La Señora Yo

Por MARINA FERNANDOIS DE BALLÓN

Este libro, que ponemos en sus manos para consideracin de los amables lectores, es un gran aporte a las letras ya que mantiene el inters sin recurrir a escenas cargadas de violencia o de recursos forzados; ms al contrario estimula evocacin profunda y reconfortante. Logra que su lectura se haga sencilla y emotiva; lo que deja al final es una agradable sensacin de armona y paz. Este libro trae emotivas poesas, lo mejor de CASCABEL, lo mejor de Cartas a la Vida adems de encantadoras narraciones.

• Idioma: Español
• Editorial: Palibrio
• Fecha de lanzamiento: 16 dic 2011
• ISBN: 9781463314934

MARINA FERNANDOIS DE BALLÓN

MARINA FERNANDOIS DE BALLÓN, de nacionalidad boliviana, es una escritora que ha cultivado con éxito su afición a las letras en el campo de la literatura narrativa, poesía y humorismo. Se destacó como escritora del humor político en la prestigiosa revista boliviana “CASCABEL” bajo el seudónimo “YO”, durante la década del 1960. Publicó su primer libro “Cartas a la Vida” en 1992. En reconocimiento a sus logros, fue nombrada “La Boliviana de Oro”, por el Canal de Televisión UNITEL, La Paz, Bolivia, en diciembre de 2010. Tiene un amplio conocimiento de la naturaleza humana, y lo demuestra con gran acierto al escribir sobre temas tan variados e interesantes, que siendo ficción tienen un asombroso parecido con los hechos de la vida real, tan ricos en matices, que a veces supera toda fantasía.

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Contents

Reconocimientos

PROLOGO

(escrito por José Luque Medina)

Acerca de la Autora

LA REVISTA CASCABEL

COMO LO VEO YO

DEFINICIONES ACERCA DEL SERVICIO

DE COLECTIVOS

LA REVISTA CASCABEL

Los Tres Mosqueteros… Eran Cuatro1

EPÍSTOLAS

¿QUO VADIS?

ETERNO PROBLEMA

EL CUENTO DE UNA SILLA

OFRENDAS A UNA SILLA

DILEMA

EL PALACIO QUEMADO

SOÑAR NO CUESTA NADA

SI YO FUERA CANDIDATO

SI YO FUERA ALCALDE MUNICIPAL

VERSOS ABIERTOS AL SEÑOR ALCALDE

CARTA ABIERTA AL SEÑOR ALCALDE

CONTROL

HERENECIA

TURISMO

GIRA ELECTORAL

VOLVERAN

RETORNO

CARTAS DE ULTRATUMBA

CARTA ABIERTA

DESHAUCIO

DESVENTURAS DE UN DEPORTADO

LA SEGUNDA REPÚBLICA

UNA BURLA DEL DESTINO

COMO LLEGAR A SER CANDIDATO

COPLAS DE AYER Y HOY

SABADO INGLÉS

EL AGUINALDO

RINCON POETICO

RINCON POETICO

RINCON POETICO

RINCON POETICO

CARTAS AL DIRE

CARTAS AL DIRE

CARTAS AL DIRE

TELIFONITONTERIAS

TELIFONITONTERIAS

DEFINIENDO NUESTRAS ASPIRACIONES MARITIMAS

¡¡¡QUE GOBIERNEN LOS ANIMALES!!!

LOS EXTRATERRESTRES

LA POLITICA

LOS PARLAMENTARIOS

CUENTOS

UN CUENTO

FUERA DE SERIE

COMO LO VEO YO

ASÍ DE SENCILLO

MINI-COMEDIA

Las Aventuras del A.B.C.

POESIAS

LA JUVENTUD

DESPERDICIE MI VIDA

RENACER

QUIMERAS

TERCIOPELO NEGRO

FANTASEANDO

ANSIAS

FRAGMENTOS

LA COPA VACIA

CARTAS SIN DESTINO

VIDA Vs. AMOR

IN MEMORIAM

HOMENAJE AL CANTOR

TRISTEZA EN LAS MANOS

TANGO AMIGO

LA NOCHE TANGUERA

A MI MADRE

A LA MADRE

RECORDANDO AL VIEJO

CARTAS A LA VIDA

CUANDO LOS AÑOS PASAN

PACTO DE HONOR

Esmeralda

El Juicio

INSPIRACIONES

DEDICADAS A BOLIVIA

HACIENDO HISTORIA

TARDE ANDINA

HACIA EL MAR

AL MAESTRO RURAL

REFORMA

INSPIRACIONES DEDICADAS

A LA HUMANIDAD

AYER Y HOY

HACIA LA PAZ MUNDIAL

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A mis tres hijas que fueron mi inspiración. A mis nietos José Antonio y María Sarmiento, que son como hijos para mí. A mis nietos, bisnietos y tataranietas. También a mi hermana Yolanda y a mis queridos sobrinos Rony & Katya Guerra, Diana & René Gutiérrez con todo mi amor.

Reconocimientos

Sinceros agradecimientos a José (Pepe) Luque Medina, Director de la Revista Cascabel, estupendo artista; maestro, colega y amigo por su apoyo y colaboración durante los años de Cascabel y en la edición de este libro. Por su gran visión; por su afectuosa y magnífica contribución artística. La portada ha enaltecido esta obra y le ha dado el toque original y genuino de la verdadera "Cascabel". Pepe, un auténtico artista que en sus pinturas refleja una extraordinaria dimensión que alcanzan pocos. El pionero y fundador de esta leyenda que es Cascabel; quién mejor que el propio P.P. Luque, el cual con cada línea y cada pincelada nos transporta a un mundo de simpáticos recuerdos.

De igual manera, especiales agradecimientos a Eduardo (Lalo) Flores, dibujante de Cascabel, colega y amigo, principalmente por su gran aporte artístico en la edición de este libro. Cada una de sus caricaturas hechas con gran afecto y fantástico nivel artístico representan un valioso complemento a esta obra. Gracias también, por su generosa ayuda al brindarnos su colección de Cascabel. Sin su ayuda este libro no hubiera alcanzado su alta calidad y atractivo.

Agradecimientos a las hijas de la señora Yo; a José, David y Juan Sarmiento por su extenso trabajo de recolección de material, recopilación, trabajo de edición, revisión y formación de este libro que no hubiera sido posible sin la ayuda de cada uno de ellos.

Agradecimientos a la Sra. Nelly Fernandois de Guerra, hermana, y esposo, Jaime Guerra Muños, QEPD, por su apoyo moral y ayuda financiera que hicieron posible la publicación de "Cartas a la Vida" en 1992.

PROLOGO

(escrito por José Luque Medina)

La Señora Yo y yo

Empezaba la década del 60 del siglo pasado. Parecería con este introito que se trata de muuucho tiempo pasado, pero no, aún están frescos en mi memoria los tentadores olorcillos de las madrugadoras llauchas de la Loayza, de las salteñas de la Tokio al final de El Prado o de los chorizos a la chuquisaqueña de las Estenssoro, tanto que recordar y escribir esto son como latigazos de masoquista por lo que no abundaré más en los cientos de olores y sabores que guardo de mi lejana patria, como nunca olvidaré la música folklórica y criolla esparcida por sus calles, los murmullos bilingües de su gente hasta los molestosos fragores de los buses urbanos subiendo como garrapatas cansadas por los adoquines casi coloniales de la Ayacucho. Ha pasado un buen tiempo, sin duda, pero las buenas evocaciones, aunque faltos de detalles, siguen bailando en mi mollera, lo que es bueno para narrar esta historia que nunca fue escrita menos contada.

Eran tiempos críticos pero la atmósfera paceña estaba cargada de buenos presagios. Llegaba de Oruro con mi bagaje de experiencias como dibujante caricaturista con unas cuatro exposiciones de los notables orureños como cochabambinos y también como humorista, con una fama de haber sido parte de El Mosquito, una revista que en poco tiempo llegó a tener una circulación muy respetable, creada por don Enrique Miralles Borrecanere, mi mentor y maestro en este difícil género, aparte traía mi equipaje moral, la tremenda responsabilidad de recién casado y padre primerizo con una muchacha orureña que me acompaña felizmente hasta estos días.

Posiblemente Sipe Sipe, mi pueblo natal, encendió mi pasión por el arte, pero fue Oruro que a fuerza de estudio, golpes de frío, api con buñuelos o rostros asados los domingos el que forjó y templó mi carácter artístico, pero no me ofrecía ninguna meta como pueblo chico, de ahí la razón de llevar mis tereques y mis sueños a La Paz, cuna de caudillos y tumba de tiranos. Y lo primero que hice fue presentar una exposición de caricaturas con los personajes y trabajadores de la prensa escrita y radial. Todo un éxito publicitario porque de billetes casi nada, de ahí que no dejaba de rezongar mi compadre Manuel Díaz -¡Esto te pasa por meterte con periodistas patos! Creo que el propósito era realmente eso, conquistar la ciudad aún sea sólo con publicidad que, de todas maneras, era un buen comienzo. Justamente aquí conocí a Raúl Gil Valdez, el Rulo Vali que pronto sería mi socio de aventura. Ex caricaturista del diario La Patria, como yo, y también pupilo de Enrique Miralles. Él, junto a Oscar Lora (Arol) publicaban Ulupica una revista de humor de muy buena calidad donde llegué a colaborar, pero la revista cojeaba, no por el Rulo, sino por la falta de propaganda y el poco afán de los canillitas que mimetizaban la publicación nacional entre tantas otras extranjeras y estaba destinada, como muchas otras, al fracaso. El inicio de nuestra amistad puso frenéticamente en marcha la maquinaria de los sueños, en principio nos reuníamos en cualquier parte, preferible un bar con cervezas bien frías. Luego invadimos una pequeña oficina en pleno Prado, frente al cine Monje Campero, rentada por el che De La Rosa que hacía fotograbados y donde tenía su estudio Walter Morales, un gran dibujante de historietas. En un rinconcito, al que se sumó Daniel Villamil, el Villita, y uno que otro entusiasta de la gran idea, con el Walter incluido, empezamos a bocetar y a pergeñar una revista que hasta ahí no tenía pies ni cabeza, a pesar de estar tan saturados de ideas. Pues, chicos, hagamos una deportiva con puras caricaturas, los hacemos socios al Chichi Siles del Bolívar y al Rafo Mendoza del Strongest, vendemos los sábados y domingos en el estadio y tenemos la plata super asegurada, la plena, Pepito. –No, argüía otro, la verdadera plata está en el sexo, el morbo. Nos vamos a fotografíar a todas las estriptiseras del Maracaibo y otros night clubs, las publicamos en cuerotes con chistes y monitos y eso saldría como pan caliente. –Bah, replicaba otro, lo genial es estar a la moda, muchachos. ¡Fotonovelas! Con dramas, amor, sangre, sexo y humor bien picante… Mejor, hagamos una,,, Y la cosa no paraba. Yo venía con la lección aprendida en El Mosquito y mi intención era clara al respecto: Humor político y punto. Rulo Vali me apoyaba. Para el nombre surgieron muchas otras sugerencias pero Cascabel se posesionó al tiro. Por ahí alguien dijo: ¡Genial! Demostraremos cómo pica una cascabel… pero esa no era la idea. Tanto Rulo como yo, veníamos del pueblo que tenía el carnaval folklórico más grande del mundo y cada año, en esta fiesta, todo Oruro sonaba como un gran cascabel, de ahí el logotipo que creamos como un pepino carnavalero y más por esa idea que teníamos de la política y los partidos en manos de cuatro gatos politizados para quienes todo el año era carnaval y que de una buena vez habría que darles a estos marrulleros su buen chorizazo y ponerles su cascabel para que dejen de fregar la pita. Así, entre bromas y chascarillos, entre dimes y diretes, entre salud y salud con un San Pedro o unas bielas de por medio, en ese pequeño rincón de El Prado se gestó lo que sería la revista más emblemática del humor boliviano. Más el parto sería muy complicado

El Día D estaba marcado en el calendario del 60 para que salga a luz, diciembre, antes de la Navidad. Y trabajamos día y noche para ello con un gran refuerzo: Jorge Coco Flores Sempértegui, compañero de barrio, de estudios y correrías de arte allá en Oruro. Nuestra imprenta socia tenía problemas ya con el papel, ya con la fotomecánica o el quemado de las placas; el sistema offset tenía poco tiempo de establecido y sólo disponíamos de la impresora que era una Multilith, de ahí las dificultades. Y nosotros, a cambiar de fecha, a cambiar portadas, a reciclar los chistes navideños o del año nuevo o de Reyes y rehacer textos, empeñando hasta la camiseta donde el prestamista. Luego vendrían las impresiones, el proceso bicolor manual de las portadas y al fin, también a mano, el compaginado, el cocido y el refilado donde trabajamos todos hasta las primeras horas de la madrugada. Por fin había parido esa que parecía ser una gran mula. Era, mediados de enero del 61.

Nuevo viacrucis. Habíamos citado a los canillitas para distribuirles la revista en un lugar señalado, la Nueva América transmitía la publicidad que Raúl Salmón como buena gente nos había brindado. Eran las diez de la mañana y nadie se presentó. ¡Qué canallas los canillas! Protestamos y no nos quedaba otro camino que caminar y dejarles puesto por puesto. –Bueeno, habrá que probar, dejame diez…, —Si es al fío me dejas vente… —Vente otro día, hoy tengo mucha revista…, y así por el estilo. Nuestros ánimos cansados, más el peso de las revistas, se arrastraban por los adoquines de la Comercio, de la Santa Cruz hasta El Prado para rematar en el Pullman y emborracharnos con nuestros sentimientos encontrados, de triunfo por que lo logramos, de desilusión porque lo logramos. Hicimos nuestro juramento de rigor de seguir en la batalla, chocamos nuestras copas y ¡cerveza para todos!

Una vez superado el ch’aquí nos empeñamos a fondo en el Nº 2 y a repetir la odisea en la imprenta, algo más duchos pero igual de sufridos cuando fuimos donde los canillas, puesto por puesto, a dejar revistas y hacer cuentas; canjear las nuevas por las no vendidas y esta vez ya no existía el ánimo ni el optimismo, sabe Dios dónde se irían, éramos nosotros los tirados en plena calle, donde los transeúntes se daban el gusto de pisarnos. Nos devolvieron casi mil de un tiraje de 1.500. Llegamos rodando a la cantina más cerca y salud, por las penas y salud, por el círculo vicioso; con tres botellas en el coleto nos olvidamos de todo y… otra vez a soñar, a escribir y dibujar el tercero. Así fueron los números siguientes, no nos rendimos pues no queríamos el destino de Ulupica y el amor propio nos hizo sobrevivir, un amor propio con una mano adelante y la otra detrás, pero muchas cosas habían cambiado. Éramos ya todo un equipo, al fiel Villita se sumaron Clovis Díaz, Oscar Arol que tenía un ojo clínico para las muchachas lindas y le encargamos la sección Sirenas, Fidel Veramendy Pica-pica y el benjamín de la familia Ricardo Frías Rifrico, ganador varias veces de la página del colaborador e invitado a trabajar en el staff y el capo del humor escrito Coco Manto. Algún tiempo después se integrarían Lalo Flores, Julito Arce, Abraham Quiroz Quirito, Tenors, Rubén Mallea, Jorge Villanueva Villas y las colaboraciones eventuales de Ricardo Pérez Alcalá Cardo, maestro de la acuarela y buenísimo para la caricatura como lo es Pedro Shimose, gran poeta. Rulo hacía de gran caporal y los tenía a raya con su lengua irónica como fuete. Desde el cuarto número presentamos las tapas a todo color, logramos resolver la distribución con Difusión" de Oscar Crespo y Jorge Catalano que pusieron en vereda a los canillas que ya no se hacían rogar, ahora rogaban con plata al contado. La circulación oscilaba en poco menos de los diez mil ejemplares, aunque las salidas fueron siempre algo irregulares pues era la única revista semanal que salía cada quince días de mes en cuando. Hasta aquí, el Nº 13, era ya toda una hazaña y ninguna revista que se sepa había durado tanto, con circulación que crecía en todo el país, que llegaría a los 25.000 como normal y en muchas circunstancias a los 45.000 ejemplares, pero eso fue algún tiempo después.

Trabajábamos esa tarde el próximo número a puerta cerrada para evitar fisgones o acreedores y para no hacer trascender la chacota que dominaba, como debía ser, en una oficina que vivía de la chacota. Sentimos unos golpes en la puerta y el silencio… -Aguanta, que puede ser el casero… o el Control Político (ya habíamos tenido dos experiencias). -¿Quién es? -Yo. -¿Y quién es yo?, preguntamos. -Yo misma, la que ganó el concurso en la página del colaborador… -Ahh… respiro de tranquilidad. Al abrir la puerta una hermosa dama, bien plantada y acompañada de otra hermosa niña hacían su ingreso al santuario del humor. –Buenas tardes, señores, vengo a agradecer el premio y conversar con el director por la gentil invitación que me hicieron para ser su colaboradora… -Pasen ustedes, el director las va atender… Y pasaron por el frente mío y se dirigieron donde Rulo, que tenía más pinta de director, Rulo corrigió y me señaló. –Oh, disculpe, -media sonrojada- pensé que era el hijo del director… -Yo, yo… -totalmente sonrojado con mi cara de chiquillo- yo soy Pepe Luque. Y usted es Yo, mucho gusto, es un placer. Muchachos, ella es Yo, la señora Yo, (presentándola) es un grato honor recibirla, nos encantó sus Definiciones sobre el servicio de colectivos (Lo que seguía era una especie de juramento cascabelero). A partir de este momento será una colaboradora oficial de esta revista. Tendrá que adaptarse a todas las vicisitudes y peligros que conlleva ser parte de esta revista, como trabajos horas extra, falta de remuneración mensual y el constante riesgo de ir a dar con los huesos en la cana. ¿Acepta? Ella, visiblemente emocionada sólo atinaba a decir:

-Yo, yo…

Así, en ese marco de caras estupefactas y babosas de mis colaboradores ante la lindura de la Señora Yo, se incorporaba al equipo de irrespetuosos que vivían del puro chiste. Rulo Vali siendo el más conservador de la thojpa, no se convencía y mascullando algunas frases decía, -Bah, dónde se ha visto mujeres escribiendo humor, ay, Dios, ¡en qué mundo estamos! Mientras todo el mundo festejaba la incorporación de Doña Marina Fernandois de Ballón, la Señora YO.

Ciertamente, toda Bolivia festejó su agudeza en tomar temas álgidos, su ironía y chispa para tratar los problemas y versificarlos combinando con las rutinarias labores de la casa. Trataba de imaginar, al ilustrar la portada, cómo se las ingeniaba para que no faltara la sazón en el puchero ni la sal en sus versos. Simplemente, fantástica.

Yo y los miles de lectores de Cascabel de un tiempo ya concluido, nos congratulamos de haberla tenido entre los ingenios, mis colaboradores, y haber quitado horas amargas y tristes a un pueblo que vivió momentos difíciles para suplirlas con sonrisas, risas y hasta con carcajadas. Por el trabajo y la dedicación de ellos Cascabel pudo constituirse en el más grande referente histórico del periodismo humorístico de Bolivia y Marina Fernandois de Ballón, la Señora Yo, es parte de esta historia, de esta gloria.

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Puntos No Olvidados: Mención especial merecen dos colaboradores importantes en otra etapa importante: Juan Alfaro Juancho y René Rosquellas Roque, que junto a Rifrico y Rulo Vali eran un motor fórmula 1. Mi homenaje profundo a los que partieron y dejaron su huella impresa en las páginas de Cascabel y en los corazones de los que los conocieron, el Prof. Daniel Villamil Villita todo un personaje por su chispa y fidelidad, el primero en abandonarnos y Raúl Gil Valdez, que de gil nunca tuvo nada, mi socio, mi aparcero y camarada, mi mashi que en algún lugar, arriba o abajo, debe estar haciendo de las suyas.

Aprovecho también para hacer llegar mi gratitud eterna, donde sea se encuentren, a esos grandes amigos y amigas que nos apoyaron con todo y desinteresadamente, tal vez no exista otra oportunidad para llenar este espacio en blanco: Javier Arce Villalba, Armando Soriano Badani, Carlos Cassígoli, Gonzalo López Muñoz, Floren Sanabria, Bertha y Martha Alexander, Oscar Crespo, Jorge Catalano, Freddy Alborta y hermano y… sé que hay muchos más pero la memoria me patina. Disculpas.

Guayaquil, Ecuador, Diciembre de 2011

Homenaje

En la revista Cascabel del humor político, "La Señora Yo, brilló con luces propias en su columna Rincón Poético"

¡Qué dilema tan grande

se presenta en mi vida…!

Estoy en un callejón

y no encuentro salida

a inscribirme a un partido

obliga la hora actual

pero si no le acierto

me será fatal…."

¿Qué tal? Para muestra un botón.

En estas breves líneas, rindo homenaje a Marina Fernandois de Ballón Señora Yo, única mujer escritora humorista en el medio boliviano, no conozco otra; por la versatilidad que plasmó en decenas de composiciones con gran chispa y grato humor. Ni qué decir de sus versos La Juventud, Desperdicié Mi Vida, La Copa Vacía, Terciopelo Negro Fantaseando que muestran la riqueza interior de su espíritu inquieto. Marina Fernandois de Ballón es un precioso modelo para las nuevas generaciones. Para mí es un privilegio y una bendición el ser parte de esta liga de humoristas que marcó historia en Bolivia. Me uno a sus hijos en este homenaje bien merecido a una mujer de incomparable trayectoria.

Lalo Flores M. Colega de la Revista Cascabel

Las hijas de La Señora Yo con orgullo rendimos homenaje a una madre excepcional. Homenaje por la forma recta en que ha conducido su vida; por su calidad humana que se refleja en sus escritos. Las hijas somos las verdaderas privilegiadas pues hemos disfrutado de cerca su carrera como escritora. Una mujer, amena, simpática, elocuente que ha enriquecido nuestras vidas con su sabiduría y por su amor al dedicarnos su mejor poesía La Juventud.

Sinopsis del prólogo escrito por el escritor señor Armando Soriano Badani en Cartas a la Vida, 1992.

"Cartas a la Vida", comienza con una original trama epistolar suscitada por la ficción sembrada de reflexiones reveladoras de riqueza interior. La carga emocional en las cartas, es su rastro distintivo, que fluye del fondo de las meditaciones sugerentes. Las cartas de primavera, verano, otoño e invierno, encumbren con su contenido sugerente los diversos momentos cronológicos de la vida con el aliento del consejo moralizante orientador o el reflexivo análisis inductor de una conducta.

Las composiciones de diversa dirección temática como "Pacto de Honor, Cuando los años pasan", "Esmeralda, El Juicio" mantienen la nota común de una narración equilibrada, uniforme y correcta, a pesar de la ausencia de un esclarecido nivel estilístico, que adviene solamente con la reiteración creadora.

El curso de las circunstancias de la fabulación no se resume en un núcleo de acción, siguiendo por el contrario la corriente difundida de narraciones animadas por el desarrollo de tramas, enlazadas por la casualidad. Así las composiciones propician diferentes matices ganando un colorido narrativo que favorece la riqueza expresiva.

La proyección de la intriga completa acertadamente el cuadro de la creación desarrollada con ribetes realistas, aunque hay también composiciones de acento fantástico que mitigan el impulso de la intención realista. Augurándole un grato futuro intelectual.

Armando Soriano Badani, 1992.

La autora de Cartas a la Vida para mí es una verdadera genio, 1996.

Sóila Estrada De Porta

Escritora Guatemalteca

Acerca de la Autora

Marina Fernandois (Casaigne) de Ballón, nació el 26 de abril de 1920 de padres de origen francés. Se crió en un hogar de medianos recursos en un ambiente de respeto, de moralidad y libre de todo vicio. Su padre, dedicado a su familia, a su arduo trabajo y a mantenerse al tanto de los eventos mundiales, es tal vez una de las razones de su pación por las letras y su sed insaciable por el conocimiento en general, especialmente de la literatura en todas sus facetas. Ella guarda en su memoria como uno de sus mejores recuerdos de su niñez las colecciones Tesoro de la Juventud y "Las Mil y Una Noches", un regalo de su padre para ella y sus cinco hermanos que con los años memorizó y transmitió a sus hijas y nietos.

Marina no tuvo la oportunidad de continuar sus estudios a nivel superior, sin embargo, esto nunca la frenó. Ella no dejó de auto-instruirse mediante libros, periódicos, revistas y todo lo que llegara a sus manos. Marina es dotada de una memoria envidiable, un gran sentido de observación, gran elocuencia, compasión y una insaciable sed de aprender; esto ha dado el resultado de la escritora que es hoy en día.

Marina contrajo matrimonio el año 1942 con el Sr. David Ballón Sanjinés. En la actualidad tiene 3 hijas, 9 nietos, 17 bisnietos y dos tataranietas. Su vida fue dura y tuvo que luchar mucho por su familia. Como ella lo expresa: He vivido muchas cosas en mi propia vida y en la historia de Bolivia, patria que amo; decenas de revoluciones y presidentes y también la Gran Depresión de la década de 1930 y comienzos de 1940. Esto incluye la Insurrección del 21 de julio de 19461 y desenlace de violencia y desesperada lucha social: La caída de Gualberto Villarroel con quien colaboraba el MNR. Varios levantamientos habían intentado ya derribar a Villarroel hasta que lograron su caída por medio de un movimiento popular que produjo una hecatombe política sin precedentes el 21 de julio de 1946. El presidente Villarroel y numerosos de sus colaboradores fueron asesinados y bárbaramente colgados de los faroles de la plaza Murillo de La Paz.

Marina siempre con su pluma y papel expresando sus sentimientos y su humor a través de los años, robando momentos inclusive a sus tareas del hogar para poner sus ideas por escrito. En la década del 60 colaboró con la célebre revista "Cascabel". Durante estos años ella disfrutó enormemente ya que hacía lo que más le gustaba y el resultado fue un gran número de artículos humorísticos de gran aceptación. Lo simpático de su carrera como escritora de esta revista fue que eligió el seudónimo YO. Como en esa época era poco común una mujer humorista, los lectores, estaban seguros que se trataba de un escritor y no una escritora. Lo anecdótico fue el día en que Pepe Luque, el Director, publicó "El Tomo de Navidad de Cascabel, incluyó las fotos y biografías de cada uno de sus colaboradores. Esta revelación causó un gran revuelo entre los lectores y los colegas del rubro; YO" era una señora y no un señor.

Al cierre de la revista, Marina continuó escribiendo esporádicamente y en 1992, con la ayuda financiera de familia, publicó su libro "Cartas a la Vida", un libro de narraciones que reflejan sus propias experiencias.

Después de la publicación de este libro, Marina continuó con su inquietud de escribir acerca de temas de historia nacional y universal. Decidió emprender la tarea de escribir lo que ella nombró "El Súpersabio", al momento inédito. Se trata de una enciclopedia de referencia, que ya cuenta con 36 Tomos cuidadosamente catalogados; ricos en información y gráficos; cuenta con temática global, las maravillas del mundo y mucho más. Como ella señala: "Estoy escribiendo "El Súpersabio puesto que no puedo dejar a mis nietos y bisnietos sin regalarles todo lo que he aprendido a través de mis años. Vale aclarar que Marina, nunca ha tocado una computadora y no hace uso del internet; el contenido de "EL Súpersabio", en su totalidad, viene recopilado de todo lo que ella ha leído, ha escuchado y ha investigado.

Marina Fernandois de Ballón, fue nombrada Boliviana de Oro por el Canal de Television UNITEL el 2010, en reconocimiento a sus logros. Además, fue sujeto de una entrevista por Alejandra Pau, "Mujeres de Acero en el Trabajo y las Ideas Después de los 85 Años", Sección: Gentes y Lugares, Página Siete, diciembre 27, 2010.

Este libro "La Señora Yo", es un compendio de sus escritos que presenta su lenidad al escribir que no se limita al campo narrativo; al contrario se extiende al campo humorístico y poético.

Nancy Alcira Ballón

1 C.E.I.P León Trotsky. La Revolución Derrotada. Boletín No 5, diciembre 2003.

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LA REVISTA CASCABEL

Revista del humor político creada y dirigida por José (Pepe) Luque Medina y Raúl Gil Valdés (Rulo Vali) en La Paz, Bolivia 1961.

Pepe Luque y Rulo Vali, excelentes humoristas gráficos, hay que reconocerlo, fueron los pioneros del género de humor político en Bolivia.

Lalo Flores, dibujante de Cascabel, octubre 2011.

La Revista Cascabel del humor político. La revista más importante de Bolivia. -Todohistorietas.com, 2009-

Revista humorística Cascabel, revista que marcó un hito en la historia del periodismo humorístico boliviano. Pepe Luque, Director

Al humor como a la guapa, hay que servirlo por los ojos, saborearlo en el espíritu y digerirlo en el recuerdo.

Extracto de la introducción del primer editorial de la célebre revista. Y continuaba: Los mejores dibujantes, los mejores escritores, la mejor conducción técnica y gráfica, conjuncionados en un jarabe de humorismo, tonificante de nervios y restaurador de hígado. Cascabel, tomo No 1, enero de 1961.

Las páginas de Cascabel fueron la cuna y vitrina de una generación de dibujantes humoristas y caricaturistas como, Pepe Luque, Rulo Vali, Villita, Coco Flores, W. Morales, Pica-Pica, Lalo Flores, Rifrico, Villas, Rema, Quiríto, Julio Arce, Juancho y Clovis Díaz. También de escritores, como Jony Pepino, Rulo Vali, Coco Manto, y la señora Yo.

Lalo Flores, dibujante, octubre 2011

Los componentes de Cascabel con el paso de los años han volcado sus aptitudes hacia diversos campos del arte y del periodismo. En especial Pepe Luque que se ha convertido en un célebre pintor, actualmente radica en el Ecuador.

El Diario, 12 de septiembre de 1993, La Paz, Bolivia

Dentro de los premios que conserva a su favor el pintor boliviano Pepe Luque, se encuentra el Primer Premio en la Segunda Bienal Nacional de Acuarela 2006, en Ambato, con la obra Pensamientos; además de la condecoración otorgada por el Congreso Nacional Vicente Rocafuerte al Mérito Artístico Cultural.

Johanna Cedeño – Expresiones Ecuador, septiembre 5, 2011.

Pepe Luque y la Acuarela

Pepe Luque tiene esa virtud imprescindible del acuarelista, ser un gran dibujante. Y en más de una oportunidad, en revistas y periódicos, ha demostrado sus dotes de caricaturista, produciendo figuras llenas de firmeza en el trazo y de un desbordante humor. Hay que agregar además, que él es producto de una gran tradición de acuarelismo boliviano que es, sin lugar a dudas, el más importante en nuestro continente.

Expreso Ecuador, septiembre 13, 2011

Escaparate de esta generación, la revista Cascabel dirigida por José Luque Medina, que alcanzó medio centenar de números en la década de los 60, es según coincidencia general, la publicación que significó el origen de la historieta como género en Bolivia, ya que además de mostrar las clásicas caricaturas de prensa, dio espacio para que los creadores expongan sus primeras experimentaciones de personajes y tiras cómicas en cuadritos

Periodista Martín Zelaya Sánchez, Cómic made in Bolivia,

Los Tiempos.com. Sep. 5, 2009.

Creo que el mítico Cascabel se puede mencionar como el inicio real de lo que ahora se define como cómic, porque aunque todo estaba supeditado a la sátira política, la mofa a los políticos y autoridades, fue ahí donde surgieron historietas con temáticas y personajes definidos. Julio Arce, dibujante de Cascabel, Cómic made in Bolivia, Los