Dance usted
Por Luis Costa
()
Información de este libro electrónico
Una mirada, actual y retrospectiva, sobre lo que representa y ha significado el baile, en su vertiente más puramente social, en la cultura de club y en nuestra sociedad.
El baile, ese placentero acto de extraordinarios beneficios físicos, psíquicos y cognitivos, quedó abruptamente interrumpido con la entrada en escena de esta devastadora pandemia que nos ha sacudido lo suficiente como para detectar y reconocer nuestra capital necesidad de menear el cuerpo aquí y allá.
Dance usted se adentra en la oscuridad del club, entre luces estroboscópicas, flashes, láseres, leds, humo y bolas de espejo, para lanzar una mirada, actual y retrospectiva, sobre lo que representa y ha significado el baile, en su vertiente más puramente social, en la cultura de club y en nuestra sociedad.
Luis Costa
Luis Costa (Barcelona, 1972) se gana la vida escribiendo y pinchando desde 1994, año en que se incorpora al equipo de Disco 2000, revista pionera de la cultura de club. Es responsable de prensa de Razzmatazz Clubs y programador de conciertos de la sala Freedonia, en Barcelona. Colabora en el suplemento Cultura/s de La Vanguardia y en Música Dispersa. Es autor de ¡Bacalao! (Contra, 2016) y coautor de Balearic (Contra, 2020). Fotografía del autor © Irene G. Ruiz
Relacionado con Dance usted
Títulos en esta serie (47)
Estranys: Escrits sobre l'humà i el no humà Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLecciones de una pandemia: Ideas para enfrentarse a los retos de salud planetaria Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Com ordenar una biblioteca Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPandèmia: La covid-19 trasbalsa el món Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLliçons d'una pandèmia: Idees per fer front als reptes de salut planetària Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCómo ordenar una biblioteca Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Nova il·lustració radical Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesNueva ilustración radical Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Pandemia: La covid-19 estremece al mundo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Prohibido aprender: Un recorrido por las leyes de educación de la democracia Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl don de la siesta: Notas sobre el cuerpo, la casa y el tiempo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa otra guerra: Una historia del cementerio argentino en las islas Malvinas Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Monstruas y centauras Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Lo que estábamos buscando: De la pandemia como criatura mítica Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Silencio administrativo: La pobreza en el laberinto burocrático Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Los enemigos: O cómo sobrevivir al odio y aprovechar la enemistad Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La cancelación y sus enemigos Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Ofendiditos: Sobre la criminalización de la protesta Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Extraños: Ensayos sobre lo humano y lo no humano Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLos brotes negros: En los picos de ansiedad Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La moda justa: Una invitación a vestir con ética Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La carta robada Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones¿Soy yo normal?: Filias y parafilias sexuales Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Ecotopía: Una utopía de la Tierra Calificación: 1 de 5 estrellas1/5Vivir peor que nuestros padres Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Hipocondría moral Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Yo soy el monstruo que os habla: Informe para una academia de psicoanalistas Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Las tres dimensiones de la libertad Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEn presencia de Schopenhauer Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Dance usted Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Libros electrónicos relacionados
Los últimos días de la fotografía Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa música despierta el tiempo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesHipocondría moral Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Limbo Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El don de la siesta: Notas sobre el cuerpo, la casa y el tiempo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesNotas de paso Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCon los ojos bien abiertos: Ensayos sobre arte Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa novela múltiple Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Como el aire que respiramos: El sentido de la cultura Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Los brotes negros: En los picos de ansiedad Calificación: 4 de 5 estrellas4/5No sé si no en la herida: Antología de poetas líquidos Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCurar la piel: Ensayo en torno al tatuaje Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La radio ante el micrófono: Voz, erotismo y sociedad de masas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesBajo escucha: Estética del espionaje Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl subastador: Aventuras en el mercado del arte Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Teleshakespeare: Edición remasterizada Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesIlustres raperos: El rap explicado a los blancos Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Yo nací con la infamia: La mirada vagabunda Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl compromiso del creador: Ética de la estética Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesUn lugar sin límites: Música, nihilismo y políticas del desastre en tiempos del amanecer neoliberal Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesContra el tiempo: Filosofía práctica del instante Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Habitaciones con música de fondo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEn defensa del error: Un ensayo sobre el arte de equivocarse Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Nein.: Un manifiesto Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Contra todo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEros: La superproducción de los afectos Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLas tres dimensiones de la libertad Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCrónicas del desorden Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesArte y miedo: Peligros (y recompensas) de la creación artística Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Ecotopía: Una utopía de la Tierra Calificación: 1 de 5 estrellas1/5
Artes escénicas para usted
El diálogo: El arte de hablar en la página, la escena y la pantalla Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Fausto Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Los 1001 mejores chistes Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesBiblioteca Studio Ghibli: El viaje de Chihiro Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Teoría de la Música: Niveles 1 - 3 Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Guía Práctica de Ejercicios de Técnica para Guitarra Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El Aprendizaje de Idiomas es Fácil Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El Gran Cuaderno de Podcasting: Cómo crear, difundir y monetizar tu podcast Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Cómo se hace un cortometraje Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Oratoria Métodos y ejercicios para aprender el arte de la oratoria Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Las 50 leyes del poder en El Padrino Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Iniciación a la Locución Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Edipo rey. Antígona. Electra Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El guión. Story Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Fausto: Clásicos de la literatura Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El miedo escénico: Orígenes, causas y recursos para afrontarlo con éxito Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Metamorfosis y cartas al padre Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La liberación de la voz natural: El método Linklater Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Batman, el héroe: La trilogía de Christopher Nolan Calificación: 5 de 5 estrellas5/550 Clásicos que debes leer antes de morir Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl guión y sus formatos Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El secreto del mejor cine: El subtexto en el guion y en la novela Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Storytelling: Cómo contar tu historia para que el mundo quiera escucharla Calificación: 5 de 5 estrellas5/5¿Quieres escribir un cuento? Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Anatomía del guión: El arte de narrar en 22 pasos Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Otelo Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La historia de la Gaviota y el Gato que le enseñó a volar Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Cómo escribir un microrrelato Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Don Quijote Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La Mandrágora Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Comentarios para Dance usted
0 clasificaciones0 comentarios
Vista previa del libro
Dance usted - Luis Costa
Índice
Portada
Intro
1. Señoras estupendas
2. La tierra de los mil bailes
3. (Sub) Cultura de club
4. Discoteca
Interludio: El Dorado
5. Loft es el mensaje
6. Un cadáver en el respiradero
7. Rave
Outro
Nuevos cuadernos Anagrama
Notas
Créditos
Luis Costa (Barcelona, 1972) se gana la vida escribiendo y pinchando desde 1994, año en que se incorpora al equipo de Disco 2000, revista pionera de la cultura de club. Es responsable de prensa de Razzmatazz Clubs y programador de conciertos de la sala Freedonia, en Barcelona. Colabora en el suplemento Cultura/s de La Vanguardia y en Música Dispersa. Es coautor de Balearic (Contra, 2020) y autor de ¡Bacalao! (Contra, 2016).
Dance usted
Asuntos de baile
El baile, esa placentera actividad de enormes beneficios físicos, psíquicos y cognitivos, quedó abruptamente interrumpido con la llegada de esta plomiza pandemia que nos ha sacudido lo suficiente como para reconocer nuestro incontenible impulso de menear el cuerpo aquí y allá. Dance usted se adentra en la oscuridad del club, para lanzar una mirada, actual y retrospectiva, sobre lo que representa y ha significado el baile, en su vertiente más puramente social, en la cultura de club y en nuestra sociedad.
Quien no baila está fuera de la realidad.
FRIEDRICH NIETZSCHE
La vida es un banquete.
DAVID MANCUSO
Hágalo en privado
Hágalo en privado
Hágalo en privado
Pero dance usted.
No pierda una sola ocasión
Use el cuerpo en otra dimensión.
Dance usted
Dance usted
Dance, dance, dance usted.
RADIO FUTURA, «Dance usted»
Intro
Me gusta bailar, soy de los que siempre lo ha dado todo en la pista. Claro que mi cuerpo ya no es el de aquel chaval que machacaba sus Adidas Gazelle en los clubs barceloneses y en festivales como el FIB o el Sónar, en los noventa, cuando el indie y la música electrónica lo eran todo. Nada que no se pueda llevar con resignación y alegría.
Cuando me dispuse a redactar las primeras líneas de Dance usted, el ejercicio del baile, a lo largo y ancho del globo, permanecía interrumpido y prohibido en sus espacios naturales, sin fecha de regreso a la vista. Así lo quiso el SARS-CoV-2, que nos privó, entre otras cosas, de nuestra preciada parcela reservada al ocio. De un día para otro, nos fue arrebatada por el obligado y prolongado cierre de cines, teatros, museos, salas de conciertos, festivales, bares, restaurantes... y, claro, de clubs y salas de baile.
Hasta ese súbito y delirante momento de colectivo confinamiento, el gozoso acto de bailar en nuestros momentos de esparcimiento lo teníamos asociado a la más absoluta «normalidad», ese concepto que se fue quedando suspendido en el tiempo, a la espera de recuperar su pleno significado. Antes, bailar era un acto espontáneo, sencillo de improvisar; bastaba con seleccionar el vestuario, buscar a los cómplices pisteros y escoger un club.
Cuando hablo de «el gozoso acto de bailar en nuestros momentos de esparcimiento» lo hago pensando en el escenario donde se instala Dance usted: el del baile libre e individual, en un contexto social y festivo; no en uno profesional, ni tampoco en uno amateur. Es decir, todo baile que no precise de ningún tipo de técnica o ensayo y aprendizaje. Aquí no encontrarán, pues, disertaciones sobre danza contemporánea o bailes de pareja... Tampoco diagramas de pasos y movimientos. Todo ello «no es objeto de este estudio», como se suele decir. En cualquier caso, no es lo mío, y, por otro lado, hay cientos de libros estupendos que lo exploran en profundidad, con propiedad y autoridad.
El baile no solo es placentero por su evidente componente festivo y social, sino por sus extraordinarios beneficios físicos y psíquicos. Se trata de uno de los ejercicios más completos, pues reúne «equilibrio, esfuerzo muscular de todo el cuerpo, coordinación, expresividad, interacciones [...], respeto del ritmo...», según dice la doctora en neurobiología Lucy Vincent en su libro ¡Haz bailar a tu cerebro!¹ Allí, explora las conexiones neuronales que existen entre cuerpo y cerebro, cuando bailamos, y sus efectos emocionales y cognitivos.
La pandemia nos dejó con unas ganas incontenibles de quemar suela. No es extraño, pues, que haya coincidido con la explosión de TikTok, la red social basada en la publicación de microvídeos, con una enorme cantidad de gente bailando... De todas las edades, por cierto.
Dance usted aborda ese particular y escurridizo ambiente de la cultura de club, del clubbing: un hábitat con sus propios códigos y rituales, estrechamente ligado a la industria de la música dance; ese baile, insisto, libre.
En una ocasión, un amigo DJ y productor me habló de su colaboración en un espectáculo de danza, en el que se encargó de la ambientación musical a partir de piezas de música electrónica. Un día preguntó a un grupo de bailarinas de la compañía si alguna vez habían acudido a un club a bailar, y resultó que no. Cuando por fin se decidieron, enloquecieron de pura felicidad y, tras aquella experiencia, ya no hubo forma de sacarlas de la pista. Hablamos de ese tipo de baile.
El clubbing, por supuesto, ha desplegado su propia arquitectura técnica de pasos o posturas para esta o aquella escena. Es el caso del charlestón, el swing, el rock, el mambo, la salsa, la música disco, el northern soul, el breakdance, el voguing, el gabba o, más recientemente, el tektonik, el footwork y el shuffle, entre otros.
Dance usted penetra en la oscuridad del club y se abre paso hasta llegar a la pista, entre luces estroboscópicas, flashes, lásers, leds, humo y bolas de espejos, para echar una mirada actual y con perspectiva histórica sobre el baile y la cultura de club.
Pues bien, en aquel momento de abrupta interrupción, veníamos de bailar como borregos, apelotonados en macrofestivales, eventos masivos y clubs. O parados en