"Es temprano en el aeropuerto de Heathrow y en mi cabeza solo hay lugar para una pregunta: ¿cuántas posibilidades hay de que se estropee el transporte público de Londres? La respuesta llega pronto: todas. Repaso las de esta entrevista, pregunto al trabajador del monstruo subterráneo... Entretanto, vuelvo a ver uno de los vídeos virales de la semana: Green Day da un concierto sorpresa en un pub de la ciudad, concretamente en The Marquis (Covent Garden). Un comentario en el vídeo: “Falto uno de los días al trabajo y pasa esto”. Sonrío. A mi lado hay un grupo de colegiales vestidos con uniforme azul que se ríen y se empujan. Me pregunto si habrán escuchado alguna vez Boulevard of Broken Dreams o si dedicarán Last Night on Earth a algún amor.
Después de dos horas, el metro consigue llegar hasta Tottenham Court Road. Corro todo lo rápido que me permiten mis asmáticos pulmones hasta High Holborn,. Cuando llego a la habitación, la mánager, con ojos gigantescos, suelta un “es mi álbum favorito”.Y aprieta el botón de reproducción de las quince canciones. Fresco, juvenil, a veces crudo, vivo. Lo escucho hasta que la mánager me confiesa lo inesperado: Billie Joe y Tré se encuentran indispuestos. No podrán responder a mis preguntas… hoy. Al otro lado del pasillo me espera Mike Dirnt, bajista del grupo.
