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Playa de fuego
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Libro electrónico56 páginas37 minutos

Playa de fuego

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En Playas de Fuego el mar no habla la lengua de los muertos. El mar representa la clausura de la palabra, el espacio donde queda encerrado el discurso, constituyéndose solo como el reflejo y rebote del cielo, pura ilusión. En la poesía de Bárbara, el mar es el espacio de la indistinción, un desierto de la palabra, la mudez absoluta. La muerte no es la física, sino la muerte de la voz. El aliento se expande en la superficie y desaparece semejando el movimiento de las olas en la orilla. Borrando todo rastro.
IdiomaEspañol
EditorialAlquimia
Fecha de lanzamiento2 ene 2017
ISBN9789569974335
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    Playa de fuego - Bárbara Délano

    BÁRBARA DÉLANO

    PLAYAS DE FUEGO

    UUID: 0065f970-00bc-11ea-ab19-1166c27e52f1

    Este libro se ha creado con StreetLib Write

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    PLAYAS DE FUEGO

    BÁRBARA DÉLANO

    N. del E: Todas las ediciones que existen de Playas de Fuego son póstumas. Nunca sabremos con exactitud la data y contexto de su escritura. Tampoco si existió un borrador definitivo o lo que podemos leer son sólo bocetos que, con el paso del tiempo, volverían esta alucinante obra el tercer libro de poesía de Bárbara Délano. Un poema torrentoso que, leído veinticinco años tras su escritura, sorprende por la contemporaneidad de sus versos, que generan la crispación en la espina dorsal.

    Para la composición de esta edición nos hemos basado en la fijación de textos correspondiente a Cuadernos de Bárbara (Galinost, 2006), volumen recopilatorio realizado por la madre de Bárbara, María Luisa Azócar, publicado como conmemoración a los diez años de su muerte. Para la diagramación, nos hemos guiado en la versión editada por Gonzalo Cordero que apareció en el sello Dolmen el año 1998. La decisión se basó en la separación y espacios en blanco que existe entre versos, los que generan una temporalidad de lectura afín al poema. Hemos incluido una semblanza biográfica escrita por Carolina Melys especialmente para esta edición; y rescatado los textos que escribieron sobre Bárbara sus colegas y amigos Pablo Brodsky y Malú Urriola.

    Los muertos no nos rehabilitarán.

    Tadeusz Rózewicz

    He regresado para sentarme

    como una vieja se sienta a la orilla de las lamentaciones
    y hunde sus dientes contra una piedra

    para no hablar

    para no hablar ya más

    y dejar que el mar susurre su voz de nieve ardiente

    He vuelto a este rincón enfermo

    donde me obligan a tragar una hostia mancillada

    por las bocas que dijeron todas las mentiras

    Entonces veo desfilar en el caleidoscopio del agua
    las grandes y pequeñas traiciones

    bajo el delirante sol de febrero

    Allí están los que osaron aspirar eternidad
    sin pedir permiso para entrar en la Historia

    comieron carne ajena e invadieron casas

    donde alguien oraba en secreto

    Luego se sentaron en la sala

    pidieron café y cigarrillos

    Y allí estamos nosotros

    Insomnes mudos los rostros

    sin orillas flotando sin destino

    tratando de ver a Dios en la tierra de nadie

    Porque todo lo que se pierde va a dar al mar

    me tiendo en el borde

    para oír a mis hermanos muertos

    Puedo ver en la ciudad desierta

    a mujeres que amontonan cachureos en los patios

    pequeños objetos que se pudren

    La trivialidad del poder atraviesa

    civilizaciones de sangre

    para luego ofrecer té y cuidar de los heridos

    Puedo verte

    danzando sin cabeza

    desnudo sobre las olas llameantes

    moviendo apenas los labios

    los dedos apuntando hacia arriba

    donde los pelícanos baten sus alas mudas

    La ciudad una botella soplada por un viento

    pútrido

    se hincha

    Y a través solo veo muertes solapadas

    por todas las mentiras dichas para robarnos a Dios

    para hacer de nosotros buenos chicos chicas listas

    Quieren ponernos las cosas difíciles te dije

    considerando que las palabras ya no designan

    objetos ni situaciones

    sino relaciones lingüísticas

    dejándonos

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