Sobre el estilo. Sobre lo sublime
Por Demetrio, Longino y Carlos García Gual
5/5
()
Información de este libro electrónico
En este volumen se presentan dos breves tratados de crítica literaria de la tradición helenística postaristotélica, ambos de hacia el siglo I d.C.
De Demetrio (autor del que sólo conocemos el nombre) nos llega Sobre el estilo, el único ejemplo conservado con detalle sobre la teoría de los estilos, que divide en cuatro apartados: llano, grandioso, elegante y enérgico (esto último es la novedad que aporta a los estudios de crítica). Cada estilo es explicado en cuanto a estilo, dicción y disposición de palabras, como lo son los correspondientes estilos defectuosos (el frío, el árido, el afectado y el repulsivo). Forma y contenido concuerdan según las normas del decoro: el estilo grandioso, con su dicción rica y frases elaboradas, es adecuado para la narración de las batallas y los mitos cósmicos, el estilo llano para las escenas de la vida cotidiana, el fuerte para la cólera y la invectiva literaria, el elegante (con su gracia e ingenio) para el amor, los epitalamios y los jardines. Se refiere además al estilo epistolar: la carta refleja el carácter del escritor y no debe ser un opúsculo pomposo ni excesivamente coloquial. También resultan interesantes los estudios de la metáfora y la oración. Para ilustrar sus ideas, Demetrio recurre a ejemplos de numerosos autores y géneros.
El famoso tratado de Longino, o de un Pseudo Longino, es el mejor de su tiempo en crítica literaria y tiene como cualidad principal el entusiasmo y el fervor en la exposición de su tema. Junto al afán de precisión en la búsqueda de unos fundamentos objetivos para el análisis literario, está animado por un espíritu vivo y cálido. Longino percibe la grandeza sublime en Homero, Platón, Demóstenes, un poema de amor de Safo, el latín de Cicerón y (único en la crítica pagana) la creación del Génesis. Todos estos ejemplos comparten su capacidad de afectar emocionalmente: lo sublime no encanta o convence, sino que asombra, nos lleva con una fuerza irresistible a participar de la inspiración del autor. Este efecto emotivo se combina con un planteamiento global, pues lo sublime se alcanza mediante la nobleza de la mente. En una gran digresión sobre el genio, se afirma que la sublimidad de la mente es lo que más nos acerca a la mente divina. La grandeza implica el riesgo al fracaso, pero el genio defectuoso es superior a la mediocridad pulida. Se trata, en suma, de un alegato en favor de la audacia y la amplitud de miras y contra la cómoda seguridad. Longino ha tenido una influencia enorme, sobre todo entre los críticos románticos.
Autores relacionados
Relacionado con Sobre el estilo. Sobre lo sublime
Títulos en esta serie (100)
Vida y hazañas de Alejandro de Macedonia Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Sobre el estilo. Sobre lo sublime Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Agrícola. Germania. Diálogo sobre los oradores Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Himnos homéricos. La "Batracomiomaquia" Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Tragedias I: · Medea· Los Heraclidas· Andrómaca · Hécuba · El cíclope · Alcestis Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El satiricón Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Los filósofos presocráticos I Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Discursos I Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Sobre la muerte de los perseguidores Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesHistorias. Libros I-IV Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesHistorias. Libros I-IV Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesMimiambos. Fragmentos mímicos. Sufrimientos de amor Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Quéreas y Calírroe. Efesíacas. Fragmentos novelescos. Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Discursos I-V Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Historias. Libros V-XV Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Tragedias I Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Antología Palatina I: Epigramas helenísticos Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Historia. Libros III-IV Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Apología. Flórida. Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Helénicas Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Fábulas de Esopo. Vida de Esopo. Fábulas de Babrio. Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Anales. Libros XI-XVI Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Historia romana I Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Tratados de lógica (Órganon) I Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Historias. Libros XVI-XXXIX Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Vidas de los sofistas Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Historia. Libros V-VI Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Tragedias III Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Historia de los animales. Libros I-VIII Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesAnábasis de Alejandro Magno. Libros IV-VIII (India) Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Libros electrónicos relacionados
Vidas de los sofistas Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Alegorías de Homero. Metamorfosis. Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesObras morales y de costumbres (Moralia) IV Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesHimnos homéricos. La "Batracomiomaquia" Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Tragedias I Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Argonáuticas Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Fragmentos de la comedia media Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesFragmentos Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Proverbios griegos. Sentencias Calificación: 2 de 5 estrellas2/5Eneida Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Obras morales y de costumbres (Moralia) X Calificación: 2 de 5 estrellas2/5Obras morales y de costumbres (Moralia) III Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Mimiambos. Fragmentos mímicos. Sufrimientos de amor Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Sobre la naturaleza de los dioses Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Sobre la vida y poesía de Homero. El antro de las ninfas de la Odisea. Sobre los dioses y el mundo. Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesObras morales y de costumbres (Moralia) II Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Los filósofos presocráticos I Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Posthoméricas Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La naturaleza Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Diálogos. Apocolocintosis. Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPoesía y Filosofía de la Grecia Arcaica: Una historia de la épica, la lírica y la prosa griegas hasta la mitad del siglo quinto Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Diálogos Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Sobre las formas de estilo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Ejercicios de retórica Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Cuestiones naturales Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesRetórica a Herenio Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesAlejandra. La toma de Ilión. El rapto de Helena. Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesDiálogos III: · Fedón · Banquete · Fedro Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Testimonios y fragmentos. Retórica a Alejandro. Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesObras completas, XIX: Los poemas homéricos, La Ilíada, La afición de Grecia Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Ficción general para usted
Meditaciones Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El libro de los espiritus Calificación: 4 de 5 estrellas4/5100 cartas suicidas Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La Iliada: Clásicos de la literatura Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La Divina Comedia Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La Ilíada Calificación: 5 de 5 estrellas5/5¿Cómo habla un líder?: Manual de oratoria para persuadir audiencias Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La riqueza de las naciones Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Las 95 tesis Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Crimen y castigo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Mañana y tarde Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El mercader de Venecia Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La milla verde (The Green Mile) Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Poemas de amor Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Esposa por contrato Calificación: 3 de 5 estrellas3/5EL PARAÍSO PERDIDO - Ilustrado Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Arsène Lupin. Caballero y ladrón Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Las siete muertes de Evelyn Hardcastle Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La llamada de Cthulhu Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Crítica de la razón pura Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Rebelión en la Granja (Traducido) Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El verano en que mi madre tuvo los ojos verdes Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Fortuna Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Alicia en el País de las Maravillas & A través del espejo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Mitología Inca: El pilar del mundo Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Cuentos para pensar Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La casa encantada y otros cuentos Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Vaya vaya, cómo has crecido Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Sexópolis: Historias de mujeres y sexo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Civilizaciones Perdidas: 10 Civilizaciones Que Desaparecieron Sin Rastro. Calificación: 5 de 5 estrellas5/5
Categorías relacionadas
Comentarios para Sobre el estilo. Sobre lo sublime
1 clasificación0 comentarios
Vista previa del libro
Sobre el estilo. Sobre lo sublime - Demetrio
CAPÍTULO I
1. Así como la poesía está dividida en versos, como, por ejemplo, los versos cortos¹, los hexámetros y los otros, así también la prosa está dividida y diferenciada en los llamados «miembros» (kṓla)², que, por así decirlo, conceden reposo al que habla y al tema mismo; ponen límites en muchos lugares a lo que se dice, pues de otra manera el discurso sería largo e ilimitado y dejaría simplemente sin respiración al orador.
2. Estos miembros quieren señalar el final de un pensamiento, unas veces un pensamiento completo, como hace Hecateo³ al principio de su historia: «Hecateo de Mileto narra de la siguiente forma». Aquí un pensamiento completo es abarcado por un miembro completo y ambos terminan a la vez. Sin embargo, a veces, el miembro no concluye un pensamiento completo, sino una parte completa del total. Porque, así como el brazo, que es un todo en cierto modo, tiene partes, como los dedos y el antebrazo, que son a su vez ellos mismos un todo, desde el momento que cada una de estas partes tiene sus propios límites y sus partes propias, así también un pensamiento completo, cuando es grande, puede comprender en sí un número de partes que son en sí mismas también completas.
3. Un ejemplo lo tenemos en el principio de la Anábasis de Jenofonte⁴ desde «De Darío y Parisátide» hasta «el más joven Ciro». Todo forma un pensamiento completo. Cada uno de sus dos miembros son partes del mismo, pero dentro de sus límites cada uno comprende una idea completa. Así: «De Darío y Parisátide nacieron dos hijos». Este pensamiento está completo en sí mismo, es decir, que Darío y Parisátide tuvieron dos hijos. Lo mismo ocurre con el segundo miembro: «El mayor era Artajerjes, el más joven Ciro». De modo que, como yo sostengo, el miembro comprende totalmente un pensamiento, que es un pensamiento completo o una parte del mismo que forma un todo.
4. No hay que hacer los miembros muy largos, pues, en ese caso, la composición resulta pesada y difícil de seguir. Incluso la poesía, a no ser en raras ocasiones, no usa versos más largos que el hexámetro, pues sería absurdo que un verso no tuviera un final y que al terminar el verso nos hubiéramos olvidado de cuándo empezó. Pero, si los miembros largos no convienen a la prosa debido a su carácter pesado; tampoco convienen los miembros breves, ya que el resultado sería la llamada composición «árida», como por ejemplo: «la vida es breve, el arte largo, la oportunidad pasajera»⁵. La composición aparece desmenuzada y cortada, y no impresiona por ser todo tan menudo.
5. Algunas veces es apropiado el uso de un miembro largo, por ejemplo en los pasajes elevados, como cuando Platón⁶ dice: «A veces la divinidad misma guía la marcha de todo el universo y le ayuda a dar vueltas». Aquí la longitud del miembro se puede decir que contribuye a la elevación del pasaje. Es por esto por lo que el hexámetro es llamado heroico por su longitud y es apropiado a los temas heroicos. La Ilíada de Homero no estaría escrita de forma apropiada en los versos cortos de Arquíloco⁷, como por ejemplo:
Báculo triste
y
¿Quién trastornó tu mente?,
ni en los versos de Anacreonte⁸, como:
Trae agua, trae vino, muchacho.
Pues es el ritmo propio de un anciano ebrio, pero no de un héroe luchador.
6. A veces, por los motivos aludidos, un miembro largo puede ser apropiado; otras veces lo será un miembro breve, como cuando hablamos de algo pequeño. Jenofonte⁹, por ejemplo, dice del río Teleboas, cuando los griegos llegaron a sus orillas: «Éste no era grande, pero sí hermoso». Con la pequeñez y la ruptura del ritmo se pone de manifiesto al mismo tiempo la pequeñez del río y su belleza. Si, extendiendo la frase, hubiera dicho: «Éste por su tamaño era menor que la mayoría de los ríos, pero por su belleza los superaba a todos», hubiera perdido en naturalidad y tendríamos lo que llamamos un estilo «frío»¹⁰. De la frialdad, sin embargo, se ha de tratar más adelante.
7. En los pasajes enérgicos se pueden emplear también los miembros cortos. Pues es más vigoroso y más intenso lo que se dice en pocas palabras. Por eso los lacedemonios son concisos al hablar a causa de su vehemencia. Las órdenes se dan en un lenguaje conciso y breve, y todos los señores se expresan con monosílabos al dirigirse a su esclavo. La súplica, por el contrario, y la lamentación son prolijas. En Homero¹¹, las súplicas son cojas y rugosas debido a su lentitud, que es tanto como decir a su prolijidad, y los ancianos son prolijos debido a su