entre cierra un tanto los ojos)... Más oscuro...

    ♪Incubite – Collision Course♪

    Circuit Zero se encuentra tocando Collision Course en el bar Dark Roads. La noche tiene pocas personas pero todos la están pasando bien. La música suena fuerte y las luces se ven genial, cambian de verde a rojo, pero también hay luces violetas y amarillas fijas, la barra por su parte tiene una luz azul. Gus está cantando, se movería como cualquier otro cantante de electro-industrial si no le diera por temblar de vez en cuando. Se ve como de costumbre, cresta casi completamente blanca, ojos maquillados de negro como mapache y guantes de cuero; Alex tiene la guitarra y su cabello platinado, sus ojos con maquillaje y la cara seria. Brandon está hasta atrás con la batería; porta esa cara de que no se esfuerza mucho y una pañoleta de pandillero en la cabeza. A la derecha está Rafa; con sus googles vintage y la boca abierta con cierta agresividad, está concentrado dándole al teclado. Cuando van casi terminando la canción. Gus pide algo:

    —Gus: ¡A ver sus pa, palmas! (tiembla)

    Alguien alcanza a reírse y decir:

    —¡Imbécil! Esto no es una bailo terapia.

    Gus se muestra incómodo. Pero sonríe al ver que el resto levanta las palmas y aplaude al ritmo del bombo. Se mantiene sonriendo pero algo extraño suena:

    —¡EGHHHHHHHSHHHHH!

    —Rafa: ¡UYYY LOCOOOOO!

    —¡DROOOOOOOOOMM!

    La música se para.

    Un hueco enorme en la tarima acaba de hacerse. Se ha tragado el teclado, la mesa del teclado, la computadora única al teclado, y a Rafa, que estaba tocando el teclado.

    Los muchachos corren a auxiliar a Rafa:

    —Alex: (Angustiado) ¡Vamos amigo! ¿Qué?

    —Rafa: (Desesperado) Ayúdenme. No veo nada loco, creo que apagué la laptop por error.

    —Brandon: (Burlándose con ganas) ¡JAJAJAJAJAJA! ¡Maldita sea! ¡Amo este escenario!

    —Gus: ¡Rafa! (Susurra) Rayos, rayos, rayos ¡No de nuevo!...

    —Alex: (Enojado, mirando a Brandon) ¡Ya imbécil, deja de reírte y ayuda a sacarlo!

    —Brandon: Con una mano me basta, querida.

    —Gus: Tranquilo Rafa, sube, sube. ¿Listo? (Halándolo junto con los demás) ¡1,2,3!

    —Rafa: Gracias amigos, pensé que me paré sobre un retrete gigante.

    —Brandon: Lo sé, te tragó como mierda.

    La canción termina, esa era la última. Son apenas las 11 pm, usualmente en Dark Roads en las noches más flojas las bandas no tocan hasta tarde, sino que dejan que un DJ cerca de la barra ponga la música hasta que cierren. Gus y su banda Circuit Zero ya habían guardaron todo, incluso Gus se quitó el maquillaje. Un técnico le hablaba a Gus bajo la tarima:

    —No ha pasado nada a su equipo, han invertido bien su dinero punkis. Hasta pronto.

    —Gus: Ok, gracias, ¿el Sr. Korcales está en su oficina?

    —Sí, está allí.

    —Gus: Bueno...

    Los demás estaban ya sentados como clientes cualquiera. Brandon y Alex pidieron cerveza e invitaron a unas muchachas. Están en una esquina casi para el fondo. Rafa les está contando algo:

    —Rafa: Esta tarde fui al cine. Entré con mi laptop, la abrí y me puse a ver una película.

    —Alex: En la sala

    —Rafa: Sí, en la sala loco.

    —Brandon: ¿Por qué subnormal? ¿No tenías la película en frente?

    —Rafa: ¿Qué? Pero no tenía los subtítulos. Entonces la descargué para verla con subtítulos, pero después me aburrí y me puse a ver televisión.

    —Alex: ¿En el cine?

    —Rafa: Sí, tengo uno de esos USB con internet. Olvidé el nombre. Entonces entré en un anuncio de televisión gra...

    Gus está camino a la oficina del Sr. Korcales. Sin embargo, cuando pasa junto a la mesa de los muchachos, Alex le interrumpe.

    —Alex: (Casi sonriendo) ¡Gus, Gus! Te las presento; ella es Sara y ella Adelina.

    —Gus: ¿Hola, cómo están? (Agita la mano saludando, y sonríe, pero se nota con prisa, sigue de largo)

    —Alex: (Levantando la voz y mirando atrás mientras hace una seña de que venga) Espera, espera... Gus, oye ¡Haz el truco del vaso!

    —Gus: (Voltea para mirarlo) Sí, ahorita, es que voy a... (Señala con el pulgar una puerta al fondo)...

    —Brandon: (Casi riendo) Ahí va el hombre de negocios...

    —Sara: ¿Por qué tan nervioso, flaco?

    —Alex: (Sacude su mano como diciendo que venga aunque Gus no lo ve) Es rápido. Hazlo para que ellas lo vean.

    —Rafa: Yo también lo quiero ver, negociador humano, no... (Confundido mira al suelo) Así no era.

    Alex en el escenario parece un tipo muy frío. Pero fuera de él es cualquier otro veinteañero común; en exceso realmente.

    —Gus: Amm (Mira a Alex, luego hacia la puerta con una ligera cara de resignación y entonces vuelve a Alex) Ok... (Y se acerca a la mesa sonriendo).

    Hay un vaso sobre la mesa de color rojo. Es un simple vaso desechable y está vacío. Los muchachos y las chicas observan el vaso, excepto Brandon, él está mirando su celular algo fastidiado.

    ––––––––

    Gus acerca su mano un poco; como si lo fuera a tomar.

    ––––––––

    Su mano está a unos 30 centímetros de distancia.

    ––––––––

    Su mano se cierra un poco y el pulgar se pone frente a sus uñas.

    ––––––––

    Su ceño se frunce, el tiempo se siente lento.

    ––––––––

    Todos están en silencio y entonces:

    ––––––––

    —¡Pfrapp!

    El vaso es disparado contra la pared.

    Las chicas se ríen y Alex también.

    —Rafa: Te reto a que lo hagas con los ojos cerrados a ver si le atinas...

    Los muchachos ya han visto el truco un millón de veces. Gus sonríe y entonces se aleja. Pero Sara lo interrumpe y le dice:

    —Sara: Espera flaco, siéntate...

    —Gus: Sí, sí. Ya vengo (Le muestra su palma y se aleja)

    Las chicas se quedan diciéndole a Alex: ‘’¿Cómo lo hizo, lo sopló verdad? ¿Ay, es que yo lo vi, no le pegó con los dedos o sí?’’

    Y Alex se reía y les respondía:

    —Alex: No sé, no sé, el tonto nunca me ha querido decir, pero cálmense yo también puedo hacer trucos, (toma aire) puedo adivinar a cuál de las dos les gusto más.

    (Oficina de Korcales)

    La oficina de Korcales, es esa típica oficina de bar, con olor a cerveza, un tanto desordenada y con una computadora no muy nueva. Korcales estaba escribiendo algo en papel. Gus entra y habla:

    —Gus: (Sonriendo) Sr. Korcales ¿Cómo está?

    —Korcales: (Luce sorprendido) ¡Ah Gus, carajo! Esa tarima debe tener un embrujo, ya no sé si seguir reparándola ¿Pero ustedes están bien no?

    —Gus: Sí, a...No nos pasó nada. Otro susto y ya.

    —Korcales: ¡Mmm, ujum! Ya te doy lo de esta noche, espérate señorito...¡Listo! (Se levanta de la silla, se saca la cartera y toma un billete, rebusca y luego saca otro) Ten... (Y le entrega los billetes)

    —Gus: (Los toma, tímido) Eso es... (Se queda mirándolo con atención como esperando algo)

    —Korcales: (Se sorprende) ¿Todo? Sí eso (se sienta de nuevo), hoy la noche estuvo floja (coloca una mueca de tristeza), y debo sacar para las reparaciones. Pero bueno, ahí se los...

    —Gus: Son 20 euros para 4 (apaga su rostro)

    —Korcales: (Levantando los hombros y mirando al monitor) Pero yo no tengo la culpa señorito. Hoy estuvo muy flojo, eso es así, no se haga porque usted sabe que...

    —Gus: (Con tristeza y negando con la cabeza mientras mira a la pared) Vamos, hoy no...

    —Korcales: (Cierra los ojos y coloca su palma izquierda delante) Mire, mire...

    —Gus: (Levanta sus manos en manera de pregunta) ¿Cómo voy a...

    —Korcales: (Se levanta con una sonrisa inconforme) No pero...

    —Gus: No puedo, tenga compasión...

    —Korcales: (La palma hacía delante de nuevo) ¡Ya va!...

    —Gus: (Algo enojado) ¡Siempre es lo...

    —Korcales: No pero...

    —Gus: (Con actitud exigente) ¿Cómo voy...

    —Korcales: (Lo apunta fieramente con el dedo índice erguido) ¡ESCÚCHAME, ESCÚCHAME!...Yo pago en función de lo que entra. Encima de que les regalo la cerveza y los estoy ayudando usted sigue con lo mismo (mientras niega)...

    —Gus: (Como si trabara con labios endureciéndose) Pero, esto ya lo habíamos hablad...

    —Korcales: (Abre bien los ojos) ¡BUENO PRECISAMENTE! Esto ya lo hablamos...Esto ya lo hablamos y me extraña que usted, una persona tan sensata, no quiera entender (se detiene algo cansado esperando una respuesta)

    ...

    Gus:...(Traga saliva y sus ojos comienzan a aguarse)

    —Korcales: (Alza sus manos y hombros un poco). Si la gente no viene, ya se me escapa de las manos, y hay mucha gente que hay que pagarle...Yo no sé... (Se comienza a sentar)Yo no sé... (Termina de sentarse y acomodarse en la silla, para comenzar a escribir)

    Pasó un silencio prolongado.

    Gus:...Bu...Bueno, supongo que así quedamos, hasta luego señor... (Se va de la oficina, a paso rápido, con rostro muy serio y con lágrimas en los ojos a punto de caer)

    Cuando Gus va pasando por la mesa de los muchachos y pasa de largo, las muchachas los miran raro, Alex se preocupa, se levanta y lo toma del brazo pero ya un poco alejado de la mesa:

    —Alex: ¡Ya va, pero! ¿Qué paso? ¿Por qué te vas así?

    —Gus: 20 euros, sólo 20 euros nos dieron...Y no pue... (Sigue avanzando)

    —Alex: (Incómodo) Cálmate, cálmate, mañana nos va...

    —Gus: Sí, sí...

    —Alex: Ey, Ey, quédate.

    —Gus: (Se detiene, se voltea y le dice) ¡No! Yo no aguanto más (sus labios parecen entumecidos). No alcanza, así no sirve... (Mientras se aleja va diciendo) De paso se los sacó de la cartera...

    —Alex: ¡Mira, hey!

    Gus se está yendo. Está a punto de salir por la puerta trasera.

    —Alex: Si quie... (Lo alcanza y toma del hombro) Si quieres quédate con mi parte...

    —Gus: Es que no se trata de eso. Ya estoy cansado...Me voy ya... (Sale del bar al estacionamiento)

    —Alex: (De lejos le habla) ¡Hey, espera!... (Se acerca a él y lo toma otra vez por el hombro)

    —Gus: ¿Qué?

    —Alex: Pero mira, tu siempre sales de esto...Yo ya no te puedo prestar, pero oye ¿Por qué no arreglas algo como la otra vez?...

    —Gus: Es que eso es muy compl...

    —Alex: Pero a ti te salió bien.

    —Gus: (Mira al suelo)...

    —Alex: Amigo...Mañana te llevo a la chatarrería. (Sereno) Cálmate, busquemos otros bares, hay opciones, no te estreses, hay muchas cosas...

    ...

    —Alex: Gus. Puedes ir a comer a mi casa...

    —Gus: (Sonríe un poco).

    —Alex: (Se ríe) ¿Qué?

    Gus:...Bueno... A tu casa.

    —Alex: (Inclinando el rostro en sorpresa) ¡No! ¿Cómo crees? Mis padres te detestan.

    —Gus: (Sonríe)

    —Alex: ¿La chatarra? ¿Entonces?

    —Gus: (Asienta) Está bien...

    —Alex: ¿Ves? No hay que estresarse...

    Alex se va de nuevo al bar, ambos estaban lejos.

    —Gus: Alex ¡Oye!...

    —Alex: ¿Ah?

    —Gus: Dejé el micrófono ¿Puedes llevármelo mañana?

    —Alex: Bueno dale, descansa, yo me quedo otro rato, creo que le guste a las 2...

    —Gus: (Sonríe ligeramente) Está bien... ¡Nos vemos!

    ♪The Smiths – Charming Boy♪

    El agua corriendo de la regadera sonaba. Gus se estaba bañando. 12 minutos después salió, se secó bien el cabello, pasó un buen rato peinándoselo, y luego se colocó una ropa fresca, excepto por el suéter amarillo de mangas recogidas.

    Salió a barrer la entrada. Las hojas de los árboles caen muy menudo por allí.

    Se dio cuenta de que en la puerta estaba pegado un papel.

    —Aviso de Desocupación. 2 semanas.

    Gus lo despegó, lo miró con desgano y se lo guardó arrugado en el bolsillo. Miró hacia los lados con pena, terminó de barrer y entró a la casa. Entonces abrió la nevera:

    —Gus: Salsa de tomate (saca la salsa) Con... (Asiente)Pan. Será con eso.

    Prendió la cocina, tostó el pan. Tomó un vaso con agua y le colocó azúcar.

    Luego sacó su lista de compras y escribió: ‘’Comprar atún, el que estaba en oferta’’

    Estaba desayunado a un lado de la cocina mientras veía la televisión. Era la T.V local:

    Unas franjas rojas pasaban con una música bailable muy pegajosa; un par de guitarras eléctricas y saxofones. La franjas se detuvieron para soltar el logo del programa: ‘’Ciudad hoy, con Johan Weibser’’

    Un hombre de pelo castaño y gran sonrisa (Johan, el presentador) hablaba mientras sostenía tarjetas en sus manos.

    Johan: Bienvenidos, estamos aquí de nuevo con los doctores Ernerst Znitch y Gref Malakias.

    —Gref: (Cómodo) ¿Cómo estás?

    Johan: Sí, eso ya lo había dicho (dijo casi riendo)

    Todos se rieron en ese momento, el público e incluso Znitch.

    Johan: Bueno, ¿dónde habíamos quedado? Jaja ¿Su presentación? ¿No?

    —Znitch: Sí, bueno. Hoy nos presentaremos en el auditorio principal de la Universidad Ciencias Unidas, por la noche.

    —Gref: Somos casi el último acto, va haber mucha gente colega. En efecto es un acierto tremendo lo que se está consiguiendo con la manera en la que se presenta esta feria

    Johan: Sí, a la gente últimamente le encantan estas convenciones.

    —Znitch: Regalos, sorpresas, retos...

    El público completo ríe.

    Johan: Eh, ¿Qué pasa?

    —Gref: No, si supieran que es cierto jaja.

    Johan: Me parece perfecto, porque ciencias naturales era mi segunda materia más odiada...

    El público ríe.

    —Znitch: (Con cara de intriga) ¿Y por eso decidiste ser entrevistador?

    El público ríe de nuevo. Y Johan también.

    Johan: (Mira con una cara de consideración al público, entrecerrando lo ojos y señala con la mano abierta) ¡Aplausos!

    El público aplaude:

    —Znitch: (Apaciguando) No, no. No es enserio, estamos...

    Johan: Tranquilo, así es mi programa; (inclinaba la cabeza a un lado y luego al otro) regalos, sorpresas, retos...

    Todos ríen.

    Johan: (Se acomoda en el asiento) Ya, ya, mucho, mucho. (Se acomoda la corbata) ¿Algo que quieran decir para invitar al público?

    —Gref: (Rascándose la barbilla) Definitivamente hay muy buenos proyectos, éste y todos los años, son eventos con muchísima preparación que todos deberían ver. Yo llevo casi 8 años con el desarrollo de ésta tecnología, basicamen...

    —Znitch: ¿Llevo?

    —Gref: Perdón (Sonríe) llevamos...

    El público ríe y Gus se ríe tímidamente.

    —Gref: Y es maravilloso el mundo de posibilidades que hemos descubierto. No sé si Ernest quiera...

    —Znitch: (Inclinándose, y colocando los codos sobre sus piernas) Nuestra meta es llegar a donde las manos humanas no pueden llegar (se expresa mucho con las manos), abrir esa ventana de posibilidades infinitas para todos. Algo que definitivamente cambiará el futuro de la investigación científica y garantizará una nación segura y poderosa. Todos formaremos parte ello, nuestro compromiso es con ustedes. Creemos en ustedes el mundo y en este proyecto.

    El público dijo: (Con impresión pero muy en juego) ¡Ohhhh!

    Znitch se ríe mirando al público.

    Johan: (Con ojos impresionados) ¿Creen que se lleven el primer premio?

    —Gref: Está reñido porque son muchos, pero ya veremos en la premia...

    —Znitch: Seguro.

    El público dijo: (Con impresión pero muy en juego) ¡Ohhhh!

    Johan: (Mirando a la cámara) ¡No se lo pierdan esta noche!

    El público aplaude y Johan se levanta de su escritorio.

    Johan: Universidad Ciencias Unidas; entrada libre. Un placer caballeros (les acerca la mano para estrecharlas)...

    Se estrechan las manos y vuelve la música del programa.

    Gus coloca su plato en el lavadero, suena un claxon afuera y un grito que dice:

    —¡GUS!

    Es Alex, con su auto.

    Eran las 9 am. Gus salió de su casa y se subió al auto, también estaba allí Rafa, y así se fueron a la Chatarrería Rick’s. Gus vive en un vecindario de clase media, no hay mucha inseguridad ni cosas como pandillas. Casi todas las casas son pequeñas y de máximo 2 pisos, cerca de allí se encuentra un hospital y casi al frente un taller automotriz.

    Luego de pasar el Downtown y salir de la zona conocida como Handel, llegaron cerca de la Universidad Ciencias Unidas. Tenía lugar un embotellamiento.

    En el auditorio de esa universidad y su cancha techada, se estaba preparando desde hace unos días La Feria Internacional de Nuevos Proyectos. Znitch y Gref participarán allí. Se trata de una feria que suele darse cada 2 años, donde multitud de proyectos tienen un espacio para presentarse ante la comunidad científica no sólo alemana sino también de otros países. Es un evento muy importante que tiene varios escalafones.

    Hay espacios dirigidos a proyectos medianos, por lo general de estudiantes o profesores universitarios comunes. Estos proyectos no son demasiado ambiciosos por el resumido presupuesto que presentan pero indiscutiblemente logran llamar la atención. No se trata de una feria de ciencias escolar aunque conserva ese espíritu, por lo tanto los exponentes invierten bastante dinero en construir un stand llamativo y bien profesional. Estas presentaciones suelen estar más hacia la entrada de la chancha.

    En los auditorios secundarios que son 4; ocurren presentaciones por turnos de laboratorios y empresas con más expansión que las anteriores, aquí al contar con un espacio parecido a una pequeña sala de cine (incluso con ambientación y decoraciones), las presentaciones son muy preparadas, siempre buscando inversionistas; estos proyectos plantean generalmente soluciones a problemas cotidianos o empresariales.

    Para la parte del auditorio central, están los proyectos más grandes, y por lo tanto costosos, donde hay turnos exclusivos para cada presentación. A éstas presentaciones acuden científicos de renombre, grandes empresarios, algunos representantes de transnacionales, ministros de gobierno y autoridades militares, por lo tanto todo debe salir más que impecable, y las exposiciones deben aprovechar al máximo todos los atributos que tengan: Oratoria, medios audiovisuales, experimentos en vivo, incluso regalos o sorteos para crear un momento

    excepcional, aquí más que una presentación de ciencia, parece un espectáculo publicitario para vender la mejor idea del mundo.

    Muchos espectadores importantes han planteado mudar el lugar de encuentro de la presentaciones a un lugar más reservado, y tantos otros se quejan de que la feria ha perdido noción de lo que debería ser y se ha transformado en un episodio de Negociando con Tiburones. No obstante, debido a la tradición; el lugar y el estilo se mantienen.

    Finalmente y después de un largo de día de presentaciones, tiene lugar una premiación en el auditorio principal.

    Al ver el embotellamiento, Alex pregunta:

    —Alex: ¿Y esto?

    —Rafa: Eso es de la feria de ciencias.

    —Alex: ¿Feria de ciencia? ¿Y por qué hay tantos carros? ¡Mira, mira! Está pasando un camión de mudanzas.

    —Rafa: (Algo tieso) Sí, si ese camión es de la feria, para allá va mucha gente, es entrada libre loco. Es una cosa así internacional, no me acuerdo el nombre pero era algo así; como feria mundial de ciencia del mundo, no sé, pero para el auditorio de adentro es con invitación o no sé si había que pagar, déjenme bajarme para preguntar si (se mueve como si se fuera a bajar)...

    —Alex: (Niega con su palma) No, no es necesario, tranquilo.

    —Gus: (Voltea a verlo) ¿Y cómo sabes eso? Creo que acabo de ver algo de eso en televisión.

    —Rafa: Ah, yo tengo un primo que una vez expuso allá (se rasca la frente). Pero como en la parte más pobre loco.

    —Gus: Ok (asienta con la cabeza).

    —Rafa: ¿En qué canal lo viste?

    —Gus: Había una entrevista en Ciudad Hoy.

    —Alex: ¿Ves eso? Pensé que era el único con ese placer culposo...

    Luego de salir del tráfico, siguieron recto hasta la chatarrería.

    .

    Sólo Gus bajó del carro. Entró, y a lo lejos vio de espaldas a Pascal. Pascal es un señor robusto y muy amistoso, es fácil de recordar su gruesa voz. Gus se acerca a él y grita su nombre:

    Pascal estaba hablando con otro señor.

    —Pascal: (Se voltea y le dice) ¡Epa! ¡Ya voy!

    Habló un momento más con el otro señor y luego se acercó a Gus sonriendo, sin embargo, en él se notaba también una mueca tendida en intriga.

    —Gus: (Sonriendo un poco) ¿Cómo estás? Vine el otro día para...

    —Pascal: ¡Ah! Ya me acordé; eres el de la caja registradora.

    —Gus: Sí, ese (sonríe y cierra los ojos)

    —Pascal: Y el del peinado ridículo...

    —Gus: ¿Qué?

    —Pascal: Nada compañero, dime ¿qué necesitas?

    —Gus: Bueno, estoy buscando algo para reparar (se rasca la mano)

    Pascal, exageradamente se sorprende, levanta las manos y gira un poco el torso de derecha a izquierda. Gus se ríe.

    —Gus: Jaja, me refiero, a...Bueno, algo pequeño pero que no esté muy dañado. (Con gesto conforme) Es para ganar dinero, no sé, algo rápido (sonríe un poco).

    —Pascal: Bueno papá, aquí hay de todo, dime ¿Te busco otra caja? O no sé, por allá hay un microondas más o menos bueno...

    —Gus: (Infla un tanto sus mejillas) Sí, no lo sé.

    —Pascal: ¿Qué pasa? Sigues demasiado tímido. Párate derecho.

    —Gus: ¿Tímido?

    —Pascal: Sí, mira tu cara. Compórtate con más confianza. Deberías entrar en no sé...Una banda por ejemplo. Cantar en una banda te va a quietar el miedo a mirar y hablar firme.

    —Gus: (Sonríe amargamente) Sí, seguro. Debería.

    —Pascal: ¿Vamos por el micro?

    —Gus: Es que no se qué tan difícil sea reparar un micro (se mete las manos en los bolsillos), lo del otro día (mira hacia otro lado) fue algo imprevisto, yo nunca había...

    —Pascal: (Interrumpe a Gus emocionadamente y lo hala del hombro) No, no, ya va. Venga, ¡venga para acá!

    Ambas fueron hasta el lugar que Pascal sugería; un lugar con techo, como una especie de depósito. Visto desde lejos luce como un baño. Pascal abre la puerta y le dice:

    —Pascal: Aquí me dejaron un escáner (sonríe). Es como un aparato... Un aparato de radiografías, (levanta el escáner y su voz suena algo pujona al agacharse) así me dijo el señor,

    y que se le quemó no se qué cosa ahí, pero no le entendí. (Colocó el escáner sobre una mesa) Háblenme de fusiles, yo de esto no sé mucho, (se limpia el sudor de la frente) aún que supuestamente es muy caro, y como tú quieres ganarle... Pues, no sé. Tú dices (abre bien los ojos como esperando un respuesta).

    —Gus: (Se rasca la cabeza) Se ve como raro...Yo nunc...

    —Pascal: (Cambió a una mueca de fastidio) El señor me lo quería vender en 170 y yo le dije que no, y me lo terminó dando en 80. Me pareció caro pero me dijo que reparado lo podía vender en por lo menos 300 (sonríe). Porque nuevo, (coloca sus manos a un lado de su boca como si dijera un secreto) supuestamente cuesta 700.

    —Gus: ¿Necesitaba dine...

    —Pascal: Sí, yo creo. Por eso me lo dio así en 80.

    Gus:...

    —Pascal: Mira, yo creo que eso no necesita mucho, se ve bien, sería cuestión de que lo abras y veas...

    —Gus: Amm...

    —Pascal: (Sonríe, mira al suelo, y luego de nuevo a Gus) Se te nota que estás comenzando en esto de la electrónica.

    —Gus: (Dice con inseguridad) Solamente hice un curso accidental...

    —Pascal: (Se sorprende) ¿Accidental? jajaj.

    —Gus: Sí, algo así (ríe sutilmente).

    —Pascal: Me recuerdas a mi sobrino (asienta con la cabeza). Pero una vez que tomas confianza, no importa que sea (niega con la cabeza mientras camina hacia un lado), te da curiosidad. (Señala a Gus) Quieres arreglar hasta matrimonios.

    —Gus: Jajaja (Se ríe mirando al suelo).

    —Pascal: (Dice inclinando la cabeza, con voz pacifica y buscando los ojos de Gus) Necesitas dejar ese miedo... (Cruza los brazos y luego deshace el cruce para masajearse la barbilla)Vamos a hacer algo; a ti por caerme bien te lo voy a dejar en 100 (señala el escáner y luego a Gus). Y sí no lo logras reparar puedes tráemelo devuelta y te devolveré el dinero (vuelve a cruzar los brazos).

    Gus lo miró sorprendido, pensando que era una broma.

    —Pascal: Pero no me lo vayas a traer todo vuelto mierda, así si no te devuelvo un carajo.

    —Gus: (De manera emocionada) ¿Enserio?

    —Pascal: Sí, sí está hecho mierda no te voy a devolver nada.

    —Gus: (Ligera cara de mal chiste) Estaba pensando en...

    —Pascal: ¡Ah! ¡El trato! Claro (sonríe); verás que no debe ser nada complicado, yo mismo lo haría.

    —Gus: (Con una leve sonrisa) ¿300?

    —Pascal: (Levanta las cejas mirando al escáner) Mínimo 300. Nada más no lo arruines.

    Gus salió de de Ricky’s con el escáner en la mano y entró en el auto. Alex le preguntó:

    —Alex: ¿Qué compraste? ¿Eso es un microondas?

    —Gus: Es un escáner.

    —Alex: ¿Y si lo sabes arreglar?

    Gus:...(Algo incómodo) Me toca investigar justo como con la registradora, supongo que después se lo venderé al mismo sujeto (levanta sus hombros un poco).

    —Rafa: ¿El anciano de (mientras lo dice mueve sus manos hacia los lados como si abriera una ventana) ‘’Compra y venta Hermanos Wendy’’?

    —Gus: Sí. Además si no lo logro reparar, Pascal me dijo que lo trajera de regreso y me devolvería el dinero (sonríe).

    —Alex: Bien y ¿cuánto te costó?

    —Gus: 100...

    —Rafa: ¿100? ¿No es mucho, loco?

    —Gus: Sí pero, dijo que lo puedo vender en no menos de 300.

    —Alex: Ok...Bueno (levanta los hombros rápidamente), vámonos.

    Alex dejó a Gus en casa. Gus no lo pensó mucho e inmediatamente se puso a investigar sobre el escáner. Leyó todas las etiquetas que tenía: Defcon(c) 355. Multiuse 3D Scan. Ultra— diamagnetic Energy System. Warning: High Voltage Device.

    En internet no había mucha información de ese modelo, sin embargo, sí había de modelos similares. La diferencia es que los demás no tenían la etiqueta Ultra—diamagnetic Energy System. Así que buscó Ultra—diamagnetic Energy System por separado. Y entre los resultados encontró:

    —‘’El fraude de la energía ultra—diamagnética’’

    —‘’Científicos suecos descubren la energía ultra—diamagnética’’

    —‘’La energía ultra-diamagnética no es un descubrimiento reciente’’

    —‘’¿Realmente existe la energía ultra—diamagnética?’’

    —‘’Máquinas ultra—diamagnéticas llevan tiempo en el mercado’’

    Eso sólo lo llenó de más preguntas. Títulos así sólo infundían inseguridad. Por eso se dispuso a leer cada texto que encontraba sobre el tema:

    "La energía ultra-diamagnética es un tema de controversia en la comunidad científica. . . No se ha demostrado que los procesos vinculados a esta energía puedan ser controlados por el humano. . .El hecho de que haya productos que se promocionen con tal sistema de funcionamiento a estas alturas es preocupante"

    ‘’La energía ultra-diamagnética es un hecho y es cuestión de algunos años para que veamos las primeras celdas ultra—diamagnéticas (que protejan nuestros objetos de cualquier cosa...’’

    ‘’Los defensores de la energía ultra-diamagnética suelen colocar como ejemplo los experimentos realizados por Jakobsson acerca de incrementar el diamagnetismo natural de las moléculas para generar energía cinética a través del movimiento de partículas. . .Pero estos experimentos al intentar ser replicados denotan que necesitan energía eléctrica y aun así el incremento del diamagnetismo de las moléculas que ciertamente ocurre no es suficiente como para generar una energía cinética aprovechable...’’

    ‘’Los experimentos de Jakobsson han sido replicados con éxito por investigadores suecos...Las ventajas que brindan estos procedimientos pueden ser utilizadas en escáneres 3D, detectores de movimiento, incluso en unos años celdas anti gravitacionales. . .Me preocupa que la energía ultra-diamagnética pueda ser utilizada en armas, y lo digo porque al comentar en qué consiste esta energía muchos piensan directamente en eso...’’

    ‘’El profesor Wen Xao de la Universidad de Chéngjiù explica como funcionaría un escáner ultra—diamagnético. . .Este concepto prefiero llamarlo como escáner antiestático. . .El crear movimiento de partículas en capas gruesas que se mantengan desde la fuente de impulso, permite detectar como un sensor a qué distancia se encuentra un objeto al empujarlo y comprimirlo hasta cierto punto, para luego enviar estas señales a un sensor eléctrico...’’

    ‘’Varios productos llevan tiempo en el mercado, haciéndose pasar como dispositivos con sistemas de energía ultra-diamagnética. . .La ventaja de un sensor o escáner tridimensional teóricamente con energía ultra-diamagnética como clave de funcionamiento sería la de prestar una mayor precisión que los sistemas actuales. . .Podrían hacer lo que hace un sensor o escáner común, pero sin ninguna clase de luz o señal de calor, simplemente su presencia.

    ‘’Tengo mucho tiempo siguiendo de cerca el tema de la energía ultra-diamagnética. . .No entiendo por se empeñan en el tema de los escáneres y sensores, cuando ya con las tecnologías actuales basta. . .De hecho podría ser utilizada de muchas maneras creativas que no se pueden logar por otros medios; el tema de mover objetos al empujar partículas de aire en capas me parece fascinante para procesos industriales, y si se puede lograr comprimir cualquier fluido alrededor se podría experimentar con crear dispositivos capaces de soportar altas presiones

    como las que se hallan en el fondo oceánico. . . ¡Incluso crear escudos o campos de fuerza a base de esta energía! Aunque parezca descabellado ¡ tiene mucho más sentido que centrarse en complejos sensores de movimiento! ¡EL MUNDO ESTÁ INVIRTIENDO MAL SU TIEMPO E IDEAS! ...

    —Gus: Ok... Es, es suficiente...(Se levanta de la silla)

    Ahora Gus no sabe qué hacer. El escáner podría ser un fraude o una maravilla. Sin embargo, no se explica por qué costaría sólo 700. En páginas de compra y venta el producto existe, no es un prototipo ni mucho menos un mal chiste que le hicieron a Pascal o incluso a Gus.

    Lo que ocurre ahora es que no hay ningún tutorial o guía para la reparación de este aparato. Búsqueda, búsqueda y búsqueda, ya van 10 páginas de resultados, desde la 3 no tienen nada que ver con el tema...

    —Gus: Tiene que haber algo...

    Gotas de sudor que denotan insatisfacción caen de la frente de Gus e impactan sobre la mesa mientras él sigue mirando el monitor.

    ––––––––

    Página 11 de búsqueda...

    ––––––––

    Nada. Gus se arriesga a desarmarlo y ver la reparación de un escáner similar para ver si logra detectar el problema.

    Primero toma el cable del aparato y lo enchufa, oprime el encendido, espera y...

    Nada ocurre. Efectivamente no funciona.

    Con mueca insatisfecha se aleja del escáner en su gastada silla de oficina. Se toca el pantalón y de allí se saca arrugado el aviso de desocupación.

    Traga saliva y toma el destornillador. Empieza a sacar tornillo por tornillo la carcasa exterior de color blanco. Mientras tanto en la computadora se reproduce un video de la reparación de un escáner similar.

    ♪File Not Found – Schwarz♪

    Se trataba de un joven con el pelo afro muy desordenado y unos lentes de bastante futuristas, estaba con una mesa de madera cables y piezas alrededor e incluso detrás de él y una pared blanca un poco sucia.

    —¿Como están muchachos? ¿Les gustan mis lentes? Sí, sí, ya sé lo que van a decir, que no voy al grano y tienen razón. Pero comiencen desarmando el escáner. Esto es para tí Drago997. Es que ya sé que hablo mucho pero (Gus adelantó el video en este momento) Bueno. Una vez la carcasa esté afuera debemos proceder a quitar la otra carcasa de seguridad...

    Debajo de la carcasa blanca, hay otra carcasa, pero esta de color gris, es de acero al parecer, y tiene hoyos por donde pasan las 4 pequeñas bombillas. Los tornillos de ésta son más complicados de sacar pero al hacerlo Gus logra quitar esta carcasa y se encuentra con otra carcasa más. Esta parece ser de aluminio. A los lados tiene bolsas con líquido e imanes por dentro. Pero la del video no tiene nada similar a estas bolsas.

    Las bolsas son similares a compresas que están acopladas con cables. Cualquiera podría llamarlo un espectáculo visual; hay algunas rojas y otras azules, algunos grupos de cables están rodeados por tubos grandes un tanto traslúcidos de color verde y los demás grupos de cables por tubos amarillos. Lucía complicado pero en buenas condiciones como si nunca se hubiera usado.

    En la parte superior había una especie de compartimiento que sobresalía; era un cuadrado no demasiado grande de donde emergen las 4 bombillas, y por la parte frontal está la puerta. Al abrirla sólo se observa una cabina blanca con 6 rectángulos de plástico parecidos a celdas solares en los laterales.

    El sujeto del video continúo explicando sobre las carcasas, la circuitería y los problemas más comunes de esos aparatos. Así que a Gus sólo le quedaba continuar en la búsqueda de algo que denotara claramente algún tipo de daño. Todo se veía normal salvo por algo; al levantar la tapa del compartimiento había algo como una pequeña tarjeta madre y justo al lado otra tapa. Al levantar esta otra tapa, estaba el problema:

    Tenían lugar 5 resistencias y precisamente la del medio se encontraba fundida, sobre ellas hay una inscripción que alcanza a decir ‘’Caja de resistencias’’. Era difícil arriesgarse, el resto del aparato lucía bien y aventurarse a revisar parte por parte desconectando cosas podían dejar el escáner en un peor estado, así que por el momento: Eso era todo; había que remplazar la resistencia.

    El del video lo único que mencionó sobre las resistencias fue: ‘’Si el problema son las resistencia, vayan a mi otro video, está en esta misma página, apóyenme muchachos, me esforcé mucho haciéndolo para ustedes’’

    Cambió el tutorial de internet, por ese del mismo sujeto, donde explicaba como cambiar resistencias.

    —Muy bien amigos verán que no es nada complicado, aún recuerdo cuando...(Gus adelantó el video) Segundo paso, hacen... (Retrocedió el video) Bueno, comencemos, primer paso...

    Gus terminó de ver el video y ya los instrumentos los tenía; el soldador eléctrico y el estaño.

    Tuvo que comprar cerca de casa varias resistencias porque la fundida estaba muy deteriorada como para saber de cuantos ohms era. Como las demás resistencias eran de 1 millón y medio de omhs, compró una de esas pero también una de 2 millones y otra de 3 millones. Si no funcionaba con ninguna de estas debía comprar una de 1 millón o medio millón y probar. Le tomó casi 2 horas remplazar la primera resistencia, era la primera vez que lo hacía.

    El video del sujeto seguía reproduciéndose, simplemente hablaba sobre como en su adolescencia le tocaba reparar todas las cosas que se estropeaban en su casa.

    Gus colocó la tapa y luego la carcasa de acero. Es muy molesto colocar esta carcasa. Lleva unos 15 a 20 minutos. Puso la carcasa blanca, enchufó y encendió el escáner:

    —¡Wiiiiinnnn! (El escáner hizo un ruido)

    Comenzaba a sonar un ventilador, las luces prendieron, parecía una impresora cuando está iniciando. Pero antes de que termine de sonar, se escucha un crackido y se apaga. Gus retira todo de nuevo con mucha preocupación y encuentra que la resistencia se quemó; era la de 1 millón y medio.

    Eso fue decepcionante, pero al menos sabía que el problema era la resistencia, así que no lo pensó mucho y cambió esa resistencia por la de 2 millones. Volvió a colocar todo y se tardó de nuevo con la carcasa de acero. Enchufó el escáner, lo encendió y:

    Comenzaba a sonar un ventilador, las luces prendieron, parecía una impresora cuando está iniciando. Pero antes de que termine de sonar, se escucha un crackido, y se apaga. Esta vez duro más tiempo que en la prueba anterior.

    Repitió todo el procedimiento, ya le toma 45 min y el tipo del video sigue hablando. Gus todo estresado, no le puso la tapa de acero, sino que hizo la prueba directamente, enchufó el escáner, lo encendió y:

    Comenzaba a sonar un ventilador, las luces prendieron, parecía una impresora cuando está iniciando. También se escucha estática, los imanes brillan un poco. Pero antes de que termine de sonar, se escucha un crackido, y se apaga. Esta vez duro mucho más tiempo que en la prueba anterior.

    Ya eran casi las 8. Compró una última resistencia, la de 5 millones. Es verano así que aún no anochece. La puso muy rápido, en unos 20 minutos. Puso la tapa del compartimiento pero no la de acero, enchufó y encendió el escáner:

    Comenzaba a sonar un ventilador, las luces prendieron, parecía una impresora cuando está iniciando. También se escucha estática, los imanes brillan un poco. No deja de sonar, la estática se hace más fuerte, la computadora se apaga y de repente: Un destello azulado se desprende de la máquina junto con crackido fuerte, como un tímido disparo. Gus asustado se aleja, sale otro destello, ¡CRACK! Se mueve rápido, desconecta el escáner y el sonido de desvanece, los imanes se apagan. Gus se aleja y observa que las bombillas permanecen encendidas, y el sonido sólo se intensifica. Ahora es tan intenso como antes, y sigue aumentando y aumentando. Los imanes brillan, aparece otro destello... ¡CRACK! Rayos azules se despegan de las bolsas. Es una conmoción, la tensión aumenta, Gus se remite a alejarse. ¡CRACK! Otro destello ¡CRACK! Uno más. ¡TRAHSSS! Una bombilla explota.

    Los rayos latigan objetos metálicos

    —¡¡OOOOORILD!!Tum

    Y los atraen.

    El corazón de Gus puede escucharse a la distancia. Le tiemblan los labios y sus ojos están casi aguados.

    Clips alrededor, monedas, bolígrafos; el aparato toma un objeto, absorbe otro y suelta el anterior, Gus está desorientado y su cabeza no deja de girar al ver los objetos; es como si el escáner buscara algo: objetos más grandes.

    Pero comienza a sonar demasiado FUERTE Y LOS DESTELLOS CREAN UNA DIFERENCIA DE LUZ ENORME EN EL CUARTO como si se tratara de una discoteca.

    Las llaves, ¡CRACK! OTRO DESTELLO, ¡TRAHSS! OTRA BOMBILLA, EL CELULAR DE GUS NO SE ESCAPÓ, GUS CORRE A ARRANCAR EL CELULAR Y LA MÁQUINA ABSORBE SU MANO, TAMBIÉN SU OTRA MANO, ESTÁ CALIENTE. LOS RAYOS RASGUÑAN SUS ANTEBRAZOS, COMIENZA A QUEMARSE LAS PALMAS, NO PUEDE DESPEGARSE, INTENTA COLOCAR SU RODILLA PARA HACERSE A UN LADO LA MÁQUINA, LAS BOLSAS ARRANCAN LA TELA DEL PANTALÓN PERO LA SUELTAN, LAS MANOS SIGUEN ARDIENDO, las lágrimas salen de los ojos, SE ESCUCHAN GRITOS DE AUXILIO Y DOLOR:

    —Gus: ¡¡AHHHHHHHH, NOOOOO, ME...ME...

    Su ceño se frunce.

    —Gus: ¡¡AHHHHH!!

    De sus manos se escapa lentamente una energía como el tornasol y traslúcida sin embargo. Totalmente de aspecto espectral, distorsiona impulsivamente el rededor de sus manos. Sus manos se están despegando y las siente frías, muy frías, pero los rayos no paran. El papel tapiz del cuarto se está comenzando a deshacer.

    Un momento congelado, Gus habla en su mente:

    .

    .

    .

    .

    .

    ¿Qué fue eso?

    .

    .

    .

    .

    .

    .

    ¿Qué está...

    .

    .

    .

    .

    .

    .

    Mis manos sangran...

    .

    .

    ¿Por qué estoy sintiendo frío?

    .

    .

    .

    .

    .

    .

    ¿Qué debo... ¡¡¡CRACKPFFFTHRUUUU!!! GUS GIRA LA CARA Y CIERRA LOS OJOS. LA MÁQUINA HA REVENTADO 2 LAS ÚLTIMAS BOMBILLAS y reveló un destello amarillento, pero todo el cuarto adquirió una tonalidad verdosa.

    Gus logra soltarse, camina hacia atrás y se tropieza con la vieja y descuidada silla giratoria. Intenta tomar el teléfono fijo con sus manos sangrando y con esa capa tornasol, pero no lo puede agarrar. Cuando se acerca al teléfono éste se aleja y ahora está en el suelo. Su cara y todo su cuerpo se sienten pesados mientras se inclina para tomar el teléfono y el estruendoso sonido de la máquina no le deja pensar. Él se limita a perseguir el teléfono unos 2 metros, hasta con las 2 manos conseguir tomarlo. Se levanta desesperadamente. Marca el número de emergencias y se acerca el teléfono a la oreja, le cuesta mucho sostenerlo.

    —Gus: Hola...

    —Bue...¡Trakkstrak!

    El teléfono está hecho trizas.

    —Gus: Rayos, ¿Qué, qué...

    Gus se dispuso a escapar del la habitación.

    —¡TUFRASHHH!

    De su cuerpo se desprendió una ráfaga aglutinante que dañó una de las paredes. El efecto se repitió y rompió el marco de la puerta y una bombilla. También derribó una pequeña mesa corriendo. El humo recorría la sala y

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