historias de Pasiones

Por Camila Winter

Antología de dos historias breves: 1 El heredero Mac Intoch , y Pasión en Norfolk.Dos cuentos ambientados en el siglo XIX: El heredero mac instosh: una joven acaba de casarse y de comprender que su esposo ha desaparecido y viaja a las highlands a buscarlo... Y descubre una verdad que había sospechado y debe tomar una decisión que cambiará su vida para siempre.

2- Pasión en Norfolk, Ambos temían padecer ese amor enfermizo que se había cobrado muchas vidas en el país y en el continente: un amor atormentado sin esperanzas que arrojaba a sus víctimas al suicidio.
Kenth Derrigham era un joven heredero del condado de Norfolk: guapo, orgulloso y reacio al matrimonio.
Victoria Winston, una joven mimada que había vivido recluida en su mansión de Hampshire hasta ese momento.
El destino y los planes casamenteros de la tía del joven los unieron una tarde frente al lago de la mansión de Richmond.
Un cuento sobre el amor y el miedo a amar en los tiempos del romanticismo.
Ellos temían padecer "la locura amorosa", una plaga entre los más jóvenes y la causa de muchos suicidios, pero descubrieron que era demasiado tarde para poder escapar.

Autor Biografía
Camila Winter es una prolífica escritora del género romántico histórico, y del romance gótico-paranormal. Ha publicado varias novelas en amazon, entre ellas la saga regencia oscura y Laberinto de Pasiones.
Estudiante de periodismo e investigadora histórica, ha escrito varios artículos de historia en su blog.
 

• Idioma: Español
• Editorial: Camila Winter
• Fecha de lanzamiento: 9 feb 2014
• ISBN: 9781498928410

Camila Winter

Autora de varias novelas del género romance paranormal y suspenso romántico ha publicado más de diez novelas teniendo gran aceptación entre el público de habla hispana, su estilo fluido, sus historias con un toque de suspenso ha cosechado muchos seguidores en España, México y Estados Unidos, siendo sus novelas más famosas El fantasma de Farnaise, Niebla en Warwick, y las de Regencia; Laberinto de Pasiones y La promesa del escocés,  La esposa cautiva y las de corte paranormal; La maldición de Willows house y el novio fantasma. Su nueva saga paranormal llamada El sendero oscuro mezcla algunas leyendas de vampiros y está disponible en tapa blanda y en ebook habiendo cosechado muy buenas críticas. Entre sus novelas más vendidas se encuentra: La esposa cautiva, La promesa del escocés, Una boda escocesa, La heredera de Rouen y El heredero MacIntoch. Puedes seguir sus noticias en su blog; camilawinternovelas.blogspot.com.es y en su página de facebook.https://www.facebook.com/Camila-Winter-240583846023283

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Historias de Pasiones

Camila Winter

Libro de relatos románticos de otros tiempos

Índice o tabla de contenidos

Historias de Pasiones

Camila Winter

1.El heredero Mac Intosh

Camila Winter

2. PASIÓN EN NORFOLK

1. El heredero Mac Intosh

Camila Winter

Prefacio

El presente relato fue seleccionado y forma parte del libro La mujer Suave de ediciones Rubeo publicado en junio de este año.

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El viaje había sido cansador, agobiante y la recién casada (sin su esposo) llegó al castillo Mac Intosh, en las Highland con un mohín de disgusto pintado en su bello rostro, diciendo una y otra vez:

—¡No puede ser! —en inglés y en francés pues su nana francesa se lo había enseñado y esta, que la acompañaba miraba todo con disgusto.

Harriet se asomó por la ventanilla del carruaje para descubrir un castillo en ruinas, rodeado de un hermoso bosque en el cual sencillamente no podía vivir nadie.

Miró a su vieja nana Marie, mitad francesa, mitad inglesa, que aún hablaba con acento y usaba expresiones francesas como pas posible, ¿qué broma es esta? La fiel nana que había criado primero a su madre y también a ella, pero amaba tanto a su madre francesa que nunca había aprendido el inglés correctamente y su jerga era una mezcla de ambos idiomas.

Esto no disgustó en absoluto a la familia Wellington, todos apreciaban sinceramente a la anciana dama y consideraban su lenguaje original, florido y muy a la moda de entonces. Tener una criada francesa, una modista y un vestido francés chic, elegante, era un signo de distinción y los Wellington no desdeñaban en absoluto la situación, sino que sacaban provecho de ella.

El compromiso de su hija sin embargo, con el heredero Mac Intosh fue la excepción a la regla. Pero es que ¡Harriet había insistido tanto! Y ambos parecían tan enamorados y eran una pareja tan encantadora, que los padres de la joven accedieron al cortejo y luego a la boda. ¡Y qué boda tan magnífica!

Harriet Wellington llevaba un vestido blanco con un corsé bordado: una toca larguísima, el velo de una extensión pavorosa. Una novia hermosa, feliz, dichosa al extremo de haber podido casarse con el hombre de sus sueños. Andrew Mac Intoch era la viva imagen del joven guapo, educado y de noble estirpe escocesa. Sus propiedades atravesaban gran parte de las tierras altas, un castillo del siglo XV, sendos campos donde pastaban animales, una granja y otros negocios en la ciudad de Edimburgo.

La familia del joven estaba compuesta por una madre viuda, poco agraciada y una tía solterona pues lord Mac intosh había fallecido hacía tiempo. Para la imponente Anne Wellington y su marido fue suficiente. No era lo que habían soñado para su hija por supuesto, pero un heredero escocés no era poca cosa.  Además era un joven desinteresado y no hubo problemas con la dote, que era por sí generosa.

Lo único cuestionable fue que su hija fuera a vivir a las tierras altas. Quisieron convencer al joven para que aceptara vivir en una propiedad de la familia en las afueras de Londres pero este no aceptó. Tenía responsabilidades en Escocia, ineludibles por supuesto y debió marcharse enseguida, luego de la boda. Harriet viajaría días después con su suegra, pues al parecer había un problema impostergable en Edimburgo...

Pero la viuda Mac intosh no pudo acompañarla, y se quedó en Londres pues había pillado un resfriado y fue el comienzo de una serie de dificultades.

El viaje en tren fue incomodísimo, lleno de contratiempos. Tormentas de viento, lloviznas y cuando finalmente vislumbró las propiedades de su marido su desaliento fue total.

—No debimos venir, mademoiselle —repitió su nana.

Harriet no había soportado más estar lejos de su amado Andrew, ser una esposa sin marido, en la casa de sus padres hasta que este fuera a buscarle. No había respondido sus cartas (que seguramente tardaban demasiado en