Ansiedad Social, Fobia Social: Cómo Afrontar La Mirada Del Otro Para Vencer El Miedo A Ser Evaluado O Avergonzado. Sanar Tu Pasado Para Impactar En Tus Relaciones Personales

Por Javi Martínez

¿Te sientes limitado por la ansiedad o temes las interacciones sociales? ¡No tienes que enfrentar estos miedos solo!

Con Ansiedad Social, Fobia Social, un libro cristiano revolucionario, aprenderás a superar tus miedos y a mejorar tus relaciones personales. Con consejos prácticos y estrategias efectivas para enfrentar y superar tus miedos, este libro te guiará en el camino hacia una vida más plena y significativa.

Con temas que van desde el miedo a ser observado hasta el comportamiento evitativo y la importancia de la consejería y el acompañamiento, este libro aborda los desafíos que enfrentan las personas con ansiedad social y ofrece soluciones efectivas para superarlos.

 

• Descubre cómo superar la ansiedad social y tener relaciones sanas.
• Aprende a entender la ansiedad y a salir de tus limitaciones.
• Deja atrás el miedo a ser observado y evaluado.
• Aprende a manejar el miedo al juicio y la humillación.
• Supera el miedo a hablar en público.
• Deja de fantasear y pelear en tu mente.
• Descubre cómo el comportamiento evitativo limita tus relaciones.
• La importancia de la consejería y el acompañamiento para superar la ansiedad.
• Cada capítulo contiene preguntas de reflexión para profundizar en tu proceso de cambio.
• Contiene oraciones en cada sección que te ayudarán a contar con la intervención de Dios en el proceso.
• Descubre cómo sanar tu pasado y tener una vida plena y libre de ansiedad.

Este libro ofrece nuevas estrategias y consejos prácticos para superar la ansiedad social y fobia social. La inversión en tu salud emocional y es necesaria. Los consejos son aplicables a una amplia gama de situaciones.

Si deseas comenzar tu camino hacia una vida social más plena y satisfactoria, adquiere "Ansiedad Social, Fobia Social" hoy mismo.

• Idioma: Español
• Editorial: Javi Martínez
• Fecha de lanzamiento: 31 mar 2023
• ISBN: 9798215325377

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Escritor: Javi Martínez

© 2022. Oración Publicaciones. Todos los derechos reservados.

A menos que se indique lo contrario, todas las citas bíblicas han sido tomadas de la versión Santa Biblia, Reina-Valera 1960, RVR.

© 1960 Sociedades Bíblicas en América Latina.

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INTRODUCCIÓN

Nacimos para las relaciones

Se ha escrito mucho sobre la ansiedad y también sobre la ansiedad social. Existen muy buenos materiales y tratamientos con un pronóstico muy positivo. Aunque cada vez hay más materiales dirigidos al público en general que pueden ser entendidos por cualquier persona, he escrito este nuevo material enfocándome en la sencillez y brindando pequeñas soluciones prácticas que puedan ayudar a reducir la ansiedad en situaciones sociales.

Al leer la Biblia, encuentro que Dios dice: No es bueno que el hombre esté solo (Génesis 2:18). En esa afirmación de Dios, encontramos que Él pensó nuestra dimensión social de maneras mucho más profundas de las que solemos considerar. Si había algo que no era bueno en el paraíso, era que el hombre estuviera solo. La ansiedad en las relaciones personales nos hace sentir un constantemente peligro o miedo ante el encuentro con el otro. Sumado a la soledad y el aislamiento que producen el ritmo vertiginoso de las grandes ciudades y la despersonalización, dificultan que quien padece ansiedad social logre desarrollarse de manera satisfactoria.

La primera interacción que hizo daño

Las relaciones humanas son una parte fundamental de nuestra naturaleza, ya que fuimos diseñados para la conexión. Solo podremos tener una vida plena si tenemos una buena calidad en nuestras relaciones.

Originalmente, la experiencia con los demás estaba diseñada para ser una experiencia de amor, aceptación y validación. En el principio de la humanidad, no existía la posibilidad de que alguien dañara a otra persona. Todas las interacciones habían sido pensadas por Dios para la afirmación interior, el desarrollo personal y el cumplimiento de proyectos sin intenciones egoístas. Simplemente, era bueno relacionarse con los demás.

La primera interacción comenzó a ser dañina cuando Eva comió del fruto prohibido y luego le convidó a Adán. Esta interacción fue mortal. Aunque parecía ser buena, ya que Eva estaba compartiendo lo que tenía a Adán, en realidad era una trampa mortal. El miedo más profundo que subyace en la ansiedad o fobia social es ese miedo primitivo a que la interacción con los demás nos pueda matar. La ansiedad, en algunos casos, elabora argumentos muy profundos e irracionales acerca de por qué debemos protegernos de los demás y cómo ellos representan una amenaza para nosotros. Aunque el entorno no muestre señales de peligro, en nuestra mente percibimos que puede haber un peligro oculto del cual no podemos protegernos. En sentido figurado, pensamos que otras personas pueden darnos de comer del fruto prohibido causándonos un mal del cual no podemos recuperarnos por nosotros mismos. Las alarmas internas suenan. La sirena de peligro pone a todo nuestro ser en alerta. Nuestra manera de procesar el mundo nos ha dicho que el otro es peligroso y nos cuidamos por si alguna de esas interacciones resulta ser mortal.

La restauración de la manera de relacionarnos

En el nuevo pacto, Dios nos ha dado un nuevo corazón con la forma de nuestro diseño original. Aún no se ha manifestado por completo esta nueva naturaleza mediante la cual Dios nos ha hecho parte de una nueva creación restaurada. Es cierto que todavía tendremos interacciones semejantes a las de la naturaleza caída, pecando contra otros mutuamente. Sin embargo, poco a poco quienes estamos siendo moldeados y trabajados por el Señor manifestamos el amor a Dios y el amor a otros.

Quienes están siendo restaurados muestran el amor en todos los ámbitos de su vida. En sus familias aman a su cónyuge, viven lo dice el texto bíblico: Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella (Efesios 5:25). No conducen la crianza de sus hijos para que exploten o tengan una ira reprimida, sino que hacen realidad lo que la Biblia da como mandato: padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor. Ellos trabajan con una ética laboral sirviendo a Dios, encarnan el mandato todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres (Colosenses 3:23). De hecho, hacen todo con amor (1 Corintios 16:14).

La restauración conduce al amor a vivir la vida de Dios en nosotros, a estar unidos a los demás por el amor. El versículo que refleja cómo deberían ser las relaciones debido a la restauración que Cristo ha hecho es: Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto (Colosenses 3:14). En Cristo, nos une un nuevo lazo, no el de nuestro propio interés, ni el de la supervivencia, sino el vínculo del amor.

La experiencia humana más profunda que nos conecta y produce en nosotros una sensación de plenitud y satisfacción es vivir aquello para lo que fuimos diseñados: tener relaciones significativas con los demás, dando y recibiendo amor.

●  Las relaciones humanas son esenciales para tener una vida plena.

●  La ansiedad en las relaciones personales se debe a que sentimos un peligro o miedo profundo ante el encuentro con el otro que dificulta la conexión.

●  La primera interacción que se volvió