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Cómo Pensar Como un Genio: Mejora tu Toma de Decisiones, Pensamientos y Razonamientos como los Grandes Genios
Cómo Pensar Como un Genio: Mejora tu Toma de Decisiones, Pensamientos y Razonamientos como los Grandes Genios
Cómo Pensar Como un Genio: Mejora tu Toma de Decisiones, Pensamientos y Razonamientos como los Grandes Genios
Libro electrónico123 páginas7 horas

Cómo Pensar Como un Genio: Mejora tu Toma de Decisiones, Pensamientos y Razonamientos como los Grandes Genios

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¿Te has preguntado si es posible incrementar tu coeficiente intelectual? ¿Te consideras una persona a la que le cuesta tomar buenas decisiones? ¿Te gustaría ser la persona que siempre ofrece las mejores soluciones?  Entonces sigue leyendo…

 

"El secreto de la genialidad es el de conservar el espíritu del niño hasta la vejez, lo cual quiere decir nunca perder el entusiasmo." - Aldous Huxley 

 

No necesitas ser Leonardo DaVinci o Albert Einstein para pensar como un genio. Existen muchas formas de desarrollar la creatividad y de mejorar la capacidad de pensamiento crítico. Trata de dejar divagar tu mente sin juzgar tus pensamientos. Cuestiona la sabiduría tradicional e intenta alcanzar niveles de conocimiento más profundos que la simple memorización.

 

Entonces, ¿cómo lo haces? Después de todo, puedes obligarte a trabajar más duro. Pero simplemente no puedes obligarte a ser un genio. ¿O puedes hacerlo?

Durante la última década, los científicos sociales han descubierto una variedad de técnicas sencillas que todos podemos usar para abrirnos a un pensamiento más profundo.

 

En este libro, descubrirás: 

Trucos poderosos para convertirte en un genio.

Aprende a priorizar la velocidad y el contexto a la hora de tomar decisiones.

Descubre la manera más efectiva de adquirir un mejor punto de vista. 

Formas correctas de solucionar cuestiones. 

Mejores anti-modelos mentales para alcanzar el éxito. 

Y mucho más…

 

Reconoce las estrategias de pensamiento comunes de los genios y su aplicación te permite ser más creativo en tu trabajo y vida personal. Los genios son genios porque saben "cómo" pensar, en lugar de "qué" de pensar.

 

¡Estás más cerca de ser un genio que antes! ¡No esperes más! ¡Desplaza hacia arriba y añade al carrito!

IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento8 sept 2022
ISBN9798215954157

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    Cómo Pensar Como un Genio - Fernán Calleja

    1

    Priorizando la velocidad y el contexto en la toma de decisiones

    Es como el viejo adagio: Si solo tienes un martillo, todos los problemas son como un clavo. Y, por supuesto, esta declaración también se aplica a la forma en que los quiroprácticos abordan su trabajo médico. Sin embargo, es una forma muy dañina de pensar y ver el mundo. Por lo tanto, es necesario tener varios modelos. Además, los modelos deben basarse en diferentes dominios, porque la sabiduría universal no se limitará a un pequeño campo académico.


    No tienen suficientes modelos mentales.


    Por lo tanto, existe la necesidad de modelos que cubran muchos campos diferentes. Y de todos estos modelos, solo unos pocos requieren un esfuerzo significativo. La mayoría de las personas están entrenadas en un solo modelo y tratan de resolver cada problema de una manera particular. Conoces el dicho «Si solo tienes un martillo, todos los problemas se resolverán».


    Si bien personalmente no iría tan lejos como para decir que dominar una disciplina es una tontería, no se puede negar que no es la forma óptima o más efectiva de lidiar o comprender las situaciones que surgen en nuestra vida diaria. No lo preparará lo suficientemente bien para situaciones fuera de su área principal de especialización, pero ser un experto en todas las áreas no es la respuesta. Se trata de encontrar tu propia red de modelos mentales. Así, Munger deja en claro que explorar el mundo sin la ayuda de modelos mentales es como vendarse los ojos y señalar al azar un globo que gira rápidamente, tratando de encontrar Cuba.


    Si no tenemos modelos mentales para guiar nuestras ideas, nuestra percepción se limitará a elementos individuales y aleatorios que no están relacionados entre sí. Es un esquema que llama su atención sobre los elementos importantes de la situación que enfrenta y establece el contexto, el contexto y la dirección. Comprenderá la situación incluso si carece de ese conocimiento o experiencia, y desarrollará la capacidad de tomar decisiones óptimas. Sin un marco de modelos básicos, cada nueva fórmula introduce un nuevo conjunto de obstáculos.


    Si bien algunos pueden ser comunes, diferentes situaciones requerirán diferentes tipos de esquemas, y es por eso por lo que Munger pone gran énfasis en las redes de modelos mentales, ya que les permitirá prepararnos para tantas situaciones como sea posible. Sin un modelo mental, es posible que no vea nada más que un conjunto de líneas aleatorias. El modelado mental lo ayuda a comprender la situación y le brinda resultados predecibles de lo que sucederá en el futuro. Puede verlos como herramientas de descubrimiento para la vida cotidiana o como guías para evaluar y comprender una situación.


    Puede pensar que ningún modelo es un reflejo completamente fiel del mundo, pero ese no es necesariamente el caso. Su única misión es guiarnos en la dirección correcta para comprender las complejidades que nos rodean y distinguir entre ruido y señales. Todos tenemos nuestros propios modelos mentales, que hemos desarrollado simplemente experimentando y percibiendo patrones en la vida cotidiana. Todos tenemos una idea de cómo actuar en un restaurante de lujo porque de una forma u otra hemos estado expuestos a una situación así.


    También tenemos un conjunto de modelos mentales basados en nuestros valores, experiencias y perspectivas únicos. De hecho, algunos pueden llevarnos en la dirección equivocada. Por definición, nuestros modelos mentales individuales son limitados y reflejan solo una perspectiva sesgada.

    Si mi enfoque mental fuera lo único que usara para percibir y entender el mundo, no tendría una comprensión profunda de él.


    Inevitablemente, entenderé mal muchas cosas y me quedaré sin opciones en situaciones en las que no puedo aplicar mi propia experiencia. Me gustaría presentarles una red de modelos mentales que les permitirán funcionar mejor en el mundo. Le ayudarán a pensar con más claridad, tomar decisiones más informadas y encontrar una perspectiva en medio de la confusión. Analizar un mismo objeto o evento a través de diferentes modelos mentales te dará perspectivas muy diferentes dependiendo de tu principal área de interés y sin duda una enorme cantidad de conocimiento, el más amplio que obtendrás si te apegas a tu propio marco.


    Por separado, ninguno de los ciegos estaba equivocado, pero solo podían interpretar la situación desde un punto de vista, por lo que estaban equivocados sobre la forma general del elefante. Muchos modelos se desafían entre sí para brindar una perspectiva más amplia de la situación, mientras que confiar en unos pocos reducirá su perspectiva general a un contexto o disciplina limitados. Existe una amplia gama de modelos mentales que pueden ampliar sus horizontes y neutralizar algunos de los «errores» inconscientes que puede causar el uso de solo unos pocos modelos. Eso no significa que tengas que saber todo acerca de un millón de principios diferentes para usar diferentes modelos mentales.


    Lo que más se necesita es desarrollar un talento que vaya más allá del uso de un martillo. Este primer capítulo explora los modelos mentales que facilitan la toma de decisiones. En cierto sentido, la mayoría de los modelos mentales nos ayudan a tomar decisiones en un momento dado, pero esos modelos específicos giran en torno a la forma más eficiente de procesar información y encontrar resultados significativos. Aquí es donde empezamos con el primer modelo mental.


    MM #1: dirección Importante; ignorar urgente. Úselo para distinguir entre prioridad verdadera y falsa.


    Incluso cuando estamos descansando, de repente podemos entrar en pánico y sentir un subidón de adrenalina mientras tratamos de tomar una decisión. Podemos estar completamente relajados, pasar el rato junto a la piscina y aún tener esa sensación. ¿Y a qué se debe?


    Es nuestro cerebro tratando de atraparnos en una de las falacias más peligrosas: la que te mantiene enfocado en cosas irrelevantes todo el tiempo. Parece que cada situación es una emergencia que necesita ser atendida lo más pronto posible, y si no tomas acción personal, tendrás que sufrir consecuencias desastrosas.


    El error es pensar que importante y urgente son sinónimos, ignorando la gran diferencia entre ambos términos y la prioridad que se le debe dar a cada uno. La capacidad de distinguir entre los dos es un paso importante para reducir la ansiedad, detener la procrastinación y garantizar que estamos haciendo nuestro mejor esfuerzo.


    Este enfoque mental quizás sea más adecuado en el campo de la productividad, donde el tiempo es precioso. Pasamos demasiado tiempo en tareas urgentes cuando deberíamos centrarnos en tareas importantes.


    Misiones críticas: estas misiones contribuyen a nuestros objetivos a corto y largo plazo. Son imprescindibles para nuestro trabajo, responsabilidades y vida personal. No pueden ser ignorados y deben ser priorizados. Es posible que no sea necesario hacerlo de inmediato, lo que los hace menos importantes. Esta mentalidad aumenta nuestras posibilidades de caer en la trampa de ignorar lo importante a favor de lo urgente. Estas son las tareas que tienen un impacto real en tu objetivo final, e ignorarlas tendrá consecuencias muy negativas.


    Misiones urgentes: no requieren más que rapidez e inmediatez, y muchas veces nos las encargan un tercero. Por supuesto, esto provoca una reacción natural que te hace perder el interés.


    Pueden implicar una tarea importante, pero también pueden exigir su atención inmediata sin ser dignos. Tienden a ser más breves y fáciles de lograr, por lo que tendemos a centrarnos en ellos para postergar y eso nos hace sentir bastante productivos incluso cuando no sabemos lo que realmente deberíamos estar haciendo.


    Muchas tareas urgentes pueden posponerse, asignarse a otra persona o simplemente ignorarse. Para un breve ejemplo, si eres un escritor con una fecha límite que se acerca, es importante que sigas escribiendo el libro. Debe escribir 5.000 palabras al día durante las próximas dos semanas o arriesgarse a perder su trabajo.


    Esto califica como una preferencia. Una tarea urgente será reparar la molesta luz de verificar motor que parpadea constantemente en el automóvil. Es posible que a su automóvil le queden algunos viajes más, y si bien las luces intermitentes pueden ser molestas, debe resistir la tentación porque es un trabajo urgente que pretende ser importante.


    A menudo, encontrará que una actividad o proyecto importante puede no tener muchas tareas urgentes asociadas. Esto a menudo conduce a la confusión entre las prioridades.


    Afortunadamente, existe un método comprobado para distinguir entre lo que es urgente y lo que es importante, y lleva el nombre de uno de los presidentes más famosos de los Estados Unidos: Dwight D. Eisenhower. Se llama Eisenhower Matrix y lo ayudará a priorizar y determinar qué actividades realmente debería estar haciendo en este momento. Eisenhower fue un general de cinco estrellas durante la Segunda Guerra Mundial antes de ser elegido presidente por dos mandatos de 1953 a 1961.


    Además de liderar a las fuerzas aliadas a la victoria en la guerra, Eisenhower supervisó el éxito de la guerra. red de carreteras y nuevas leyes de derechos civiles, y condujo a los Estados Unidos a través de su conflicto con Corea del Norte y la instigación de la Guerra Fría. Para mantenerse al día con su agitada agenda, Eisenhower desarrolló un sistema

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